Cuando JunMyeon se despertó a la mañana siguiente, Irene no estaba en la cama. La encontró en la sala de estar, sentada en el sofá entre SeHun y BaekHyun, comiendo el desayuno, que probablemente, habían ordenado.

Todo el mundo ya estaba allí, vestido con la ropa de la noche anterior, con aspecto cansado.

— Buenos días. — Le dijo a nadie en particular y todo el mundo lo recibió de vuelta con la boca llena.

JunMyeon encontró su lugar al lado de ChanYeol en el lateral de la butaca. Escogió un mollete de chocolate de la meseta llena de dulces y frutas.

JunMyeon comió, tratando de no hacer contacto visual con SeHun. Se sentía un poco raro por lo que había sucedido la noche anterior, al igual que se sentía días después de que SeHun lo hubiera hecho correrse. Pero se desvaneció con el tiempo, porque SeHun estaba actuando como de costumbre, haciendo burlas durante el desayuno y bromas.

Cuando Irene les dijo que había tenido el mejor sueño de las últimas semanas, SeHun hizo contacto visual con JunMyeon y le guiñó un ojo, mordiéndose el labio.

JunMyeon no pudo reprimir la sonrisa que apareció en su rostro y Irene sonrió porque pensó que la sonrisa era para ella.

— Entonces, ¿qué harás para tu cumpleaños JunMyeon? — Preguntó ella mientras bebía lo que quedaba en el vaso de jugo de naranja.

— Tenía pensado hacer una fiesta en el hotel de mi tío. — Él respondió y BaekHyun asintió con entusiasmo.

— Pero va a ser un día antes de mi cumpleaños, el 23, porque mis padres me quieren en casa para la cena de Nochebuena.

— ¿Tu tío es dueño de un hotel? — JongIn preguntó sorprendido y JunMyeon asintió.

— Del St. Paul.

— Ese es el más caro en Seúl — SeHun habló.

— Por supuesto que lo es.

Terminaron el desayuno en quince minutos, y al mediodía se fueron. Y sí, JunMyeon informó que una mujer en la puerta se había acostado con un cliente, pues bien, ese no era su trabajo.

[...]

La próxima semana tuvo dos pruebas. Irene se quedó casi todas las noches, y a JunMyeon no le importaba el hecho de que todo lo que hicieron antes de dormir fue tal vez nada. Rara vez se dormían abrazados y JunMyeon estaba bien con eso.

No sabía si debía sentirse culpable por el hecho de que SeHun le había hecho correrse y viceversa, o porque no se sentía culpable en absoluto.

No había visto a SeHun desde el día del baile, y para ser honesto, estaba un poco nervioso acerca de su fiesta de cumpleaños. Iba a comenzar dentro de dos horas, y sabía que SeHun iba a venir, y que todo el mundo tendría su propia habitación de hotel.

La madre de JunMyeon había ordenado su traje de Dolce Gabbana y JunMyeon estaba emocionado porque lo llevaba puesto, y porque era el más caro. Era muy suave y los zapatos hacían juego, con una camisa negra muy agradable con cuello blanco. Llevaba el pelo en una franja suave y no podía estar más emocionado.

Toda la familia de JunMyeon iba a venir, pero sus padres le prometieron que los dejarían solos con sus amigos.

La fiesta iba a tener lugar en un restaurante de primera, donde todo el mundo podía comer lo que quisiera y su familia iba a asistir también. Entonces, cuando los adultos y los niños fueran a sus habitaciones, la fiesta se llevaría a cabo en la piscina cubierta, que estaba equipada con un gran bar y un DJ.

Y JunMyeon estaba muy feliz porque finalmente podía beber delante de sus padres y era legal. La torta se trajo a la medianoche, tenía seis niveles diferentes de colores con diferentes sabores, y había dieciocho pastelitos en la parte inferior, cada uno con una vela en él para que JunMyeon soplara.

Llegaron al hotel veinte minutos antes que los invitados. JunMyeon estaba empezando a ponerse nervioso, porque no solo todo el mundo en su año se suponía que debía asistir, si no que también algunas personas de la escuela de SeHun.

Todo parecía ser perfecto; treinta mesas para diez personas fueron esparcidas alrededor del restaurante, había tres mesas largas llenas de bebidas y postres, y los cubiertos eran de plata pura. Así que sí, JunMyeon podría calmarse un poco.

Irene y KyungSoo fueron los primeros en llegar, vestidos bien y llevando regalos. La sangre de JunMyeon empezaba a bombear más rápido, porque si había una cosa que le encantaba sobre los cumpleaños, eran los regalos.

Su tío ya le había conseguido un nuevo reloj Rolex y uso el nuevo iPhone que sus padrinos le habían regalado. Cada pariente le dio sobres llenos de dinero. No es que le importara sin embargo, él estaba ahorrando para un yate de todos modos.

BaekHyun le compró un nuevo par de tirantes de Prada con una camisa abotonada negra a juego, y ChanYeol le dijo que también aportó (lo que probablemente era una mentira, pero a JunMyeon no le importaba para ser honesto).

SeHun y JongIn se presentaron más tarde, por supuesto. JongIn le trajo una carcasa de iPhone, y SeHun algo de Prada, que JunMyeon estaba seguro de que lo había robado.

— ¿Robaste esto? — Preguntó cuando miró dentro de la bolsa, detectando un suéter gris.

SeHun se encogió de hombros y sonrió, mirando a su alrededor. JunMyeon tomó esto como una oportunidad para echarle un vistazo. Llevaba una camisa azul a cuadros que se rodaba hasta los codos, un par de jeans ajustados negros (que eran los únicos que parecía tener) y converse negras.

— ¿Puedes rodar tus mangas hacia abajo para ocultar tus tatuajes? — JunMyeon le preguntó mientras dejaba los regalos en la gran mesa donde estaban todos los otros.

— ¿Por qué?

— Porque mis padres te sacaran con seguridad.

SeHun rodó los ojos y bajó sus mangas, antes de que se ajustara el cuello y le sacara la lengua.

— Todavía tengo el piercing en mi lengua. — Dijo y JunMyeon se dio la vuelta para guiarlo a su mesa.

— Entonces mantén tu boca cerrada. No estás en cualquier lugar donde puedas hacer y decir lo que pasa por tu cabeza, ¿ok?

— ¿Así que después de esto vamos a ir a la piscina? — Preguntó SeHun, ignorando completamente lo que decía JunMyeon.

— Sí, pero...

— ¿Y te veré en traje de baño?

— ¡Cállate! — JunMyeon le siseó, volviéndose rojo y mirando a su alrededor para asegurarse de que nadie lo había escuchado.

— ¿Y todos tienen sus propias habitaciones?

— Sí.

— ¿También yo?

JunMyeon rodó los ojos. — Sí. Es el hotel de mis tíos.

— Por supuesto que lo es. — SeHun se burló y sacudió la cabeza, antes de que se acercara a la mesa donde estaba JongIn, y se sentara. JunMyeon hizo caso omiso al hecho de que algunas chicas de su escuela se sentaron allí, y parecían totalmente encantadas por los dos.

JunMyeon estaba sentado en una mesa con Irene, ChanYeol, BaekHyun, SooYoung, XiuMin, Yixing, KyungSoo y sus padres. Podía hacer esto; él podía.

Una hora más tarde descubrió que no podía. Debido a que durante el discurso de su padre vio a una de las chicas de su escuela salir del restaurante con su mano en el brazo de SeHun, y los ojos de SeHun estaban en su culo. JunMyeon iba a gritar sin razón aparente.

Regresaron treinta minutos más tarde, cuando estaban sirviendo el postre, y JunMyeon pudo ver claramente que la chica tenía despeinado el pelo y el cuello de SeHun estaba rojo.

A JunMyeon no le gustaba para ser honesto y lo hacía sentir incómodo. Unos minutos más tarde sus padres anunciaron que iban a ir a sus habitaciones, junto con sus hermanas, por lo que exactamente a las 21:00 todos se trasladaron desde el restaurante hasta el sótano del hotel, donde estaba la piscina. No había sillas suficientes para todos, pero JunMyeon sabía que a la gente no le importaba compartir una, y se sorprendió al ver que sus compañeros de clase eran en realidad más locos de lo que él había pensado.

Irene y él ocuparon el sillón más cercano al bar de la piscina. Ella llevaba un bikini azul y tenía el pelo recogido en un moño. JunMyeon tenía sus Hawaii con temas troncales Tommy Hilfiger bajo sus pantalones de vestir, pero no estaba tan seguro como para quitárselos. Todo el mundo estaba ya en sus trajes de baño, a excepción de él.

JunMyeon sabía que había comido un poco (demasiado) como para que pudiera sentir su barriga presionando contra la cintura de sus pantalones. Miró alrededor de la piscina y vio a SeHun justo enfrente de la piscina, en un par de pantalones cortos de color amarillo que dejaban ver sus abdominales apretados y sus tatuajes.

El chico mayor estaba charlando con otra chica de su clase, y JunMyeon ya se estaba enojando porque las niñas de escuelas privadas no debían asociarse con los chicos de las escuelas públicas, por no hablar de coquetear. Ella estaba girando su pelo alrededor de un dedo y lo empujaba hacia fuera. A SeHun no pareció importarle, porque en lugar de estar realmente prestando atención a lo que estaba parloteando, estaba mirando sus pechos.

JunMyeon suspiró y decidió que era hora de desnudarse, porque era el único que todavía estaba vestido para una gala de mierda. Se quitó la chaqueta y se desabrochó los pantalones, empujándolos hasta los tobillos. Se quitó los zapatos y los empujó debajo de la silla.

JunMyeon los doblo cuidadosamente en la silla del salón, antes de cubrirla con su toalla. Ahora estaba en su traje de baño y camisa, por lo que poco a poco comenzó a desabrochársela, antes de tirarla.

Cuando se dio la vuelta hacia su ropa doblada en la silla del salón, vio a SeHun mirándolo mientras se mordía el labio. JunMyeon se sintió un poco cohibido, así que se dio la vuelta para preguntarle a Irene si quería ir a la piscina con él.

Ella levantó la vista de su teléfono y sacudió la cabeza.

— En un rato más JunMyeon.

— ¿Qué estás haciendo? — Preguntó, dando un paso más cerca de ella, viendo que estaba metida en instagram eligiendo un filtro adecuado para un selfie.

JunMyeon rodó los ojos y decidió ir a la piscina solo. Metió su pierna derecha en el agua para probar la temperatura, y después de asegurarse de que estaba lo suficientemente caliente, se dio la vuelta y subió por las escaleras.

El agua llegó hasta sus pezones y caminó lentamente hacia KyungSoo. Al mirar a su alrededor, llegó a la conclusión de que la gente en realidad se estaba divirtiendo; había un DJ en la esquina, poniendo música de fiesta a lo largo de la habitación, y todo el mundo estaba ya sea en la piscina o en el exterior de la misma con una copa en sus manos, ya sea bailando o charlando. Las luces se habían atenuado y ahora la piscina estaba iluminada.

JunMyeon vio a SeHun a lo largo de la mesa llena de cubos de champán y hielo, con un vaso en la mano, hablando con JongIn.

— Entonces, ¿Qué pasa contigo y JongIn? — JunMyeon le preguntó a KyungSoo.

— Me preguntó si podíamos compartir una habitación hoy.

— ¿Qué hiciste aquella noche del baile?

— Um, sólo nos besamos porque estaba muy cansado.

JunMyeon sonrió para sí mismo, porque él había conseguido realmente que SeHun se corriera.

— SeHun ha estado mirando para acá los últimos cinco minutos. — KyungSoo le dijo y JunMyeon se sonrojó, lanzando una mirada rápida en dirección a SeHun, al ver que en realidad estaba mirando. JunMyeon giró rápidamente la cabeza y le preguntó a KyungSoo si quería hacer una ronda de shots en el bar de la piscina.

Ellos nadaron a través de la masa de gente a la barra y se sentaron en las dos únicas sillas vacías que quedaban. Ordenaron dos rondas de shots de tequila, así que después esparcieron sal en la parte posterior de sus manos, y comenzaron a tomar sus chupitos.

— Sabes que todavía no es legal tomar alcohol para ti, ¿verdad?

JunMyeon giró la cabeza para ver a SeHun justo a su lado, el agua apenas llegaba a unas pocas pulgadas debajo de sus clavículas. JunMyeon rodó los ojos y SeHun puso una mano en su muslo bajo el agua.

— Te ves bien en traje de baño.

— No lo hago. — Dijo JunMyeon, y sí, tal vez le gustó que SeHun le dijera que se veía bien. Pero luego se terminó preguntándose lo que SeHun quería de él ahora. — ¿Qué quieres?

— ¿Es necesario tener una razón para hablar contigo? — Preguntó SeHun inocentemente.

— Um, ¿sí?

— Estoy ofendido ahora. — SeHun puso mala cara y JunMyeon golpeó su mano.

— Deja de tocarme.

— No te estabas quejando la última vez.

JunMyeon se puso rojo y rápidamente miró a su alrededor para ver si alguien había oído. Pero nadie les estaba prestando atención a ellos, y KyungSoo estaba demasiado ocupado hablando con JongIn.

— ¿Cuánto tiempo tenemos que esperar hasta que podamos ir a nuestras habitaciones?

— Um, puedes ir en cualquier momento.

— Está bien, entonces, ¿cuánto tiempo tengo que esperar para que tú puedas ir a la habitación conmigo?

— ¿Qu-qué te hace pensar que yo haría una cosa así?

— Debido a que apenas te toqué y ya puedo ver que estás medio duro en esos short apretados.

JunMyeon bajó la mirada hacia su entrepierna, pero no pudo ver nada bajo el agua.

— Estás mintiendo.

— ¿Lo estoy? — Preguntó SeHun y JunMyeon se bajó de la silla porque una chica quería sentarse en la barra también.

— El pastel llega a la medianoche, así que probablemente me quedaré aquí hasta la madrugada. — JunMyeon se encontró respondiendo la pregunta.

— ¿Y cuando te vendrás? — Preguntó SeHun, lo que hizo que JunMyeon le diera una bofetada suave en su boca.

SeHun rió y le lamió la palma de la mano, por supuesto que lo hizo, y JunMyeon apartó la mano.

— Eres asqueroso.

— Me gusta mucho esta idea de la piscina, porque nadie puede ver mis manos. — SeHun le dijo y puso su mano sobre la espalda baja de JunMyeon.

JunMyeon lanzó una mirada en dirección a Irene, pero ella estaba demasiado absorta en su teléfono al notar en realidad lo que estaba pasando.

— Para. — JunMyeon le dijo cuando la mano de SeHun se deslizó, sobre la curva de su trasero. Sin embargo, no hizo nada para detenerlo porque su estómago se sentía más apretado con el toque de SeHun y quería más.

— Está bien. — Dijo SeHun, para sorpresa de JunMyeon, y apartó la mano.

Luego se dio la vuelta y se fue de allí. JunMyeon quedo mirando su espalda.

SeHun encontró a la chica que le había dado una mamada antes en una esquina de la piscina con dos de sus amigos. No tenía nada que decirle, sólo agarró la parte posterior de su cabeza y la besó con la boca abierta.

Cuando SeHun vio a JunMyeon desvestirse en su sillón, estaba completamente encendido y se imaginó a sí mismo follando a JunMyeon en la piscina, el bar, y contra la pared.

Quería a JunMyeon desnudo esta noche, porque los short del chico más joven, mostraban sus muslos gruesos y culo perfecto. Y el hecho de que JunMyeon parecía tan ajeno a todo, tan inocente y no tenía idea de lo caliente que en realidad se veía, hizo que SeHun se encendiera más. Solo quería comer, morder, lamer y marcar su culo hasta que estuviera rojo por todas partes.

Cuando presionó su entrepierna contra la pelvis de la chica, ella sonrió contra sus labios, porque probablemente pensó que ella era la razón de que SeHun estuviera duro. Oh, si ella supiera.

JunMyeon no sabía exactamente a quién se le había ocurrido la idea, pero una hora más tarde se encontró en un círculo hecho de una veintena de personas, justo al lado de la piscina. Había dos botellas de vodka dando vueltas, y todo el mundo tenía un vaso en frente de ellos, y aparentemente estaban jugando un juego llamado 'nunca nunca'.

Estaba confundido, no tenía idea de que era este juego, pero JongIn arrastró a KyungSoo, y KyungSoo arrastró a JunMyeon. Irene, ChanYeol, BaekHyun, XiuMin, SooYoung y SeHun estaban jugando demasiado contentos, y JunMyeon tenía un poco de miedo porque se trataba de tomar bastante alcohol.

— Así que para aquellos que no saben como se juega. — ChanYeol comenzó, mirando a todos los amigos de la escuela de JunMyeon. — Todo el mundo va a decir algo que ellos han hecho, como, 'yo nunca me he quedado dormido en un techo', y los que lo han hecho deben tomar. Nos detendremos cuando las botellas estén vacías, y el perdedor tiene que hacer algo que el ganador ordene.

JunMyeon decidió que no le gustaba este juego.

ChanYeol comenzó el juego diciendo que él nunca había probado drogas, y todo el mundo, obviamente, tuvo un tiro de alcohol. Media hora de juego después JunMyeon se enteró de que Irene, KyungSoo y él mismo eran los únicos vírgenes que quedan en el año. Al parecer se había equivocado acerca de sus compañeros de clase (una vez más); no eran santos.

JunMyeon se sentía como un perdedor y el hecho de que SeHun estaba riendo y moviendo la cabeza (obviamente borracho, y estaba ganando) no le ayudaba en absoluto.

— Yo nunca he engañado o ayudado a alguien a engañar. — Dijo Irene y JunMyeon casi, casi tomó, pero por suerte BaekHyun le dio un codazo en las costillas.

— Yo nunca he querido follar a alguien en este juego tan malo. — Dijo ChanYeol y todo el mundo a excepción de JunMyeon tomaron. Incluso Irene. JunMyeon estaba horrorizado y se sentía como una mierda, porque él no tenía experiencia.

Terminaron el juego veinte minutos más tarde, y no fue una sorpresa cuando SeHun ganó y le sonrió a JunMyeon, porque él tenía que atreverse a hacer algo.

— Te reto a... caminar alrededor de la piscina desnudo.

— ¡De ninguna manera! — JunMyeon protestó y negó con la cabeza, sintiendo el calor de su cara.

— Tienes que hacerlo, son reglas. — ChanYeol le dijo y JunMyeon cruzó los brazos sobre su pecho.

Pero para su suerte, el DJ anunció que era oficialmente medianoche, y que el pastel sería traído en un minuto.

Así que JunMyeon se levantó del círculo, contento de que tenía una excusa para no completar el desafío.

El pastel era increíble, como habían prometido, y después de que todo el mundo le cantara feliz cumpleaños, sopló las velas, con el deseo de conseguir entrar a Oxford.

Todos tenían una rebanada y parte de ella era sobra, así que ChanYeol y BaekHyun pensaron que sería una buena idea tener una guerra de pastel. Casi todo el mundo terminó cubierto en pastel y la habitación entera estaba ahora desordenada, llena de gente cubierta de torta.

A JunMyeon no le gustaba estar todo pegajoso, por lo que escapó al baño a lavarse la cara y las manos. Gracias a Dios que no tenía en el pelo, o de lo contrario le habría dado un ataque.

La gente empezó a subir a sus habitaciones como se esperaba, alrededor de la 1:00 am, y JunMyeon fue el último en quedarse en la piscina, porque tenía que instruir a algunos trabajadores del hotel para que limpiaran todo.

Irene ya estaba en su habitación en el sexto piso, medio dormida cuando JunMyeon entró.

— Feliz cumpleaños JunMyeon. — Ella sonrió cuando salió de la ducha, vestida con su pijama azul de algodón.

— Gracias. — Él respondió y se metió en la cama con ella.

Intercambiaron besos antes de que Irene le dijera que estaba cansada y quería dormir. JunMyeon se desplazó a través de su Facebook, cuando su teléfono sonó en señal de que había recibido un mensaje.

Era un número que nunca había visto antes, pero se dio cuenta de quién era inmediatamente.

X: Ven.

JunMyeon: ¿Cómo conseguiste mi número?

Puso a SeHun en su lista de contactos, antes de esperar a que respondiera.

SeHun: Lo robé de BaekHyun.

JunMyeon: ??? Quiero dormir.

SeHun: habitación 482

JunMyeon resopló para sí mismo y bloqueó su teléfono, no teniendo intención de ir a la habitación.

Cinco minutos más tarde, decidió que no podía conciliar el sueño. Él definitivamente no quería levantarse e ir a la habitación de SeHun.

Él no lo haría.

JunMyeon se levantó de la cama y cogió la tarjeta de la puerta, en silencio saliendo de la habitación y cerró la puerta tras él.

Decidió tomar el ascensor hasta el cuarto piso, por lo que no tendría ningún momento de reconsiderar las cosas. No podía creer que estaba haciendo esto, ir a la habitación de SeHun a hacer Dios sabe qué.

JunMyeon llamó a la puerta, pero rápidamente cambió de opinión y estaba a punto de salir corriendo cuando SeHun abrió la puerta. Estaba sin camisa, vestido con sus pantalones y calcetines.

— Hey. — Él sonrió y dio un paso a un lado para dejar que JunMyeon entrara.

JunMyeon entró y vio que SeHun estaba viendo la televisión, mientras que bebía una botella de chardonnay.

— ¿Pediste servicio a la habitación? — Preguntó JunMyeon cuando SeHun cerró la puerta.

— Sí.

— No tienes vergüenza en aprovechar el hecho de que mis padres van a pagar por todo, ¿verdad? — Preguntó JunMyeon y SeHun negó con la cabeza con indiferencia, agarrando el vaso lleno de la mesa.

— ¿Quieres un poco?

— Preferiría no beber después de ti.

— Te das cuenta de que nos hemos besado antes, ¿verdad? — SeHun se burló y JunMyeon se mordió el labio, volviendo su vista a la TV

— Así que, ¿la novia está dormida?

JunMyeon asintió y SeHun vino a sentarse junto a JunMyeon, que estaba en realidad un poco decepcionado de que no estaban haciendo nada.

— ¿Trajiste a esa chica aquí? — Preguntó JunMyeon, tratando de hacer conversación.

— ¿Cuál?

— Cualquiera de ellas.

— No.

— ¿Qué te hizo ella a ti?

— Una mamada.

JunMyeon se mordió el interior de su mejilla.

— ¿Estás celoso? — Bromeó SeHun y JunMyeon negó con la cabeza.

— No estoy celoso de esa escoria. — Respondió y SeHun rodó los ojos, antes de silenciar el televisor.

El corazón de JunMyeon empezó a latir más rápido. Ni siquiera llegó a girar la cabeza y mirar a SeHun correctamente, porque SeHun atacó literalmente sus labios, empujando su espalda.

JunMyeon reaccionó de inmediato, poniendo sus manos sobre las caderas de SeHun, mientras SeHun puso su mano izquierda en la parte posterior del cuello de JunMyeon, acercándolo más.

La rodilla de SeHun se acercó entre las piernas de JunMyeon y apretó contra su entrepierna. Estaban tumbados de lado a lado, con SeHun medio cubriendo su cuerpo.

La mano de SeHun bajó del cuello de JunMyeon a su culo, y le apretó una nalga.

— Levántate. — SeHun ordenó cuando él se apartó de JunMyeon, dejándolo con labios húmedos e hinchados.

JunMyeon obedeció y se paró. SeHun se sentó en la orilla de la cama y abrió sus piernas, metiendo a JunMyeon entre estas.

La manera en la que SeHun estaba mirando al menor, con una expresión hambrienta en su rostro hizo que los pantalones de pijama de JunMyeon se apretaran más.

— Quítate esa ridícula camisa — Le dijo y JunMyeon lo hizo. La desabotonó y la tiro en la cama, sus manos estaban a sus lados mientras miraba a SeHun.

Los dedos del más alto estaban en el dobladillo de los pantalones de JunMyeon, antes de bajarlos hasta sus tobillos. La cara de JunMyeon se volvió de un rojo carmesí cuando su dura polla brincó libre.

SeHun mordió su labio inferior ante la vista por que era más grande de lo que había imaginado y grueso. Lamió sus labios mientas ponía sus manos en la parte de atrás de las rodillas de
JunMyeon, arrastrándolas por sus piernas hasta que ahuecó su trasero con sus dos manos

— Mierda, tu trasero es grande.

Volteó a JunMyeon para tomar una mirada de él, su boca se aguó ante la vista. Era grande y redondo y sin duda el mejor culo que SeHun había visto en su vida.

JunMyeon se encontraba furiosamente sonrojado, y estaba realmente contento de ver el efecto que él y su cuerpo tenían sobre SeHun.

— ¿Quieres que te chupe tu bonita polla? — SeHun le preguntó y giró a JunMyeon para mirarlo. — ¿Lo quieres?

La garganta de JunMyeon se secó y lo único que pudo hacer fue asentir sin poder decir nada.

— Siéntate en la cama. — SeHun instruyó y JunMyeon lo hizo.

SeHun se puso de rodillas delante de las piernas abiertas de JunMyeon, poniendo una mano en su muslo derecho, la otra envuelta alrededor de su pene.

JunMyeon gimió ante el contacto, porque nunca había tenido a nadie tocando su polla y se sentía muy bien. Estaba apoyado sobre sus manos, mirando a SeHun, que ahora estaba lamiendo una larga franja desde su base hasta el final de la punta.

SeHun tomó todo de JunMyeon en su boca, tan fuerte que golpeaba la parte trasera de la garganta de SeHun. Fue lo mejor que jamás haya sentido por el momento, y literalmente podía sentir cada músculo de su cuerpo apretarse.

— SeHun. — Él exhaló y SeHun lo miró, con los ojos vidriosos. Y joder, era la cosa más caliente que JunMyeon nunca había presenciado. Sin llegar a pensar en ello, alcanzó una de sus manos y enredo los cabellos desordenados de SeHun en su mano. Fue inesperadamente suave bajo sus dedos y SeHun parecía disfrutarlo, porque él zumbaba alrededor de la polla de JunMyeon.

Rodeó la cabeza de JunMyeon con la lengua un par de veces, antes de chupar como si su vida dependiera de ello.

— ¿Estás bien bebé? — Preguntó con voz ronca.

JunMyeon asintió, y de hecho podía sentir el orgasmo acumulándose en la boca del estómago. Cuando SeHun comenzó ahuecando sus bolas, sintió ganas de llorar porque se sentía tan jodidamente bien.

— Mírame. — SeHun ordenó al momento en que los ojos de JunMyeon rodaron a la parte posterior de su cabeza.

— Ese es la rodada de ojos que me gusta de ti. — Añadió y JunMyeon hubiera dicho algo sarcástico a cambio si no hubiera estado demasiado ocupado con correrse en ese mismo momento. Fue tan repentino y abrumador, y JunMyeon no podía hacer otra cosa que gemir el nombre de SeHun.

SeHun tragó todo lo que JunMyeon le dio, y luego procedió a masturbarse lentamente mientras bajaba desde el mejor orgasmo.

— Feliz cumpleaños. — SeHun respiró contra los labios de JunMyeon tan pronto como se puso de pie y se inclinó para darle un beso.

Luego se sentó junto a JunMyeon y llegó con unos tirones rápidos a su polla enorme. JunMyeon seguía sonrojado por el tamaño de la misma, y otra cosa era que SeHun era muy bueno en esto. 

— ¿Tienes hambre? — Preguntó SeHun y JunMyeon negó con la cabeza, a pesar de que en realidad podría comer un helado o algo así.

Él se encogió de hombros como respuesta y SeHun rodó los ojos, poniéndose de pie para ir a buscar el servicio de habitación.

— Elige lo que quieras. — Le dijo a JunMyeon, que resopló.

— Bueno, yo voy a pagar de todos modos.

SeHun rodó los ojos y se metió de nuevo en la cama, mirando al techo. JunMyeon le dijo que quería un soufflé de chocolate y SeHun no pudo evitar burlarse de él por eso.

Cuando llegó el servicio de habitación, JunMyeon desapareció en el cuarto de baño para que nadie lo viera. Se tomó un momento para mirarse a sí mismo en el espejo; su cuello estaba de color rojo y sus mejillas eran rosadas y nunca se había mirado tan desordenado como lo estaba ahora.

Tan pronto como supo que el servicio había salido de la habitación, salió del baño para ver a SeHun sentado con las piernas cruzadas en la cama, comiendo algún tipo de croissant que JunMyeon estaba planeando comer para el desayuno.

Se sentó al lado de SeHun y vieron una película mientras comían, de vez en cuando se burlaban de los malos actores.

— Debería volver. — Dijo JunMyeon alrededor de las tres de la mañana, cuando la película había terminado.

— Podrías dormir aquí.

— ¿Qué pasa si Irene despierta?

JunMyeon se sorprendió a sí mismo al no rechazar la proposición.

— ¿Y? — Preguntó SeHun y JunMyeon suspiró.

Para ser honesto, estaba demasiado cansado para molestarse en salir de la cama, por lo que sólo se arrastró debajo de la manta. SeHun fue al baño primero y salió unos minutos más tarde, con olor a jabón y pasta de dientes.

Estuvieron en la cama durante Dios sabe cuanto tiempo (que podría haber sido minutos, pero parecieron horas), cuando SeHun se volvió a su lado haciendo frente a JunMyeon.

— ¿Qué? — Preguntó JunMyeon y SeHun negó con la cabeza, antes de agarrar la parte posterior del cuello de JunMyeon y atraer sus bocas. JunMyeon suspiró en el beso y SeHun sacó su pierna derecha por encima de su cintura para acercarlos.

El beso no era áspero ni precipitado, como de costumbre; era lento y perezoso, como si nadie los apurara, tomándose todo el tiempo del mundo.

Y era raro para JunMyeon sentirlo así, como si no tuviera cuidado con el mundo y pudiera hacer lo que quisiera.

Daba miedo, pero a él le gustaba, y se encontró deseando que nunca terminara.