-Hyuuuuung

-Estoy ocupado -suspiró tecleando rápidamente con la vista fija a la pantalla de su computador.

-¿Puedo hacerle compañía? -se acercó pinchando el hombro del mayor, Yoongi suspiró.

-Está bien, ¿Dónde estarás?

-¿Puede sentarse en mis piernas? -detuvo sus dedos y miró al menor, que sonreía esperando una respuesta.

-Ya, pero no puedes hacer nada, sólo serás un sillón -se levantó ligeramente y Jimin corrió a sentarse al sofá, sujetando la cintura del mayor y tirando de él hasta tenerlo sobre sus piernas, entre sus brazos.

Pasó media hora, en la que Jimin contenía sus ganas de romper la computadora del mayor para que le prestase atención. Sabía de sobra que era un trabajo importante, así como también sabía que había sido una pésima idea pedirle a Yoongi que se sentase en sus piernas, porque tener el trasero del mayor moviéndose constantemente a causa de que, cada vez que necesitaba algo, se estiraba para alcanzarlo o simplemente se acomodaba mejor, era un martirio en su zona más íntima.

Estaba excitado, no había duda, pero no podía hacer nada al respecto ¿O sí? Tal vez si se movía ligeramente...

-Quédate quieto, joder -gruñó Yoongi sin parar de teclear.

Bien, estaba jodido ¿Qué hacía ahora? Movió una de sus manos muy cuidadosamente para tocarse aunque fuese un segundo, pero un nuevo movimiento de Yoongi lo detuvo.

-Jimin -lo llamó- ¿Es en serio? -hace bastante que había comenzado a sentir algo duro contra su trasero, pero estaba tan concentrado en su trabajo que no había tenido tiempo para quejarse.

-¿Qué... qué cosa? -murmuró con el rostro rojo, apoyando su frente sudorosa contra la espalda del mayor.

-¿Tienes una maldita erección? -Consultó lo obvio, escribiendo un par de cosas más antes de ponerse a leer para berificar que lo había hecho bien.

-¿Y-yo?

-Sí, tú

-Yo... -suspiró rendido, manteniéndose en silencio.

Rodó los ojos y continuó leyendo hasta que corroboró su buen trabajo, sonrió y guardó el trabajo en sus documentos, dando un saltito de alegría por haber finalizado.

-¡Ah! H-hyung... -y un gemido lo regresó a la realidad, por un segundo, se había olvidado del problemita del menor.

-Uups... -murmuró- Lo siento, lo olvidé

-S-sí... está bien -jadeó abrazando inconscientemente más fuerte al mayor.

Yoongi se volteó a verle el rostro, murmurando un par de maldiciones al notar aquella excitación impregnada en el rostro de Jimin, alzó su mentón con su mano derecha y besó sus labios suavemente.

-Hyung... -mordió el labio inferior de Yoongi y levantó su cuerpo para voltearlo por completo y dejarlo sentado sobre él nuevamente, pero quedando de frente, para besarlo como debía.