-Capítulo 4: Confusión-

"No le cuentes esto a nadie, vale? Si lo haces te destrozo la vida" Dijo con la mirada fija en el suelo.

"Que no le cuente a nadie el que"

"Todo lo que hemos hablado. A nadie"

"Esta bien, vale. No se lo contaré a nadie"

"Así me gusta"

Después de eso, se hizo el silencio. Yo no sabía que decir, y supongo que él no quería hablar.

"Bueno... Yo me voy a ir ya" Dije al fin.

"No, espera, quédate un poco más" Me miró con la misma mirada que me atrapó en el primer momento que lo vi.

"Vale, me quedo un poco más" Le sonreí.

Instantes después estábamos besándonos apasionadamente.

Al día siguiente, yo me levanté sin ganas. Me fui hacia el instituto y cogí mis cosas, dispuesta a ir para clases.

De repente, alguien me puso las manos rodeando la cadera. Me asusté, pero al instante me tranquilicé. Billy estaba mirándome sonriendo.

"Porque no lo hacemos aquí delante de todos?"

"Billy, que coño dices"

"Venga, quítate la camiseta, hagámoslo"

Lo miré con una mirada a la que yo llamo de negación, pero parece que no lo entendió.

Billy empezó a manosearme, y a intentar quitarme la ropa. Yo me resistía, y le repetía la palabra No.

Vi a lo lejos, a dos chicos riéndose de la situación, y de un momento a otro, se había formado un círculo de personas a nuestro alrededor.

"Déjame!" Grité.

La gente a nuestro alrededor no hizo nada, hasta que llegó Steve.

"Te ha dicho que la dejes" Dijo enfurecido.

"Ahora Harrington es tu novio?" Dijo riéndose.

Negué con la cabeza. No era capaz de pronunciar palabra en ese momento.

"Entonces quien eres tu para decirme lo que debo hacer con ella" Billy lo miró desafiante.

"Su amigo" Dijo Steve con seguridad.

"Muy bien, arreglemos esto entre nosotros, te parece?" Dijo Billy en posición de boxeo y con los puños preparados para la pelea.

Steve asintió. Yo me aparté, hacia donde estaba la multitud. Y me dirigí al baño, para llorar.

Después volví y vi a Steve en el suelo, con un moretón en el ojo, y vi como Billy le escupía en la cara. La gente rápidamente se esparció de nuevo por los pasillos, y yo me ofrecí para ayudar a Steve y llevarlo a al enfermería.

Luego llegó la hora de comer. Y yo estaba algo perdida, porque prácticamente conocía a alguien.

Me planteé ir a comer al baño, pero una última esperanza me abrió el paso. Vi a Steve con Jonathan Byers, y una chica la cuál no conocía.

Me acerqué a la mesa.

"Hola, puedo sentarme?" Dije.

"Si, claro" Me sonrió la chica.

"Como te llamas" Dijo de nuevo.

"Sydney" Dijo Steve.

"Ah, pero ya os conocíais?" Preguntó la chica.

"Si, de Scoops" Respondió Steve.

"Y también nos hemos conocido en mi casa" Dijo Jonathan.

"Mi madre invitó a Sydney y a su madre a cenar hace unos días"

"Ah, entiendo, bueno Sydney yo soy Nancy. Si tienes algún problema me lo dices" Dijo Nancy.

"Encantada, Nancy, y no lo dudes" Sonreí radiante.

Estuvimos conversando durante esa hora, y después quedaban las clases de la tarde.

Cuando estas acabaron me fui para casa, y estuve viendo la televisión.

Alguien picó a la puerta. Fui a abrir, y me encontré con Nancy Wheeler. No esperaba su visita.

"Hola! Sydney quiero hablar contigo" Dijo ella.

"Hola Nancy. Eh, pasa, pasa" Sonreí.

Nos sentamos en el sofá.

"De que quieres hablar?" Dije.

"Bueno, quisiera saber que ha pasado esta mañana, si no te importa. Steve vino a comer con un moratón en el ojo, y quiero saber porque, él es mi amigo"

"Eh, bueno, Billy empezó a forzarme a hacer algo que yo no quería, y Steve sin casi conocerme, vino al rescate"

"Espera...Conoces a Billy?"

"Si" Asentí "Pero aún no entiendo que tipo de persona es"

"No es alguien de quien debas hacerte amiga, ni nada parecido, créeme"

Quizá tenía razón, al fin y al cabo, yo conocía a Billy desde hace apenas 2 días.

Estuvimos hablando de mi vida, de la suya y del pueblo de Hawkins y sus curiosidades.

"Me estas diciendo que un niño desapareció a causa de un monstruo?"

"Un demogorgon, Sydney. Apréndete los nombres" Ambas reímos. En aquel momento, me di cuenta que había formado otra amistad.

"Y de donde se supone que sale este monstruo?"

"De un agujero en la pared que hay en el laboratorio, que da al Upside Down o Mundo al Revés"

"Es demasiado extraño para que me lo crea" Dije riendo. Pero ella estaba seria.

"Verás Sydney, los amigos de mi hermano y mi hermano han sufrido por esto, y yo junto a Jonathan y a Steve también. Es real lo que te cuento, no es ficticio"

La miré, y parecía ir en serio.

"Te creo, pero crees que podré ver algo para creermelo con más certeza?"

"Quieres ver un demogorgon?"

"Supongo que sí"

Nancy rió.

"No entiendo como deseas ver ese monstruo"

"Pura curiosidad,  quiero tener más credibilidad de que lo que me has contado es totalmente cierto"

"Vale, como quieras, pero no se si encontraré" Nancy rió "Eleven acabó con los monstruos, así que ya estamos fuera de peligro, y lo siento pero creo que no podrás ver a los queridos demogorgons"

"Espera, quien es Eleven?"

Nancy rió, e immediatamente empecé a reír yo también.

Fue una tarde entretinida, hablé de muchos temas con Nancy, y nos confesamos muchas cosas.

Por la noche, ya estaba sola, así que me fui a dormir.

Al día siguiente, debía ir al instituto de nuevo, pero no me vi con ganas.

Aún así fui, deseaba no encontrarme a Billy con todas mis fuerzas. Pero mis deseos no se cumplieron.

"Hola Australia, ayer no me dijiste nada más desde la mañana"

"Es que no quiero saber nada de ti. Encuentras divertido forzarme a hacer algo y que todos se reían de mi? Porque si es así, no me dirijas más la palabra"

Caminé por los pasillos, hasta llegar al aula donde tenía la siguiente clase. Billy no me siguió, así que no me moleste en buscarlo.

La clase pasó lentamente, y volví a casa desanimada. Realmente pensé que estaba empezando algo con Billy, pero tal vez no me convenía, y ni siquiera se había disculpado.

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Fin del capítulo gente.
:)
¡Espero les haya gustado!
~Carla