Si nada nos salva de la
Muerte, al menos que el amor
Nos salve de la vida

NERUDA

1

Él dormía plácidamente, un aura de paz le envolvía. Era raro pues no se sentía así desde hace tiempo.

______ lo observaba desde hace rato, como su pecho subía y bajaba lentamente, sus labios entreabiertos y ese leve ronquido que se oía cada cierto tiempo. No podía ocultar lo feliz que se sentía de tenerlo de nuevo a su lado, sólo les faltaba una pequeña cosa para estar completos; Chuck. Ése niño se convirtió en su hermanito pequeño, lo quería tanto que actuaba como madre sobreprotectora.

Se levantó de la cama con cuidado de no despertarlo, fue por algo de ropa (aunque sea la interior) y se dirigió al baño. En un par de horas el sol se asomaria por el horizonte y tendrían que ir a buscar a su amigo Peter. Le dolía el corazón sólo de pensar que su amigo tenía el tiempo contado, no había forma de impedir la Llamarada y lejos estaban de encontrar una cura (inexistente) para ésa cosa.

Con el dinero de su tarjeta podría comprar algunas dosis de la Felicidad, pero cuando se terminen. ¿Qué? El día llegará y oficialmente Peter será un Crank.

Se apoyo en el lavabo, pensando en una solución. Daba golpecitos al borde con la yema de sus dedos, su mirada fija en el reflejo que tenía enfrente.

Un rostro delgado, pálido, con pómulos marcados gracias a la falta de carbohidratos.

-eres un desastre -se dijo a sí misma.

Lavo sus manos con la delgada barra de jabón que estaba a un lado de la llave de agua fría. Acuno las manos bajo el chorro del agua, al llenarse se llevó el agua al rostro, se sentía un poco relajada. Repitió la acción una y otra vez.

Mantuvo los ojos cerrados, no quería pensar en nada. Deseaba poder hacer desaparecer a todo CRUEL con un solo chasquido. Eran un dolor de cabeza.

Su cerebro no cooperaba, pues comenzó a reproducir lo que ocurrió horas atrás. Mordió su labio para retener una boba sonrisa.

No entendía como después de todo lo que pasó siempre terminaba volviendo con Thomas. Se iba para que él estuviera a salvo y regresó a su lado; se fue para no tener que matarlo y al final fue a buscarlo para salvarlo; arriesgó su vida para salvarlo de aquel disparó y ¿Qué pasó? Bueno, siguió viviendo.

No importa lo que hiciera; él siempre estaría ahí. 

Regreso a la cama. Al meterse de nuevo entre las sábanas un brazo la rodeo y la jalo hacia atrás.

-¿A dónde fuiste? -inquirió una voz ronca. Thomas se despertó al no verla a su lado.

-tan sólo fui al baño -acarició su mano.

-tardaste mucho -beso su hombro.

Dio vuelta para verlo a la cara. Tenía los ojos cerrados, al parecer seguía con sueño. Acaricio su cabello.

-no tarde ni cinco minutos -replicó sonriendo.

-parecieron diez -protestó.

Rio. Besó fugazmente sus labios. En ese momento deseo detener el tiempo y quedarse siempre ahí, la noche le pareció tan corta.

-La Rata menciono algo -dijo Thomas, después de varios minutos de silencio-. Dijo que a Peter no le queda mucho tiempo, que están cerca de la cura... Y también que... soy el candidato final.

El bello momento que pretendía permanecer en la memoria de ______ fue arruinado con esas cuatro últimas palabras. La ira de nuevo aumento en ella, todo ese tiempo Janson supo lo que estaba tramando. Creyó estar un paso adelante de él y, fue todo lo contrario, era él el que estaba un paso adelante.

Si acción de acariciar el cabello de Thomas se detuvo, su sonrisa desapareció.

-¿Qué tú qué? -pregunto incrédula. El esfuerzo que hizo fue en vano. 

-soy el candidato final. "Según" yo puedo hacer que terminen tantas pruebas y salvar a la humanidad -voltea los ojos.

-¡No le creas! ¡Ni siquiera pienses en volver! Es una mentira. -aseguró. Ese mes que estuvo ahí averiguo muchas cosas-. La cura no existe, y eso que quieres hacer con el candidato final es lo más horrible, creí que no podían ser peores -suspiro-, sin duda me equivoque.

-¿Qué quieren hacer? -indago curioso.

-piensan que la cura esta en el cerebro, ¡obviamente no hay nada! -espetó. El saber que su plan de una semana se echó a perder desde el principio la frustaba-. Thomas, si los dejas, te abrirán el cráneo y extirparan tu cerebro ¡para buscar una cura que no existe!

-no es para que te pongas así, _____, no tengo pensado volver, ¿Crees que sería tan idiota? Esos garlopos de la única forma que tendrán mi cerebro será muerto -asegura. Acuno su rostro entre sus manos, para tranquilizarla-. Princesa...

-¡Thomas, por Dios! -alejó sus manos en un movimiento rápido. Se deshizo de las sábanas y se puso de pie, caminando de un extremo a otro en la habitación-, de la forma en que llegues tendrán tu cerebro. A Janson le sirves de ambas formas. Ése garlopo miertero cara de poplus de Penitente sabía lo que estaba tramando.

-¿Qué tramabas? -preguntó confundido.

-me dejo a cargo de supervisar la fase tres de cada uno de ustedes, los reclutas estrellas; tú y Aris, eran los de, ¿Cómo decirlo?... -se dio de golpecitos en la barbilla, pensando en una forma de explicarse bien.

Thomas se sento a los pies de la cama, observando la caminar de un lado a otro. Si seguía así haría un pozo en el piso.

-eran los de mayor prestigio en ése aspecto. Supervisar sus fases era la prioridad. -explicó-. Cada vez que yo tenía que hacerlo me encargaba de que los resultados y Variables apuntaran a Aris. Y no hice un buen trabajo, pues Janson por lo visto lo sabía y ahora te quiere con de vuelta.

Las manos de _______ temblaban. La necesidad de golpear algo no desaparecían. En verdad tenía miedo de tener algún problema mental, ¿Qué sería de ella? No creía encontrar algún medicamento hoy en día, no con esas circunstancias.

Thomas se acercó, abrazandola por la espalda. Entrelazo sus manos y la rodeo por la cintura. Se dio cuenta de que lloraba; lloraba en silencio, lo único que la delató fue el sacudir de sus hombros y el sonido de su nariz al sorber.

-Princesa... -la llamó. La hizo girar para verla a la cara. Odiaba verla así, escuchar su voz quebrada le partía el corazón-. Hey, descuida que no volveremos a ése sitio. Ni tú, ni yo, ni nadie. Vamos a ir por Peter y le diremos a Jorge que nos lleve a otra ciudad, ¿está bien?

Algo que ella temía, su temor más grande era perder a sus seres queridos. Los habían separado una vez, mas ella sabía que estaban a salvo y lo seguirían estando. No obstante, eso podían cambiar en un chasquido, esta vez puede que no sepa si estarán bien o no. Aquel hombre de traje blanco era capaz de cualquier cosa, eso no tenía que dudarlo. Thomas la abrazo fuerte, sus ojos cristalinos le decían más cosas que su boca, necesitaba un abrazo y aunque no lo dijera sus ojos la delataban.

-todo estará bien. Escapamos y somos libres.

______ seguía con esa cuestión de si había algo malo en ella. Se lo preguntaría a Thomas, él no le mentiría.

Inhalo hondo. Con voz temblorosa le preguntó: -¿Crees que tengo algo malo? Algo así cómo una enfermedad.

Esperaba impaciente su respuesta. Necesitaba oír de sus labios una respuesta. Thomas tardo más de lo debido en contestar y eso la estaba desesperando, creyó que le mentiría o cambiaría de tema. Se apartó de él, la vio a los ojos esperando a lo diría.

-¿Por qué preguntas eso? -indago confundido.

-porque algo me dice que no estoy bien. Thomas, he matado a personas -puntualizo-, han sido tantas que no puedo recordarlas. ¡Y si soy una psicópata!

-no lo eres -aseguró.

-no estuviste allí cuando paso. Te aseguro que si hubieras visto mi cara o lo que hice, me habrías desconocido por completo -agregó. De nuevo brotaron lágrimas de sus ojos-. Thomas, yo... desde que me devolvieron mis recuerdos no he sido la misma; la ira se apodera de mi de un momento a otro, quiero matar a cuan se me ponga enfrente. Y la verdad eso no es normal.

Fue a sentarse en la orilla de la cama. La frustración la mataba, quería saber en verdad lo que tenía, ¿Estrés por traumático? ¿psicopatía? ¿O no tenía ninguna de las anteriores y esa era su actitud de verdad? Ser una asesina desquiciada no se escuchaba para nada bien. 

-es normal -afirmó. Se quedó a su lado y la acerco a su cuerpo abrazandola fuerte-. Yo me sentí igual cuando recibí aquella carta, quería matar a todos, era una bola de ira todos los días; me sentía como animal enjaulado. Te conozco tan bien y te aseguró, te afirmó que no eres una psicópata. Lo que tienes es mucho coraje contra CRUEL.

-hay una oscuridad en mi que desconozco.

-al igual que en todos nosotros -acarició su mejilla. Lo que más deseaba era hacerla sentir bien y ya estaba perdiendo ideas y palabras, no sabía cómo hacerla entender; era terca, pero no recordaba que lo fuera tanto-. ______ te aseguró que no hay nada malo contigo, y sabes por qué lo sé. 

Levantó su cabeza, limpio todo rastro de lágrimas de sus mejillas y espero por la respuesta que Thomas tenía por darle, puede que tal vez eso la hiciese cambiar de parecer con lo de su "enfermedad".

-cuando vimos a Gally no te le echaste encima para matarlo. Él te disparó e intento matarte en muchas ocasiones atrás en el Laberinto. -destacó. Su tono de voz era dulce, la trataba como si de una pequeña niña se tratara.

-es que no tiene la culpa de nada; CRUEL lo manipuló todas esas veces, al igual que te manipularon a ti en casa de Hans -argumento.

-así es. Si fueras una psicópata lo habrías matado hasta con la perilla de la puerta. Sé que lo puedes hacer. Créeme, _______, no tienes nada; y si así fuera me tienes a mí. Estaré a tu lado siempre, estamos juntos en esto no lo olvides.

Asintió. No la convenció al cien por cien, con que él se quede tranquilo actuaría como que si lo hizo.

Volvieron a acostarse. Esta vez de cucharita. Máximo les quedaba cuarto de hora para que los demás fuesen y tocarán la puerta, eso sería suficiente para recuperar energía, pues horas atrás lo habían dado todo en esa cama.

A las siete en punto Newt se encontraba tocando su puerta. Sus golpes no eran para nada sutiles, sin duda tan bien despertaron a los vecinos de habitación y mas de uno salió a ver de donde provenía semejante ruido, claro, para nada contentos de que hayan interrumpido sus siestas.

-¡Thomas! ¡abre la jodida puerta! -demandó.

-viejo, relajate. Se deben de estar bañando... juntos -dijo Minho. Newt lo miro mal y continuó con sus insistentes golpes.

-Minho, deja de echarle leña al fuego -sugirió Brenda.

-que alguien abrá por favor -suplicó Jorge, harto de ver a Newt-. Compadre, no fue tu idea que ellos pasarán la noche juntos, no te quejes de las consecuencias.

-los deje aquí para que arreglarán el jodido mal entendido, ¡el mal entendido! -recalcó. Por su mente no dejaban de aparecer ideas de lo que esos dos pudieron hacer en ése momento-. Si tocó a mi hermanita, voy a matarlo.

Su cara de pocos amigos dejaba en claro que no bromeaba. Una _____ no tan gruñona abrió la puerta, su cara no dejaba ver que estaba molesta por la insistencia de su hermano; al contrario, una amable sonrisa estaba pintada en su rostro. Los cuatro al otro lado de la puerta se miraron entre sí.

-¿no se supone que llegarían en un rato más? -miro su reloj. No creía que el tiempo había pasado tan rápido.

-yo hago las preguntas señoritas - dijo Newt molesto-. ¿Por qué tardaste tanto en abrir? ¿qué hacían? ¿dónde está Thomas?

-Newt, estaba bañándome. Thomas estaba esperando su turno, tranquilo -lo tomó de los hombros, sacudiendolo. Le causaba gracia la reacción de su hermano.

-¿esperaba su turno? ¿para qué?

-para bañarse obvio -señaló.

-te apuesto a que hicieron más que bañarse -susurro Minho hacia Jorge.

Newt los miro mal. Ambos trataban de contener las carcajadas. ______ se apartó de la puerta y se dirigió a terminar de ponerse sus botas. Brenda se apoyo en la pared con los brazos cruzados, cuando la miró ella levanto una ceja con burla, ______ apoyo su dedo índice en sus labios y sonrió traviesa. Brenda rio entre dientes.

-no respondiste todas mis preguntas.

-¿Hay más? -suspiro con pesadez-hermanito, fue tu idea que él se quedará aquí. 

-¡Se lo dije! -destacó Jorge.

-responde, ¿Qué hacían tu y Thomas que tardaron tanto en abrir? Yo no me trago eso de que: esperaba su turno para bañarse -imitó su voz y gestos.

-pues...

(En su mente)

Pensó en lo que ocurrió minutos atrás. Tenía que pensar bien que respondería y sonar convincente. No se le ocurría una forma de decirlo sin que su hermano pensará mal.

-hey, ¿tan tarde es? -Thomas se unió a la reunión. Salió del baño recién bañado y vestido.

-Tommy, ¿qué hacían mi hermana y tú que tardaron en abrir? - lo interrogó esta vez a él. 

-nada en realidad. Yo me cepillaba los dientes mientras ella se bañaba, no escuché nada por el ruido de la regadera sino te habría ido abrir. -respondió sincero.

______ quedó sorprendida por su forma de mentir tan natural. En parte no fue mentira, sí se estaba cepillando los dientes mientras ella s bañaba, pero de ahí una cosa llevo a la otra y el sonido de la regadera (y otras cosas) no les permitió oír el alboroto que causaba Newt.

Resignado, Newt dio por terminada la conversación y se fueron del hotel. _____ antes de seguirlos miro a Thomas y sonrió coqueta.