-Capítulo 2: Cigarettes-

"Buenos días, soy el vecino de en frente. Venía a saludar"

"Oh, hola, soy Elisa, encantada"

"Encantado. A parte de saludar, venía invitarla a cenar en mi casa esta noche, de parte de mi madre"

"Oh, muchas gracias por invitarnos, sobre que hora?"

"A las 8. Eh, no vive sola?"

"No, me he mudado con mi hija, ahora esta durmiendo"

"Ah, entiendo, bueno me voy. Nos vemos esta noche en mi casa"

"Muy bien, hasta la noche. Por cierto, como te llamas?"

"Jonathan Byers"

"Bien, pues, hasta esta noche Jonathan"

La puerta se cerró. Oí las escaleras crujir. Y la puerta de mi habitación se abrió ligeramente.

"Cariño, estas despierta?"

Gruñí. Mi madre entró en la habitación, y abrió las cortinas de par en par.

"Mamá!" Dije molesta.

"Es tarde, no deberías dormir hasta tan tarde. Venga, arriba. El desayuno esta en la mesa"

"Ahora voy" Dije tapándome con las sábanas.

"Bien, yo voy a la cafetería a continuar con el trabajo"

"Vale"

"Ah, y, cariño, esta noche tenemos una cena de bienvenida con los vecinos de enfrente. Ha venido un chico llamado Jonathan a saludar, y me ha dicho que su madre nos había invitado a cenar."

"Ya lo sé mamá, lo he escuchado todo."

"Bueno, pues ve al centro comercial y busca algo formal y bonito para esta noche. Debemos dar buenas impresiones"

"Pero yo ya tengo ropa suficiente" Dije

"Será mejor que lleves ropa de aquí, de Hawkins. Así vas más a la moda"

"Dices esto como si fueras una modista profesional, pero ni te acercas"

"Anda, hazme caso, además así visitas el centro comercial de Starcourt"

"Mamá, ya fui ayer" Refunfuñé

"Y encontrastes algo? No, verdad? Entonces no te importará volver a ir"

"Esta bien, iré"

"Muy bien cariño, así me gusta. Bueno me voy ya, nos vemos a la noche en casa de los Byers"

"Adiós" Dije incorporándome en la cama.

Mi madre se fue, y cerró la puerta de la casa al salir.

Yo bajé las escaleras, aun dormida, y tomé el desayuno.

-Unas horas después-

Llevaba toda la mañana vagueando por casa. No había pisado la calle aún en aquel día, y decidí vestirme con ropa de deporte para salir a correr un rato.

Pasé por casi todas las zonas de Hawkins, pero tampoco era difícil hacerlo, ya que el pueblo es más bien pequeño.

De camino a casa me encontré con un coche de un azul eléctrico que me llamo la atención. Estaba aparcado delante de una casa como cualquier otra. Me acerqué a la casa, por curiosidad.

Me asomé por una de las ventanas delanteras, y vi un cabello rubio con rizos, y luego unos ojos de un azul profundo. Enseguida reconocí esos rasgos. Era el chico con el que intercambié miradas el día en que visité el instituto.

Pensé en llamar a la puerta, pero era muy arriesgado presentarse de esa forma y conseguir algún tipo de amistad con ese chico.

En vez de hacer eso, me acobardé y me dirigí a mi casa.

Al llegar a casa, me acordé que debía ir a Starcourt. Me pusé ropa bonita, y me maquillé un poco. Cogí el autobus y me dirigí al centro.

Al llegar ahí, no pensaba encontrarme a quién me encontré. A lo lejos, vi ese chico rubio que llevaba llamándome la atención desde que llegué. Esa era mi oportunidad para hablar con él, aunque hubiera tenido muchas otras para hacerlo. Sentí que ese era el momento, así que me acerqué donde estaba.

El chico sostenía un cigarro en la mano derecha, y parecía enfadado.

"Hola"

"Hola? Te conozco?"

"Eh, no, pero llegué hace unos días a Hawkins, y bueno eh.."

"Tienes algo que decirme?"

"No, yo sólo quería hablar contigo, porque te he visto en muchas ocasiones y no había tenido la oportunidad" Sonreí

"Que pasa, que soy alguien especial? Este pueblo es muy pequeño, aquí todo es mierda"

Porque tanto odio contra el mundo?

"Porque me hablas así? Sólo quería presentarme, te vi en el instituto y pensé que asistías a clases"

"Lo hago, y no se porque querías conocerme. Ahora ya me conoces"

Él mientras hablábamos, seguía fumando, lo cuál me resultó algo molesto.

"Tienes necesidad de ser así con el mundo? O es que me has cogido manía"

"De que hablas? Has venido a hablarme. No pensarás que le voy a hablar gentilmente a una desconocida"

"Pues si, pensaba en eso, porque es lo que la gente suele hacer" Me giré, enfadada, y empecé a caminar.

"Espera"

Me giré para mirarlo.

"Que? Ahora te quieres disculpar?"

"Soy Billy. Vente a una fiesta que hay esta noche en casa de Tommy. Me has gustado"

"Oye, pero que te piensas, que después de tus palabras voy a aceptar asistir a una fiesta contigo?"

"Pues si, eso pensaba"

"Muy bien. Asistiré a la fiesta porque quiero conocer a la gente. No quiero tener nada contigo"

"Vale. Te recojo esta noche en tu casa?"

"Oh, espera, esta noche no puede ser, tengo una cena con los Byers"

"Los Byers?" Se rió

"Muy bien, haz lo que quieras, te pierdes la oportunidad de estar conmigo" Añadió.

"Ni siquiera me has preguntado el nombre"

Me miró esperando que dijera algo más.

"Sydney"

"Adiós Sydney"

"Adiós Billy"

Me fui a una de las tiendas de ropa, a buscar un vestido algo formal para la cena de esta noche.

Desde la tienda vi a Billy, que hablaba con una chica pelirroja que parecía más pequeña que él, parecía que se gritaban entre sí. Pensé que debía de ser su hermana.

Al final del día, llegué a casa con bolsas llenas de ropa. Mi segunda visita a Starcourt había tenido éxito, por fin algo que me salía bien.

Me vestí con el vestido que me había comprado, y me puse mis pendientes de aros plateados.

Me maquillé de nuevo con algo más suave, y bajé al piso de abajo.

"Cariño, vamos a cenar?"

"Si, yo ya estoy lista"

"Pues vamos"

Cruzamos la calle y picamos al timbre de la casa.

"Hola! Sois las nuevas vecinas, verdad?" Dijo amablemente una mujer de pelo castaño.

"Si, muchas gracias por invitarnos a cenar" Sonrió mi madre

"Pasad, pasad"

Nos sentamos junto a esa mujer en la mesa y empezamos a hablar.

"Bueno, y ya habéis conocido a mi hijo, verdad?"

"Si, Jonathan, no?"

"Si"

"Yo no he tenido la oportunidad" Dije

"Bueno, pues ahora cuando venga lo conocerás. Por cierto, yo soy Joyce. Me he despistado y olvidaba presentarme"

"Yo soy Elisa, y ella es Sydney"

"Y de donde venís?"

"De Arizona" Dije

"Ah, muy bien. Bueno voy trayendo la cena, disculpad que Jonathan no se haya presentado aún, le debe haber surgido algo"

Después de estar un rato charlando con la amable Joyce se oyó el motor de un coche.

Joyce fue directa a la puerta.

"Jonathan, que hace aquí Nancy? Acaso no te acordabas de la cena?!"

"Si, mamá, pero es que Nancy ha tenido un mal día y no la podía dejar allí tirada. Ha bebido demasiado"

Joyce le hizo una señal para que subiera.

"No tardes" Dijo Joyce en un tono de enfado.

"Perdonad, problemas de adolescentes" Añadió Joyce.

Me reí. Jonathan parecía simpático.

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Este capítulo ha sido un poco más largo, espero que les guste!

:)