MADISON

-Ella es tu responsabilidad, ¿cómo es que viajo un par de días y ocurre esto?

Me parece oír algunas voces o a lo mejor sólo las estoy imaginando, lo cierto es que creo darme vuelta y acomodarme para seguir durmiendo. Me pregunto si ya estoy muerta como a veces muestran en las películas y ahora veré como sería una vida sin mí.

¿Me iré al cielo o al infierno? ¿Alguien me extrañaría? 

Entonces abro los ojos y no veo absolutamente nada, ¿enserio estoy muerta?

No, idiota. Estás sedada. Responde Ariana

¿Y ni siquiera así puedes ser más simpática conmigo? Recuerda, somos la misma persona.

Como no vuelve a contestarme, me pongo a pensar que si estoy sedada, esto lo debo de estar imaginando y debe de ser un sueño o pesadilla dependiendo de como lo veas. La verdad quiero dormir, así que me tiendo en el piso y en cuestión de segundos vuelvo a quedarme dormida.

(...)

-Madison despierta, ya has dormido muchas horas.-Una vez más escucho voces que me interrumpen el sueño, creo que muevo mi mano para taparme más y al hacerlo siento dolor. Así que me quedo quieta.

Creo que es una buena idea invernar, tal vez eso haré de ahora en adelante. Dormir.

Las voces parecen ir disminuyendo, lo que me permite volver a dormir plácidamente.

(...)

Cuando abro los ojos, lo primero que me pregunto es dónde estoy. Claramente estas no son las paredes de mi habitación, no alcanzo a pronunciar ninguna palabra cuando mi madre aparece frente a mí, observándome como si no me hubiera visto en días.

-¡Madie! Me asustaste mucho, no lo vuelvas a hacer.-Dice con una sonrisa temblorosa.

-¿Qué...?-Siento la garganta seca

-¿Qué te pasa?-Pregunta preocupada

-Tengo sed.-Incluso mi voz suena algo diferente en mis propios oídos

-Pediré que te traigan agua.-Dice mirándome con cariño

Veo que se dirige hacia la puerta y luego entra a la habitación el que supongo que es un doctor, aunque se ve bastante joven.

-Hola Madison.-Saluda él

-Hola.-Respondo de vuelta sin saber que más decir

Una vez que me consiguen un vaso con agua, lo bebo como si mi vida dependiera de ello y lo termino en tiempo récord. Jamás un vaso con agua me había puesto tan feliz.

Veo como tanto mi madre y el doctor me observan con atención y supongo que esperan que actúe de determinada manera, pero no sé muy bien que hago ahí.

-¿Recuerdas algo de lo que te pasó?-Me pregunta el doctor

-Bueno, supongo que me caí en alguna de mis clases de la Academia, ¿no? Aunque nunca creí que pudiera ser tan torpe.-Digo intentando aligerar el ambiente con una broma, pero veo que no les causó gracia alguna

Esa no es la respuesta que esperaban por mi parte, así que intento hacer memoria sobre que me pudo haber ocurrido, pero no llega nada a mi mente. Es como si estuviera completamente en blanco.

-¿Qué me ocurrió?-Me atrevo a preguntar luego de unos segundos de silencio

-Por lo que me contaron estuviste en una pelea.-Dice mi mamá como si me lo estuviera reprochando y supongo que así es, yo no soy de meterme en peleas. 

-¿Enserio? Eso no suena a algo que yo haría, ¿al menos gané?

-Madison esto es serio, te pudo haber pasado algo mucho peor que esto. ¿Es normal que no lo recuerde?-Le pregunta preocupada al doctor

-Bueno, se golpeó fuertemente la cabeza y ha estado inconsciente dos días. Es muy normal que ahora que acaba de despertarse no lo recuerde todo, hay que darle tiempo y ver su evolución. Todos los casos parecidos que he visto reaccionan de maneras diferentes.

Llevo mi mano hacia mi cabeza y me quejo cuando siento dolor, así que la retiro de ahí de inmediato.

-¿Dónde están mis hermanas y papá?-Pregunto dandome cuenta que ellos faltan en esta reunión familiar

-Están todos afuera esperándote. Primero teníamos que saber cómo reaccionarías al despertar.-Dice mamá tranquilizandome  

-Bueno, al parecer desperté con sed, con dolor de cabeza y con moretones.-Digo observándome el brazo. Espero que mi rostro no haya corrido la misma suerte. No tengo el rostro más bonito, pero es lo que hay.

-¿Pueden pasar a verla?-Le pregunta mamá al doctor y yo espero que responda que sí. Ver a mis hermanas seguro que me hará bien. Con ellas puedo olvidar lo que acaba de pasarme. 

-Sí, por supuesto que pueden pasar. Yo vendré en un momento para hablar sobre su estado.-Dice él saliendo de la habitación y luego entran mis hermanas.

-¡Madie! Jamás vuelvas a hacerme pasar por esto.-Dice Elena abrazándome muy fuerte y luego se une Bella a nuestro abrazo.

-Me alegra que hayas despertado, jamás creí que pudieras dormir tanto.-Dice Bella con algo de humor

-Yo igual me alegro de verlas. Falta Liv, ¿Dónde está?

-Entrará con papá un rato más.-Dice Elena observándome

-Sean sinceras conmigo, ¿qué tan mal me veo?

-Como si un camión te hubiera arrollado.-Dice Elena divertida

-¡Elena!-La reprende Bella

-Es la verdad... Bueno tienes algunos moretones, pero fuera de eso, creo que todo está en su lugar. 

-Vaya, eso me relaja como no tienes idea. ¿Me veo más ruda?

-Te ves igual que siempre a diferencia de que pareciera que tu cara fue usada como saco de boxeo, pero con el tiempo se irán.

-Entonces, ¿con quién discutí que terminé así?-Ellas se observan de la misma forma que el doctor y mi madre y eso me molesta. 

¿Qué tan malo pudo haber sido que no me quieran contar?

Yo sigo intentando recordar, pero mi memoria no me está facilitando los recuerdos.

-Tus recuerdos volverán, tranquila. Ahora, cuéntame, ¿qué se siente haber dormido dos días completos? Eso es muco tiempo.-Comenta Elena

Me molesta que me cambien el tema de conversación, pero lo dejo pasar porque deben de tener sus razones para haberlo hecho.

-No lo sé, a veces oía algunas voces y luego volvía a dormir. No tengo mucho que contar la verdad. Lamento decepcionarlas.

Elena me cuenta que se reencontró con alguien de su pasado y cuando le pregunto por su nombre, ignora mi pregunta. Muy típico de Elena la verdad. Me mantienen ocupada conversando sobre cualquier tema y casi se siente como sino estuviera en un camilla de hospital.

Cuando veo que alguien nos observa desde la puerta, me asusto y mis hermanas vuelven a darse una mirada cómplice antes de decirme que irán afuera.

-¿Me dejarán sola?-Pregunto indignada al verlas marcharse.

-Créeme, no estarás sola. Te dejamos en buenas manos.-Dice Elena divertida.-Estaremos afuera por cualquier cosa.-Le indica a la persona que nos espiaba.

Cuando lo observo con más detenimiento, me resulta un tanto familiar, pero aun no puedo darle un nombre, aunque tengo el presentimiento de que lo he visto antes.

-Hola.-Lo saludo una vez que estamos solos.

-Hola Madie.-El desconocido me observa fijamente y tengo curiosidad

-¿Eres novio de alguna de mis hermanas?-Pregunto intentando adivinar de donde lo conozco.

Él me observa durante varios segundos y luego niega con su cabeza.

-No, no salgo con ninguna de tus hermanas.

-¿Cómo te llamas?-Pregunto algo desconfiada al no recordarlo. 

¿Y si mi mente me está jugando una mala pasada y no lo conozco?

-¿Enserio no me recuerdas?-Pregunta sorprendido y algo triste. Entonces me muestra una pulsera y leo el nombre que aparece en ella.

-Kyle.-Digo y el asiente con la cabeza

-Ese es mi nombre.-Dice algo divertido.-La pulsera me la dio alguien muy especial.-Dice con orgullo.

-Genial. Llevar una pulsera con tu nombre debe de ser una gran forma de recordar quien eres. Supongo que yo podría tener una que diga Madie.-Comento divertida.-Me vendría de gran ayuda en ocasiones como esta.

-Supongo.

-Entonces... ¿De qué nos conocemos? Si estás aquí es porque evidentemente nos conocemos, pero hasta donde yo sé mi único amigo es Thomas.

-Nosotros...

-¿Ibas a la Academia? No recuerdo haberte visto, creeme que con lo atractivo que eres, lo haría.-Digo poniendome en evidencia. 

Diablos, que verguenza

-¿Así que te parezco atractivo?-Pregunta de mejor humor

-Sólo un poco, pero no te creas. No eres para tanto. Me gustan más los rubios como...

-Austin Moon.-Termina por mí divertido

-Bien, lo conoces. Entonces te he hablado de Disney, ¿de donde nos conocemos?-Pregunto mucho más curiosa que antes

-Nos conocimos en una audición, ¿recuerdas? Era una audición para salir en un video de la banda The Warriors.-Dice con calma 

-Claro, eso tiene sentido. ¿Y cómo me fue finalmente? ¿Me aceptaron?

-Sí, quedaste seleccionada.-Dice mirándome con lo que creo que es orgullo.

Algunos recuerdos aparecen rápidamente en mi cabeza, pero no estoy segura de que tan fiables puedan ser. Estoy dudando de todo ahora mismo.

-Vaya que suerte, es bueno saberlo. Así que somos amigos.-Digo con algo de duda, él me observa de una manera extraña y parece que no le gusta esa palabra.

-De hecho se podría decir que estuvimos saliendo por un tiempo.

-¿Estuvimos saliendo? ¿Y qué ocurrió?

-Yo lo arruiné.-Responde con pesar y observandome con culpa

-Oh, entonces...-¿Qué debería de decir ahora?

-Madie, ¿enserio no recuerdas nada de lo que ha pasado?-Dice tomando una de mis manos entre las suyas y no sé que responder.

Estoy intentando recordar, pero me duele la cabeza y los recuerdos que tengo son tan confusos...

Entonces Kyle me muestra su celular y en la pantalla va enseñándome fotografías de nosotros. Empieza a pasar una tras otra y él me las va explicando con paciencia, en casi todas salgo sonriendo o salimos abrazados. De a poco más recuerdos llegan a mi mente de manera espontánea. Algunas conversaciones, situaciones y vergüenzas que he pasado.

Sobretodo muchas verguenzas. 

-¿Ya me recuerdas?-Pregunta con esperanza luego de enseñarme la última fotografía nuestra

-Eso creo.-Él guarda su celular en un bolsillo y empieza a acariciar mi mano, estuve a punto de quitarla, pero la caricia se siente bien y familiar.

-No sabes lo mucho que me preocupé cuando supe lo que sucedió, he estado aquí la mayor parte del tiempo. Y si pudiera cambiar las cosas...

-¿Qué cambiarías?-Pregunto

-No te hubiera dejado ir en mi cumpleaños. Te habría defendido de mi padre y me hubiera quedado contigo.-Puedo notar la tristeza que tiñen sus palabras.

-No hay nada que puedas hacer.-Respondo con algo de pena

-Así parece.

-¿Sabes? Ojalá hubiera perdido la memoria, si lo hubiera hecho habría olvidado cuanto duele recordarte junto a ella en tu cama.

-Madie...

-Lo recuerdo todo Kyle, tal vez no cuando abrí de inmediato los ojos, pero sí cuando vi tu pulsera. No te haces una idea de cuánto me tomó hacerlo porque no encontraba el color azul adecuado.

-¿Desde la pulsera me recuerdas?-Pregunta atónito

-¿Enserio creías que te olvidaría así como así? Pero luego me dio curiosidad cuando sacaste tu celular y quería saber lo que me dirías, te seguí el juego.-Digo con una pequeña sonrisa

-Me asustaste, enserio creí que me habías olvidado. Y eso hubiera sido de las peores cosas que me habrían pasado.

-Lo cierto es que también asusté a mi mamá y a mis hermanas. Sé perfectamente como termine aquí, fue gracias a Amanda. ¿Qué pasó con ella?

-Ya se fue, sus padres la vinieron a buscar. Me dijeron ya no me molestará más y resulta que me mintió, si tenía familia aquí y se ha quedado con ellos desde que le dije que se fuera a un hotel.

-Está loca, quiso empujarme a la calle y lo consiguió, pero no se esperó que la empujara junto a mí.-Digo sintiendo orgullo, a pesar de terminar en estas condiciones

-Lamento mucho que hayas tenido que pasar por esto. No lo mereces.-Dice acariciando mi rostro

-Al menos sigo viva... Me habría gustado despertar y que las cosas siguieran igual entre nosotros. Ya me entiendes... antes de tu cumpleaños.-Digo con pena

-Créeme que yo también, no ha pasado ni un solo día que no me arrepienta por haber sido tan idiota, pero quiero que sepas que te quiero, sin importar qué. Eres la única para mí

Sin entender muy bien el motivo me pongo a llorar. No sé si es porque estuve inconsciente dos días, si es porque ver a Kyle explicándome las fotografías me dio nostalgia o porque yo no quería que lo nuestro terminara así.

Simplemente lo nuestro no tendría que haber terminado, estabamos bien. 

Kyle me abraza con delicadeza para no pasarme a llevar alguna herida que aún no me haya visto y nos quedamos así un buen rato. Simplemente los dos abrazados y se siente bien tenerlo cerca de nuevo.

Ninguno de los dos sabe que decir, pero me basta con saber que está ahí.

No puedo fingir que nada ha pasado y besarlo como me gustaría hacerlo. Aunque Amanda ya no esté, la imagen que tengo de ellos y saber que Kyle prefirió conversar con ella que salir a buscarme aún me duele, porque yo sí lo busqué, pero no fui lo suficientemente rápida. 

-Aun no te sacas la pulsera.-Digo conmovida 

-No pienso quitármela, es especial al igual que la persona que me lo regaló. Adoré cada uno de tus regalos, pero la lista con las canciones es de mis favoritas.-Dice mirándome con una sonrisa llena de afecto

-Soy muy cursi, ¿no?

-No lo negaré, pero también es muy tierno. Y ya he escuchado todas las canciones.-Dice orgulloso.-Me gustaría poder volver atrás en el tiempo. 

-A mí también.-Digo estando completamente de acuerdo. 

Él me sonríe en respuesta y en algún momento me vuelvo a quedar dormida en su compañía.

(...)

Cuando vuelvo a despertarme Kyle ya no está, pero si está mi padre y Liv quien se emociona al verme y me trae un dibujo que me estuvo haciendo.

-¿Te gustó?-Pregunta atenta

-Por supuesto que sí.-Sigue dibujándome con figuras geométricas, así que el dibujo que le regaló a mamá debe de haberlo hecho Justin como suponía.

-Me alegra verte despierta Madie.-Dice papá sentado frente a la camilla con una revista en sus manos.

-Lo mismo digo, ¿estuvo bien tu viaje...?

-Sí, luego te diré más detalles sobre eso. Hay varias cosas que debemos hablar y solucionar cuanto antes.

No tengo ni idea de a qué se refiere con eso, pero lo dejo pasar porque Liv luego me habla sobre una serie que está viendo y le dedico toda mi atención a mi hermana menor. O a una de mis hermanas menores, puesto que también ahora está Savannah. 

Cuando Liv se retira junto a mi padre me dice que mañana hablaremos con más calma y que se alegra que dentro de todo, esté bien.

Sólo queda mamá haciendome compañía en la habitación y yo aún estoy procesando todo lo ocurrido estas últimas horas. Que sin duda es demasiado.

-¿Puedo saber que ocurrió entre tú y Kyle?-Pregunta mi madre con cautela, como si oír su nombre me fuera a asustar.

-Creo que terminamos.-Digo con pesar

-Me pude dar cuenta de eso, pero...

-No quiero hablar sobre lo ocurrido, ¿sí? Creo que es la experiencia más cercana a tener roto el corazón.

Si Bella se sentía así cada vez que terminaba con Nate, puedo entender porque le cuesta tanto avanzar. Ahora mismo la idea de salir con alguien que no sea él, la veo muy lejana. Practicamente imposible, dudo que vuelva a conocer a alguien cómo él.

-Muy bien, sólo quiero que sepas que Kyle estuvo muy preocupado por ti estos dos días. Así que sólo espero que lo que haya sucedido lo puedan arreglar. Me parece un buen chico y se nota que te quiere. Ni siquiera tu padre lo logro convencer de irse.

Nuevamente me dan ganas de llorar, porque a mí también me gustaría perdonarlo y olvidar lo ocurrido, pero no es tan fácil como parece y las cosas entre los dos no serían las mismas.

Ya nada será lo mismo con Kyle y eso me duele.