El corazón podía salir expulsado de su garganta en cualquier momento, y el sonido de sus latidos estaba tan presente en sus oídos que no podía más que escucharlo tamborilear con fuerza, el nerviosismo causaba que sus manos sudaran en demasía, trago saliva con dureza mientras mantenía su mirada concentrada en su profesor, quien se dedicaba a pasar la pagina del dichoso ensayo que le salvaría el pellejo o esperaba que así fuera.

Cerro sus ojos por breves instantes, recordando la conversación que había tenido minutos atrás con Min Yoongi.

"¿Hoy es el día?" esa fue la pregunta que le hizo el omega de piel pálida, y Jimin simplemente soltó un largo suspiro para tratar de disipar los nervios en su cuerpo, no tardo en dar un asentimiento ante sus palabras.

"Lo es" Jimin mordió su labio inferior con algo de nuerza. "Para serte sincero quiero vomitar."

"Eso es asqueroso" Yoongi lo miro con disgusto, pero no tardo en regalarle una sonrisa. "Deberías relajarte, el ensayo quedo bien, lo aprobará, ya lo verás."

"¿Y sí no es así?" los malos pensamientos comenzaban a surcar por su cabeza. "¿Y sí me dice que es un plagio? ¿Qué tal si por una simple palabra me reprueba? ¿Habré escuchado bien el tema que debía investigar para el ensayo? ¡Por la luna! ¿Y sí lo hice mal? No voy a soportar una nota reprobatoria, si eso pasa me sacarán del equipo de atletismo y me perderá las próximas competencias, bajará mi rendimiento escolar, no me graduaré y tendré que vivir desempleado, con un omega que no me gusta pero que tiene un hijo mío que sé que se decepcionará de su padre y..." el omega interrumpió su letanía.

"¡Ya, Park Jimin!" el mencionado cerro la boca de inmediato y miro hacia el omega. "En verdad es increíble, deja tus locas fantasías extrañas, ¿quieres?" quizás el omega tenía razón, Yoongi relajo las facciones de su rostro. "El ensayo esta más que perfecto, tendrás una nota aprobatoria."

—Park Jimin —el mencionado abrió los ojos de golpe y miro hacia su profesor, quien le llamaba mientras miraba en su dirección, el alfa no tardo mucho en entender que debía acercarse, se incorporo y camino hacia el escritorio del profesor para escuchar lo que le diría.

—Sí —se coloco enfrente del escritorio, el profesor le entrego de inmediato las hojas y Jimin no dudo en tomarlas, pero al verlas, se encontró con que no había nada escrito en las mismas, lo que hizo que frunciera el ceño, confundido—, esto...

—Para serte sincero esperaba un montón de errores, tanto ortográficos como gramaticales, además de la posibilidad de que hubieras utilizado algún tipo de herramienta en internet o que inclusive robaras todo el contenido del ensayo de otros autores —el alfa apretó ligeramente sus labios, el semblante del profesor era serio, pero apenas una diminuta y casi imperceptible sonrisa surco en el rostro del profesor que hizo que Jimin se sintiera en paz—, me equivoque —el profesor se encogió de hombros—, tu trabajo es uno de los más completos y he de admitir de los más interesantes y completamente auténticos que he revisado, incluso podría decir que podrías competir contra Min Yoongi en cuanto a sus ensayos, y él es muy bueno.

"Lo sé, él fue quien me ayudo." Pensó el alfa mientras miraba las hojas en sus manos, tenía que decírselo a Yoongi.

—Felicidades, Park —menciono el profesor—, espera la corrección de tu calificación en los días venideros.

—¡Muchas gracias, profesor! —Jimin dio una pequeña reverencia con la cabeza antes de regresar a su sitio y agarrar su mochila para guardar el ensayo.

Necesitaba con urgencia ir a hablar con Yoongi, porque lo había logrado, ¡su ensayo fue todo un éxito! El alfa no podía contener su propia alegría, estaba más que contento, podía salir e ir enseñando su trabajo a todos los demás alumnos que se encontrase en el camino, porque se sentía tan orgulloso de él, pero sobre todo se sentía tan agradecido, ¿acaso la diosa luna le había enviado un ángel? Quizás sí, el destino se había apiadado por completo de su alma y le había puesto en su camino una radiante flor que le iluminará por completo, lo admite, Min Yoongi había sido esa luz de esperanza que había logrado alumbrar su desesperanza y le había guiado hasta este magnifico y satisfactorio momento, ¿cómo podría pagar tanta ayuda recibida? No lo sabe, pero, espera lograrlo.

Salió del salón de clases, el profesor solamente había dedicado la clase para revisar los ensayos, y él había sido de los últimos, pensó por un momento que Yoongi se quedaría en el aula a esperarlo, pero simplemente salió, quizás a comer algo, quizás para leer, no lo sabe con certeza, lo único que sabía en esos momentos era que debía encontrarlo para hablar con él, quería darle la buena noticia, en cuanto salió miro hacia ambos lados del pasillo, esperando que por lo menos su omega no estuviera tan lejos.

Para su buena fortuna lo vio, Yoongi estaba revisando su casillero o al parecer lo estaba limpiando, en la mente del alfa paso una pequeña y traviesa idea, ¿y sí le jugaba una pequeña broma? Por supuesto que lo haría, quiere ver su reacción, sus pies no dudaron en ir avanzando hacia el omega, sus pasos eran más apresurados, mientras que Yoongi miraba dentro del casillero, había tardado un poco, pero había logrado acomodar mejor sus libros, siempre se volvía un desastre cuando tenía que volver a acomodar sus cosas, pero al menos todo ya se encontraba ordenado, aunque claro él mismo sabía que el orden no duraría lo suficiente, pero al menos podía sentirse satisfecho por el momento. Soltó un suave suspiro mientras admiraba su trabajo, pero a sus fosas nasales llego una fragancia que logro reconocer de inmediato, no dudo en girar su rostro hacia la derecha, mirando que cierto alfa se acercaba hacia él con un semblante levemente decaído, Yoongi frunció el ceño, pero no tardo en recordar lo que estaba pasando minutos antes, ¡el ensayo!

—¿Y-ya termino de revisarlo? —se atrevió a preguntar el omega, los pies del alfa se arrastraban por el suelo, se detuvo a unos cuantos pasos de Yoongi antes de dar un asentimiento pequeño—. ¿Y? ¿Q-qué te dijo? —el omega miraba atento las expresiones del alfa, pues esa forma de caminar más esa mirada baja le indicaban lo peor.

—Pues... —hizo una pequeña mueca con sus labios—, me hablo de la estructura, también de la redacción y... —llevo una de sus manos a su nuca, rascándola levemente, aparto la mirada del omega, mientras mantenía una expresión de decepción en su mirada perdida—, supongo que debí hacerlo mejor...

—Oh... —el omega relajo sus expresiones al escuchar eso—, descuida, quizás si hablas con el profesor podrías tener una nueva oportunidad, sí...

—¿Para qué? —dijo Jimin en voz baja—. No creo que me deje volver a hacer otro ensayo, está era la única oportunidad que tenía.

—Lo sé, pero —apretó sus labios levemente formando una fina línea recta—, podemos...

—No hay otra oportunidad, omega.

—¡Sé que no! Pero podrías hacerlo recapacitar y...

—¿Por qué lo haría cuando me dijo que el ensayo estuvo excelente?

—Porque podrías perder tu... —el omega dejo de hablar, repitió en su mente las palabras que aquel alfa le había dicho y después lo miro, el semblante de Jimin era pacifico, sin expresión alguna, pero esa sonrisa casi imperceptible para muchos le indicaba que se estaba divirtiendo y mucho—, eres un tonto —el omega no dudo en acortar la poca distancia que los separaba para después darle un golpe sobre el pecho fornido al alfa.

—¡Auch! —dijo Jimin por el repentino acto—. ¡Oye! Si pegas fuerte, omega —se quejo el alfa sobando la zona afectada—. ¿No te han dicho que la violencia es mala?

—¿Y a ti no te han dicho que no es gracioso ese tipo de bromas? —Jimin soltó una pequeña risa—. Idiota, por un momento creí que habías reprobado.

—Pues no —se encogió de hombros y sonrió—. Aprobé, ¿sabes lo que me dijo el profesor?

—¿Qué? —Yoongi cruzo sus brazos sobre su pecho.

—Que el ensayo estaba más que perfecto —el alfa sonrió mostrando su blanca dentadura—, y que podía competir contigo en cuanto a ensayos.

—Si supiera quien te ayudo, alfa tonto —el omega sonrió sintiéndose totalmente satisfecho por esas palabras.

—Y estoy sumamente agradecido contigo, Yoongi —las manos del alfa picaban en emoción, quería hacer algo, peor no sabía si el omega lo tomaría a mal, aún así no podía simplemente quedarse con los brazos cruzados—, perdóname, pero tengo que hacer algo.

El omega arqueo una ceja al escuchar esas palabras, y su cuerpo se tenso al mirar a Park acercársele más de la cuenta, invadir el espacio personal de una persona podía ser una causa enorme de desaprobación y más sin el consentimiento de la misma, Jimin lo sabe, y también es consciente de que Yoongi jamás le permitiría tanto contacto, apenas se están conociendo, pero no podía evitarlo, estaba agradecido y el impulso de demostrarlo estaba en su pecho, necesitaba sacarlo de una buena vez o sino explotaría. En un movimiento rápido, doblo ligeramente sus rodillas y no dudo en atrapar a Yoongi entre sus brazos, abrazándolo por la cintura para después elevarlo un poco por sobre sus hombros, el omega ante la sorpresa no dudo en sostenerse sobre los hombros del alfa para no caerse.

—¡¿Qué carajos te pasa, tonto?! —el omega exclamo sintiéndose atemorizado por el repentino acto, y más cuando Jimin empezó a dar vueltas con el omega aún en sus brazos—. ¡Bájame!

—¡Gracias, gracias, gracias, Min Yoongi! —exclamo feliz el alfa a pesar de que sentía como Yoongi le trataba de dar golpes sobre su hombro para que dejase de girar—. ¡En verdad no sabes como te lo agradezco, omega!

—¡Sólo bájame, tonto! —el alfa soltó una risa y no taro en detenerse y colocar sano y salvo a Yoongi en el suelo, el omega se sostenía de los hombros del alfa y no tardo en dirigirle una mirada desaprobatoria, mientras que los ojos del alfa brillaban en demasía ante la imagen tan dulce del omega entre sus brazos, Yoongi soltó un resoplido—. No hagas eso de nuevo, ¿bien?

—Lo siento, pero tenía que hacerlo —Jimin no estaba dispuesto a soltar a Yoongi—, gracias...

—No tienes por qué agradecer tanto.

—¡Claro que sí! —el alfa no podía apartar la mirada de aquellos orbes marrones que tenían su atención solamente en él—. Gracias a ti no perderé mi lugar en atletismo, no tendré una nota reprobatoria, me ensañaste a realizar un ensayo, me ayudaste sin siquiera pedir tu ayuda y eso... —sin querer Yoongi parpadeo un par de veces, batiendo esas lindas y rizadas pestañas que el alfa no pudo ignorar—, eso... yo... —su corazón dio un vuelco, comenzando a palpitar más rápido y haciendo que sus palabras se quedasen en su garganta, atrapadas.

—Lo hice porque quise —dijo Yoongi—, no es nada del otro mundo, Park —empujo al alfa con sus manos que aún permanecían sobre los hombros del alfa—, ahora, te agradecería que me sueltes o alguien malinterpretará la situación.

—¿Qué harás si decido no dejarte ir nunca? —el omega rodo los ojos.

—Sólo déjame —volvió a empujar, a regañadientes Jimin le dejo ir, Yoongi sonrió levemente—, sinceramente estoy feliz de que lo lograrás, tu esfuerzo logró esto, no solamente fue mi ayuda.

—Pero...

—Sin peros, Park —Yoongi le regalo una sonrisa—, no lo arruines —Jimin no dudo en corresponder esa sonrisa.