007

— ❈ 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐊𝐨𝐨𝐤

Las lágrimas corrían por mis mejillas . No podía creer lo que estaba viendo.

Jungkook estaba teniendo relaciones con una chica del staff. Cerré fuertemente la puerta del estudio y salí lo más rápido que pude de ese lugar.

Las lágrimas me hacían ver todo borroso así que no veía muy bien por dónde iba, y por eso choqué con alguien. Limpié mis lágrimas y me fijé que había chocado con Namjoon.

—¿___ que pasó? —preguntó preocupado mientras me tomaba por los hombros.

—Jungkook —susurré— él... me... engaño —solté balbuceando para luego volver a romper en llanto.

Namjoon me abrazó mientras yo lloraba en su pecho. Escuché como alguien se acercaba gritando mi nombre, entonces, me aferré mas a Namjoon. No quería ver a Jeon.

—Cariño lo siento —soltó el pelinegro en un hilo e voz—. No es lo que parece, yo te puedo explicar.

Me alejé de Namjoon y miré a JungKook.

—¿¡Qué mierda me vas a explicar!? —exclamé furiosa—. ¿¡Qué accidentalmente tu pene entró en ella!? —suspiré.

Namjoon seguía ahí mirando la escena, al igual que otras personas de la empresa que se habían detenido a ver lo que ocurría. Los ojos de Jungkook se comenzaban a cristalizar.

—Ella me obligó ¡te lo juro! —me miró.

Me crucé de brazos y sonreí amargamente.

—Te dejaré una cosa en claro —sentencié—. Una tercera persona no puede entrometerse en una relación sin que una de los dos restantes lo dejé. ¡Y tú! —lo señalé —. Nunca te opusiste a nada... ¡Maldito infeliz!

El solo bajó su cabeza triste. Estaba dispuesta a irme pero miré mi mano izquierda y quité el anillo que llevaba. Me di vuelta nuevamente y se lo dí.

—___ por favor no —susurró.

—Cuando nos conocimos yo te conté mi historia y te dije que me habían engañado... entonces tú, me prometiste que me cuidarías y que nunca me harías algo así —sorbí mi nariz—. Pero te importo más tú deseo carnal que nuestro compromiso. Así que espero que seas feliz con ella o con cualquier otra mujer, solo te pido que por favor no me busques.

Salí lo más rápido que pude de ese maldito edificio, y al llegar a la acera caí de rodillas al suelo y comencé a llorar desconsoladamente. Sentí como alguien se arrodillaba frente a mi y me abrazaba. Por su aroma supe que era Namjoon.

—Gracias —fue lo único que pude decir.

Jungkook veía desde lejos esa escena y su corazón se rompía cada vez más. ___ tenía razón, él se había dejado llevar por un simple deseo carnal. Y gracias a eso había perdido a la mujer que más amaba, había destruido un corazón que tanto le había costado reconstruir. Y lo destruyó del mismo modo en que ya te habían herido.

Se sentía el peor ser humano del mundo.

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