Tiempo atrás sin ver la luz.

Bian

Vivir de recuerdos, a veces, solo a veces, es mejor que vivir de la realidad... adornada por el llanto, la soledad y el dolor.

Hoy, ha pasado exactamente un año sin verla, en persona, ni escuchar su melodiosa voz.

Y esta es, la peor experiencia que he tenido en mi vida.

Siento... ¡Ja! ¡Ya quisiera! No siento nada más que angustia y nostalgia; además de un profundo dolor, siento sin poder negarlo o pararlo mucho amor, por ella, solo por ella.

De vez en cuando me entraban unas irremediables ganas de verla y tenerla entre mis brazos aunque fuese por unos segundos; llegué a llorar por la impotencia, por su lejanía.

Trabajo, es lo único que ocupa mi mente además de ella.

Duele admitir que estoy muerto por dentro sin mi lucero personal mas no negaré que la amo. La amo. ¡La amo!

Hoy, han pasado tres años desde que me fui.

Duele, quema y arde mi alma.

Mi cuerpo la extraña: mis manos la añoran y no pueden contener los temblores ni la picazón que las invade por tocar su piel o enredarse en sus cabellos; mis brazos las esperan con ansia para acunarla y darle abrigo; y mi pecho siente frío porque ella no está para darle calor con su tibio cuerpo.

Mis días se ven opacos porque ella no está.

Duele respirar y que no sea su perfume el que inunde mis vías respiratorias.

Aunque mi corazón quedó en ruinas por las distorsionadas palabras terremóticas pronunciadas por farsantes que destruyeron los cimientos de mis escudos acorazados.

Ya comprendí que nuestra ruptura no fue porque ella lo deseara sino por las situaciones que aparecieron ante nosotros y el modo en el cual los corazones de ambos entendieron que debían enfrentarse a los hechos.

Aun así, la amo.

A pesar del tiempo que hemos estado separados y la distancia más que kilométrica, oceánica, que nos separa; la amo.

La amo como el primer día.

Hoy... se cumplen... CINCO AÑOS sin ella; sin mi alma, sin mi corazón.

Solo puedo decir que, sentimentalmente, estoy igual de destrozado que el primer día.

Paso las noches sin dormir.

Si pudiera verla, sería un honor para mí; me gustaría tenerla de frente y gritarle: "te amo tanto que sin ti todos estos años no he podido vivir."

Estos sesenta meses, con sus numerosísimas semanas que ni siquiera conté porque contabilizaba los días, horas, minutos, segundos... así esas semanas con sus aproximadamente mil ochocientos veinticinco días, con sus cuarenta y tres mil ochocientas horas aproximadas; y sus dos millones seiscientos veintiocho mil minutos lejos de ti.

Me hallaba en una agonía constante e irreversible de la cual no creo que pudiese salir sin ella a mi lado.

Todo es tiempo ha sido muy brutal para mí y mis sentidos atormentándome, no he podido ni podré olvidarle además esa nunca ha sido mi intensión sino por el contrario mis deseos son recuperarla y no dejarla ir jamás.

Para poder verla haría lo que fuese.

Si supiera dónde está.

Haría hasta lo imposible por estar junto a ella, navegaría por cielo, mar y tierra. Me enfrentaría con la peor y más atroz de las guerras. Dejaría todo lo que he logrado a un lado por abrazarla de nuevo. Excavaría la tumba de TUTANKHAMÓN para reunirme con ella. Canjearía muchos de mis órganos por salvarla y salvarme de la soledad. Donaría la mayor parte de mi sangre solo por tenerla cerca de mí unos minutos. Entregaría mis ideas, mis planes, mi futuro por reunirme otra vez con ella.
Dejaría mi piel en el intento de encontrarla. Incluso me adentraría en el núcleo de la Tierra o viajaría al espacio visitando constelación por constelación, planeta por planeta, centímetro cuadrado por centímetro cuadrado, en el que pudiese existir vida, en el que pudiese encontrarme con ella.

Por ella y solo por ella, modificaría mi vida... volvería a vivir.

Porque solo ella es mi razón de ser, la única que me permite ser quien en realidad quiero ser sin trabas ni tabúes yo, yo y solo yo; junto a ella, soy yo de verdad.

Mi trabajo ha dado frutos: adquirí el 35% de las acciones de una naciente pero exitosa compañía, que hace tan solo cinco años fue fundad y posee una demanda notable, es bastante reconocida, posee buenas fuente de contrato y sobre todo e inusualmente es dirigida por una mujer mientras que el resto del personal ejecutivo está dominado por el sexo masculino, o eso fue lo que me comunicó -lo poco que me informó- el antiguo socio e inversor.

Y qué decir de todo lo que tuve que soportar; los constantes ciclos en los que cerrar los ojos o desviar la mirada era lo mejor e incluso las adversidades que se presentaron en mi camino que por momentos parecían infranqueables pero que por más que trataron de cerrarme el paso abrí nuevas brechas y continué.

Porque a pesar de que aguanté hasta ahora: insinuaciones de mujeres frías y falsas, que por tener cinco centavos más que el resto de los mortales se creían divas; propuestas indecentes de todo tipo de índole, proveniente de todo tipo de persona y cuyas edades eran de las que menos se esperaría semejante desfachatez; y vulgaridades incómodas profesadas no solo por hombres sino también por mujeres, desde las más sensuales y finas hasta las más honestas y rectas; para llegar al puesto en el que estoy.

Aun así nunca de los nuncas, renuncié a mi libertad, no caí en esos trucos baratos y muchos menos traicioné ni en pensamientos a mi amor.

A la luna que me ilumina en las noches largas, porque cada noche sin ella es muy larga.

Al sol que calienta mis días fríos sin su azul mirada, su fresca sonrisa, su dulce voz.

Al ángel que con devoción protegía y me protegía de igual forma.

A la diosa que bajó a la Tierra sólo para mostrarme lo que es el amor y que debo luchar por él, porque los detalles siempre son importantes, fundamentales.

Porque lo acepto: la amé, la amo y la seguiré amando hasta que muera.

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Nota de la autora

Amar...
Palabra fuerte de significado y sentimientos.

Duele.

💀💀💀Death 💀💀💀

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