Me despierto a mitad de mañana, estos últimos días he aprovechado para descansar lo máximo posible, parece que lo he conseguido porque me siento con las energías suficientes como para mover el cielo.

Durante toda la mañana aprovecho para leer un poco y recoger toda la casa.

Lo que más me gusta hacer cuando estoy sola es recoger y ordenar mis cosas, en cierto modo es una manera de ordenar mi cabeza también.

Estos momentos son los que me hacen sentir que poco a poco estoy pasando página, que ese sentimiento de que mis padres están lo suficientemente ocupados con su trabajo porque prefieren eso a estar conmigo.

Ese sentimiento de culpa ya no está.

Dentro de una hora Sira vendrá a casa a comer y salir a pasar la tarde juntas. Decido meterme en la ducha y relajarme un poco. Tardo más de lo normal, el agua caliente me ha hecho imposible resistirme a quedarme más tiempo, salgo y me visto con un conjunto básico de una falda larga y un jersey.

Justo al terminar de prepararme el timbre suena. Sira ha llegado.

Bajo las escaleras mientras me termino de peinar, al abrir la puerta Sira me mira con una sonrisa de oreja a oreja.

— Hola guapísima. - Sira me abraza cariñosamente.

La dejo pasar y ella se toma el lujo de fisgar toda mi casa desde el salón hasta la habitación de mi hermano.

Río y niego con la cabeza, Sira me sugiere pedir comida a domicilio para no gastar mucho tiempo a lo que yo accedo.

Mientras esperamos me cuenta que tiene pensado viajar a Qatar en unos días ya que el primer partido será pronto. Me sugiere de comprar mi billete también a lo que yo niego, de momento no estoy segura de si quiero ir.

— Irene, es uno de los momentos más importantes en la vida de Pedri, si le quieres deberías ir.

— Claro que quiero estar allí, lo que me da miedo soy yo, el estar en un estadio lleno de gente que seguramente sepa quien soy, los medios, el agobio y el no querer salir llorando de allí con un ataque de ansiedad mientras estropeó la felicidad que pueda sentir él en ese momento.

— Para eso estoy yo aquí, voy a ayudarte en todo lo que pueda, incluso si Ferran o Pedri tienen que ayudarte no creo que estropees nada, eres su mejor amiga y su pareja, los amigos están para eso, la familia es lo primero.

Y eso parece que se me queda dentro. Nadie me había dicho algo así nunca.

"La familia es lo primero." Esa regla es general, si, pero  ¿donde está la mía? Mi única familia son mis abuelos y mi hermano, y, el tiempo me ha enseñado a valorar eso, a poner por delante lo único que tengo en la vida, mi hermano.

— Se que tú vida no ha sido difícil y que confiar cuesta, pero, vas a estar bien Irene.

Sonrío sintiendo mis ojos aguarse, la abrazo y siento como si mi corazón se curase un poco más, ella me sonríe mientras me acaricia el brazo.

Sin duda, Sira ha sido un regalo caído del cielo directo a impactar en mi vida.

Mi móvil vibra, es Pedri.

Canario de ojos marrones <3

Este cara de culo dice que te echa
mucho de menos (no más que yo) y
que espera que os lo paséis bien hoy.
Esta muy pesado.

Sira se ha puesto celosa porque
dice que ella también lo echa de menos.
Nos vemos pronto, Pepi.

Cierro la conversación y escucho el timbre sonar, la comida esta aquí.

Abro y pago al repartidor dándole las gracias. Hemos decidido comer pizza y unos nachos, comemos tranquilamente mientras hablamos. Le pido que me explique más o menos quiénes son los chicos de la selección porque no voy a mentir si digo que no conozco a ninguno.

Sira me hace un croquis de todos los jugadores, el portero principal se llama Unai Simeón acompañado de Robert Sánchez y David Raya, en la parte defensiva están Laporte, Eric García, Alejandro Balde, Carvajal, Cesar Azpilicueta, Hugo Guillamon, Jordi Alba y Pau Torres. En el medio estaban Gavi, Sergio Busquets, Carlos Soler, Rodri, Marcos Llórente, Koke y por supuesto Pedri.

Por último en ataque estaban, Álvaro Morata, Pablo Sarabia, Dani Olmo, Ansu Fati, Yeremi Pino, Marcos Asensio, Nico Williams y Ferran.

Asiento sabiendo que ni la mitad de las personas que me ha mencionado se me van a quedar en la cabeza. Algunos me suenan, Eric me suena de que estuvo algunos años con Ferran en el City, Gavi es el mejor amigo de Pedri así que se quien es.

Ambas nos levantamos y recogemos todo para salir a la calle, son las cinco de la tarde, quizás nos hemos entretenido de más, pero no importa.

La tarde se pasa volando, cuando los queremos dar cuenta y es hora de volver a casa, hemos ido de compras y reído, sobre todo eso.

Me despido de Sira y la prometo que me pensaré lo de ir.

Al entrar en mi casa siento como la soledad me golpea de repente, mi hermano no vuelve hasta la semana que viene y Andrés está de vacaciones en Alemania.

Un sentimiento de tristeza se apodera de mi.

Estar sola me gusta, pero, sentirme sola me aterra, es algo con lo que he tenido que lidiar toda mi vida, esa sensación de estar solo me aterra. Decido cambiarme y ponerme el pijama para acurrucarme en el sofá.

Mis lagrimas salen solas, estar sola te enseña a valorar el tiempo que pasas contigo mismo, pero también te hace afrontar el sentimiento de que no hay nadie a tu lado.

Mi móvil empieza a sonar.

— ¿Si?

— "Hola, bailarina...espera, ¿estás llorando?" - Pedri parece que cambia de un tono alegre a uno preocupado.

— Nada, es solo que estoy aquí sola y eso.

Desde aquí puedo notar como sonríe.

— "Entonces este billete de vuelo te vienen de lujo." - Pedri enciende la cámara y me enseña los billetes, está sin camiseta.

Me quedo mirando no se muy bien qué, el lo nota y sonríe ladinamente.

— "¿Te gusta lo que ves?"

— No me gusta, me encanta.

— "Tengo unas ganas tremendas de que estés ya aquí, ¿aceptas los billetes?"

— No se Pedri, yo...

— "No vas a estropear nada, quiero que estés allí, estés llorando, estés gritando o estés dormida, con que estés allí voy a ser el chico más feliz del mundo porque la chica que más quiero está viéndome en el momento más importante de toda mi carrera."

— Está bien, iré.

— "Vaya, pensé que tendría que llorarte más." - Pedri sonríe a través de la pantalla.

— Sabes que pase lo que pase voy a estar siempre para ti, canario.

— "¿Siempre?"

— Siempre, hasta que el baile deje de ser arte.

Dentro de dos capituló empieza el drama y me va a doler nivel querer tirarme de la parte más alta del Camp Nou.

Un día más cumpliendo. Espero que os haya gustado.

Mi secreto más oscuro es que en un principio pensé matar a Sergio por una enfermedad rara pero al final no.

*se va rápidamente para que no la arrojen piedras."