Un mundo amenazado
Su sombría mirada se centraba en la puerta que llevaba a la sala de estar, se encontraba irritado, molesto, la situación actual no le gustaba para nada.
-Ya han pasado tres días y no se va...- murmuró arrugando su entrecejo.
-Tal vez mintió...- Respondió el pelirrojo, observando como a su amante le comenzaba a hervir la sangre.
-Ese tipo podrá ser un completo idiota sin sentido, pero no es mentiroso...- Explicó con fastidio mientras caminaba hasta la puerta -Ve y averigua que sucedió... Su presencia ya me tiene enfermo...-
-De acuerdo, iré... Pero trata de calmarte... Sabes lo mal que le hace a este mundo tus sentimientos negativos...- Caminó para besar la mejilla ajena -La irá hace que este lugar se caliente...- Siguió antes de perderse entre los pasillos.
-Que te vaya bien...- Murmuró antes de abrir la puerta de par en par, dejando al descubierto aquella extravagante escena.
-Oh, Karamatsu ¿al fin decidiste unirte?- Preguntó el primogénito con una suave sonrisa, mientras penetraba con fuerza el trasero de su hermanito.
-¿Siguen con eso?- suavizó su expresión mientras se adentraba en la sala -Deberían detenerse al menos para comer-
-Eso hacemos...- Respondió Choromatsu mientras sorbía un tazón de fideos -Pero Jyushimatsu no quiere parar... Tiene una monstruosa stamina...- Miraba de reojo las lascivas expresiones de su hermanito.
-Bueno... Jyushimatsu siempre a sido así de duradero...- Murmuró el cuarto Matsuno debajo de la mesa, mientras chupaba el miembro del quinto.
Ante aquello Karamatsu solo se limito a suspirar para luego sentarse al frente de la mesa, pudiendo apreciar con lujo y detalles, como Jyushimatsu era profanado por el pene de Osomatsu, provocando un sin fin de sonidos.
-Hey, Karamatsu-nissan...- Llamó su atención el menor de todos con voz seductora -¿Podemos jugar contigo también...?- Preguntó mientras lo abrazaba por la espalda.
-Oh, my little cute brother nada me haría mas feliz...- Movió sus manos para mover su cabello de manera sensual -Pero primero deben terminar con Jyushimatsu- esbozó una tierna sonrisa en sus labios.
-Bien, Jyushimatsu ¡terminé contigo!- Exclamó el mayor mientras comenzaba a retirar su miembro del trasero ajeno, pero antes de poder hacerlo fue tomado por una de sus manos.
-No... Yo quiero más...- Suplicó con una lujuriosa expresión, mientras la saliva se escurría por su boca -No te detengas... Nissan...-
Ante aquello Karamatsu apretó con fuerza sus dientes por un segundo, para luego sonreír como siempre -Bien... Osomatsu, creo que es mi turno de hacer sentir bien a nuestro Bruaza-
-Ehhh... ¿Por que primero Jyushi? Ya a tenido suficiente- Se quejaron el primer, tercer y cuarto hermano.
-Non, non brothers, nunca es suficiente cuando se trata de amor- Apuntó hasta la cocina con uno de sus dedos -Mientras, seria bueno que comieras algo, aun no lo haz hecho ¿cierto? Prepare un rico curry para mis lindos hermanos-
Aquellas palabras hicieron que los ojos de todos brillaran con gran intensidad -¿En serio? ¡Que bien!- Exclamaron al unísono mientras corrían hasta la cocina, dejando a Kara y Jyushi sólos en la habitación.
-Bien mi querido little brother- se levantó mientras sacaba su ya duro miembro de entre sus pantalones -Dejame llevarte al séptimo cielo...- apenas estuvo en posición lo metió sin cuidado en la entrada de Jyushimatsu, provocando un gran gemido de su parte -O infierno...- Susurró con mirada sombría en el oído ajeno, comenzando sus violentas embestidas.
(Real world)
-Vamos Dekapan, trabaja mas rápido- Exigió el primogénito mientras tomaba una taza de té -A este ritmo no terminaras a tiempo- su oscura mirada exaltó al anciano, quien trabajaba a todo lo que podía.
Mientras, Choromatsu, Ichimatsu y Todomatsu traían consigo un par de cajas para dejarlas cerca del cansado anciano.
-Vamos Osomatsu-nissan... Al menos ayuda un poco...- Mencionó cansado ante la holgazanería del mayor.
-¿Eh? ¿Por qué debería esforzarme? Yo no cause este problema- Cerró sus ojos mientras sorbía un poco de té.
-¡Porque así terminaremos mas rápido! ¡Hermano mayor de mierda¡- Gritó furioso por aquella despreocupada personalidad.
-Ya, Choromatsu-nissan, no es como si su inútil ayuda fuese a cambiar algo- Todomatsu rió con malicia ante la inutilidad del mayor.
-¿Ha? Que estas diciendo Todo-
-Veo que se están divirtiendo...- Su ya familiar voz exaltó por completo al primogénito, provocando que se volteara para ver la procedencia de aquel irritante sonido.
-Tu...- Al verlo apretó con fuerza sus dientes -¿Que mierda quieres ahora...?- Preguntó mientras apretaba sus puños.
-Vine a ver que estaba sucediendo... Ese niño al que enviaron no quiere regresar... Y ya me esta haciendo enojar...- Esbozó una sonrisa al tiempo que comenzaba a caminar en dirección de Osomatsu.
-No es que no quiera, es que no puede...- Aclaró Ichimatsu con una sombría aura emanando de su cuerpo -Tuvimos problemas con la maquina...- Señaló el estropeado artefacto que intentaban reparar.
-¿Cuánto se demoraran en repararla...?- Su sonrisa se apagaba lentamente.
-Una semana y cuatro días...- Mencionó Choromatsu con voz nerviosa ante la mirada de enojo del pelirrojo.
Por un segundo el silencio se apoderó de la sala, Fujitora respiraba de forma profunda para calmar su enojo, ya no soportaba el hecho de tener a Jyushimatsu como invasor del mundo de Karamatsu.
-Solo tienen una semana...- Llamó su atención -Si no... No respondo por lo que le haga a ese niño...- Amenazó con rostro indiferente exaltando a los demás.
-¿¡Ha!? ¿¡Que mierda planeas hacerle a Jyushimatsu!? Bastardo- Exclamó furioso Osomatsu mientras se acercaba para tomar del cuello de su ropa al mayor.
-Lo Llenaré de amor...- Murmuró mientras una sádica sonrisa se dibujaba en su rostro.
-¿Eh...? ¿Amor?- Se preguntaron los menores confundidos.
-Si... Un amor capaz de pudrir su inocente corazón...- Mostró sus dientes en una amplia sonrisa maliciosa -Un amor capaz de matarlo...-
(Karaworld)
Abrió sus ojos lentamente, dándose cuenta que era llevado por su hermano mayor en su espalda.
-¿Nissan...?- De forma suave su voz golpeó el oído ajena.
-¿Por qué mierda tuviste que venir Jyushimatsu...?-
-¿Eh...?-
-Nunca debiste haber venido...- Apretaba sus dientes sin dejar de caminar por las oscuras calles de la ciudad -Tenemos que buscar la manera de sacarte de este lugar...-
-¿Karamatsu-nissan...?- Estaba confundido por su repentino cambio de actitud, le resultaba mas familiar que antes.
-No debes quedarte ni un día mas... Si sigues aquí terminaras consumido por este mundo de mierda...- Aceleró su paso con su mirada enojada -Terminaras muriendo... Jyushimatsu...-
-¿Eh...?- Un gélido aire recorrió su espalda.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top