MADISON

-¿Puedo saber quién te llamó para que reaccionaras de esa manera?-Pregunta mamá.

-No tengo tiempo para esto Natalie, surgió algo urgente. Tendré que viajar.-Dice papá viéndose alterado por lo que sea que le hayan dicho en esa llamada

-¿Y no puedes posponer el viaje unos días? Creí que ibas a tomarte un descanso y me dijiste que me acompañarías a quedarnos en ese hotel para pasar tiempo, juntos... Es mi cumpleaños y yo enserio quería pasar unos días contigo

-Nat, ya celebramos tu cumpleaños ¿no? No puedo hacer todo lo que me pidas y esto enserio se salió de mis manos. Puedes ir con Kate si quieres.

-Pero... ¿y quién cuidaría a Liv?

-No puedo resolver todos tus problemas yo, debes de pensar en algo. Iré a hacer mis maletas.-Dice papá levantándose de la mesa.

Y yo que creía que este cumpleaños no podría ponerme más nerviosa de lo que ya estaba.

Se han ido todos los invitados y gracias al personal de aseo que contrató Elena ya está el patio ordenado, recién nos sentamos todos a comer y empieza a sonar insistentemente el celular de mi papá, al principio no le hizo caso, pero lo llamaban tanto que subió a responder y luego bajó diciendo que tiene que viajar.

Mi tía lo miraba con sospecha y mamá se ve decepcionada de que tenga que viajar justo ahora.

-Sube a hablar con él.-La anima mi tía.

-Bien, disculpen niñas. Enseguida vuelvo.-Dice mamá subiendo las escaleras.

-¿Están molestos?-Pregunta Liv mirándonos.

-No, sólo es una pequeña discusión, ya se les pasará.-Responde Bella.

Los primeros minutos pasan en un silencio incómodo y tenso, sé que a lo mejor quien lo esté llamando sea Savannah y puedo intuir que mi tía cree lo mismo, por eso le dijo a mi mamá que subiera. Ella no podía exigirle respuestas, ya que es solo su cuñada.

Cuando se empiezan a oír gritos un poco más fuertes Bella tiene la idea de sacar a Liv de ahí y así no pueda oír nada. Así que solo quedamos Elena, mi tía y yo escuchando la gran discusión que hay arriba.

-¿Quién es Savannah y porque te llama tanto?

-Nadie importante y por favor deja de revisar mis cosas, no me gusta que lo hagan.

-La vas a ir a ver a ella, ¿verdad? Dime quien es, merezco saberlo.

-Te dije que no es nadie importante y ahora estoy muy ocupado para responder tus estúpidas preguntas Natalie, debo viajar.

-Vas a viajar a verla, vamos es evidente. ¿Desde hace cuánto tiempo que me engañas?

-No te engaño, sólo déjalo ¿sí?

-Te está llamando otra vez, vamos contéstale y pon la en altavoz. Yo también quiero oír.

-Suenas ridícula, por supuesto que no la pondré en altavoz.

-Entonces, iré contigo a ese famoso viaje

-No puedo ir contigo Natalie, es trabajo

-¿Cuántas excusas más me pondrás? Sé que me estás mintiendo, estás raro conmigo desde hace días. No sé si hice algo mal.

-No estoy raro contigo, sólo estoy agotado y lo último que necesito es que me presiones...-Sus voces bajan un poco y me siento muy mal al callar lo que vi hoy.

Ahora más que nunca es cuando debería haber dicho algo y no quedarme callada.

(...)

Trato de reconciliar el sueño y por más que lo intento no puedo, no dejo de pensar en todo lo que ocurrió hoy y lo culpable que me siento con todo.

Me levanto de mi cama y paso por afuera de la habitación de mis padres y entonces finalmente, descubro quien es la famosa Savannah:

-¿Por qué nos hiciste esto?-Escucho la voz quebrada de mi mamá por el llanto, aunque ahora la discusión perdió fuerza, son más bien susurros

-No lo tenía planeado, discúlpame. Sólo pasó.

-Sólo pasó, suenas más a un adolescente que a un hombre con más de cincuenta años.

-No tenía planeado engañarte, viajé por negocios y la conocí...

-No fue algo de una sola noche, ella tenía tu contacto, de lo contrario ¿cómo se hubiera contactado contigo para decirte que serías padre?

¿Padre? Si no están hablando de mis hermanas, eso quiere decir ¿que tengo otra hermana?

-¿Cómo crees que me siento con todo esto? ¿Crees que quería dejarla embarazada? ¿Tener una hija fuera del matrimonio?

-¿Acaso quieres que sienta lástima porque tuviste otra hija? Por favor, no puedes ser tan cínico. Me engañaste y tuviste una aventura con otra mujer quien sabe cuánto tiempo ¿y yo debo sentir compasión por ti? ¿Es enserio?

-Bueno, ahí está tu verdad. ¿No era eso lo que querías? Ahí la tienes. Tengo otra hija y debo ir a verla, su madre está enferma. Me necesita.-Sus palabras están cargadas de veneno como si de alguna forma disfrutara decirlas, como si disfrutara lastimar a mi mamá.

Así que sin pensarlo, abro la puerta de la habitación y camino a abrazarla. Tiene los ojos llorosos y rojos por el llanto, está con su pijama puesto. Mientras que mi padre está listo para viajar a ver a su otra hija, tiene una maleta a los pies de su cama y no se molesta en ocultar su enfado al verme.

-No quería decirte esto hoy, pero como ya sabes lo de Savannah, no quiero esperar más. Quiero que nos divorciemos.-Suelta papá como si fuera lo más normal hacer algo como esto.

-¿Divorciarte?-Me siento tan mal por mamá y verla tan afectada y me molesta demasiado que mi papá no se muestre afectado en lo absoluto

-No vas a fingir que estamos bien, ¿verdad? Hace tiempo que lo nuestro dejó de funcionar. Tal vez nos haga bien separarnos.

-Papá...

-Madison, ¿Cuántas veces te he dicho que no te metas en conversaciones de adultos? Ni siquiera fuiste capaz de tocar la puerta antes de entrar.

-Claro, porque eso es lo más importante ¿no? Perdón por olvidar mis modales, pero mi mamá me necesita.-Digo abrazándola más fuerte

-Bien, estaré en contacto con ustedes, ¿sí? Tendré que viajar ahora, no quiero que mañana se arme otro escándalo como el de hoy. Lamento que las cosas hayan acabado de esta manera Natalie, pero ya no puedo seguir fingiendo.

Con esas siendo sus últimas palabras antes de irse, yo me encargo de contener a mamá, así como más temprano hice lo mismo con Bella.

No hay palabras que puedan explicar lo mal que me siento justo ahora.

(...)

Cuando me despierto veo que estoy en la cama junto a mamá, hace mucho tiempo que no dormía en su habitación.

Me fijo en el reloj de la mesita que está al lado de la cama y compruebo que son las diez de la mañana. No sé en qué momento me quedé dormida.

Decido que dadas las circunstancias dejaré a mi madre dormir y yo iré a comer algo rápido en la cocina, cuando llegó ahí veo que están mis hermanas esperándome.

-¿Quieres explicarnos porque estabas durmiendo abrazada a mamá, como si de pronto fueras una niña que tiene pesadillas? ¿Y adónde se fue papá?-Pregunta Elena

-En la noche no podía quedarme dormida y pase afuera de su habitación y los escuché hablar. Básicamente nuestro padre tiene otra hija, llamada Savannah a la cual viajó a ver y le pidió el divorcio a mamá antes de irse. Yo me quede haciéndole compañía y me dormí a su lado.-Digo sintiéndome mal otra vez, porque sé que me estoy guardando algo, pero no sé si a estas alturas valga la pena decirlo.

-Vaya esposo de mierda que se consiguió mamá.-Dice Elena molesta.- ¿Cómo se le ocurre pedirle el divorcio en su cumpleaños?

-No tiene sentido, ¿él tiene otra hija? ¿Tenemos una hermana que no conocemos? Creo que esto me generará dolor de cabeza.-Dice Bella tomando asiento.-Y yo que creía que se querían, al menos eso parecía

-Ni que me lo digan, lo peor de todo es que nosotras esta semana debemos viajar y mamá quedará sola.-Digo sintiéndome culpable por tener que viajar

-Bueno, tiene a tía Kate y a Liv.-Dice Elena.

-Le prepararé un desayuno y se lo dejaré en la habitación para cuando despierte.-Digo tomando una bandeja.

Ojalá esto solo fuera un mal sueño del que poder despertar. Pienso mientras me dedico a prepararle el desayuno a mamá.

(...)

Luego de preparar el desayuno y ayudar a mis hermanas a cocinar algo, tomo un abrigo y mi bolso para ir a la casa de Kyle.

En cuanto mi mamá despertó no se demoró nada en ponerse a llorar, yo traté de consolarla y me dio las gracias por el desayuno, pero no tenía muchos ánimos de levantarse de la cama, así que el almuerzo se lo llevé también en bandeja a su habitación.

Le dijimos a Liv que papá viajó por temas de trabajo y que nuestra mamá se sentía mal porque comió algo en mal estado, así que ella está pintando y dibujando a su lado.

Ni siquiera le he dirigido la palabra a mi tía, no puedo hacerlo. Sé que ella es la responsable de que mi padre quiera divorciarse y me molesta que aún no le haya dicho nada a mamá.

Mañana finalmente viajo a grabar la película junto a Nick y hoy Kyle me invitó para que esté con él un momento. No pude negarme a esa invitación y estar cerca de él, aunque sea un instante me hace sentir mejor.

Me da ánimos, lo cierto es que me siento bastante agotada, ayer lloré junto a Bella y luego lloré junto a mi mamá. Creo que a mí también me dolerá la cabeza si sigo así.

Estaciono mi auto fuera de su casa y bajo.

El primero al que veo al entrar es a Connor y quedo realmente sorprendida cuando veo que solo esta con un short mientras toma un vaso de agua.

-Madie, no sabía que vendrías, ¿qué tal?

-Hola... ¿Por qué no estas usando polera?

-¿Para ocultar todo esto?-Dice señalándose.-Estaba haciendo ejercicio

-Le gusta presumir, eso es todo.-Responde Kyle a mi lado divertido

-Tú igual lo harías, si tuvieras este cuerpo, claro...-Dice Connor burlándose.

-De todas formas lo mío no es el exhibicionismo, a menos que este en una playa.

-Escucho la dulce voz de mi bailarina favorita. Mira aquí está el adorable Brownie.-Dice Jesse enseñándomelo.

-Si lo sigues alimentando así en vez de brownie, tendrás que empezar a llamarlo albóndiga. Está muy gordo.-Dice Aiden.

-No está gordo, así es su pelaje.-Lo defiende Jesse

-Yo creo que sí está un poco gordo.-Digo viendo la cachorro con detenimiento mientras él agita su cola. Aunque al ver que Jesse me observa como si lo hubiera insultado, agrego-O tal vez tiene mucho pelaje. Esa es otra opción

-No te quejes cuando tu pobre Brownie no pueda caminar, al menos deberías sacarlo a pasear. Sólo come y duerme.-Lo acusa Aiden

-Es mi primera mascota Aidencito, no te pongas tan mandón. Aunque tienes razón en algo. Tal vez pueda usar a mi hijo a favor. Porque ¿qué es más sexy que yo corriendo sin polera? Así es, yo corriendo sin polera con mi perro. Que además luce así de adorable.

Reprimo las ganas de reír por su comentario porque enseguida se saca su polera para comprobarlo. Y al parecer lo observo más de la cuenta porque para cuando me quiero dar cuenta Jesse me está sonriendo satisfecho.

-Creí que salías con Lindsay.-Digo para desviar la atención de mi indiscreción.

-Sí, tienes razón. Él sale con Lindsay, pero yo no salgo con nadie. Así que yo sacaré a pasear al perro.-Dice Connor.-Además mi estado físico está mejor que el tuyo Jesse Jackson.

-Pero tú fuiste con Barbara al cumpleaños de mi mamá. ¿No están saliendo?-Le pregunto

-Por favor, fue una cita casual, además sólo nos besamos y hemos tenido sexo. Nada más, ella no quiere una relación y yo tampoco. Así que estamos bien. Yo soy el único que puede utilizar al perro.

-El perro tiene un nombre y es Brownie y cómo su padre, te prohíbo que lo utilices.-Dice Jesse.-A menos que salgamos los dos con él.

-Bien, pero si no puedes ir a mi ritmo, yo seguiré corriendo con Brownie y te dejaremos ahí tirado. Estoy listo para salir a correr, ya estuve haciendo ejercicios de calentamiento.

-¿Contento Aidencito? Sacaremos a pasear a Brownie.-Dice Jesse contento.-Pero me iré a cambiar de pantalón primero.

-Hagan lo que quieran, iré a entrenar al gimnasio. Ojalá estén pendientes de Brownie y no lo pierdan por hacer alguna competencia.

-Jamás perdería a mi hijo. Connor vigila que no se mueva, yo vuelvo enseguida.-Dice Jesse subiendo a su habitación.

Y apenas Jesse desaparece Connor le pone la correa al cachorro, listo para irse sin Jesse.

-Díganle que lo esperamos afuera.-Dice Connor sonriendo.

Cuando Kyle y yo quedamos solos porque al parecer todos salieron a hacer ejercicio, le doy una pequeña sonrisa.

-Sígueme, te quiero enseñar algo.-Dice tomándome de la mano.

(...)

-No puedo creer que esto sea tan difícil.-Digo intentando jugar Guitar Hero.-Si logro tener aunque sea un poco de puntaje, debe de ser coincidencia

-No seas tan dura contigo misma, es la primera vez que lo juegas.

-Pero tú lo haces bien y han sido varias canciones. Ni en modo práctica puedo hacerlo bien. Aunque las canciones son buenas.

-Seguro que si Connor supiera que estamos aquí, nos echaría.-Dice Kyle divertido.-No le gusta que entren a su habitación sin permiso y mucho menos que toquen su juego.

-Pero él salió a correr, así que no hay de qué preocuparnos. ¿Sigue estando aquí Amanda?

-Sí, debe de estar en su habitación. No sale mucho de ahí.-Dice Kyle concentrado en el juego.

Yo me concentro en observarlo jugar y lo hace de maravilla, aunque él ya debe de estar acostumbrado. El juego debe de estar dedicado a niñitos y ni siquiera así soy capaz de hacerlo bien.

-Estoy a punto de ponerme a grabarte, luces bien así.-Digo con mi mano lista en el celular.

-Estoy empezando a creer que quieres un video de mí haciendo cualquier cosa.-Dice divertido

-No es cualquier cosa, los primeros son mis covers, el segundo es mi propia canción Disney y luego eres tú jugando Guitar Hero. No son cosas que yo vea todos los días.-Respondo.

-Puedes hacerlo si quieres.

No permito que lo diga dos veces antes de ponerme a grabar, él se encuentra parado y puedo ver como de a poco empieza a moverse hacia los lados al ritmo de la canción. Es lo más parecido a un baile que lo he visto hacer, así que por supuesto lo grabo.

Una vez que termina la canción, paro de grabar y lo observo mirándome.

-Ahora te enseñaré a jugar. Siéntate aquí.-Me indica.

Yo me voy a sentar a su lado y trato de hacer lo que me dice, pero al ver que las notas van tan rápido me empiezo a desesperar. Sé que es un maldito juego, pero aun así no me creo que no lo pueda hacer bien luego de tantas canciones.

Kyle sigue ayudándome en las siguientes tres canciones, supongo que igual me distraigo porque lo escucho cantar las canciones en voz baja.

Cuando siento sus manos sobre las mías me doy cuenta de que me está ayudando a obtener puntaje moviéndolas a lo largo de la guitarra y aunque sé que en realidad yo no estoy jugando nada, me siento finalmente feliz con el juego.

(...)

-¡Mierda!-Exclama Kyle cuando por accidente lo paso a golpear con la guitarra, creo que le pegué en uno de sus bonitos ojos.

-¿Qué pasó?-Pregunta Amanda apareciendo en la puerta de la habitación.

-Lo siento mucho.-Digo apenada por haberlo golpeado

Yo la ignoro y veo aterrada como Kyle se tapa uno de sus ojos con la mano, yo le dije que quería jugar sola y él insistió. Terminamos forcejeando con la guitarra y por error lo golpeé.

-¿Alguna sería tan amable de traerme algo de hielo? Por favor, esto duele como no tienen idea.

Amanda y yo intercambiamos una mirada y salimos corriendo de ahí en busca de hielo para Kyle. Yo le pegué por error, es mi deber ayudarlo a sentirse mejor.

Amanda llega antes a la cocina y empieza a buscar desesperada el hielo.

-No sé si lo sabes, pero ahora Kyle y yo somos amigos. Me preocupo por él.-Dice en respuesta.

-Me da lo mismo si ahora son grandes amigos, sigues sin caerme bien. Además nosotros estamos saliendo o algo así.

-¿Enserio? A mí no me dijo nada de eso.-Sonríe victoriosa en cuanto encuentra el hielo

Yo la sigo en silencio por las escaleras y veo cómo le entrega el hielo y ella por supuesto se queda ahí, sosteniéndolo.

Otra vez empiezo a sentir celos y a la que quiero golpear por accidente es a ella.

-Gracias Amanda, ahora puedes retirarte.-Dice Kyle

-¿Qué? ¿Por qué? Sólo te estoy ayudando, además...

-Quiero estar con Madie, por favor... retírate.

-No entiendo como la puedes preferir a ella, está claro que es una bruta que no mide su fuerza. Te quedará un feo moretón en el ojo por su culpa.-Me acusa como una niña pequeña.-Yo jamás te hubiera lastimado de esa forma.

-Por favor Amanda, déjanos a solas. Quiero estar con Madie y fue un accidente.-Aclara Kyle apretando el hielo en su ojo.

Amanda se retira molesta y cierra de un portazo.

Yo enseguida me acerco a Kyle esperando que no se moleste mucho conmigo.

-¿Me disculpas?-Pregunto mirando su ojo bueno.

-Fue un accidente Madie, no importa. El moretón pasará después de unos días.

-No era mi intención golpearte, ni siquiera sabía que podían lastimar tanto las guitarras de juguete.

-Olvídalo, pasará. Quiero que te quedes aquí conmigo.

-¿Sabes? He estado viendo Hannah Montana y hay una canción que me recordó un poco a ti, ¿quieres saber cuál es?-Le pregunto

-Sorpréndeme, ¿la conozco?-Pregunta divertido

Es una buena señal que me sonría, no se molestó tanto como esperaba.

-La colocaré justo ahora.-Digo buscando la canción "He could be the one" en mi celular. Una vez que empieza a reproducirse puedo ver a la perfección como Kyle analiza la letra, yo sólo la puse porque en el comienzo habla de un guitarrista, por nada más.

-Madison Dankworth... ¿Te estás declarando con una canción de Hannah Montana?-Me pregunta divertido una vez que termina

-No, dije que me recordó un poco a ti. No dije que te la dedicara por completo.-Aclara antes de que empiece a sacar las cosas de contexto.

-"Él tiene todo lo que una chica quiere" "Creo que me estoy enamorando de su sonrisa" "Él tiene algo especial" "Él podría ser el indicado".-Dice repitiendo frases de la canción con una gran sonrisa.-No sé cómo sentirme al respecto Madie, pero claramente es una declaración.-Repite divertido.-Y me siento honrado.

-No es ninguna declaración, te la estoy enseñando solamente.

-Y dijiste que te recordaba a mí.

-Dije que me recordó un poquito, sólo un poco a ti.-Digo lanzándole un cojín directo al ojo que tiene el hielo, pero él alcanza a frenarla.

-Qué mala eres Madie, justo a mi ojo moreteado.

-Lo siento, sabía que alcanzarías a frenarla.

-Sí, por supuesto por eso iba lanzada con tanta fuerza.

-Qué exagerado eres. A veces se me olvida que la estupidez de Connor se te pega.

-¿Cuál estupidez? Sólo te dije que me sentía honrado de que me la dedicaras. Viniendo de ti, ¿lo tomo como una pedida de mano? Una canción de Disney es algo sagrado para ti.

Decido que lo mejor será ignorarlo, en algún momento se aburrirá de molestarme. Así que saco mi celular y me pongo a jugar Candy Crush, tengo muy abandonado el juego.

-Oh vamos, ¿enserio te molestaste?-Dice cuando ve que no lo estoy mirando.-Madie, me obligarás a ir por ti.

Se levanta de la silla en la que estaba sentado y bloqueo la pantalla de mi celular, alerta a cualquier cosa que esté a punto de hacer.

-Acabas de perder el privilegio de que te enseñe cualquier canción que me recuerde a ti, ahora estás en mi lista negra.-Digo tratando de sonar seria, aunque esto es lo más infantil que he hecho.

-Buscaré tu perdón entonces.-Dice tomando asiento a mi lado.

-No creo que lo logres, como bien dijiste Disney es sagrado para mí y acabas de burlarte de una muy buena canción. Y lo repetiré por última vez, al inicio habla de que el chico toca una guitarra y tú también...-No me deja terminar de dar mi argumento porque se inclina y me besa.

Los primeros segundos sólo son sus labios los que se mueven sobre los míos porque no pienso ceder tan rápido a sus encantos por mucho que me guste besarlo. Hasta que pasados unos segundos le correspondo el beso y me permito disfrutarlo unos segundos.

-Jamás volveré a molestarte con tus canciones, creo que esa en específico la escucharé a menudo.

-Recuerda que no te la dediqué.-Digo prácticamente en un susurro, porque su rostro aún está demasiado cerca del mío

-Ya lo sé, sólo te la recordé al inicio.-Dice repitiendo mis palabras.- Pero, haré hasta lo imposible para que cada verso de esa canción esté dedicado a mí. Yo quiero ser el indicado para ti Madison.