Capítulo 36


MADISON


Bella: ¿Qué crees que debería hacer?  ¿Debería verlo una vez más o simplemente seguir con mi vida?

Madison: Sabes que me gusta verte feliz, pero no creo que él sea el indicado para ti

Bella: Me dedico una canción y eso es romántico y creo que ni siquiera sé estar sin él Madie. Es la relación más larga que he tenido y me... duele. No sé qué hacer, dijo que quería recuperarme

Madison: ¿Qué? ¿Cómo que quiere recuperarte?

Bella: Así es, dijo que quiere recuperar mi confianza y me pidió una cita. Yo estoy segura de que aún lo quiero, pero...

Madison: ¿Pero qué...?

Bella: Lo que pasa es que Oliver me dijo que no debería darle otra oportunidad, dijo que él no lo merece.

Madison: ¿Oliver? 🤔 Bella, te adoro, pero creo que él tiene razón. La última vez que viste a Nate te pusiste a llorar y tú más que nadie deberías no sé... ¿experimentar? Disfrutar y dejar de sufrir, no te digo que te beses con cualquiera, pero tal vez ambos deberían de darse un descanso... al menos por un tiempo

Bella: ¿Un descanso?

Madison: Sí, un descanso de su relación. Deberías de volver a ser la Bella amigable y sociable que eras antes de salir con Nate, tener amigos y salir de fiesta con Elena, como hacías antes de conocerlo

Bella: No lo sé... es difícil porque si le digo que no quiero volver... estará con más chicas. Prácticamente estaría renunciando a él  💔💔

Madison: Si debo serte muy sincera, yo te diría que NO le des otra oportunidad. Deberían de darse un tiempo y si eso Nate no lo acepta y está con más chicas es porque... no te quiere tanto como dice.

Bella: Eso fue muy crudo, sabes. No soy tonta, es sólo que yo sí creí en nosotros

Madison: Lo sé Bella, lamento mucho que hayas tenido que pasar por todo esto

Bella: ¿Cómo van las cosas por allá?

Madison: Bien, supongo que lo he hecho bien. Siento que cada vez voy mejorando. Luego podría enseñarte a patinar a ti

Bella: Toda una profesional... Me alegro por ti. Hablamos luego, debo salir en unos minutos. Suerte en las grabaciones <3

Madison: Envíale saludos a Elena, por cualquier cosa estaré aquí, te quiero


Enserio me siento mal por Bella, pero supongo que a veces no todas las relaciones son por siempre y creo que le hará bien estar sola y disfrutar un poco reconectando con sus amigos, antes era mucho más sociable que ahora.

Como aun no debo ir a ensayar, decido acostarme un poco en la cama, a veces creo que he vuelto a ser un bebé que solo quiere dormir. Me siento algo cansada.

Escucho un poco de música con audífonos y me quedo dormida.


(...)


Al despertar lo primero que hago es revisar la hora en mi celular y me sorprendo al darme cuenta de que dormí más de una hora. Lo bueno es que dentro de poco más de media hora debo estar en la pista de patinaje.

Reúno todas mis fuerzas para levantarme de mi cómoda cama, voy al baño y me percato de que ni aun usando base puedo disimular del todo las ojeras que me han empezado a salir estos días. Supongo que tendré que pedirles a mis hermanas que me regalen más maquillaje, ellas manejan mejor todo ese mundo.

Por las noches me cuesta dormir porque pienso mucho en mis padres y he sentido la necesidad de llamar a mi mamá y decirle lo que hay entre mi tía y papá, pero como debe de estar procesando lo del divorcio no sé si sea buena idea.

Así que duermo muy poco por las noches y en el día tengo sueño.

Reviso entre mis cosas y recién caigo en la cuenta de que aún no me llega mi periodo, aunque no me alarmo, suelo ser bastante irregular y con el estrés que he tenido todos estos días debe de ser más normal de lo que creo.

Por lo general, uso un cuaderno en donde voy anotando las fechas, mis hermanas siempre me han dicho que debo cuidarme, así que de esa forma me siento más segura.

Aunque siendo sincera, me parecía una pérdida de tiempo, prácticamente yo no tenía una vida sexual activa como mis hermanas, así que era imposible que pudiera quedar embarazada.

Y sabía que no sería la próxima Virgen María, por lo que anotar las fechas era un simple recordatorio de que hace tiempo no tenía nada de sexo.

Claro que con la llegada de Kyle a mi vida, ese ámbito mejoró bastante, aunque hace casi dos meses que no anoto ninguna fecha en ese cuaderno. Se me tiene que haber olvidado hacerlo con tantas cosas que he tenido en la cabeza.

¿O no me habrá bajado el periodo en esos dos meses? Si ni siquiera recuerdo que comí ayer, es difícil que pueda recordar esto.

Decido no darle tanta importancia porque conozco mi cuerpo y yo sabría reconocer si algo sucede o cambia en él.

Tomo una chaqueta porque afuera hace frío y salgo de la habitación en dirección a juntarme con Nick para ponernos a ensayar.


(...)


Luego de grabar algunas tomas que hacen que me sienta como si fuera merecedora de un premio, Drew me invita a comer algo junto a Nick y Emmeline.

Así que al menos no me sentiré tan sola.

-¿Dónde creen que podríamos ir a comer?-Pregunta Nick

-Yo conozco un lugar que dicen que es muy bueno. Ha ido mi padre.-Responde Emmeline alegre.

-Bien, entonces tú nos dirigirás.-Le sonríe Drew

Yo los sigo en silencio y escucho a medias su conversación, mi mente se mantiene ocupada pensando en otras cosas. Como mis padres, la media hermana que tengo, mi tía Kate, Amanda, Thomas y la conversación que tenemos pendiente, la relación fallida de Bella y Nate y por último Kyle.

Lo cierto es que Kyle siempre consigue tranquilizarme de alguna manera, siento que de verdad le importa mi opinión y una pequeña parte se aferra a la idea de que enserio sea posible que yo le guste. Así de... imperfecta y rara. Aunque también me da miedo, porque jamás alguien me había tratado tan bien y hecho sentir tan especial.

Es una pena que tenga tanto miedo de que finalmente alguien parezca quererme de la forma en la que siempre lo he querido, todo está siendo tan bonito que temo echarlo a perder.

Escucho muchas veces al día las grabaciones que le he hecho cantando mis canciones favoritas, incluso lo he buscado en YouTube, así me siento más cerca de él, tampoco quiero agobiarlo y sentir que se aburre de mí.

-Madie.-Escucho que alguien pronuncia mi nombre y presto atención a lo que me rodea.

-¿Qué?-Le pregunto a Drew

-¿En qué pensabas? Casi te atropella una señora que iba con un coche de bebé. Te tuvo que esquivar porque no parecías querer moverte. Eras como un zombie

-No soy un zombie, es sólo que pensaba en otra cosa.

-Seguro que esa otra cosa es Kyle.-Responde divertido

-No, pensaba que apenas llegue al hotel veré una película de Disney.-No me gusta ser tan predecible, y es una mentira a medias, ya que ahora sí tengo ganas de ver alguna película. Pero con Kyle, es una pena que no esté aquí conmigo, lo extraño.

-No te creo, lo acabas de inventar

-No me interesa si me crees o no, pensaba en eso

-Chicos, ya vamos llegando. Espero que hayan pensado en lo que comerán.-Dice Emmie emocionada

-Al menos yo sí lo tengo claro.-Dice Drew guiñándole un ojo a Emmie que le hace soltar una risa

Nick parece divertido por el comentario, pero no dice nada. En cambio, yo no necesitaba tanta información y ahora tengo claro lo que harán luego de esta comida

¡Qué asco!


(...)


Una vez que veo el menú, siento que debo superar una prueba muy difícil, ya que todo contiene demasiadas calorías y carbohidratos, aunque tampoco puedo pedir solo agua y levantar las sospechas de Drew.

Emmeline es tan perfecta que seguro debe de tener la suerte de que sin importar cuanto coma no engordará nada, en cambio yo hasta con tomar un poco de agua ya me encuentro hinchada. Detesto sentirme así, por eso mismo he reducido mis comidas diarias, pero no lo pensé cuando acepté su invitación. Ahora ellos tres estarán presentes mientras lucho con la comida.

Finalmente me decanto por la comida que menos calorías tiene, una ensalada y un jugo. Con esto admiro aún más a mis hermanas, ya que ellas se deben de cuidar mucho más que yo, no sé cómo lo harán, pero si no fuera por estas grabaciones me hubiera pedido algo mucho más delicioso y un helado como postre.

Una vez que nos entregan las comidas, me mantengo en silencio porque no sé de qué hablar. Drew y Nick llevan la conversación y yo intervengo de vez en cuando para que sepan que los oigo. Emmeline es demasiado buena y muy sociable, siempre tiene algo para decir. Me gustaría ser más como ella.

Cuando me vibra el celular veo que es un mensaje de mi padre, preguntándome como me ha ido con las grabaciones. Me sorprende un poco que me envíe un mensaje, ya que no quedamos en los mejores términos luego de enterarme de lo que le hizo a mamá, aun así le respondo que estoy bien y que me quedan aún unos días antes de ir a casa de nuevo.

Él luego de unos segundos me habla sobre mi hermana Savannah, quien tiene a su mamá muy enferma en el hospital y que lo más probable es que fallezca pronto. No puedo evitar sentirme mal por ella, sé que no la conozco, pero no debe ser fácil perder a un ser querido y mucho menos a tu mamá.

También me menciona que la llevará a vivir con él, porque no tiene más familia allá y que cree que es una buena idea que la conozcamos. Tiene en mente hacer una cena familiar para que todas las hermanas se conozcan y en cuanto le pregunto si también irá mi tía Kate, deja de responderme.

Si empiezan a salir como adolescentes... no sé lo que haré.

No puede cambiar de hermana así como así. Es muy... raro e incómodo y también me duele, puesto que yo pensaba que se querían.

En cuanto recuerdo que yo igual estoy ocultándole eso a mamá, las pocas ganas de comer que tenía desaparecen.


(...)


-¿Por qué estuviste tan callada durante la comida?-Me pregunta Drew

-A veces no tengo ganas de hablar, es todo ¿Y no que tú estarías ocupado con Emmie?-Le cuestiono a Drew

-Cumplo con mi papel de amigo, te vine a dejar. Además no me cambies de tema, ¿te pasa algo?-No me gusta el tono de preocupación en su voz. Drew es mucho más observador de lo que cualquiera pensaría

-No, estoy bien. Algo cansada con los ensayos y las prácticas. Todo es más agotador de lo que creía.

-¿Segura? Sé que no somos tan cercanos como Thomas y tú, pero aun así puedes conversar conmigo, ¿entendido?

-Gracias Drew, es muy considerado de tu parte, pero estoy bien.-Trato de transmitirle tranquilidad y que lo tengo todo bajo control.

-Hablo enserio Madie, cualquier cosa.-Drew se acerca más a mí y me observa con tanta determinación y seguridad en sus palabras que quiero abrazarlo por preocuparse así de mí. No sabía bien si considerarlo un amigo, aunque ahora sé que él me ve de esa forma y aunque eso parezca tonto, a mí me hace sentir bien.

-Por supuesto, si necesito ayuda acudiré a ti.-Le digo para tranquilizarlo.

-¿Te molesta si me quedo aquí contigo? Será solo un momento.-Pregunta algo ¿nervioso? Me sorprende que se muestre así, siempre es muy seguro de sí mismo

Yo asiento con la cabeza sorprendida por su pregunta, pero como cada vez que se trata de él, me es imposible negarle nada. Le tengo un cariño especial.


(...)


Me despierto cuando escucho tantas veces la canción de Ariana Grande que tengo por tono de llamada, creo que jamás me había asustado tanto como ahora. Tomo mi celular de la mesita que tengo al lado y veo que es Thomas quien me está llamando.

Drew me acompañó a ver una película y luego se fue porque se hizo más tarde y mañana debemos levantarnos temprano para las grabaciones, me pareció muy extraño su comportamiento, pero creo que jamás lo entenderé completamente.

Es un hombre después de todo y yo solo logro entender a los hombres literarios cuando leo desde su punto de vista, no hay nada que pueda hacer para entender a Drew por ahora.

Cuando ya estoy mucho más despierta, respondo su llamada.

-Hola, ¿qué pasa...?

-Madie, al fin respondes. Yo... Necesito conversar con alguien, sé que es tarde, pero es importante.-Su voz suena extraña y a pesar de que me encantaría seguir durmiendo, no puedo hacerlo. Él me necesita

-Por supuesto, te escucho Thomas.

-No sé cómo empezar... me siento la peor persona del mundo. Hice algo que... no me lo perdonara jamás.-Habla demasiado rápido y aún me cuesta seguir lo que me está contando

-¿Podrías explicarte más? ¿Qué hiciste y quien no te lo perdonará?

-Conocí a alguien. Se llama Sam.-Dice seguido de un silencio y creo que por fin empiezo a entender algo.- ¿Recuerdas que te dije que era como una especie de cenicienta? Bueno, resulta que mi mamá me enviaba a comprar a una tienda que queda cerca de nuestra casa cada vez que ella olvidaba algo y él trabaja ahí. Primero no le tomé atención, porque iba demasiado ocupado repitiendo lo que iba a comprar y luego de ir tan seguido, él me habló porque notó que iba a comprar a diario. Empezamos a hablar y...

-¿Y qué? Sabes que puedes decirme todo, ¿no? Para eso estoy aquí Thomy.-Digo notando sus nervios

-Bueno.-Dice tomando el tiempo necesario, no lo presiono.-Empezamos a conversar cuando iba a la tienda, hasta que un día me pidió mi número de celular. Yo estaba contento de tener un amigo, en ese entonces tú ya estabas saliendo con Kyle y me sentía... celoso. De Kyle y los otros chicos. Es estúpido, pero cada vez hablábamos menos. Así que me sentí realmente feliz de tener a alguien con quien hablar.-No puedo evitar sentirme culpable al oírlo, lo dejé completamente de lado sin ser consciente de eso.

-Lo siento, esa no fue mi intención en ningún momento.-Vuelvo a aclararle.

-Lo sé, ya lo conversamos. La cosa es que... cada vez pasaba más tiempo con él, hasta que nos besamos. Simplemente se dio y no sé muy bien porque, pero le correspondí el beso. Tú sabes que no me gustan los hombres, pero ese beso fue distinto. Aunque lo primero que hice fue alejarlo y decirle que me gustaban las mujeres y que le ofrecía mi amistad...

No sé muy bien que decir, todo esto me lo perdí por no ponerle atención suficiente a él. Me siento muy mala amiga

-¿Y qué sucedió luego?

-Bueno, después continuamos conversando y él no intentó nada más conmigo, el problema era que no podía dejar de pensar en el beso y eso me estaba molestando mucho. No podía conversar con él sin recordarlo y...

-¿Y? Puedes contármelo todo, no te juzgaré, somos amigos.-Digo animándolo, me gustaría estar con él, sé que necesita apoyo

-Tengo miedo Madie, sé que no soy gay, siempre me han gustado las chicas y esto no es normal. Al menos no en mí, me siento raro cuando lo tengo cerca y... hemos vuelto a besarnos, varias veces de hecho y no estoy seguro de lo que somos. Él me ha dejado claro que no tiene problemas con quién es y eso lo tengo claro, pero... Yo no lo tengo tan claro.

-Creo que entiendo. Necesito que entiendas algo, el hecho de que te guste un hombre o una mujer no cambia la persona que eres, sigues siendo mi amigo, mi mejor amigo y aprecio demasiado que me lo hayas dicho.

-Lo sé, por eso te llamo. Me siento confundido y ahora viene la peor parte. Yo quería comprobar si soy gay y... Digamos que besé a la hermana mayor de Sam, frente a él. Era su cumpleaños y estaban jugando el estúpido juego de Verdad o reto, en realidad yo no la busqué, pero el momento se dio y yo necesitaba saber si sentía algo.

-¿A qué conclusión llegaste?-Pregunto

-Que no sé una mierda. Digo, no sentí nada, pero a lo mejor es porque ella no me gusta. Estoy pensando que a lo mejor puedo ser bisexual. ¡Por Dios, Madison! Jamás creí que en algún momento me lo plantearía, está mal.

-¿Por qué estaría mal?

-No sé, es raro. A veces creo que ni yo mismo me conozco y no sé... tengo miedo a que algo cambie en mí. Quisiera que estuvieras aquí conmigo.

-Pues cada vez falta menos, tal vez cuando vuelva... Yo también tenga varias cosas que decirte.-Digo recordando a mis padres

-Te escucho. Así me distraes de este problema

-Bien, mi padre engaña a mi mamá con mi tía

-Vaya, eso sí que es una mierda. Al menos mi padre está muerto, así que una infidelidad no entra en mis preocupaciones. ¿Cómo te enteraste de esto?

Me encargo de hacerle un breve resumen desde que mi tía llegó a casa con mis primas y sobre mi media hermana, quien creía que era la amante de mi padre en un principio.

Luego pasamos a conversar sobre cómo van las cosas con Kyle y luego conversamos sobre Aiden, ya que Thomas vio lo que dicen sobre él en la prensa. Algo que jamás había imaginado que pudiera pasarle a él. Siempre fue amable conmigo y me cae mejor que Jesse y Connor juntos.

Converso con Thomas gran parte de la madrugada, él habla en voz baja porque no quiere que lo escuche su mamá. Y yo estoy feliz porque me siento casi como en los viejos tiempos, cuando era prácticamente mi único amigo.

Sé que de a poco volveremos a ser los mismos de antes y eso me hace feliz, odiaría perder su amistad cuando me ha ayudado tanto y es parte importante de mi vida.



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