Capítulo 5.
Ambiente familiar y una conversación que no pudo terminar.
Ray toco el timbre tres veces, esperando obtener alguna respuesta del otro lado de la puerta. Escuchó algunos pasos que indicaban que alguien se acercaba. Un hombre somnoliento y en pijama apareció justo al frente de él.
—Oh, eres tú, cíclope —musitó el adormilado Yuugo que sostenía una taza de café en su mano.
—Buenos días, Yuugo. ¿Se encuentra Emma?
Como ya era costumbre, Ray buscaba a Emma en las mañanas para cumplir su típica rutina de caminar juntos hacía la preparatoria.
—Oh, sí. Ven.
Yuugo lo invitó a pasar para que esperará a la chica, ya que ella estaba arreglándose. Caminaron hacía la sala mientras el mayor tallaba sus ojos al soltar un suspiro y el azabache lo veía con su típica cara de indiferencia.
—¿No irás a trabajar hoy? —preguntó Ray siguiendo al mayor. Pues lo veía muy relajado en su pijama cuando él es el tipo de persona que se preocupa por llegar puntual.
—Este policía tiene el día libre hoy —respondió dándole un sorbo a su café.
—Yuugo, no eres policía. Eres un guardia de seguridad en un centro comercial.
—Callate, mocoso.
Ambos se sentaron en el sofá a conversar como habitualmente lo hacían al esperar a Emma.
Sí bien no compartían lazos sanguíneos, Yuugo sentía que Ray era como de la familia, otro hijo para ser exactos. Después de todo, prácticamente Emma y él crecieron juntos, y por supuesto, Yuugo cuidándolos a ambos de manera muy sobreprotectora y cariñosa para demostrarse como un padre en el que los chicos pueden confiar.
Ya conocía su personalidad, sus manías, sus deseos y demás cosas que había aprendido al verlo crecer frente sus ojos. Y a pesar de sus problemas, Yuugo sabía que Ray era un increíble chico.
Lo quiere demasiado, le tiene un gran cariño.
Excepto esa vez que incendio su auto.
Lo quería... pero matar.
—¿Y qué tal la escuela, cíclope? —preguntó el mayor.
—Ayer incendié la cancha.
Lo peor es que lo dice como si fuera lo más casual del mundo, dijo para si mismo el mayor.
—¿Hubo heridos? ¿Isabella lo sa...?
—No hubo ningún herido. Y no, mi madre no lo sabe. Los únicos que lo saben son Emma y Nor...
—¡¡¡No me hables de ese pequeño insolente!!!
Ese bramido de Yuugo confirmaba una vez más lo mucho que odiaba a Norman.
—Norman es nuestro amigo, Yuugo.
—¡Quiere robarse a mi antena!
—Solo esta enamorado.
—¡¿Acaso lo has visto mirar a Emma con ojitos de pervertido?!
Yuugo, veo a diario como Norman babea por Emma, estas exagerando, pensó el azabache.
—No. Me. Agrada —dictaminó Yuugo mientras golpeaba la mesa con su taza.
—¡Yuugo, no hagas escándalo tan temprano! —Dina entró a la sala tomando la mano de su dos hijos, Phill y Carol—. ¿Otra vez discutiendo sobre el amigo de Emma? —la rubia le regalo una mirada de furia a su esposo.
—¡No te molestes, amor! —inquirió el exaltado Yuugo—. ¡Sabes que él no me da buena espina!
—¡Yuugo Grace, es mejor que vayas cambiando esa actitud egoísta o te la verás conmigo!
—¡Pero lin...!
—¡Callate!
La señora Dina podía dar miedo a veces.
Mientras los adultos se alejaban a discutir en otra parte, los dos pequeños corrieron hacía Ray y se abalanzaran sobre él dándole un gran abrazo.
—¡Buenos días, Ray! —dijeron ambos pequeños al unísono.
—Buenos días, Phill y Carol —dijo Ray sonriendo.
El azabache se acercó a ellos y depósito un beso en la frente de ambos, estos le respondieron con pequeñas risitas.
—Perdona la pelea, querido Ray —habló la rubia que venía entrando, de nuevo, a la sala junto a Yuugo—. Lo pasa es que él... —apunta a Yuugo mostrándose amenazante a lo que él responde dando algunos pasos hacía atrás con miedo—, no entiende que no puede elegir las amistades de su hija.
—¡Solo intento protegerla! —inquirió Yuugo.
—Callate ahora, Yuugo —al escuchar que su esposa lo había llamado por su nombre, decidió callar. Dejo muy en claro la amenaza—. Bueno niños, es hora de irnos a la escuela, hay que despedirse de papá y Ray —dijo Dina recuperando el tono amoroso con el que siempre habla.
Los niños obedecieron las ordenes de su madre y luego se retiraron de la casa con ella.
—Miedoso —dice Ray entre risas cuando sabe que Dina esta lejos.
—Callate, cíclope —bramó el amargado Yuugo tirándose en el sofá—. Y ya que estamos en el tema... Dame tu reporte semanal.
Ray era el espía de Yuugo, pues observaría a Emma y trataría de evitar que no hiciera algún desastre.
—¿Cuanto es la paga? —sonrió el azabache al ver a donde se dirigía la conversación.
—Cinco litros de aceite y dos encendedores.
—Emma, trepo un árbol para salvar a un gatito, resbaló y cayó en el jardín del viejo Lewis. El anciano estaba a punto de pegarle en la cabeza con su bastón porque destruyó sus flores blancas y rojas. La señora Mujica no permitió que le hicieran daño pero el viejito juró que se vengaría de Emma.
Yuugo se sentía orgulloso al saber que su hija trato de salvarle la vida a un animalito. También se sintió abrumado al escuchar que su pequeña estaba en guerra con un anciano.
—Tu sobrino, Oliver, sigue detrás de Emma. Le dije que dejará el acoso hacia la peli-naranja pero el solo me respondió: carne de primo, se come.
Yuugo pensó en la fuerte conversación que tendría con Lucas sobre educar a su hijo para no ser norteño.
—¡Buenos días, Ray! —gritó Emma bajando las escaleras con su morral en la mano y su uniforme bien planchado.
—Tardaste —la recriminó Ray mientras estaba tomando sus cosas para irse.
La chica se disculpó y ambos se despidieron del adulto para comenzar a caminar hacía su destino.
—Tardaste demasiado —repitió Ray mientras daba largos pasos—. Llegaremos tarde por tu culpa.
—¡Es que estaba ocupada metiendo en mi bolso ropa cómoda para la práctica de hoy! —exclamó la orbes verdes, que al contrario de Ray, caminaba dando leves brinquitos.
—¿Como es posible que hayas aceptado la propuesta de tu primo? Le gustas, Emma, y de seguro tratará de coquetear.
—Solo acepté para aprender... Y para demostrar ser una pareja digna de bailar con Norman.
—Acepta que el genocida te gusta y ya.
Emma paró de caminar cuando escuchó las palabras de Ray. ¿Le gusta Norman? Sus mejillas ardían al pensar en aquella idea.
—¿Gustarme Norman? ¡Qué tontería Ray! —dijo ella cabizbaja. Aunque se podía notar el color carmesí que adquirió su cara.
—¿Segura que es una tontería? Tal vez es recíproco.
—¡Es absurdo que yo le gusté a Norman!
Es absurdo, pero es la verdad, pensó Ray.
—A parte, hay demasiadas chicas detrás de él...
Pero él solo tiene ojos para ti.
—No soy lo suficiente bella para él...
Él cree que eres una obra de arte que debe ser exhibida en el museo más prestigioso.
—Y la forma en que me trata es porque soy su mejor amiga, no porque sienta algo por mí.
¡¡¡Date cuenta, Emma!!! ¡¿Acaso la antena que tienes en la cabeza no capta la señal de Norman enamorado?!
—Nunca seríamos pareja porque ninguno siente nada... Creo.
¡¡¡Estúpida, mi NorEmma, idiota!!!
Ray tenía ganas de golpearla con un poste en la cabeza para ver si al fin se daba cuenta de todo.
¡Ni siquiera con señales de humo se daría cuenta de que Norman esta enamorado desde hace años de ella!
—Emma, mírame.
Emma obedeció al chico y éste la tomó de los hombros.
—Emma, soy tu hermano y puedes confiar en mí. Sabes que de mi boca no saldría ninguno de tus secretos. Se sincera, ¿te gusta Norman?
—A mí...
¿Le gusta Norman? ¿Será verdad? Después de todo, el la trata bonito. Desde que se conocen, siente que es un tipo de ángel que ha venido a ella para animarla en cada momento. Emma se siente segura a su lado, su euforia resalta al verlo y cuando lo abraza, nunca más quiere soltarlo. Pero ¿Amor? ¿Lo que siente es amor o solo son sentimientos extraños, producto de su amistad?
—Es que... Yo...
—Dilo, Emma.
—Yo...
El sonido de la campana se escuchó y Emma vio su oportunidad para escapar de la presión. Salió corriendo del pequeño círculo personal que tenían y se dirigió hacia la preparatoria.
—¡Hablamos luego, Ray!
........................................
Emma, no sea tan ciega.
Weno, hola gentecita bonita. ¿todo bonito?
Tenía la esperanza de que Yuugo y los de Goldy Pond aparecieran en la segunda temporada, pero cuando vi que ya tenían la cura para los de Lamba y no necesitarían a Adam... Perdí mi fé ;(.
Así que capítulo con Yuugo y Dina porque esa pareja es un sol bien bonito. 👉👈 ❤
Ya casi llegamos a las 300 lecturas. 7w7r
¡Gracias por leer 💙!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top