Había un niño llorando a la fiesta de compromiso de mi hermano, a la que mis padres me habían llevado, estaba escondido en el jardín trasero, detrás de todo el mundo. Parecía de mi edad, pero se veía más frágil. Estaba agachado limpiándose las lagrimas.

—¿Por qué lloras? —pregunte, el niño se limpio las lagrimas y me miro con sorpresa.

—Mi hermano me pegó muy feo —el estiró el brazo y mostró una marca roja muy fea—, dijo que nadie me quiere y que a nadie le importo.

—¿Por qué tú hermano diría eso? —pregunté con curiosidad—, mi hermano y yo nos llevamos muy bien, somos casi inseparables, el siempre me está cuidando, eso es lo que mis padres me enseñaron que hacen los hermanos, a veces peleamos pero nunca nos golpeamos. Y tampoco diría palabras tan crueles.

—Mi hermano es muy malo, él no me quiere.

—Entonces yo si te voy a querer, así que no estés triste —tome su brazo y puse en beso en la marca.

—Mi appá dice que así ya no dolerá tanto.

—Me sigue doliendo —el niño grito y volvió a llorar, en realidad cuando me lastimaba ymi appá me besaba donde me había lastimado, tampoco dejaba de dolerme, pero yo jamás le dije eso para no lastimar los sentimientos de mi appá —vamos, no llores, mejor hay que jugar. ¿No quieres jugar conmigo?, ¿Cómo te llamas?

—Soy Jimin.

—Mucho gusto, yo soy Taehyung.

Los primeros recuerdos de Jimin volvieron a mi cómo en un sueño, me levanté de la cama y empecé mi rutina diaria. Corría por las mañanas una hora así que baje con mi ropa deportiva hasta la sala. Papá y Namjoon estaban en medio, parecía que estaban discutiendo algo.

—Que pasará con Taehyung? —preguntó Namjoon, así que me detuve y me escondí para no ser notado. Si la conversación era sobre mi, era algo que tenía que saber.

—Nada pasará con Taehyung, no tienes que preocuparte por él, una vez que te cases y te mudes a la casa de los Jung, Taehyung podrá empezar sus deberes en la compañía, sobre todo cuando estés de luna de miel. Podrá cubrirte, se que crees que no apreciamos lo suficiente a tu hermano pero Taehyung también es un Kim, no importa si es un alfa o un beta.

—El quiere casarse con Park Jimin, no lo obligaras a un matrimonio sin amor como el mío.

Papá puso su mano encima del brazo de Namjoon.

—Tu hermano será libre de casarse con quién el quiera.

Casi grite de la felicidad, prácticamente mi futuro con Jimin estaba asegurado. Nada podría salir mal, mañana cumpliría la mayoría de edad, así que bien podría empezar a cortejar a Jimin oficialmente, entre más rápido lo alejara de esa maldita familia mejor. Lo sentía por mi hermano, pero él lo superaría, tenia mejor temperamento que yo, Hoseok podría ser un dolor en el culo pero nada que no pudiera aguantar.

—Aún así no entiendo porque tengo que irme a vivir con los Jung,

—Solo será por un periodo corto de tiempo, como los Jung sólo tuvieron un hijo omega, heredaras la compañía.  Tienes que vigilar tus intereses. Además ya sabes que nuestras familias han estado fuertemente ligadas por generaciones, hay muy pocos alfas y mucho menos omegas.  

—Pero es que ustedes no conocen a Hoseok, él es irritante. Admito que sus feromonas son increíblemente atractivas pero me volvería loco por ello.

—Tu también lo eres Namjoon, sólo que no te das cuenta

En eso padre tenía razón, Namjoon tenía un temperamento bastante narcisista, nunca veía sus defectos, a veces incluso sin quererlo podría llegar a lastimar cruelmente a los demás, la diferencia con Hoseok es que él si lo hacia con toda la intención, disfrutaba viendo a los demás por debajo de él.

—Estoy seguro que el piensa que todos debemos lamer la punta de sus zapatos

Finalmente decidí dejar de escuchar a escondidas y seguí mi camino. Le mandé un mensaje a Jimin, quería verlo. Le quise desde el primer momento, tal vez no fue amor a primera vista porque éramos solo niños, a esa edad todo es sobre jugar con lodo y palos, pero poco a poco se fue metiendo en mi corazón. Cuando me di cuenta, lo amaba y no había vuelta a atrás.

Jimin estaba comiendo en la cocina cuando llegue, me senté a su lado y la cocinera incluso me sirvió un poco de comida.

—Ya tienes el traje que usarás mañana para mí fiesta.

Jimin suspiro cansadamente.

—No creo que ellos quieran llevarme, les avergüenzo ya sabes.

—Te he invitado personalmente, dudo mucho que se atrevan a dejarte, no pueden quedar mal conmigo y con mi familia.

Le guiñe el ojo a Jimin y luego puse mi mano en su mejilla apretándola un poco. Él hoy se veía más lindo que de costumbre, 

—Ya, no molestes —Jimin intento apartarse pero lo retuve abrazando y acercándolo un poco más a mi, luego bese su frente.

—Me gustas mucho Jimin, solo quiero hacerte feliz, quiero que tengas una sonrisa en tu rostro.

—No soy tan miserable como piensas, he podido estudiar.

—En una escuela pública para omegas, cuando Hoseok estudia en las mejores universidades del país— casi grite y preferí alejarme de Jimin. No me gustaba cuando el trataba de defender a la familia que tenia.

—Hoseok es el primogénito, su esposo, ósea tu hermano se volverá la cabeza de esta familia. Por supuesto que Hoseok tiene que prepararse con lo mejor. Ahora que los omegas podemos estudiar....

—A Hoseok la escuela jamás le ha interesado, estamos en la misma carrera y se muy bien que sus notas son terribles, más bajas que el promedio, sólo va a la escuela a alardear de la superioridad de sus feromonas, y tiene a todos esos alfas caminando detrás de él como perros, no puedo olerlo, pero estoy seguro de que si pudiera, apestarían para mí.

—Si pudieras olerlas. Estarías bajo su dedo meñique como la mayoría —Jimin sonrió— son abrasadoras, incluso yo siendo también un Omega no puedo evitar estar un poco contagiado, las feromonas de Hoseok afectan tanto a alfas como omegas, según lo que él decida.

—Entonces agradezco no ser alfa, de todos modos eso no es importante, no me gusta como te tratan: comes en la cocina, te hacen limpiar la casa, cuidar el jardín, tu habitación está a lado de las habitaciones del área de servicio.

—No es tan malo Taehyung, hay otros omegas que lo tienen peor que yo

—No porque otros estén peor significa que este bien

No soporta a esa parte de Jimin, siendo tan conformista, todo estaba bien para el, si lo golpeaban no pasaba nada, si lo humillan, lo acepta. Tiene tan baja autoestima que está destruido por dentro creyendo que no merece lo mejor.

—Jimin, en cuanto mi hermano se case, quiero solicitar el permiso para casarme contigo también. Aceptarías estar conmigo para toda la vida.

Jimin se sonrojo ante mis palabras, parecía sorprendido pero también había una ligera sonrisa, asintió; lleno de euforia tome sus manos y acerque mi rostro al suyo, Jimin no se alejó, entonces nos besamos por primera vez, primero de forma suave e inexperta, nuestros labios apenas moviéndose sobre el otro, pero fue un sentimiento reconfortante y al mismo tiempo embriagador.

Poco a poco nuestros labios se acoplaron y establecimos un ritmo un poco más apasionado, separándonos de vez en cuando para recoger un poco de aire en nuestros pulmones y luego volvimos a besarnos.

Unas palmadas se oyeron a lo lejos. Al separarnos pudimos ver a Hoseok recargado en el marco de la puerta aplaudiendo.

—Felicidades Jimin. Al parecer te vas a quedar en la familia, cuando pensé que por fin me iba a alejar de tu mugrosa presencia, te vas a convertir en mi cuñado.

—Ahórrate tus palabras de mierda Hoseok. Deja en paz a Jimin. Ya madura y acepta que los problemas en tu familia no son culpa de Jimin, sino de tu padre infiel.

Hoseok sonrió con burla.

—

Ambos se merecen. Un bastardo Omega y un insípido beta. Les deseo felicidad muchachos.

Se dio la vuelta y se fue. Me relaje y me concentre en Jimin de nuevo, el parecía bastante afectado.

—No dejes que sus palabras te molesten, sabes que lo único que salen de su labios son mierdas. No te preocupes por él, no vale la pena.

—A veces siento que él es más miserable que yo, obligado a casarse con tu hermano. Obligado a ser el mejor, papá siempre está encima de él insistiendo en que debe ser bueno, su madre también. Me da mucha lastima.

Rode los ojos, lastima debería darle mi hermano que tendrá que cargar con él toda la vida.

—No la merece. Pero tienes algo de razón, tal vez eso es el porque se comporta como un idiota contigo, te tiene mucha envidia porque tú si puedes escoger Y estoy muy feliz de que me escojas a mi.

Para la fiesta, mis padres rentaron un salón en el centro de la ciudad, era tan grande como nuestra propia casa, los meseros caminaban de arriba a abajo llevando copas de champagne y bocadillos. Yo me quedé en la puerta de la entrada esperando a que Jimin llegara.

Cuando vi el auto de los Jung estacionando fuera mi corazón empezó a acelerarse, pero mientras las personas descendían del vehículo mi humor empezó a volverse oscuro.Felicidades Taehyung por tu mayoría de edad. Te hemos traído este presente, nada que no te merezcas. La madre de Hoseok hablo. Trataba de aparecer agradable mientras yo sólo podía fruncir el ceño, cuando Hoseok paso a mi lado, se detuvo y susurro muy cerca de mi oído.

—Creo que tú querida Cenicienta se quedó en casa.

Dijo en un tono burlón, antes de que se fuera lo tome por el brazo con fuerza reteniéndolo, y entonces mi otra mano simplemente se movió sola, para cuando me di cuenta ya estaba sobre su hermoso rostro.

Escuché varios jadeos a nuestro alrededor. El señor Jung tomo a Hoseok entre sus brazos y lo abrazo cerca. Parecía bastante enojado, yo aún estaba un poco en shock por mi actitud, pero estuve tan enojado cuando Hoseok se refirió a Jimin como Cenicienta que no pude detenerme.

Para cuándo me di cuenta Namjoon me estaba sacando del salón casi a empujones. Parecía muy molesto, lo que me hizo preguntarme por qué si supuestamente no tenía sentimientos hacia Hoseok, incluso parecía que también lo odiaba.

—Te has vuelto loco, ¿Cómo se te ocurre?.

—Se lo merecía.

—Me importa un comino si se lo merecía o no, nunca en tu vida vueltas a ponerle una mano encima, el es mi prometido y faltarle el respeto a él, es faltármelo a mi públicamente.

—A quien le importa. Ni siquiera te gusta. No quieres casarte con él.

—Claro que quiero casarme con él.

Mi hermano admitió por primera vez delante de mi, en su vida. Aunque desde que tengo memoria siempre había odiado este compromiso, diciendo que Hoseok lo volvería loco.

—Cada maldito alfa en esa fiesta moriría por tenerlo, y eso es lo que me vuelve loco de celos. tienes suerte de ser un beta, es verdad que no he demostrado tenerle mucho aprecio, pero eso es muy diferente a dejar que tú le pongas un dedo encima.

—Pues no me arrepiento.

—Pues entonces tendrás que pagar las consecuencias.