Sábado 23 de junio 11:00 am

Después de pasar casi toda la noche haciendo el amor, Jamie y Jazmín tuvieron esa reconciliación que tanto anhelaban. Él se despertó primero, la admiró un segundo mientras dormía, vio la hora en su celular, eran las 11. Se levantó y puso el bóxer seguido del pantalón y bajo las escaleras para preparar el desayuno. Se sentía tremendamente feliz. Todo había salido de alguna manera como lo había planeado, tenia a la mujer de su vida, su hermano ya estaba con él y sus amigos eran lo mejor del paquete por haberlo ayudado a arreglarse con su chica.

Después de preparar capuchino, masiras con dulce de leche y acomodar todo en la bandeja, subió y se encontró con la hermosa mujer sentada en medio del desorden de sábanas, con el pelo salvaje y sexy, ojos somnolientos y una sonrisa brillante en los labios.

-Buenos días mi amor- dijo él y depositó un suave beso en sus labios.

-Buenos días rubio- respondió mas sonriente que antes.- mmm huele rico.

-Eso espero, hace mucho no hago desayunos especiales. Mi mamá seguro te va a envidiar- ambos rieron- ahora acomodate linda, tengo ganas de mimarte mucho hoy.

-Ay por dios, ¿qué le hiciste a Jamie?- dijo riendo y volvió a besarlo mientras tomaba la taza de ella en sus manos y él se sentaba a su lado. Y así comenzaron el día juntos.

A eso de las 14:30 de la tarde, los chicos aparecieron en el departamento de Jazmín para que conociera bien a el hermano de su novio, Samuel, Sam para los amigos según decía él. Habían hablado casi por tres horas, se llevaban bastante bien, pero algo de eso no encajaba y Jazmín habló de repente cortando todo.

-Estoy algo confundida- todos la miraron pero nadie hablo por lo tanto prosiguió- ¿Cómo es que ustedes sabían todos acerca de lo que iba a pasar y ninguno me dijo nada?.- Al ver que ninguno respondía y empezaban a ponerse pálidos, comenzó a juntar las tazas de café lentamente, una vez que acabó, Alan habló.

-Nena, creo que lo mejor es que no hablemos de esto ahora, ya conociste a Sam y volviste con este rubio insoportable, si hablamos de otra cosa te vas a ahorrar un disgusto.- todos lo fulminaron con la mirada cuando entendió que había metido la pata hasta el mismísimo fondo.

-¿Sabes qué pienso yo? Que mis amigos y amigas, me jugaron una mala pasada cubriendo a Jamie ocultándome este momento y ahora no quiero verlos por un tiempo, así que si me hacen el favor de irse a la mierda y de mi casa, se los agradecería.- Jamie tenía en su mirada celeste un miedo atroz al escucharla, pero ella hablo y no fue para mejor.- Vos también amor, necesito estar sola y pensar.

Una vez que todos agarraron sus pertenencias, a eso de las 18:00 horas fueron saliendo uno por uno, el último era Jamie, que la miraba casi rogándole que no lo echara en ese momento, pero como parecía que Jazmín no iba a dar el brazo a torcer, se acerco un poco a ella, la miró a los ojos y solo dijo unas palabras.

-Acepto que meterlos fue un completo error, pero si para eso conseguí que abrieras los ojos y logré también abrir los míos sometiéndome a la tortura de verte con otro mientras yo solo fingía con Rocío y después de anoche descubrir que sos la mujer de mi vida no alcanza para el perdón, hacemelo saber pronto para volver a casa.- ella lo miró con lágrimas en los ojos, él no entendía por qué ella estaba dolida, pero acepto sus palabras, le besó dulcemente los labios, atónito, salió por la puerta y ella comenzó a llorar sin para, sus amigos la habían traicionado, o tal vez ayudado, estaba sensible por todo lo conversado con su cuñado, por eso necesitaba estar sola.

Dispuesta a no perder el día soleado que hacía afuera ese sábado por la tarde, se puso su ropa deportiva y salió a correr como cada día desde que se había tomado vacaciones. Pasó por su trabajo a hablar con su jefe, vio a su compañera y hablaron un rato, pasó a ver a Julie para ver como iba con la boda y entrando la noche a las 22:00, llegó a su casa, saludó a Ruca que estaba de turno de portero y subió las escaleras para no perder el ritmo de ejercicio.

Después de una ducha refrescante, se puso su camiseta y un culotte y se fue a dormir. No le dieron ni ganas de entrar al blog de colegio para ver que se hablaba sobre la fiesta, estaba en estado de shock, feliz, pero en estado de shock.

Dos meses después. Miércoles 22 de agosto. Jazmín se encuentra con Mario, su Ginecólogo.

Las lágrimas por los ojos de Jazmín, no sabía si eran de alegría o de tristeza, pero ahí estaban.

-Tengo que felicitarte, estás teniendo un progreso muy bueno en dos meses- decía el ginecologo mientras el ecógrafo le mostraba en la pantalla lo que parecia ser el cuerpo de su bebé.

-Gracias Mario. Todavía no puedo creerlo. Tengo miedo.

-No deberías, pero si queres contarme él por qué, te escucho.

-El padre no se si lo va a reconocer.

-Ser madre soltera no tiene que preocuparte, en confidencia- le apretó la mano- son muy buenas y valen tanto como las que tienen un hombre a su lado.

-Pero hace ya dos meses que estoy y no tengo el valor de decírselo, ¿y si lo hago y me deja?- las lágrimas asomaban por sus ojos.

-Entonces no te merece, un verdadero hombre se haría cargo de sus actos. Ahora no pienses eso, recorda que es un embarazo de riesgo y si te estresas puede traer problemas.

-Lo sé, lo sé, tengo que calmarme. Gracias por tomarte un tiempo, de seguro estas atareado de trabajo.

-No me tenes que agradecer, la familia de Cadierno es mi familia también y vos sos parte de ellos y siempre que necesites podes pasar. La próxima ecografía es el 15 de noviembre, ahí sabremos el sexo.

-Esta bien, lo agendare así no se me pasa.- sacó el móvil que tenia en silencio y tenia un mensaje: "Amor, ¿merendamos con los chicos en Carisma? Avisame y te paso a buscar", sonrió y le respondió que estaba a unas cuadras, que los esperaba ahí.

-No dudes en venir si sentís algo, puntadas o dolores excesivos- ella asintió, fue al vestidor, se colocó su calza negra deportiva, las vans blancas, la remera de tiras roja, su mochila, dobló el camisón que le había dado el ginecólogo y volvió de nuevo para despedirse.
Luego de diez minutos caminando y de escuchar la grabación de Viny del mix de Christine Aguilera que le había regalado, llego a la confitería y ahí la esperaban sus amigos y su novio con una media sonrisa, parecían nerviosos y ella sabía porqué, era el día de hablar sobre lo que iban a hacer para la fiesta de graduación, y después de dos meses sin verla, salvo Jamie y Sam, las cosas sabían que no iban a andar fáciles.

-Hola nena- dijo Viny alejado lo más posible- ¿elegís mesa?.

-Hola, vamos allá, tengo cosas que hacer, no tengo mucho tiempo.- respondió cortante y todos cruzaron miradas, iba a ser mas difícil de lo que pensaron.

Una vez ubicados, Jazmín sacó su notebook de la mochila y mientras prendía pidieron café, capuchino y rosquitas para merendar, cuando dijo que pidieran dos docenas la miraron y ella dijo que no había almorzado y tenía hambre, pero los antojos eran la razón, aunque no podía contarles aún, no tenía fuerzas, se sentía aún dolida. Cuando ya tenían todo preparado, comenzaron a debatir entre todos qué iban a hacer para la fiesta de graduación, aunque sabían que iba a ser ya de gala, todavía faltaba la decoración y asistencia, no todos iban a entrar como en la otra, tenían que ser si o si 50 personas o 60 contando las familias.

Después de una hora de discusión, se pusieron de acuerdo en el tema, decoración y música, Jazmín publicó el comunicado en el blog y mientras guardaba todo en su mochila, apareció Samuel con Valeria agarrados de la mano y se acercaron a su mesa. Todos los presentes lo saludaron, cuando la mirada verde de Sam se encontró con la de ella, su mundo se derrumbó, no pudo articular palabra, besó a Jamie en la mejilla y salió disparada del lugar, nadie la siguió, no tenía sentido, estaba destrozada y no tenía en quien confiar, sus amigos le habían dicho todo lo que había pasado en este tiempo y no le quedó duda de que, al terminar la secundaria, tal vez su vida tomaría otro rumbo.

4 horas después, 19:30 Jazmín sentada frente al puente de Lions.

-Hola Jaz.- la saludó Viny a unos metros mientras se acercaba con la patineta, ella solo lo miró, no le hablaba, él captó el mensaje y solo se sentó en silencio a su lado a contemplar el paisaje, era realmente hermosos su lugar de relajación y más cuando la caída del Sol se asomaba.

-Voy a dejar comedia musical- Jazmín rompió el silencio con esa simple frase.

-¿Por qué Jaz?.

-No tengo ganas de hablar con vos sobre eso, solo te aviso que ya no voy a ir más.

-Entiendo...- se rasco la nuca- Bueno, al parecer no hay nada mas que decir, te veo por ahí. Cuando quieras hablar, ya sabes.- ella no le respondió, siguió contemplando el paisaje y solo cuando se aseguró de que Viny ya se había ido, volvió a llorar, definitivamente la amistad no iba a ser la misma. Pero merecía la pena saber que él le seguía siendo fiel pese a todo.

Semanas después. 13 de septiembre, última clase de comedia musical.

Mientras veía a sus compañeros bailar y cantar, Jazmin sentada en el piano pensaba como despedirse de todos, con su embarazo no podía seguir, tendría demasiado estrés y tal vez tendría que esforzarse el doble. Perdida en sus pensamientos se asustó cuando Samuel se le acerco y arrodillo al lado, Jamie los miraba de lejos.

-Hola Jazmin- le beso la mejilla.

-Oh, hola Samuel- respondió ruborizada- ¿Cómo estás? ¿Qué significa el bolsito?.

-Te ves tierna cuando te pones así, ¿en qué pensabas?- omitiendo sus preguntas le preguntó él.

-En como despedirme del grupo, viendo tu bolso parece que no soy la única que se va, ¿me equivoco?.

-No te equivocas, ¿pero vos por qué te vas? Crei que esto era tu vida.

-Si lo es, pero... tengo que pensar en un futuro y además las cosas con los chicos, como ves- señaló- no están bien.

-Fue culpa mía. Yo lo supe todo el tiempo, lo de Jamie, Rocio y mi tocayo, pero era un secreto y yo quise estar con vos, pero lo arruine. -ella no dijo nada, pero le tomó la mano y apretó y él junto fuerzas para seguir entendiendo su mirada, tenía lágrimas asomadas- No me arrepiento de haber salido con vos y todo lo que dije para lastimarte me dolía en el alma, pero si no lo hacia no iba a poder dejarte ir y aquel- señaló con la barbilla a Jamie- está hasta los huesos por vos. Yo con Valeria empecé ayer una relación, cuando te vi me quería matar, tenia que hablar y pedirte perdón. Tenés que hablar con Sam, él te va a explicar todo mejor. Y lo de los chicos, eso lo decidís vos. Nena, sabes que te adoran y matarían por vos. Quiero saber, ¿podrías perdonarme?.

-Te deseo toda la suerte del mundo con ella, y te agradezco mucho la sinceridad de decirme todo. Pero... solo te puedo perdonar si me guardas un secreto hasta que la tumba, tengo que contarle a alguien sino me voy a volver loca.- él arqueo una ceja y ella rió y continuó- bueno...emmm.. estoy embarazada.

-¿Me estás hablando en serio? - asintió y él hizo que se pusiera de pie y la abrazó, se abrazaron y todos los miraban desconcertados- hasta la tumba. Espero que cuando se lo digas me cuentes o mandes foto de su reacción. Ahora. Tengo que subir al escenario, hoy era mi último día.
Dejándola atónita Samuel se fue al escenario, se abrazo con Jamie y comenzó a hablar, pero Jazmín no escuchaba, la cabeza le daba vueltas, la vista se le nublaba por las lágrimas y cuando se dio cuenta estaba corriendo por el pasillo hacia los baños, se encerró en uno y tuvo por millonésima vez el primero de muchos síntomas de su embarazo. Definitivamente tenía que despedirse y volver a casa, ya no podía seguir si quería mantener la fachada o simplemente darse un poco mas de tiempo para hablar con Jamie.
Cuando salió y se miró en el espejo no se reconoció, con ojeras y el pelo echo un desastre. Se enjuago la boca, se mojo la cara con agua fresca, se peino un poco y volvió a comedia musical, al parecer nadie había notado su ausencia, llegó cuando Samuel estaba terminando su discurso. Todos aplaudieron y ella se unió a la multitud, con una seña de cabeza, comenzó a caminar al escenario, lo abrazo y se paró frente al micrófono, había llegado la hora.

-Chicos y chicas, tengo que decir unas palabras- nadie se callaba ni la escuchaba- ¡CIERREN LA MALDITA BOCA Y ESCUCHEN UN MINUTO!- gritó y todos con ojos como platos se callaron en el instante- Muy bien, mi discurso no va a ser tan largo ni motival como el de nuestro ex compañero Sam, yo sólo voy a decirles que esta será mi última clase de comedia, dejo el grupo. Ya pueden seguir con sus cosas.- todos se miraban entre ellos, los chicos preocupados, Jamie con ojos tristes la siguió con la mirada hasta que con su mochila, celular y Samuel abandonaron el salón.

Jazmín entró corriendo directo al ascensor, llorando y sin ganas de volver a ese lugar, estaba cansada, sensible y solo quería comerse todo lo que se le cruzara por el camino. Entró en su casa, puso llave y traba en la puerta, se apoyo contra ella sin parar de llorar le escribió a su cuñado en Whatsapp.

Conversación de Whatsapp entre Jazmín y Sam Bower

Jazmín: Hola Sam (15:00 pm visto)

Sam: Hey, hola Jaz, como va? (15:01 pm visto)

Jazmín: De mal en peor. Necesito que hablemos, tenes que contarme qué es lo que realmente te hizo venir a la ciudad. (15:03 pm visto)

Sam: OH nena, bien bien... a ver.. mi hermano llega en un rato, está en el colegio. Donde te parece que nos encontremos? (15:05 pm visto)

Jazmín: En Carisma, en 20 minutos, yo voy caminando por eso. (15:06 pm visto)

Sam: Listo, nos vemos en 20. No llevo el cel, te espero allá. (15:07 pm visto)

Después de leer su contestación, se levantó del suelo, caminó hasta el baño de la planta baja, se lavo la cara para bajar la hinchazón de sus ojos rojos, se puso un poco de maquillaje y salió para encontrarse con su cuñado. Esta charla iba a ser interesante.

Llegó a Carisma y la esperaba Sam con dos capuchinos recién servidos.

-Hola linda, pedí por los dos, espero no te moleste.

-Hola nene, no para nada, gracias, tardé más de lo que pensé.

-Ah dos minutos no es nada, tranquila. ¿Querés preguntarme o te cuento nomas?.

-Contame, no estoy para hacer preguntas, estoy mal y la verdad es que no sabía a quien recurrir para despejarme.

-Teniendo tantos amigos me sorprende que digas eso- sus miradas se encontraron, ahí Sam entendió lo que ella quiso decir y prosiguió- Muy bien. Te pido que no me prestes atención y que si querés que pare para profundizar algo me lo hagas saber.- Jazmín asintió y él comenzo a contarte todo lo que había planeado para viajar a Argentina para encontrarse con Rocío, le contó que ella tenía un ex que le tenía bronca y por eso Jamie lo había ayudado.
Pasaron mas de dos horas sentados hablando, Jazmin lloraba, no podía creer todo lo que le habían ocultado, se sentía defraudada pero igual amaba a sus amigos e iba a hacer lo posible para recuperar sus buenas juntas. Cuando terminó de hablar, siendo ya las 17:00 pm, se abrazaron y Jazmin fue hasta una tienda donde vendían ropa de bebé, aunque no le dijo a Sam para que no metiera la pata.

Comenzaba una etapa nueva de su vida, el primer conjuntito para su esperado bebé, mocasines y un babero de color blanco. Emocionada se fue a casa después de comprar, prendió la notebook, apagó su celular y se inundó de paz y música, todo iba a cambiar.

El mes de octubre pasó rápido, su relación con Jamie se fortalecia, los exámenes los rendía lo mejor posible y el avance de la revista con Gio y Mark iba a favor del viento.
Su vientre crecía de a poco, cada día era una nueva aventura: elegir ropa de tamaño grande, comprarse zapatos para que no le dolieran los pies por la hinchazón y chocolate, mucho mucho chocolate.
Si no engordaba por el bebé lo iba a hacer por gula.
Solo deseaba que al momento de revelarselo a su novio, no perdiera el atractivo y el amor hacia ella.