No sentía ninguna de mis extremidades, veía las cosas borrosas con breves instantes de claridad, un molesto pitido resonaba en mis oídos y lentamente iba disminuyendo hasta que desapareció dándole paso al gran bullicio provocado por las criaturas.

Aizen estaba siendo arrastrado por el polvoriento suelo, se encontraba gravemente herido y no sabia porque... Aunque tenia una vaga idea de lo que había ocurrido. Alguien me sostenía, sus brazos pasaban por debajo de mis axilas y sus manos entrelazadas se posicionaban sobre mi abdomen, no podía levantar la cabeza pero aquellas manos pálidas no eran las de una mujer.

— ¡Cole!— Se escucho una voz femenina.— ¡Sacalo de aquí!

Era Natalia.

— ¿A donde lo llevo?— Hablo la persona que me sostenía, Cole. Su voz era gruesa pero no mucho.— No puedo dejarlo en la casa del clan.

— No lo se... Solo llevatelo a otra parte, aquí no es seguro.

Apenas Natalia terminaba de hablar, sentí como Cole me levantaba y me colocaba sobre su hombro, mi torso quedo estirado en su espalda, mis inertes brazos se movían de un lado al otro con cada paso que daba Cole, caminaba muy rápido, logre ver con dificultad como nos escabullíamos entre las casas y luego de eso perdí el conocimiento.

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Escuchaba el ruido del agua corriendo, como un pequeño riachuelo pero poco a poco fue aumentando hasta el punto de parecer una cascada. Abrí los ojos, y lo que vi me dejo impresionado, estábamos en una especie de rió subterráneo, en un túnel, y este era iluminado por una especie de cristales color violeta, era hermoso. Los cristales se extendían por todo el lugar iluminándolo, incluso bajo el rió se lograban ver, el agua era sumamente clara y podía ver todo, desde los cristales hasta peces y otras raras criaturas acuáticas.

Ya podía moverme, me encontraba bastante bien. Iba a levantarme para dar una vuelta por el lugar y sentí como alguien me tomo por la muñeca y la subió por mi espalda hasta llegar a mis omóplatos.

— Como te muevas te arranco el brazo yo a ti.— Soltó estrellandome contra la pared sin soltarme. Esa voz... Era Cole.

— T-tranquilo... Soy yo, Zack.— Dije buscando la calmarlo.

— Lo se, por eso lo hago.

No entendía... ¿Que fue lo que paso?

— Oye... ¿Podrías explicarme con exactitud que paso?— Pregunte, el agarre de Cole era cada vez mas fuerte.

— ¿Qué? ¿Es que acaso no lo recuerdas?

— No... Para nada.— Esto de quedar inconsciente ya se estaba haciendo rutina.

Cole me soltó y fue allí cuando pude verlo bien, tenia el cabello un poco largo y liso, tez pálida que ahora se veía violeta a causa de los cristales luminosos, era pelirrojo.

— ¿De verdad no recuerdas nada?— Volvió a preguntar, esta vez con cara de idiota.

— No. No recuerdo nada, solo que Aizen me dio una patada y atravesé la pared.— También recordaba lo que había dicho ese chino asqueroso... "Eran todos unos inútiles".

— Vaya... 

Cole se quedo callado, mirándome con la misma cara de idiota que tenia hace rato. Me estaba estresando.

— ¿Me explicas?— Solté.

— Ah, si si por supuesto. Es que te me hiciste familiar por un momento.— Respondió, ¿familiar? en mi vida lo había visto.— Veras...— Cole comenzó a hablar.

***

Zack corrió hacia Aizen a una velocidad abismal, fue tan veloz que el asiático no tuvo ni una oportunidad de reaccionar. Zack estaba completamente fuera de si, sus ojos eran completamente negros, su rostro no reflejaba mas que ira... Una ira contenida por mucho tiempo.

En milésimas de segundos Aizen se estrello contra una casa atravesando la pared tal como había pasado con Zack momentos atrás. El azabache le propino una patada en el estomago a Aizen antes de que este pudiera hacer algo para evitarlo.

— ¡Aizen!— Grito Dennise mientras corría para socorrer a su amigo.

Sin embargo, antes de que esta estuviera cerca de llegar a su lugar, Aizen corrió en dirección a Zack con gran rapidez. Cuando lo tuvo en frente le soltó un zarpazo con sus largas y afiladas uñas, pero, antes de que lograra tan siquiera tocarlo, Zack le propino un bestial golpe en el rostro que le desencajo la mandíbula al asiático para luego chocar contra el suelo.

— Joder...— Musitó Anthon.

Ninguno de los que allí se encontraban tenia intenciones de intervenir, por mas que su código moral de vampiro les obligara a hacer algo, no harían nada, eso era algo que el mismo Aizen se había buscado. Ademas de que... Tenían miedo, estaban aterrados.

Varios Orbys empezaban a salir de sus casas para ver lo que estaba sucediendo, Zack se distrajo a causa de los murmullos provocados por las criaturas, cada vez habían mas pero nadie se atrevía a hacer algo para detener la pelea. Aizen aprovecho el momento, su mandíbula traqueaba mientras lentamente iba volviendo a encajarse, corrió hacia Zack y cuando tuvo la distancia necesaria le lanzo un potente golpe. Pero, este fue detenido por la mano del azabache, Aizen se quedo paralizado, Zack lo miraba fijamente y comenzaba a apretar la mano del asiático. 

Se oían los huesos crujir y algunos gritos de dolor provenientes de Aizen, ya no se encontraba en optimas condiciones, estaba cansado y adolorido lo que le dificultaba moverse, tenia múltiples y muy serias heridas internas. Con su brazo libre trato golpear a Zack pero este de nuevo lo atrapo. 

— ¿Q-que eres?— Soltó Aizen entre dientes.

Zack no respondió. Por un breve instante Aizen noto como como el azabache le sonrió, fue una fugaz sonrisa ladeada y luego de eso... Jalo uno de sus brazos tan fuerte que por poco se lo arranca. El brazo derecho de Aizen quedo destrozado, estaba siendo sostenido únicamente por unos cuantos tendones, la sangre no tardo en aparecer al igual que los gritos de pánico de las criaturas que se encontraban alrededor.

Los alaridos de Aizen eran desgarradores, sobre todo para el cuarteto de vampiros que se encontraban mirando sin hacer nada. Ver a su amigo ser torturado así, por mas odioso y problemático que el fuera, les causaba un gran dolor.    

Muchas criaturas se fueron corriendo horrorizados por la bestialidad de lo que estaban viendo, pero otras se quedaron ahí, curiosas de ver como terminaría o con intención de ayudar. Aizen estaba en el suelo, gritando por el dolor que en vez de disminuir iba en aumento, su regeneración estaba siendo muy lenta, estaba cansado y ya tenia un montón de heridas. Para poder recuperarse tendría que beber sangre. 

Zack se acerco a el a paso rápido, Aizen no podía escapar, solo podía esperar su fatal castigo. Cuando estuvo a escasos centímetros de el dio un pisotón con una increíble fuerza bruta que impacto en el abdomen de Aizen, haciendo que una mezcla de sangre  vomito fuera expulsada por su boca.

— ¡No!— Grito Dennise, pero fue detenida por el resto del grupo de vampiros.

La mirada de Aizen estaba perdida, ya no se quejaba, no se movía, pero aun estaba vivo. Zack se sentó en su abdomen y comenzó a golpear el rostro del asiático repetidas veces con una fuerza bestial, el rostro de Aizen comenzaba a deformarse, los huesos de su cráneo estaban siendo triturados por los poderosos golpes de Zack, roja sangre brotaba de sus heridas y tras cada puñetazo salpicaba el suelo, y la ropa de ambos. 

Poco a poco la cara de Aizen perdía su forma, convirtiéndose solo en una perversa mezcla de huesos, carne y sangre. Dennise forcejeaba para liberarse del agarre de sus compañeros, quería ayudar a Aizen pero ellos no la dejaban, ese era un riesgo que ellos no iban a tomar.

— ¡Ya basta!

Dennise soltó un poderoso y largo grito que hizo doler los tímpanos todos los presentes, fue un sonido que retumbo toda Terranova. Todas las criaturas taparon sus oídos pero aun así el grito era muy fuerte. Cuando Dennise se detuvo, observo como Zack se había detenido, de sus oídos empezaba a brotar sangre y segundos después cayo al lado de Aizen, inconsciente. 

***

Lo sabia... Yo fui el que provoco todo, pero, ¿como?

— Estabas completamente fuera de control,— Hablo Cole.— de no ser por Dennise habrías matado a Aizen.

 — No lo entiendo... Estaba molesto pero ¿como pude perder el control así?

— Eso no lo se, parecías un vrolok.

— ¿Vrolok?—Pregunte.

— Viejo, ¿no sebes que es un vrolok? 

— No... Si lo supiera no te estuviera preguntando.

Cole se quedo en silencio con una mirada desafiante, a pesar del tiempo que tengo aquí, conociendo este lugar y siendo un vampiro habían muchas cosas que no sabia... Demasiadas diría yo.

— Ah... como se nota que eres un novicio.— Soltó Cole mientras me daba la espalda y empezaba a caminar.— Ven... Vamos a salir de aquí, te contare en el camino.

Lo seguí y me puse a su lado, caminaba muy rápido y era algo difícil llevarle el paso.

— Los vrolok son como una variación de los vampiros, por decirlo de algún modo, cuando eres mordido tienes tres posibilidades... Morir, convertirte en un vampiro, o convertirte en un vrolok.— Cole hablaba y yo lo escuchaba atentamente.— Cuando despiertas convertido en un vrolok ya no eres consciente de tus actos, tus habilidades físicas mejoran casi al nivel de un vampiro pura sangre, pe...

— ¿Pura sangre?— Pregunte.

— Un vampiro completo, no un híbrido entre humano y vampiro como nosotros,—Respondió Cole.— pero ellos son muy difíciles de encontrar, después de todo no quedan muchos en todo el mundo... Menos de diez diría yo . Pero como seguía diciendo, los vrolok pueden ser casi tan fuertes como un vampiro pura sangre, pero no son seres pensantes, son solo bestias que solo buscan comer y por donde pasan solo dejan desgracias y tragedia. Por eso esta prohibido convertir a otros en vampiros, para evitar que se conviertan en un vrolok y destruyan todo.

— Pero entonces... ¿Por que me paso eso? ¿por que perdí el control así? 

— No se, le preguntaremos a Seth cuando vuelva.

— ¡¿Y Aizen como esta?!— Me había olvidado de el por completo.

— Tranquilo, no lo mataste, estará bien... En unos días.

— Yo no quise hacer eso...— Mentira.— Me siento mal por todo lo que cause.— Eso si era cierto.

— Tranquilo, no pasa nada. Ahora salgamos de aquí para encontrarnos con los demás.

Cole y yo nos dirigíamos a la entrada del túnel, ya se podía ver la luz de afuera. De repente, Cole se detuvo. Su mirada estaba centrada en el suelo y tenia el ceño ligeramente fruncido.

— ¿Que ocurre?— Pregunte.

— Problemas...— Soltó el pelirrojo.— Seth llego, pero Nikolai fue secuestrado por los cazadores.

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¡Hola! perdón por la tardanza xd

¡Bajo tus pies ya llego a las 400 vistas! ¡gracias por el apoyo!

En la parte anterior dije que en este capitulo se responderían varias preguntas, y así iba a ser pero era muy largo y lo partí en dos pedazos, así que en el próximo si se responderán :)

Nos vemos en el siguiente capitulo... Adiós, se me cuidan el dulce ;)