Demonio blanco, amplia el alcance de su corazón
Demonio blanco, que dejarás a tus amigos ir?
Demonio blanco, amplia el alcance de su corazón
Demonio blanco, que dejarás a tus amigos ir?
Seamos el amor
(Vamos a estar enamorados)
Vamos a ser viejo y gris
(Vamos a ser viejo y gris)
Yo no te haré llorar
(Yo no te haré llorar)
Nunca me apartaré 
(Nunca se apartará)
Voy a hacer mi parte
(Voy a hacer mi parte)
Seamos el amor esta noche   

(A white demon, The Killers)

—Umm —murmuro en respuesta —bien por ti

Tomo el suéter y me voy de ahí, no quiero que se dé cuenta de lo que realmente causaron esas palabras en mí. No me detengo a verle, sé que está dolido por mi respuesta, puedo sentirlo y de alguna forma yo también lo estoy.

El día se pasa lentamente, yo alejada de él mientras realiza su trabajo y él ignorándome. Lo último son los ensayos de su concierto, así que detrás del escenario me encuentro sentada en una banca, alejada de los demás que hacen su trabajo. Algunos me siguen observando debido a mi extraña presencia ahí, no preguntaron qué fue lo que pasó con respecto al desmayo de Chanyeol pero sé que se lo preguntan, por eso las constantes mirada de algunos. Escucho algunas de sus canciones, su solo de batería y luego de un rato pierdo la noción de que estoy ahí.

Hay un vacío dentro de mí o eso creo, porque también siento que es de él, sus sentimientos se mezclan con los míos de una extraña forma. Lo que Chanyeol siente, yo lo siento de igual manera...y la tristeza que le inunda es muy familiar a lo que estoy sintiendo.

Hace semanas atrás jamás habría sentido esto, esta conexión extraña que me une a él. Todo pasó muy rápido, todo fue sin planearse, sin contemplaciones... y yo no estoy lista para enfrentar todo esto. Mis miedos siguen ahí, en lo más profundo sigo teniendo miedo de ser herida, de ser abandonada, de no ser la única en la vida de Chanyeol.

—Es hora de irnos —alzo la vista, es él. Asiento ligeramente y le sigo.

Voy detrás de él mientras observo su ancha espalda caminar delante de mí. No hay más que silencio en todo el trayecto, de camino a casa y al llegar al departamento cada quien se va a dormir a su cama.

***

Dos días enteros pasan así, sin tener una verdadera conversación, intercambiamos palabras escuetas sólo para comunicarnos por necesidad. Es ya un día antes del concierto y decido quedarme en casa.

—Hoy me quedaré en casa —informo de repente. Él está en la cocina sirviéndose algo de cereal, me escruta con la mirada y luego aprieta los labios como si quisiera callarse algo.

—Entiendo —dice finalmente.

No digo nada, sólo me quedo observando cómo desayuna, se pone su abrigo y se marcha... cuando lo veo salir del departamento mi mano se levanta ligeramente queriendo atraparlo. No voltea a ver, si hubiera volteado... ¿Se habría quedado?

Bajo la mano sintiéndome algo estúpida. Lo que hago, digo y pienso no concuerda en absoluto, estoy mal.

Me paseo por el lugar, veo la tele un rato mientras hago zapping, escucho música, inclusive juego con el celular que me dio Chanyeol pero nada me quita la sensación de vacío. Suspiro mientras observo el pequeño departamento.

Opto por ponerme a limpiar el lugar, voy al pequeño cuarto de limpieza donde está la lavadora y secadora. Ahí encuentro la escoba y otras cosas más para limpiar. Pongo algo de música mientras me ocupo en limpiar el lugar.

Intento estar entretenida en todo lo que puedo para no pensar constantemente en él y así mi día se va. Hay un punto en el que simplemente me dejo caer en el sillón por el cansancio, exprimí cada rincón del departamento para dejarlo impecable como si con eso llenara mi vacío.

Ese vacío que sólo puede ser llenado por Chanyeol...y yo no quiero que sea así. No quiero depender de un vampiro, no quiero dejarme llevar como las demás.

Entre tantos pensamientos termino cerrando los ojos con la única convicción de que no quiero caer ante Chanyeol.

***

Algo me remueve lentamente, algo frío me toma de mi lugar y con cuidado me levanta. Abro los ojos un poco, a pesar de la oscuridad puedo ver perfectamente así que mis ojos se topan con el rostro de Chanyeol que me lleva entre sus brazos.

—¿A dónde me llevas? —susurro de repente. No baja la vista hacia mí y sigue caminando lentamente hacia los cuartos.

—A tu cama, no puedes dormir en el sillón —empieza a decir. Sin dificultad abre la puerta que lleva al pasillo —te resfriarás —agrega.

Mis ojos se clavan en su cuello, en como aprieta la mandíbula. Sé que está...triste. No enojado, sino confundido como yo, melancólico y nostálgico, por algo que hubo y no fue. Tal vez... sólo tal vez no somos tan diferentes como yo creo.

Cuando entramos al cuarto me doy cuenta de que no quiero separarme de él, de su frío calor. Antes de que pueda dejarme en la cama me aferro a su cuello, con mis brazos le rodeo y hundo mi cabeza en su pecho. Parece algo sorprendido por mi acto pues se queda quieto sin saber cómo reaccionar.

—N-no —tartamudeo un poco, aprieto mis labios con fuerza y me restriego en su camisa —no me dejes sola

Soledad. Todos estos días sin él he sentido soledad y ahora que vuelvo a estar tan cerca de él siento que he sido llenada. Su cuerpo se relaja poco a poco luego de escuchar mis palabras, se sienta en el borde de la cama conmigo en brazos. No aflojo mi agarre y me pego más a su cuerpo, no es hasta que escucho sus palabras de aliento que me doy cuenta de lo que sucede.

—Estoy aquí —murmura —no estás sola

La camisa de Chanyeol está húmeda. Sólo eso pienso por varios segundos hasta que veo que soy yo la que provocado aquello, estoy llorando y no entiendo porqué exactamente lo hago.

—Lo siento —vuelve a hablar —sentía tu soledad pero no dije nada

Intento procesar lo que me dice.

— ¿Puedes sentirlo? —Pregunto entre sollozos.

—Sí.... — susurra con timidez.

—Creí que sólo yo podía sentirlo —me remuevo un poco y alzo la vista, me está observando. Aunque la oscuridad nos rodee, nuestros ojos pueden ver cada pequeño detalle del otro. Niega con la cabeza lentamente.

Su mano derecha me sujeta firmemente en su regazo y poco a poco su mano libre va hacia mi rostro. Su tacto sigue siendo tan frío como siempre pero hace que cada parte de mi entre en calor que es como caminar sobre el hielo mientras mi cuerpo entero se incendia.

—No entiendo nada —admito de repente —lo que siento, lo que me está pasando y yo —me detengo un poco, la mano de Chanyeol está acunando mi rostro —tengo miedo de caer ante ti— termino de decir.

El seño Chanyeol se profundiza, supongo que mi confesión le ha extrañado. Sus facciones se relajan mostrando una pequeña sonrisa sin mostrar sus dientes.

—No te haré daño —asegura —estamos unidos para siempre, ¿recuerdas?

—Y si te enamoras de tu prometida, ¿qué haré? —mueve un poco de mi cabello con sus dedos observando con detalle lo que hace.

—No pasará, no es lo mismo que siento por ti, Hannie, no se puede igualar —su aliento fresco me llega —pero creo que debes descansar

Se levanta de repente conmigo aún en sus brazos y me deposita en la cama.

—Hablaremos mejor mañana —dice, se gira para irse pero luego regresa sobre sus pasos. Se apresura a venir hasta mí y besa mi frente —descansa

Susurra y se va con una gran sonrisa. Me siento algo adormecida, tanto que no puedo replicar su acción o quizá estoy feliz de ello porque una gran sonrisa ha aparecido en mis labios.

¡Hola chicas! ¿Larga espera? pos lo siento pero me pasaron muchas cosas, viajé y llevé mi lap pero  se jodió e.e9 el teclado se descompuso y apenas regresando me puse a trabajar en otra computador pfff así que por eso. Les prometo otro capítulo el 1 de Enero, habrá un especial y seguramente actualizaré en varios fics :B esperénlo con ansias. Eso es todo, comenten y voten, nos leemos luego :3