Capítulo 23 ● 3 ●
PEQUEÑO MARATÓN
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—— Ya te extrañaban — la codeó y Alex rio nerviosa
—— Yo también Pet — el castaño sonrió con las mejillas un poco rojas
Ambos caminaban por el parque con la luna alumbrándolos y el viento golpeando sus rostros, pero no era frío y eso lo agradecían.
Sus padres la dejaron salir con la condición de que no dijera nada sobre los vengadores o que había entrado a la iniciativa por órdenes de Stark.
—— ¿Que has hecho? — Peter decidió romper el silencio viéndola de reojo
Alex vaciló.
—— Mis padres consiguieron nuevo trabajo y apenas se están acoplando, me toca ayudarles — Peter asintió y se detuvo frente a una banca, Alex lo notaba nervioso así que toma aire y decide preguntar — ¿sucede algo? —
Peter levantó su vista del piso y asintió mientras relamía sus labios nervioso.
—— Quiero invitar a alguien al baile — fue su respuesta y Alex no podía estar más que emocionada pero al mismo tiempo nerviosa
¿Sería ella?
—— Ah, si ¿a quien invitarás Pet? — preguntó ocultando su nerviosismo —
Peter la veía sin saber que responder, ella lo ponía más que nervioso y no entendía el por que quizás la picadura de esa araña lo hizo perder la cabeza, Alex lo veía con el ceño ligeramente fruncido y su cabeza inclinada hacia un lado, sus labios en una fina línea y sus ojos en él, en un trato de calmarse comenzó a jugar con sus dedos y respondió lo primero que salió de sus labios.
—— A Liz — la respuesta que llegó a los oídos de Alex la hizo sentir como si cayera desde las alturas sin paracaídas, su corazón dolía y su respiración amenazaba con alterarse, así que desvió la vista y cerró los ojos en un trato por calmarse
—— ¡Oh que... — carraspeo — sorpresa, creía que invitarías a Mj — Peter frunció su ceño sintiéndose más que tonto —
—— ¿A Mj? — interrogó confundido y Alex asintió mordiendo el interior de su mejilla
—— Si, he notado cómo ella te mira — comienza a jugar con sus dedos
—— Yo jamás lo he notado — responde meneando la cabeza
—— Bueno los chicos no notan muchas cosas — ríe en un intento de no demostrar las ganas que tenia de llorar —
—— Creo que si — suspira, despegó sus labios para decir algo pero antes de hacerlo el teléfono de Alex sonó, lo sacó de su bolso y era una simple notificación pero ella por un intento de zafarse de la situación fingió responder una llamada
—— Ah hola ma — Peter la miró triste — si, ya mismo vuelvo — guardo el teléfono — lo lamento Pet, pero debo volver — mintió y Peter asintió rascando su nuca
—— ¿Quieres que te acompañe?
—— No — respondió rápidamente y cerró los ojos para negar — yo puedo ir sola — le sonrió y corrió sin más
—— Ay soy un tonto — maldijo en voz baja una vez que vio como Alex corría hasta la salida del parque — ¿Por que no pudiste, por que Peter? — Se regaña así mismo y se va de ahí
Alex corría limpiando las lágrimas, se sentía una tonta por pensar que Peter la quería a ella, se detuvo en un callejón para poder tranquilizarse antes de llegar al complejo.
Se sentó en el suelo y comenzó a pensar en por que se había ilusionado con Peter si sabía que solo eran amigos y jamás podrían ser algo más, suspiró tratando de controlar su respiración y al no poder hacerlo bien una onda salió de ella y destruyo un bote de basura asustándola. Se levantó y vio el bote totalmente hecho cenizas.
—— ¿Pero que? — preguntó confundida y un poco asustada mirando sus manos y después al callejón
Sin tener idea de lo que había ocurrido comenzó a caminar a la parada del autobús para dirigirse al complejo, suspiró y veía a todos lados como sus padres le enseñaron. El autobús se paró Justo frente a ella y lo abordó saludando al chofer y pagando su pasaje, se sentó al frente y tenía la vista al frente, las imágenes de lo que sucedió en Sokovia, el cómo reaccionó Wanda y el bote no dejaban de llegar a su mente.
¿Y si hay algo malo en mi?, se preguntaba pero no había respuesta correcta, no sabía cuánto llevaba perdida en sus pensamientos pero al sentir como el autobús frenaba se dio cuenta que era la única abordó y que se encontraba por el camino para el complejo, agradeció y bajo para comenzar a caminar.
Esta vez quería las respuestas correctas y se aseguraría que sus padres se las dieran, al estar frente a la puerta tomó varias bocanadas de aire y entró, creía que todos estarían dormidos pero no, las voces le hicieron saber que estaban en la sala, pero no era una platica normal, era una pelea.
Confundida siguió caminado hasta que escuchó algo que la hizo cuestionarse todo.
—— ¿Y que quieres que te diga? — la voz de su padre resonaba — que es verdad, que Alex no es nuestra hija, que la adoptamos como pedido de Fury y que si, si podría ser una Stark, que lo que ocurrió en Sokovia fue por que el Fénix esta en ella –
Alex se detuvo de la pared y se ocultó para ver que más podía escuchar.
—— Si, eso quería escuchar — Tony parecía feliz pero Alex no, salió de ahí y corrió sin rumbo ¿acaso todo era una mentira, el amor de sus padres, los recuerdos de su niñez?, y al hacerse la última pregunta se dio cuenta de algo
No tenía recuerdos de su niñez, su mente estaba en blanco, se detuvo en un árbol y cerró los ojos para tratar de recordar algo pero no había nada que recordar todo estaba en blanco, no había nada, solo un vacío aterrador ¿entonces, quien soy?.
Su cabeza le dolía por tratar de recordar algo y no poder, su corazón latía con fuerza y sus ojos picaban por las lágrimas ante el dolor insoportable, negaba tratando de relajarse pero no podía, simplemente no podía, todo le daba vueltas y cada una de las palabras de su padre seguían intactas en su mente, por un intento de callar el ruido volvió a dejar salir una onda y esta vez terminó con varios árboles.
Culpable y sin saber que hacer comenzó a contar y repasar los colores del lugar, pero nada servía el ataque de pánico ya se estaba presentando y esta vez estaba sola o al menos eso creía.
—— Alex — escuchó una voz antes de desmayarse
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