Hija ya levántate tienes que ir a la escuela.- escucho como me hablan pero yo quiero seguir dormida.- hija voy a pasar.

Al escuchar eso me levanto exaltada en busca de Aarón pero el no está, ¿acaso soñé todo lo de anoche?.

Ya voy mamá.- me levanto como puedo y abro la puerta.

Te tienes que alistar y desayunar.- me pasa una bolsa.- es tu uniforme.

¡¿Que?! Se supone que no se usa uniforme en la universidad.- refunfuñó caminando hacia la cama.

Deja de discutir y alístate, en esta te están pidiendo uniforme, se te hará tarde, no quieres llegar tarde tu primer día de clases.- sale por la puerta.

No, claro que no quiero que eso pase mamá.- me digo a mi misma, de seguro es un feo informe, me veré ridícula, abro la bolsa y para mí sorpresa no está nada mal, era un tipo vestido azul marino con una camisa blanca de bajo, calcetas blancas con unos zapatos cerrados negros.

—Genial, de nuevo a la secundaria—

Termine de alistarme y me gustó el resultado, pero hubiera preferido ir con mi pantalón, mientras me bañaba no pude evitar recordar lo que soñé anoche, yo y Aarón besándonos, durmiendo juntos, se sintió tan real que feo que tu mente te haga esas jugadas, salgo de mi habitación y bajo las escaleras caminando a la cocina.

Hola cariño, toma asiento desayuna.- la señora anderson me pone un plato de huevo con salchicha frente a mi, el olor llega a mis fosas nasales y me da hambre, la pregunta aquí es, ¿le pongo ketchup a mi huevito o no?.

Te quedo bien el uniforme hija.- dice mi mama inspeccionándome con la mirada.

Supongo.-digo terminado mi desayuno, y poniéndome de pie para lavar mi plato.

No, no, no deja ese plato yo me encargo.- me dice la mamá de Aarón yo la miro no tan convencida pero me insiste.

Ya vamonos.- escucho la voz gruesa de Aarón, volteo a mirarlo estaba vestido con unos pantalones negro y camisa blanca, típico badboy, al poner su vista en mi me inspecciona, lo cual me resulta incómodo, por lo cual me escondo detrás de su mama.

Es verdad hijo es tarde.- voltea y me abraza.- mucha suerte cariño- yo le sonrió devolviendo el abrazo.

Suerte mi niña, haz muchos amigos.- me abraza mi mama y le doy un beso.

Gracias nos vemos, si van de compras se acuerdan de mí.- digo antes de salir de la cocina, tomó la mochila que me dio mi mama y salgo siguiendo los pasos de Aarón, había un coche negro estacionado frente a la casa, abre la puerta del copiloto y le da vuelta al coche para subir a el, bueno al menos me abrió la puerta no?

Teníamos como 2 minutos de camino y ninguno decía nada, siento como frena y se estaciona, volteo a la ventana pero no encuentro la escuela.

¿Como amaneciste?.- escucho su voz y volteo a mirarlo.

¿Bien?.- preguntó extrañada, recuerdo lo que soñé y me da vergüenza así que apartó mi vista de el.

Yo dormí perfecto por si te lo preguntas.- veo como sonríe extendiendo sus brazos sobre su cuello.- tuve muy buena compañía-  compañía? Siento una pequeña punzada en mi corazón al escuchar eso.

Que bien.- me acomodo en mi asiento volteando hacia la ventana.

¿Qué pasa?.-

Nada.- respondo sin voltearlo a ver, escuchó un suspiro de su parte y lo pronto que siento es como me levantan de mi asiento posicionandome arriba de sus piernas.- pero que...

Porque te enojaste.- miró como sus  cejas se fruncen.

Yo no me enoje.- me cruzo de brazos.- déjame bajar.

No hasta que me digas porque reaccionaste así.-

Por nada Aarón ya te dije.- volteo mi vista, pero él toma mi mandíbula haciendo que lo mire a los ojos.

No me digas que estás celosa.- suelta una carcajada por lo que lo miro mal.

Claro que no, tú puedes dormir con quien quieras.- lo miró directo a los ojos, los cuales tienen una pizca de diversión.

Pero si tú eres con la que dormí, porque te pones celosa de ti.- suelta otra risa, espera que?

Entonces.. ¿no fue un sueño?.-

No, fue muy real.- toma mi mejilla.- fue tan real como cada beso que nos dimos- rompe la distancia dándome un beso, sus labios se mueven suavemente disfrutando cada roce, sus manos bajan a mi cadera, muerdo suavemente su labio inferior causando que si agarre se vuelva más fuerte, nos separamos por unos segundos pero vuelvo a sus labios, pero esta vez el beso es más fuerte, su lengua se adentra en mi boca donde explora cada parte, siento como sus manos van bajando hasta llegar a mis glúteos dando un apretón a cada uno haciendo que me mueva hacia adelante de sorpresa sintiendo un bulto debajo de mi que gracias al vestido hace que se sienta más.

Tienes un problema ahí abajo.- me separo un poco de él para mirarlo a esos hermosos ojos azules los cuales estaban dilatados.

Tú lo provocaste.- ¡Dios! Su voz está más ronca que de costumbre, siento como mis mejillas se calientan.

Yo no.- me hago la inocente, por lo cual el ríe.- deberíamos parar, si no no voy a llegar a clases.

Si eso deberíamos hacer.- se acerca a mi atrapando mi labio inferior, succionándolo, cierro mis ojos y me dejo llevar de nuevo, siento como da pequeños apretones en mis glúteos causando que me mueva dando roces en su pantalón abultado, escucho como gruñe.- si sigues haciendo eso no vas a ir a la escuela- con malicia lo besó apasionadamente moviéndome más rápido causando mayor fricción, no puedo negar que esto me excita, pero no tanto como a él, sus manos toman mis caderas fuertemente para que deje de moverme, nuestras respiraciones son rápidas y superficiales.- mierda Fernanda, lo haces adrede.

¿Yo?.- preguntó inocentemente ocultando mi sonrisa.

Si no quieres que te tome  aquí mismo será mejor que no sigas haciendo eso.- gruñe en mi boca haciendo que tiemble.

Ya, ya está bien.- me pasó a mi asiento acomodando mi vestido.

Mierda ahora como bajare eso.- escucho como Aarón se queja sin poder evitarlo mi vista baja hacia su "problema", santa madre, se ve demasiado grande, algunos pensamientos pasan por mi cabeza lo que me hace recordar en qué debo de ir a la iglesia muy pronto, el pone en marcha el auto, volteo a la ventana y agradezco que Aarón se estacionara en un lugar vacío.

Bueno ustedes estarán pensando, ¿No que eras virgen Fernanda?, pues si lo soy, soy virgen más no Santa.

La próxima vez no te vas a salvar, y tú lo vas a solucionar.- la voz de Aarón aún sigue igual de ronca.

Ajam.- me río con inocencia por lo cual el también ríe tomando mi mano para entrelazarlas, volteo mi vista hacia ellas y pienso:

ojala pudiera congelar este momento y vivir en el para siempre.

Capítulo largooo🎉 gracias por todo el apoyo, cada vez llegamos más lejos ❤️

Pd: dependiendo el país y universidades se usa uniforme.
Sobre todo si son de paga.