Capítulo 3: Bane
Una mujer en sus treinta y tantos se encontraba en su lujosa casa contando el dinero que le había quitado a su esposo, su amante, quien es más joven que ella, salía de la ducha usando solo un pantalón
— Jayden, ¿podrías venir un momento? — preguntó la rubia
Su amante sale de la cocina con cerveza en mano, él era de piel morena, pelo teñido de rosa y andaba sin camisa, mostrando así los tatuajes que cubrían parte de su espalda y pecho
— ¿Qué quieres, Sandra?
— ¿No has notado algo extraño últimamente?
— ¿Cómo que mi maldito auto que le presté a Javier y fue destruido por un imbécil vestido de murciélago? Claro que lo he notado
— Me preocupa que venga por nosotros
— No nos encontrará. Con el dinero que le quitamos al ingenuo de tu esposo nos habremos largado de esta ciudad — termina de beber y arroja la lata — Si nos encontrara dudo mucho que pueda hacer algo con el cuerpo lleno de balas
Los bombillos que iluminan el lugar se apagan, el varón usa la luz de la pantalla del celular pero un mueble cae, él apunta en dirección al mueble y su amante es arrastrada a la oscuridad mientras una mano con guante negro le tapa la boca. Momentos después los gritos agonizantes de Jayden se escuchan por toda la cuadra hasta que es arrojado con brusquedad a la pared
— Un hombre inocente fue acusado injustamente de violación, pedofilia, robo y asesinato, todo porque su mujer infiel prefirió a un pandillero drogadicto y maltratador en vez del hombre que le dio todo
— ¡Ten piedad, amigo, ten piedad!
— La piedad no existe para personas como tú. Dime que planea Oswald Cobblepot y tal vez no te rompa la otra rodilla
— Es el candidato a la alcaldía, no planea nada malo
— Es lo que él quiere que crea. Dime la verdad o no solo te romperé la otra rodilla, te dejaré colgado de una gárgola
— Yo solo soy el mensajero, entrego paquetes y... y hago cosas comunes como hacerme otro tatuaje
— ¿Qué clase de paquetes?
— Billetes, usa a mi gente como mensajeros pero eso es todo. Lo juro por mi madre
— Mátalo, Batman — escuchó un susurro femenino en su mente — Mátalo. Que sirva de ejemplo — Batman lo noquea de un golpe y salta por el balcón para luego planear haciendo uso de la capa — ¿Por qué no lo mataste, Batman?
— ¡Sal de mi cabeza!
— ¿Por qué no lo mataste?
— ¿Por qué te importa tanto?
— Me importa. Eres un paladín, Batman, uno de muchos
— ¿Quién eres?
— Lo sabrás en su momento. Lo que debes saber ahora es que te observan desde las sombras. Te observan desde las sombras
— ¿Quién me observa? — le preguntó aterrizando en un tejado pero este desaparece, haciéndolo caer en un abismo que se convierte en negro absoluto
Batman se voltea para quedar boca abajo y extender su capa para disminuir la velocidad pero sus icónicos ojos blancos se agrandan mostrando miedo al ver como por debajo de él se manifestaba la cabeza gigante de un búho mientras se repite en su mente aquella voz que le decía que lo observan y la cabeza abre su pico para devorarlo
— "No" le dijo el murciélago, "haré lo que pueda" — narraba una mujer una historia de su tribu — Con gran esfuerzo separó sus dedos. Cuando sus dedos y su piel quedaron tan anchos como las más anchas hojas, la piel entre sus dedos se extendía y abanicó con ellos a Cuervo un gran viento. El fantasma de la enfermedad pronto se alejó y cuervo sanó. "Gracias, amigo murciélago" le dijo el cuervo, "Como recompensa te dejaré conservar la forma que has tomado y solamente tú, de entre todos los animales del suelo, serás capaz de volar". Así fue y así es a día de hoy
— Eres un paladín, Bruce Wayne — volvió a escuchar en su cabeza — Cumple tu destino, Bruce Wayne, lideralos
— ¿Qué? — preguntó débil
— Lideralos, Bruce, lideralos
— No entiendo
— ¡Lideralos! — gritó justo cuando un pequeño animal rompe la ventana y cae al suelo
Batman despierta de golpe en el batimovil, estacionado debajo de la lluvia torrencial frente al banco, al cual había entrado hace una hora el banquero que se ha encargado del lavado de dinero de uno de los mayores jefes criminales de Nueva York. Carl Fisk se encontraba sentado en la orilla de su cama enfrente de dos mujeres vietnamitas, quienes estaban desnudas y se besaban con aparente lujuria, sin embargo no eran amantes, solo tenían sexo para el placer de el hombre gordo, degenerado y pedófilo que es Carl Fisk. La fémina de cabellera rubia se agacha y lame el clítoris de la pelirroja a la vez que le agarra los glúteos y le mete un dedo en el ano, escuchando así su gemido, Carl se había quitado el pantalón y el calzoncillo, frotando su miembro erecto con la mano
— Muy bien, Linh, mételo más adentro, que gima como una auténtica puta — le dijo a la pelirroja y sin ninguna opción lo mete más profundo
Batman había salido de su vehículo, momentos después, desde una azotea y con cansancio, observa un grupo de matones que hacían un intercambio de mercancía, drogas y armas principalmente, y entre ellos estaba el que parecía ser el jefe, un hombre de metro ochenta y ocho y tez blanca, sin embargo usaba una máscara negra que le daba cierto parecido al tan temido líder nazi que hizo temer por su vida a Adolf Hitler, vestía un saco blanco, pantalón del mismo color, camisa negra y corbata blanca
— ¿Y bien? ¿Qué servicios necesita el Kingpin de este hombre trabajador? — preguntaba con un cigarro encendido entre sus dedos — ¿Armas? ¿Drogas? ¿O quizás unas bellas y jóvenes mujeres? Porque su estúpido primo está disfrutando de unas jugosas vietnamitas?
— El Sr Fisk quiere asegurarse de que Oswald Cobblepot gane las elecciones, Sr Sionis, desde hace mucho que el crimen manda en Gotham City y Nueva York y prefiere mantener esa alianza tanto con usted como con Cobblepot — hablaba un hombre fornido y calvo con tatuajes en un costado del cráneo — Ya sabe, para mantener el control y en un futuro cercano expandirnos a Metrópolis, Central City, y más allá
— Como bien sabrá el viejo Wilson, no todas las ciudades están tan sumergidas en la oscuridad como Gotham, pero habrá una fiesta de caridad en el club de Cobblepot, asistirán las personas más ricas de la ciudad como Carmine Falcone, Anthony Zucco, Salvatore Maroni, etc, etc, etc, y al final ese enano cabrón será el alcalde y ni cuenta se dará de que solo es una triste y patética marioneta
— Alfred, ¿escuchas esto? — preguntó el murciélago por medio del comunicador
— Ciertamente el micrófono que puso en uno de los hombres de Sionis funciona perfectamente
— También se está grabando, Alfred. Le enviaré una copia del audio a Gordon y Cobblepot no podrá ganar las elecciones
— Le recuerdo que la dichosa fiesta será mañana en la noche y sería mejor que vaya como Bruce Wayne y no como Batman
— Lo sé, Alfred. No puedo llevar a Sionis y a los demás a prisión, aún no. Necesitaré a alguien que los vigile de cerca, alguien en quien no sospechen y sé quien es el indicado
— Esa es una buena idea considerando que cerró los ojos por un momento y se quedó dormido. Además, ese nuevo superhéroe de Metrópolis podría aparecer en cualquier momento si se entera que usted a mutilado y dejado al borde de la muerte a varios hombres del Sr Cobblepot y de Black Mask, sin mencionar a la mitad de la comisaría
— Me importa una mierda lo que quiera ese boy scout. Que se ocupe de Metrópolis, Gotham es mía.
— Luis — llamaba Roman al hombre fornido — Tengo entendido que Fisk tiene mercenarios a su disposición, una especie de clan ninja
— La Mano
— Sí, La Mano. Verás, a inicios de este año ha aparecido un idiota disfrazado que nos ha estado dando problemas, el bajo mundo teme no solo por sus negocios con otras organizaciones criminales como los Yakuza y toda esa gente de Madripoor, temen también por sus vidas. Se hace llamar Batman y es demasiado peligroso. Si queremos que el viejo Oswald gane tenemos que deshacernos de él, de lo contrario todo se terminará de ir al carajo
— Quieres que La Mano venga a Gotham y lo elimine. ¿Cuántos hombres necesitas?
— A todos
— Sigue hablando, hijo de puta — decía Batman en voz baja antes de recibir un fuerte golpe en la espalda, cayendo en medio de los hombres de Black Mask y Kingpin
— ¡¿Pero que diablos?! — un fornido, parecido a un fisicoculturista con máscara de luchador, miraba desde la azotea — ¡¿Y tú quien diablos eres?!
— ¡El futuro alcalde de Gotham me contrató para acabar con este demente con aires de furro justiciero! ¡Llámenme Bane! — exclamó con las manos en su abrigo
Una bomba de humo estalla y gancho es disparado hacia una azotea, Batman había aprovechado ese momento para escalar y mira a Bane. Los mafiosos le disparan, el vigilante se oculta detrás de una cornisa, la cual reciba las balas disparadas por el terrorista
— ¡Que irónico, Batman! ¡Aterrorizas al bajo mundo de esta condenada ciudad y ahora huyes como una rata asustada! ¡Cobarde! — exclamó Bane — ¡Te propongo algo: luchemos tú y yo, mano a mano sin que estos incompetentes interfieran! — en eso, Batman corre a la vez que arroja un batarang
Bane lo esquiva y el objeto queda clavado en la cornisa para luego explotar y hacerlo caer del edificio
— ¡Hijo de perra! — gritó Black Mask — ¡¿Qué están esperando?! ¡Disparen!
— ¡Esto no ha terminado, Batman!
Batman suelta el cable con el que se columpiaba y se esconde detrás del batimovil para protegerse de las balas, Bane les ordena detenerse y camina hacia el vehículo, el murciélago se asoma de reojo para ver si podía subir al batimovil sin recibir una bala
...
— Oye no tan brusco — pidió Selina a su cliente mientras era penetrada por el trasero hasta que siente el semen en su interior
— Tú nunca decepcionas, Selina — le dijo un hombre de pelo castaño y corto, guardándose el pene que se pone flácido mientras la fémina se sube las bragas y acomodandose la falda
— ¿Por qué siempre tienes que follarme por el culo, David?
— Creí que te gustaba — respondió saliendo juntos del baño de un club
— Me gusta pero siempre eres demasiado rudo y terminas lastimándome. Si no vas a dejar de ser tan bestia será mejor que busques a otra prostituta
— No, niña, tú eres mi puta personal. Eres más hermosa y sensual que la gorda de mi esposa
—Vete a la mierda, David, no soy de nadie
— Sí lo eres, a menos que quieras que le de a la policía las fotos de tus atracos — le chantajeaba agarrándola de la muñeca con brusquedad — ¿O que creías? ¿Qué tu actuación de adolescente tímida me engañaría?
Selina, ya harta de la actitud del varón, lo agarra de un costado de la cabeza para golpearlo contra la mesa, llamando la atención de los ahí presentes y se va del lugar pero al llegar a la puerta es agarrada del cuello del suéter y arrojada al suelo, trata de levantarse pero es pateada repetidas veces en las costillas, lo toma de la pierna y los guardias sujetan a David mientras otro guardia le ayuda a levantarse
— ¡Suéltenme! — exigió David pero es echado del lugar
— ¿Se encuentra bien, señorita? — le preguntó el guardia de piel oscura que le había ayudado
— Algo adolorida pero sí. Gracias
— No se preocupe por él, ya no será bienvenido en este club
— Ya es algo. Creo que mejor me voy a casa
— ¿Le llamo un taxi?
— No gracias. No vivo tan lejos — en eso Batman atraviesa el ventanal, pasando cerca de ella, e impacta en la pared — ¿Batman?
— ¡Dios mio! ¡El murciélago es real! — exclamó el guardia que la ayudó
— ¿Está muerto? — preguntó un cliente
Batman taclea a Selina y al guardia para salvarlos de las balas que disparan los mafiosos, algunos clientes las reciben y parte del personal, los demás de tiraban al suelo o se escondían debajo de las mesas hasta que dejan de disparar. El justiciero se lleva el dedo índice a los labios diciendoles que no hagan ruido, se esconde en las sombras aprovechando que le habían dado a las luces y Bane entra acompañado por algunos hombres tanto de Sionis como de Fisk
— Revisen el lugar y encuentren el cuerpo, si no está es porque sigue vivo — ordenó Bane
Las personas ahí presentes no tenían más opción que permanecer quietos, en eso una canica rueda hasta llegar a estar en medio de los mafiosos y explotar en una nube de gas que los hace toser con brusquedad, Batman sale de su escondite y deja fuera de combate a los hombres uno por uno, dejando a Bane de último pero este le atrapa el puño y lo azota contra el suelo, dirige sus puños a la cara del murciélago, quien rueda de un lado a otro para esquivarlos, los puños del terrorista dejaron marcado el suelo y Batman le da un golpe en la quijada, quedando boca abajo por el impulso y apoya sus manos en el suelo para levantarse rápidamente y alejarse. Bane lo agarra de la capa, lo jala con fuerza y le da un rodillazo en la espalda, escuchando un grito de dolor, con ambos puños lo obliga a arrodillarse al golpearlo en los hombros, Batman responde con un codazo en los testículos, Bane se sujeta de sus partes y el vigilante le da un codazo, se voltea dándole un derechazo en la quijada y un izquierdazo ascendente seguido de una patada giratoria
— ¿Quién es el cobarde, Bane?
Bane lanza un poderoso golpe, el cual Batman usa apoyando su mano en el puño para darle una patada al costado de la cabeza, seguida de otra patada giratoria, luego apoya su pie en la rodilla de su enemigo para así darle una patada ascendente, girando hacia atrás y dejándolo en el suelo
— ¿Ya te rindes?
— Cuando me hablaron de ti creí que exageraban, que solo se trataba de un loco fantasioso, un lunático — le decía levantándose y quitándose el abrigo — Sin embargo debo agradecerte, cuando Cobblepot me contrató pensé que sería un trabajo fácil, pero tú — las mangueras conectadas a su cuerpo se llenan de un líquido verde que lo hace crecer en músculo y tamaño — Tú haz hecho mi trabajo mucho más interesante
Las patrullas se detienen de golpen y los oficiales se bajan, los hombres de Black Mask y Kingpin matan a la mayoría al jalar el gatillo, excepto a dos de ellos: Ellen Yin y el Comisionado Gordon, quienes se ocultan al lado del auto. Bane golpea a Batman con la dorsal, este lo bloquea con esfuerzo con sus antebrazos y es agarrado del torso y arrojado contra Black Mask, el terrorista corre hacia él embistiendo la patrulla, los mafiosos corren y Batman dispara un gancho un tejado cercano pero Bane trepa clavando sus dedos en el muro pero una de sus mangueras es cortada por una de las balas de los policías, por lo que él se suelta y les arroja un auto
— ¡Corre! — le gritó Gordon a Yin
Batman cae en su espalda y se sujeta de las mangueras restantes, Bane salta hacia atrás, atravesando la pared y cayendo de espaldas, luego lo agarra de la pierna y lo azota contra el suelo, manchandolo de sangre, lo levanta con ambas manos por encima de su cabeza pero Batman lo golpea en la cara, Bane lo suelta y el murciélago le da varios golpes con mucha más agresividad, sin embargo el daño que le ocasionaba era mínimo y con la mano derecha abierta, Bane lo golpea contra el suelo
— Debo decir que la dosis de veneno que usé no es más que una pequeña dosis, Batman, porque no quiero que esta lucha termine pronto — Batman le arroja una bomba de gas lacrimógeno a los ojos a la vez que cierra los suyos — Muy astuto pero necesitarás más que eso para vencerme
Batman se levanta entre quejidos y usa la oscuridad a su favor, Bane lo agarra del cuello y cierra lentamente la mano
— ¿Crees que la oscuridad es tu aliada? Tú solamente la adoptaste, peleas como un jovencito asustado, Batman, asustado y lleno de ira — lo golpea en el estómago, haciendo que le salga sangre por la boca — Tanta ira ¡y no sabes aprovecharla! — lo arroja hacia la pared y se voltea, viendo a Yin y a Gordon apuntandole con sus armas
— ¡Las manos donde podamos verlas! ¡Estás arrestado! — ordenó el comisionado pero rápidamente son alzados por las grandes manos de aquel hombre y cierra un poco más la mano con la que lo sujetaba, sintiendo como sus huesos se fracturan
— Siento decepcionarlo, comisionado, pero como soy un hombre generoso lo dejaré vivir — lo arroja al otro lado de la calle — En cuanto a usted, oficial, mi empleador quiere que la lleve con él. No sé para que la quiere y no me interesa siempre y cuando me pague
— Ellen — decía Batman con dificultad, tirado en el suelo y extendiendo su mano mientras los ve alejarse y pierde la conciencia
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top