EL CAMINO DE MI FELICIDAD
Eres donde quiero tropezar las veces que sean necesarias,
porque hay personas que merecen la pena,
caer en tus brazos y rendirme por las heridas de tus manos.
Eres donde tengo escrito el amor y la sensación,
donde escribo un prohibido por cada escalón.
Dicen que tropezar en la misma piedra es de tontos,
quizás lo sea, no me importa mientra contigo se pueda.
Eres la mancha de alegría, me mojas la sonrisa y me llenas la vida.
Me siento a esperarte en cada baldosa que me vio caer,
donde cada herida sanaron mis ansias de tu sed,
arrojas mis ganas de querer volver una y otra vez.
Hay personas que te empapan de esperanzas y personas
donde ven distancia.
Lleno cubos de palabras por si algún día, por si ese dia llega
y no estoy preparada, no quiero que me pilles desarmada
sin ninguna de esas palabras.
Dejas huella donde secas mi tristeza,
donde tiendo la felicidad cada vez que me miras
y vuelcas la sinceridad que te caracteriza.
Lo que ellos no saben es que eres mi paraiso,
que se cuela dentro, llenado los espacios de mi abrigo.
Donde el invierno deja un marca pasos de frases,
frases que erizan la piel con solo leerlas,
asi eres, y ellos no lo saben.
Claro que duele, dueles porque eres la herida
que escuece, porque no se de donde vienes,
dueles porque eres la flor que quiero regar cada dia
y no puedo hacerlo.
El amor está descansado sobre tí,
los temores desaparecen cuando no caben mas hondo
en las entrañas, cuando vences los miedos y sales corriendo.
Claro que hay parejas que no sienten amor,
sin embargo siguen por convicción de volver a encontrar
lo que perdieron en su momento.
Y vienes,vienes para romperme de nuevo,
para creer,
con heridas nuevamente en cada travesía
que cruza tu linea,
en cada punto y aparte que sellas de miel.
Me curas de nuevo en cada viaje que cruzamos miradas,
en cada semáforo en ámbar,
me curas cuando las señales son oscuras y distorsiono
mis dudas.
Me arrancas la piel y de nuevo rejuvenece
como todo lo que tocas, lo que haces.
Me curas, hieres y me sanas.
Y yo lo quiero, yo quiero,
quiero que vengas y me agarres la mano
en cada salida, en el puerto de tu sabiduría,
en cada reflejo de los charcos, en cada caída
y puesta de sol,
yo quiero tener contigo el paraíso,
que no exista nadie más porque no los necesito.
contigo lo tengo, y lo quiero.
Asumo todo lo que suceda, lo que caiga de mi cuando te vayas
asumo que me agarres y me sueltes,
que me busques cuando te necesites, asumo
cada momento, lo que dure el tiempo que tengo contigo,
el segundo de una lagrima que se pose en mi mejilla,
asumo que te acunes en brazos de otras y me busques
cuando no te queden ganas y sea tu hombro donde llorar.
Asumo todo si llegas, si llegas para quedarte donde
mis lunes sean tuyos,
en cada foto que veas, que sea el desvelo de tus noches,
que cada vez que me recuerdes escapen de tus labios la sonrisa,
si llegas, que sea para quedarte
y lo asumo.
Me dicen que es mejor olvidarte, que me busque en otra parte,
tal vez tengan razón,
lo que no saben es que te necesito,
y no lo entienden porque tu eres parte de mi.
Quizás no vean que ahí encontré la felicidad,
como cualquier éxtasis que no consumo y afecta
de tal manera, eso eres, y ellos no lo entienden.
Por todo eso vuelvo a tí, sin importar hacia donde ir
ni el camino que debemos elegir.
Me equivoque o no eso es lo que quiero, ir contigo
porque tu eres eso,
El camino de mi felicidad.
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