Capitulo 24: Otra noche
Momo está probándose vestidos blancos para la ocasión mientras que yo aún estoy acostada en su cama intentando contener el vómito provocado por mi horrenda resaca de anoche, prácticamente estuve así toda la tarde. Traigo puesta una remera de tirantes color blanca mis bragas de Pokémon, estas son nuevas y tienen la cara de Charmander, si Izuku las viera posiblemente se reiría tanto que sería capaz de escupir un pulmón.
—¿Y se puede saber por qué te arreglas tanto? — Quiero sacar el tema de Shoto, quisiera saber qué paso ayer entre ello.
—Sabes que cuando se trata de fiestas me gusta estar decente ¿Tu por qué no te arreglas? —
—Tengo resaca de anoche— gruño contra la almohada —No estoy muy segura de querer ir a la fiesta esta noche—
—¿Ni siquiera a una fiesta organizada literalmente en donde vives? —
—En especial una fiesta organizada en el edificio donde vivo—
—¿Está todo bien Ocha? Por lo general sueles ser más alegre y ansiosa en lo que a fiestas se refiere. —
—Sí, todo bien, a decir verdad. — Desde ayer me siento extraña, no puedo negar que reencontrarme con Izuku ha movilizado todas mis entrañas.
—¿Tiene que ver con Midoriya? —
—¿Cómo lo supiste? —
—Vivimos juntas hace cuatro años, eres casi como una hermana para mí y gracias a eso conozco absolutamente todas tus muecas—
—Pues sí, siento un malestar en el estómago desde que nos volvimos a ver. Considero que en parte es resaca, pero muy adentro mío sé que no tiene nada que ver. Es decir..quisiera saber tantas cosas sobre él , sobre todo eso que paso ¿Tú no tienes intriga de como continuo su vida? —
—Yo creo que deberías dejarlo ir Ocha, nada que provenga de Izuku Midoriya puede ser bueno para ti, no debes olvidar como te lastimo—
—Tienes razón, a veces pierdo la cabeza enroscándome con esos pensamientos—
—¿A noche paso algo entre ustedes? —
—Nada de nada, de hecho, hice el ridículo queriéndome acostar con él y lo único que conseguí fue que me arropara en su cama—
—Tiene que ser una broma— Rompió una carcajada—¿Tú te le insinuaste? —
—Estaba ebria, a decir verdad no recuerdo nada. —
—No te dejaré más sola amiga—
—No lo hagas por favor—
—Por cierto ¿Puedes mandarle un mensaje para saber a qué hora vendrán?
—Por supuesto—
¿Una idea? ¿qué estará pasando por su mente? Mi idea era espantarlos para que no vengan al departamento. En serio lo único que quiero es dormir y dejar de confundirme con tonterías.
Después de un largo rato abro mis ojos, no sé por cuanto tiempo, pero efectivamente me quede dormida. Escucho risas a mi alrededor, cuando por fin logro centrar mi vista me encuentro a Shoto con una botella de vino mientras que lo sirve en una copa que sostiene Momo .
A mi izquierda esta Izuku mirándome fijo, creo que voy a morirme de un paro, o tal vez ya morí y estoy en el cielo viendo un angel o tal vez descendí al ardiente infierno y me cruce con la mismísima cara de satanás.
—¿Qué hora es? — Gruño contra la cama.
—Mofletitos creí que tendríamos fiesta hoy, despierta— Con sus manos me zamarrea de un lado al otro —Traje algo para divertirnos ya que no quieres ir a la fiesta—
—¿Qué cosa? —
—Una buena película de terror, por supuesto— Sonríe entre dientes, conozco esa mirada perfectamente —Traje "Los huéspedes" ¿Qué opinas? —
—Es una excelente idea— Sonrió y mantengo la cabeza en alto mientras me refriego los ojos, a pesar de que hace unos años tenía mucho miedo a las películas de terror, tengo que admitir que en este último tiempo me he vuelto valiente y puedo tolerarlas.
¡Solo tolerarlas! No quiere decir que no me asusten, pero puedo actuar perfectamente frente a Izuku .
Él tiene sus ojos abiertos como platos por la sorpresa —¿Tu? ¿Disfrutaras de una película de terror? ¿En serio? —
—Sí ¿Qué tanto cuesta creerlo? —
—Esperare ansioso por verlo— Me mira con intensidad, le devuelvo a mirada mientras intento no derretirme.
—Está decidido entonces, Momo ve a preparar la televisión ¡Veremos la película!—
Momo nos observa arqueando su ceja —Es que Shoto y yo queremos ir a la fiesta ¿No les molesta? —
¿¡Qué!? ¿Acaso piensa dejarme sola con Izuku ?¿No fue ella precisamente quien dijo que yo no debo caer en la tentación con él?¿Acaso le valió pito la conversación que tuvimos por la tarde?
—A mí no me molesta , será como en los viejos tiempos ¿No, Ocha? — Siento que me está poniendo a prueba, asiento con la cabeza y sonrió falsamente.
—De acuerdo amigo— Agrego Shoto tomando un sorbo de vino —Si nos buscan estaremos abajo divirtiéndonos en la fiesta—
—Ocha— Replico Momo —No rompan nada ¿Ok? Los veré en un rato—
Tengo deseos de revolearle un almohadón, pero decido quedarme callada y esperar a que se vayan. Cuando por fin escucho el ruido de la puerta dejo escapar un pequeño suspiro de frustración mientras me levanto de la cama, no pasaron ni dos segundos que ya comencé a escuchar la risa eufórica de Izuku .
—¿Se puede saber que es lo gracioso? —
—Pues— intenta responder entre sus risas —Tu trasero tiene una carita de Charmander—
—¡Carajo! — Corro a la cama para taparme, había olvidado que me quede dormida con la ropa interior no sexy que traía puesta.
—Descuida, es más adorable que la de Pikachu— Sigue riéndose vilmente.
—En cuanto me vista serás hombre muerto ¿Lo sabes? —
—Quisiera verlo— Me está desafiando, reconozco ese tono de voz y esa intensa mirada ¿Acaso debo sucumbir a mis instintos y permitirlo?
—Ve a preparar la televisión y algún trago para ver la película— Aunque a decir verdad no quiero consumir más alcohol, siento que ayer me excedí bastante. Pero la única manera de pasar esta noche claramente será con algún que otro trago en mi cuerpo.
—Sí señorita, tu vístete antes de que escupa un riñón de tanto reírme de ti— Guiño su ojo, lo cual hizo que reaccione.
—¡Ahora si te mato! — Salgo disparada de la cama y corro hacia él arrojando mi cuerpo contra el suyo para hacerlo caer al suelo. Dio resultado porque ahora estoy sobre él intentando darle una bofetada, sin embargo, por tan solo un instante olvidé que Izuku no solo es hombre, sino que también tiene una fuerza descomunal y gracias a eso rodo sobre mi dejándome inmovilizada a mí.
—Tus ganas— Murmuro con vergüenza.
—¿Dijiste algo? No te escuche— está acercando su cara hacia mí, por dios ¿Qué hago?
—Tus ganas— Grito con más fuerza para que se aleje.
—Mmm— Susurra en mi oído —Sabes que esas no son las palabras mágicas, Uraraka—
—No las diré— Me tiembla la voz y sé que lo disfruta.
—¿Estás segura? — Esta muy cerca, puedo sentir su aliento tan cerca de mí que casi siento el recuerdo de lo que era besarlo.
—Segura— Trago saliva.
—Pues entonces. — Cierro mis ojos ,me siento patética pero estoy entregándome a él. Entonces comienzo a sentir que clava sus manos en mi abdomen y empieza a hacerme ¡Cosquillas! Maldito sea.
—¡Eso es trampa! —
—Tú lo quisiste así— Se ríe macabramente mientras me inmoviliza con una de sus manos y la otra me llena de cosquillas horribles.
—¡Está bien! tu ganas—
Por fin se detiene y se corre a un costado —Sabia que lo admitirías, aunque quería de otra forma. Voy a preparar la televisión, ansió verte ver una buena película de terror—
—Estoy tan ansiosa como tú—
—Cámbiate, a no ser que quieras que te siga mirando con tus braguitas adorables y te haga comentarios sobre eso—
—Te odio—
—Lo sé, guapa—
Siento que mi corazón late fuerte, hace demasiado tiempo que sus labios no me llamaban así.
Me quedo sola en el cuarto, estoy buscando en mi armario un vestido que sea lo suficientemente discreto para esta ocasión. No quiero insinuarme como ayer, debo tener presente en mi mente lo que sucedió hace cuatro años, no puedo volver a caer en sus viles garras.
Salgo del cuarto, él está sentado frente al sillón con la película ya preparada. No sé en qué momento, pero preparo palomitas de maíz, lo veo tan relajado ¿Cómo es que no le mueve un pelo de nervios esto que está pasando? Es decir ¡Ya no somos solo amigos común demonio!
—No te daré de mis palomitas— Rompió el silencio tomando el bowl y abrazándolo como un niño caprichoso.
—Descuida, tengo el estómago tan revuelto que no puedo comer eso—
—¿Quieres que te prepare un té? —
—Quiero un trago—
Me mira extrañado —Si te sientes mal ¿Por qué bebes? —
¿Acaso se invirtieron los papeles? Como es posible que él sea ahora quien se extraña de que yo beba en lugar de tomar un té como una persona normal.
—Porque— ¡Quiero dejar de estar tensa! Claro que no gritaré eso —No lo sé.. —
—Estas tensa, ¿verdad? —
—¿Por qué demonios me conoces tan bien? —
—Porque fui tu mejor amigo, conozco todas tus muecas—
—Hoy Momo me dijo lo mismo ¿Acaso soy tan predecible? —
—Eso depende.. —Toma una palomita y se la come.
—¿De qué? —
—Es decir, cuando estas enfadada inflas tus mejillas como si fuera un Jiglypuff . Sin embargo, cuando te enojas de verdad tus ojos se tornan estáticos y tus cejas se arquean mientras frunces el ceño. —
—¿Eso me hace predecible?
—Cuando tienes vergüenza juegas con tus dedos sin que nadie te mire, cuando estas nerviosa tus piernas tiemblan y tu boca hace movimientos inconscientes como si quisieras hablar, pero terminas por no decir nada. —
Y ahora es cuando estoy sorprendida de lo mucho que me conoce ¿Cómo es eso posible?
—Tu mirada de miedo es adorable y es predecible porque tiendes a tapar tu cara, tu mirada cuando te gusta alguien es.. — Me dedica una media sonrisa —Bueno, creo que esa no es necesario especificarla—
No puedo evitar sentir que mis mejillas se están poniendo rojas como un labial carmesí, y es que si Izuku sabe leer mi forma de ser posiblemente también sepa que tal vez siento algo.
—¿Podemos ver la película? — Trato de no tartamudear.
—¿No vas a decirme porque estas nerviosa, Ocha?—
—Me asusta un poco— Murmuro intentando que no me escuche, por supuesto fracaso en eso.
—¿Te asusta que quedemos solos en tu apartamento? Descuida mofletes, no pienso tocarte un pelo. Solo quiero disfrutar que nos reencontramos luego de mucho tiempo ¿Eso es malo? Es decir, de verdad te eche de menos—
Estoy conteniendo las ganas de arrojarme sobre él y abrazarlo, no puedo negar que en estos años lo extrañe demasiado. Su compañía me hacía muy feliz,a veces me odio por haber arruinado nuestra amistad con intenciones románticas. Es decir ¿Cómo es posible que creyera que eso iba a funcionar?
—¿Aún te pierdes en tus pensamientos? — Interrumpe con una sutil sonrisa.
—Solo a veces. —
—¿Tu no me extrañaste en estos años? —
Creo que no debí preguntar eso.
—Creo que me apetece una cerveza— Sí, parezco el Izuku Midoriyade hace unos años que no podía tener una conversación seria sin una botella de alcohol en su mano.
—Me vendría bien una ¿Qué te parece si nos vamos a un bar? Luego vemos la película, claro eso si no te da miedositis antes—
—Muy chistoso ¿A qué bar iremos? Es decir, abajo hay una gran fiesta y podríamos solo bajar e ir por unos tragos—
Mueve su cabeza en negación —Debemos beber cocteles de calidad si vamos a tener esta conversación ¿No crees? —
"Esta conversación" no para de resonar en mi cabeza —¿A dónde iremos? —
—A mi casa—
—Pero para eso bebamos algo aquí.. —
—¿Olvidas que soy casi una estrella, mofletitos? Tengo mi propio bar en la terraza de mi edificio—
Abro mis ojos de par en par y decido seguirlo, bajamos entre la muchedumbre de gente mientras baila, con mi vista busco a Momo como en los viejos tiempos. Esta sentada en un sillón con Shoto riendo muy a gusto, no quiero interrumpirla así que solo le aviso por un mensaje que acompañaré a Izuku a su casa.
Me sorprendo al encontrarme en la puerta con una motocicleta Harley Davindson modelo Fat boy color negra a la cual Izuku se está subiendo.
—¿Desde cuándo te manejas en moto? —
—Es de Katsuki, la tomé prestada— Sonríe de costado, por supuesto que quiere decir que se la robo.
—¿Aún tomas cosas de tu primo sin permiso? —
—Siempre— Me arrojo un casco —Póntelo y vamos. —
Me siento detrás de él, intento agarrarme de los costados. Por supuesto que no tardó mucho en tomar mi mano y acomodarla alrededor de su cintura.
—Si no te aferras bien a mi te caerás—
—No creas que lo disfruto. —
—Claro que no— Hace rugir el motor con fuerza —¡Lo amas! — Y con su mejor risa diabólica comenzó a conducir a gran velocidad por las calles de San Francisco.
No lo había notado pero estamos a solo quince calles de diferencia, todo este tiempo vivimos muy cerca el uno del otro y no lo sabia.
El edificio en el que vive Izuku y Katsuki esta todo recubierto de ventanales transparentes, tiene quince pisos por lo que subir por las escaleras no es una opción.
—Aún temo a los ascensores desde que nos quedamos atrapados ¿Lo sabes? —
—No te preocupes, sobrevivirías— Rio dulcemente.
Respiro hondo y me meto dentro del ascensor con él, estoy en silencio y a decir verdad muy nerviosa.
—Cálmate mofletitos, no pasará nada malo—
—Deja de leer mi personalidad— Gruño —Estoy bien—
—No se nota—
—Debe haberme quedado la cara de trauma de lo mal que conduces—
—Tal vez—
Por fin llegamos al piso más alto, hay una terraza gigante solo para nosotros y efectivamente Izuku tenía razón. Tiene una barra gigante de licores, en tan solo uno dos parpadeos ya está preparando nuestro primer coctel de la noche.
Me acerco hacia la barra y me paro de manera provocativa mientas lo observo agitar una coctelera que, vaya Dios a saber de dónde la saco.
—¿Ahora eres bartender? — Agregue con una sonrisa.
—Hice un curso, si vas a ser una estrella debes saber hacer sus propios tragos— Tomo dos vasos para verter el contenido.
—Y ¿Se puede saber que es eso que preparaste en menos de un minuto? —
—Agregue dos cubos de hielo, dos medidas de tequila, una medida de ron, y una medida grande de licor de huevo— Se ríe ,pues nota que no entendí nada —Es un trago que invente tontita—
—Ansió probarlo— Tomo mi primer sorbo —Esto está muy bueno—
—¿Verdad? Soy un experto, creo que no debemos una conversación ¿No crees? —
Carajo —No es necesario—
—Claro que sí, veo tu incomodidad y nervios Ocha, quiero que seas sincera y me cuentes que es aquello que te preocupa. —
—Yo también quiero saber cosas—
—Pues entonces hagamos eso, tu pregunta y yo pregunto por turno. Comienza, no tengas vergüenza—
—¿Qué paso con Melissa? — Fui directa, mierda el alcohol me está aflojando la lengua.
Él me sonríe de una forma adorable —Melissa esta viviendo en Nueva York con el señor Shield, ella se cambio a una universidad de ahí—
—¿Y por eso es que fueron? —
—No— Da un sorbo a su bebida— No debería contarte, pero el señor Shield tal vez haya conseguido un contrato que podría hacer la revista de la familia Midoriya aún más conocida de lo que ya es—
—¡Es una excelente noticia! —
—Sí, lo es— Aunque no luce tan feliz —Es mi turno de preguntarte Ocha ¿Te has vuelto a enamorar? —
Carajo —A decir verdad, solo he tenido romances de una noche, creo que me convertí en una especie de Izuku Midoriya femenino—
Me mira sorprendido —Pero ¿qué ocurrió con mi pequeña mofletitos adorable que lo único que le importaba era el romance barato de las películas de Disney? —
—Pues, tal vez esa Ochako sufrió demasiado como para volver a creer en el amor— Bueno sí, lo dije.
—Ya veo.. —
—Que me dices de ti— intento cambiar el tema —¿Te has vuelto a enamorar? —
—No, es decir estoy conociendo a alguien pero no estoy seguro de que sea amor, no lo sé.. suena estúpido si lo pienso—
—El amor es estúpido—
—Lo sé, pero la realidad es que no he vuelto a estar loco por una mujer desde.. bueno tu sabes. —
Que incomoda conversación, que alguien me saque de aquí ahora.
—Mi turno de preguntar— Agrego guardando la botella en su mochila —¿Quieres seguir en otra parte? —
—¿Disculpa? ¿Te refieres en tu departamento — ¿Eso es una propuesta indecente?
— Claro que no, ahí debe estar Katsuki con una de sus conquistas. Me refiero a que es una hermosa noche de calor y he oído que el guardabosques de la reserva ecológica abandonada ya se retiró ¿Qué opinas si vamos por un chapuzón en la cascada termal? —
—Me parece una gran idea—
Al final nuestra visita aquí no duro absolutamente nada, pues terminamos de guardar algunas botellas en su mochila y corrimos como dos niños alegres al ascensor.
Buscamos la moto de Katsuki y en un parpadeo Izuku ya esta conduciendo a toda velocidad en dirección a las afueras de San Francisco, yo estoy aferrada a su cuerpo como si estuviera abrazando algo muy preciado, a decir verdad, recuerdo que la ultima vez que fuimos a ese lugar viví el "primer día más romántico de toda mi vida" pues ese fue el día en el que me di cuenta que realmente estaba enamorada de él.
Llegamos rápido, pues el señor Midoriya condujo a una velocidad que supero los limites de la velocidad permitidos por lo menos en no menos de siete estados.
Caminamos por el antiguo sendero cuesta arriba, bueno en realidad no caminamos porque prácticamente estábamos jugando carreras para ver quien era el primero en llegar.
La luna esta particularmente enorme hoy, alumbra la hermosa cascada y a nuestro alrededor. Tengo la piel de gallina, pero no porque haga frio, de hecho, estamos a 27 grados.
—Es tan hermosa como la recordaba—
—Me alegra que hayas querido venir, no me gustaría compartir este momento con nadie más—
—Lo mismo digo— Sonrió, estoy cayendo en sus redes.
—¡A nadar! — Agrego quitándose su camiseta blanca mientras lentamente desencastra la hebilla de su cinturón y yo no dejo de mirar babosa —¿Qué tanto miras? ¿Acaso traes las bragas de Pokémon? —
—No— gruño entre dientes, pues claro que me las cambie después de la escena que pasamos en mi casa.
—Entonces quítate todo y arrójate conmigo— Agrego eliminando su pantalón de Jean para luego arrojarse de bomba al agua.
Decido quitarme el vestido, no puedo evitar mirarlo de reojo, esta flotando con su tonta sonrisa.
Tal vez no debería hacer esto pero antes de arrojarme decido quitarme el brasier y arrojarlo a un costado de nosotros, cuando se dio cuenta de eso abrió sus ojos como dos huevos apunto de explotar en un microonda , creo que lo tome por sorpresa.
Corro por el pequeño puente y me arrojo de bomba también mientras suelto carcajadas, en condiciones normales tal vez tendría vergüenza, pero estoy con él y la verdad es que nada más me importa.
—¿Por qué te quedas en topless Ocha? — Sigue sorprendido, y me parece adorable.
—Para no mojar mi brasier, es costoso ¿Acaso te molesta? —
—Nunca dije eso— Se esta acercando lentamente a mí, estoy nerviosa porque nuestras miradas están muy cerca.
—¿Hay algo más que quieras saber, Midoriya? —
—Pues yo no— Susurra peligrosamente cerca de mi boca —¿Qué me dices de ti, Uraraka? —
Me cuesta reaccionar, mierda.
—¿Aún me deseas, Izuku ? —
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top