Tres años antes

—¡No pienso volver ahí con esa víbora maldita! —Grito enojada saliendo del estúpido restaurante con Stephen en brazos, estoy furiosa con esa vieja y también con ese viejo y hasta con Brad.

—Es mi madre Thalia. —Me recuerda en tono calmada apretándose el puente de la nariz con sus dedos.

—No me importa, no la soporto. —Digo alterada empezando a caminar hacia la carretera para coger un taxi e irme a mi casa.

—Bonita, yo tampoco la soporto pero quedamos en que lo intentaríamos. —Me abraza desde atrás impidiéndome caminar. No debí dejarme convencer de venir a esta tonta cena, eso me pasa por querer complacer a Brad.

—Lo intenté durante una hora aguantando las criticas de tu madre, las miradas despectivas de tu padre y las burlas de tu hermana, por mi que se vayan a la mierda, no me interesa que ellos me acepten. —Me volteo quedando frente a él con el ceño fruncido. 

Brad coge a Stephen y yo empiezo a moverme de un lado a otro enojada y fastidiada con esta situación, antes que agradezcan no les tiré el refresco encima ni le hice nada a esa vieja fastidiosa, ¿quien demonios se creen? Lo que menos me importa es si les agrado o no, con que a Brad le agrade me basta y me sobra.

Stephen ajeno a la situación empieza a hablar y tocar la cara de Brad quien le sonríe.

—Te saldrán arrugas, bonita. —Sonríe en mi dirección de forma tranquilizadora pero no funciona.

—Con arrugas y todo me vas a querer así que calla. —Suelto enojada y él ríe para empezar a jugar con Stephen quien ríe, eso si logra calmarme, amo la risa de mi hermanito. 

Nos quedamos en silencio él jugando con el niño y yo intentando calmarme, no sé como aguanté una hora ya que solo fue sentarme y que esa señora criticara mi atuendo, no sé si pretendía que fuera con un vestido de lentejuelas o algo así. 

Thalia, inhala y exhala, no puedes matar a tus suegros ni cuñada, bueno si puedes pero no debes hacerlo.

—Papá, pada. —Me detengo de golpe al escuchar las palabras de mi hermanito y volteo a verlos, Brad igual parece haberse quedado en shock ya que la mano con la que le jugaba a quedado en el aire. Trago fuerte, no puedo creer que le haya dicho así, ya a mi me dice mamá y he intentado no lo haga ya que no lo soy pero ahora esto y no puedo negar que se a escuchado muy bonito. —¿Papá? —Pregunta el pequeño al ver la reacción de Brad.

Me acerco nerviosa y expectante a la reacción de mi novio, lo analizo mejor y sus ojos se ven brillosos, creo que le saldrá su parte sentimental.

  —Me dijo papá. —Musita sin poder creerlo y poco a poco su sonrisa crece. —¡Me dijo papá! —Exclama feliz y aún con el niño en brazos empieza a saltar provocando risas en él. —Este de los mejores días de mi vida, soy tu papá. —Pone al pequeño frente a él y con una lagrima rodando ya por su mejilla empieza a darle besos al pequeño. Sonrío ante la bonita escena pero pronto esta se borra al ver a su madre salir del restaurante.

—¿Qué tanto se demoran ustedes dos? —Pregunta y al ver las lagrimas de Brad me mira sonriendo. —¿Por fin terminaron?  

Vieja hija del demonio.

  —¡Me dijo papá! —Grita feliz Brad poniendo frente a su madre a mi hermanito quien solo frunce el ceño y aprieta sus labios, a él no le cayó muy bien la señora. 

—No es tú hijo, no seas idiota. —Rueda los ojos su madre y con su mano empuja los brazos de Brad quitando a mi niño de su cara. Aprieto las manos enojada, de nuevo.

—Cállate que si es mi hijo. —Dice Brad ahora dejándome en shock a mi. ¿Cómo dices que dijiste? No pues si, ya me creí Hannah Montana. 

Tanto la señora como yo miramos a Brad con el ceño fruncido, yo confundida y ella enojada. Yo si suponía que algún día Stephen diría esa palabra pero pensé que sería a alguno de los chicos, especialmente a Mick ya que hasta hace poco vivíamos con él y este era feliz jugandole, no pensé que fuera a ser a Brad y menos que él reaccionaria así. Me alegra pero sé que Brad no dejará que yo le diga al pequeño que no le diga así.

  —No lo es ni lo será.

—Si lo es y te aguantas. —Uh, se enojó, la acaba de mirar mal, si tuviera poderes en los ojos ya estaría muerta la víbora. —Nos vamos.

—No señor, aún no terminamos.

—Ya terminamos, no me interesa si le agrado o no. —Hablo esta vez yo y jalando de la mano de Brad para poder conseguir un taxi.

En el taxi Brad intenta muchas veces que Stephen vuelva a decirle papá pero el niño se rehusa moviendo su cabeza muchas veces en negación provocando así que Brad haga un puchero y me mire esperando que yo haga algo pero yo solo niego y le quito al niño quien pronto se duerme en mis brazos.

La casa que junto con Brad estamos arrendando no es la más grande pero es perfecta para nosotros tres, hace apenas dos semanas que nos mudamos y aún hay cajas regadas por la pereza que tenemos de desempacar, recuerdo cuando Brad me pidió vivir juntos, yo pensaba que era una broma.

Flashback

Hasta que por fin no nos interrumpen, de nuevo, no es que no lo hiciéramos antes esta semana han sido dos intentos fallidos pero dicen que la tercera es la vencida y pues así fue. Ahora aquí acostados, ambos desnudos mientras él me abraza por la cintura se siente tan cómodo. 

—Bonita. —Me llama, asiento para que continúe. —¿Qué dirías si te pido que nos vayamos a vivir juntos? —Pregunta. Abro los ojos los cuales había cerrado por cansancio y me separo rápidamente provocando que la sabana se caiga pero no me importa, no es como si ya no me hubiera visto.

—¿Qué? —Pregunto y río sin poder creerlo, debe ser una broma. Lo miro sonriendo pero él luce demasiado serio, y nervioso. —¿No es broma? —Pregunto sorprendida y él niega.

—Quiero poder despertar viendo tu cara y dormirme contigo al lado y saber que te puedo abrazar en cualquier momento, que podemos hacer cualquier cosa sin que Mick nos interrumpa o alguno de los chicos, que Stephen tenga su propio cuarto ahora que está creciendo. —Habla y me jala delicadamente del brazo quedando con mi pecho sobre el suyo, él acaricia mi cara de forma cariñosa y me mira sonriendo. —Quiero un hogar contigo, te quiero a ti conmigo todos los días. —Termina de decir y me da un corto beso dejándome en shock.

Me he quedado sin palabras, en serio. Lo único que hago es mirarlo fijamente recordando sus palabras, sus lindas y cursis palabras que me han logrado dejar sin habla. Él empieza a ponerse nervioso ante mi mirada y falta de respuesta, se nota porque la caricia a mi cara ahora es con mano temblorosa. 

—Aunque si piensas que es demasiado rápido puedo esperar. —Habla rápidamente mirando hacia a un lado. Joder Thalia responde, di algo, balbucea siquiera pero no lo hagas poner así por muy divertido y tierno que te parezca.

Lo beso.

—Acepto. —Susurro sobre sus labios, siento su sonrisa crecer y pronto me abraza por la cintura volviéndome a besar. Me separo y lo miro. —Tus padres me van a querer matar.  

Fin flashback

Al final si fue cierto, sus padres querían matarme y por eso se hizo esa cena, aún cuando ya pasó tiempo pero habíamos estado huyendo a esa cena o por lo menos yo solo no aceptaba y Brad le ponía excusas a su familia. Al final terminó siendo un asco, tal y como pensé.

—Bonita. —Me llama desde la cama mientras que yo me estoy quitando la ropa. Me tiro en ropa interior a su lado y lo miro esperando a que diga algo. —Me dijo papá. —Sonríe feliz y aún sin creérselo. Lo miro y simplemente no puedo quitarle esa felicidad, no puedo quitar ese brillo especial de sus ojos ni su sonrisa, no puedo hacerle eso, me volví una tonta sentimental.

Asiento sin saber que decir, quizás debo dejar que le siga diciendo así y que a mi me diga mamá, por ahora no creo tenga algo de malo pero si Brad y yo nos separamos eso no sería bueno para Stephen y eso es lo que no quiero, no quiero que él piense que Brad es su papá y luego Brad y yo terminemos y el pequeño sea el que sufra las consecuencias.

  —¿Qué tanto piensas amor? —Pregunta. Me siento sobre su cadera y el pone sus manos en la mía mirándome fijamente.

—¿Y si terminamos? —Pregunto preocupada por el pequeño aunque por su cara creo él lo ha tomado de otra forma. —No me refiero a que lo hagamos ahora. —Aclaro y él suelta el aire retenido. —No quiero que él te diga papá y luego, por ejemplo, en dos meses terminemos y él sufra. —Muerdo mi labio nerviosa mientras paso mis manos por su pecho haciendo figuras.

—Nunca terminaría contigo bobita. —Dice y levanto mi mirada.

—Las relaciones no son eternas Brad, al menos no todas y con el genio que tengo puede que te canses de mi.  

—Se que no todas las relaciones son eternas bonita pero si ambos queremos que funcione haremos de todo para que así sea, yo no planeo dejarte ni en dos meses ni en dos años y jamas me cansaría de ti, si puede que tengas un genio difícil pero así me gustaste, así me gustas. —Suena tan honesto y no titubea en ninguna palabra que ha hecho que sus palabras me lleguen a lo más profundo, maldito cursi. —Así que déjate de bobadas porque no te librarás nunca de mí y Stephen seguirá siendo mi hijo. —Sonríe con ternura y lleva sus manos a mi trasero apretándolo, yo ruedo los ojos. 

—Fuera manos. —Digo divertida subiendo sus manos a mis caderas, él hace un puchero. —Eres un cursi.

—Así me quieres. —Se encoge de hombros seguro de lo que ha dicho, no lo niego. —Ahora calla y besame, se que quieres.  —Cierra sus ojos y estira sus labios esperando por los míos, niego divertida y lo beso.

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NO PUEDO CREERLO

#1 EN NOVELA JUVENIL. GRACIASSS

En serio no se que decir, nunca esperé eso. Gracias a todos los que me leen.

Los amo♡

GRACIAS