El viernes llegó más rápido de lo que esperaba. Pronto le encontraba a un lado de Sasuke en la puerta de Kanoha.

El se estaba despidiendo de su esposa eh hija y yo estaba pegada de una pared toda Forever alone esperando a que miss "rompe ovarios" terminará de despedirse de la pelo de chile y su hija.

(( lamento ofender a las y los fans de Sakura))

Un suspiro salió de mis labios, llamando la atención de las 3 personas que estaban presentes.

-Ya casi nos vamos- me dijo con su tono serio, mientras se volvía a hablar con su esposa y abrazar a su hija.

Cierro el ojo que tengo al descubierto, luego lo abro nuevamente. A mi mente llega un pensamiento algo tonto.

Yo, con una familia.

Una carcajada escapa de mis labios, reí tanto que tuve que sostenerme de un árbol.

-Los hombres son las plagas que hay que eliminar- me digo para mi misma en una voz tanto alta como baja
-____- miro hacia donde Sasuke- ya nos vamos- sus labios besan asquerosamente a Sakura
-Asco- digo junto a su hija, la cual me mira fijamente, y yo igual a ella
-Que genial eres- sonríe mientras se arregla los lentes, puedo jurar que me sonroje
-Gra...gracias, nadie nunca antes me habían dicho eso- sonrio, mi vista se fija en Sasuke, que tenía un ligero sonrojo, casi invisible
-Nos vamos- me volteo haciendo que mi capa se mueva bruscamente y camino hasta el lado de Sasuke- Llevas lo necesario ¿verdad?- me cuestiona
-Si- miro adelante.

Desde aquí comenzaria lo que para mi sería una nueva vida, y la oportunidad de olvidar el pasado...

O quizás...¿no?.

El atardecer nos agarro más rápido de lo que ambos pensábamos, por lo que tuvimos que parar en un hotel. Ya que además de atardecer...lluvia.

-¡Oh!, ¡¡Qué venid empapaditos!!- grita la anciana de la entrada
-¿Ah?, no es nada señora- digo seria, Sasuke mantiene una mirada fría igual
-Oh ya veo, ¿No querrán un baño usted y su esposo?- puedo jurar que me sonroje.

¡¿ESPOSO?!