Deja de intoxicarme de ti
y tu sonrisa.

Es difícil, ¿sabes? Verte y no sentir ese maldito cosquilleo tan molesto en mi estómago.

Cada vez es más difícil parar.
Me vuelvo más adicto a ti.

Y es tan molesto, ¡lo detesto y no te imaginas cuanto! Porque no tiene sentido que me afecte así, ¿verdad? Que sienta que cuando llegas a un cuarto, todo tu ser ilumine la habitación, que tan solo sonrías y yo también sienta la necesidad de hacerlo, que causes mis más intensos sonrojos, mi mente nublada y mi pulso acelerado.

Me tienes como un imbécil. E incluso cuando no estás en mi campo de visión, apareces en mis pensamientos. No importa lo que hagas, tú siempre estás ahí, sin importar cuánto luche por no mirarte y que no acapares toda mi atención, de todos modos mis ojos siempre terminan pegados a cada centímetro de tu ser, ya sean tus bonitos orbes, tus rellenos mofletes, tu pequeña nariz, tus tentativos labios, tu sedoso cabello, tus manos, tu cuerpo, tus muecas y expresiones... Todo.

¿Por qué me haces esto? Sé que es con intención, porque cuando nuestras vistas se cruzan me guiñas discretamente un ojo o muerdes lento tu labio inferior. A veces ambas.

Y lo amo.

Tus miradas, tus gestos, todo eso.
Hay algo que vuelven a alguien loco.

En serio lo hago, me vuelas la cabeza y nos llevas a una dimensión donde solo estamos los dos. No importa el resto, no importa lo que digan, lo que hagan. Tú, yo y nuestra rara manera de comunicarnos, secreto, disimulado, oculto.

Nuestro.

Es peligroso.

Ríes y finges que es por lo que dicen. Sonríes, de esa forma que sé que va nada más dirigido a mi, y te lo devuelvo, a pesar de mis nervios. Siempre amo ver tu reacción. Eres un tonto, encantando de burlarte de mí, de hacer sentir tan patético pero bien en la jodida vida.

¿Te sentirás igual que yo?

Peligroso.
No quiero quererte, no debería ser así,
lo sé en mi mente.

Tengo miedo de saber que esto solo sea un juego para ti, porque, diablos, realmente estoy empezando a llenarme de ilusiones, ilusiones que están ocasionando que vaya demasiado alto, y que aumentan conforme te acercas más, cuando vienes por tu cuenta a mí y me abrazas sin decir nada, cuando tomas mi mano, besas mi frente, me aprecias con caricias...

Y la caída, oh, va a ser muy fuerte.

No vengas hacia mi, por favor detente, detente justo ahí.
No quiero enamorarme de ti.

Muchas veces me haz lastimado, con palabras duras, acciones distantes. Y no comprendo, porque un día te diriges directamente conmigo, buscando cariño, comprensión y consuelo, y otros me desprecias como la mayor basura que se te hubiese atravesado.

¿Qué es lo que quieres exactamente de mi? ¿Es que también finges conmigo, que usas tu increíble habilidad para sacarme provecho como con el resto? Ya que de ser así... Está funcionando.

Y no deseo eso, es doloroso, es frustrante, es molesto, es una agonía. Lo odio tanto como todo esto que siento.

Tú no me amas, así que no me quieras.
No me necesitas, así que solo déjame..

Una gran parte de mi implora por tu lejanía, se siente en paz cuando no estás cerca y chilla de la rabia cuando decides hacer una de las tuyas, alterando todos y cada uno de mis sentidos con solo un roce, unos labios cincelados, unas comisuras alzadas y ojitos achicados al final, mientras que la otra la detesta, llora por tu ausencia y grita terriblemente por cada una de tus acciones, deseando cada hora del día, minuto y segundo porque vuelvas como el imán al metal hacia mí, llenándome de mimos, diciéndome esas dulces palabras al oído y arrullándome en tu pecho o tú en el mío.

Lo más probable es que solo sea algo pasajero, alguien que tienes de a ratos, que te entiende y nunca te rechaza o rechazaría. Sé bien que tienes eso en cuenta, puedo contar con los dedos de una mano cuando te he dicho que no, resultando al final en vano pues de todos modo termino cayendo por tus encantos. Y es por ello que debo alejarte.

Déjame, porque no podré escapar.
Es peligroso.

Pero no lo consigo, siempre termino regresando a ti, a esa adictiva sensación que me ofreces.

Así que por favor...

Solo lánzame, lánzame lejos...

Dolerá, lo hará y en gran cantidad, pero lo necesito, lo necesitamos los dos.

Hazlo, apártame, despreciame y no me busques de nuevo. No importará, lo superare y tú igual, después de todo...

Esa sonrisa la ofreces a todos aquí, ¿no es así?
Tan peligroso...

Puedes tener a quien quieras cuando quieras a tu alcance.

¿... no?

***

hOLAAAA.

Esta vaina está sencillita... Bueno no tanto JAJAJAJAJAJA.

Díganme, ¿de quién a quien creen que sea?

La canción que usé esta vez fue "121U" de Day6, que... ¿YA FUERON A ESCUCHARLOS? ¿OYERON "Zombie"? ARTEEEEE.

Participen aunque estén insegurxs. Nada pierden intentando. Y me encanta leer sus comentarios, en serio. uwu

Gracias por leer. ¡Recuerden votar! Lxs amo. Espero se estén cuidando y comiendo saludable. ❤️