noche compartida.

❝Sé que no puedo encontrar
a nadie tan bueno como tú.
Necesito que te quedes.❞

──stay (the kid laroi ft justin b.)

Felix apretaba las correas de su mochila con fuerza, al parecer el clima parecía no ser tan colaborador con él en esa noche. Incluso cada que exhalaba, el caliente vaho salía de entre sus finos labios como una característica mancha. Estaba a casi nada de maldecir a Chris, hasta que afortunado sintió dos manos cubrirle la vista. No fue necesario asustarse siquiera cuando el aroma del alfa lo rodeó por completo.

── ¿Qué dije de no ponerte bonito? ── le susurró al oído en tono divertido. Felix negó con la cabeza y le dio un leve empujón con el codo, girando sobre sus talones para ser sujetado de la cintura y ser él quien rodeara el cuello de Chris con sus brazos.

── Alfa tonto, tardaste mucho. ── ambos sonrieron bobamente, dándose un beso esquimal para finalizar con un ósculo más completo, ambas texturas encajando en medio de un movimiento acompasado. Uno que Felix nunca había tenido antes y que ahora le erizaba la piel.

Cuando el chasquido resonó, Chris le sonrió suavemente a un sonrojado Felix de ojitos brillantes.

── Lo siento, es que... No pude evitarlo.

El omega relamió sus labios, con un cosquilleo agradable que le hizo suspirar.

── En serio, no volverá a pasar, no quise-

── Hey, está bien. ── acunó el rostro cincelado de Chris y hicieron contacto visual, demostrando su sinceridad. ── Siendo honesto, es la primera vez que tuve un beso así p-pero, me gustó mucho.

> ¡Yah~! No pongas esa cara. ── prosiguió con una pequeña sonrisa que causó un dulce estrago en el alfa. ── Es más, quiero que lo vuelvas a hacer. Luces más guapo de lo habitual.

Chris no lo resistió, y luego de soltar una risita, estampó sus gruesos belfos en los suaves labios adversos. Felix inhaló la colonia natural del alfa y sus delgadas manos tomaron posesión nuevamente del cuello de Chris. Bastaron unos besitos más luego de ello para que al fin pudieran tomar rumbo al tan esperado lugar por Felix.

Jamás había sentido una manifestación tan libre como esa. Siendo casi las diez de la noche, con el gélido viento abriendo paso en la concurrida ciudad y abrazándose al torso del alfa con la misma confianza que tenía en sus sentimientos.

Las luces parecían titilar borrosamente a los costados, como estrellas en la Vía Láctea. Sin embargo, se sentía el centro del universo en medio de la carretera que poco a poco iba volviéndose solitaria. Los latidos de su pecho golpeteaban, demostrando la emoción del momento al recostar su mejilla en la espalda del alfa y sentir la fragancia en sus prendas.

Su lugar seguro era a donde sea que vaya con Felix, siempre.

Cuando el tiempo no pudo ser calculado y en menos de lo que esperó, la motocicleta ya estaba frenando en la entrada de lo que parecía un enorme y oscuro túnel, la vista por fuera podría parecer terrorífica, pero adentro la situación era muy distinta.

── Por aquí, bonito. ── le dijo Chris para entrelazar ambas manos, transmitiendo el apoyo tácito que necesitaba para seguirle los pasos.

A los ojos de un omega como Felix, todo parecía subjetivamente nuevo e irreal. Un ambiente totalmente fuera de lo que alguna vez pensó.

La oscuridad iba acabando cuando notaron las luces que colgaban de distintas partes estratégicas de las paredes y el curveado techo. La música resonaba animadamente y un gran grupo de personas se mantenían en movimiento. Unos se enfrentaban en medio con distintos pasos, algunos tomaban de aquello vasos gigantes o botellas medianas mientras charlaban. Y otros hacían pruebas de fuerza o flexionaban los brazos en un alto pasamanos de acero.

── ¡Eh, hasta que por fin te apareces! ── una voz que Felix no sabía de dónde apareció, le hizo frente a Chris. Era un omega, con más perforaciones en el rostro y el cabello teñido de púrpura, pero con una sonrisa amplia y amigable. ── ¡Lo sentí como siglos, hermano!

El omega sabía que no debía preocuparse tanto. Sin embargo, de igual manera se apegó más al cuerpo de Chris, prácticamente escondiendo su rostro a la altura del hombro ajeno. Él no era precisamente bueno en iniciar una conversación, sobre todo en una zona fuera de su confort.

── ¡Oh! ¿Quién es esta cosita adorable?

── Han... ── le advirtió el alfa, intentando que no se acercara tanto.

── ¿Qué? ¡Es la primera vez que traes a alguien! ── exclamó entre conmocionado y sorprendido. ── ¡Chicos, Chris tiene compañía!

── Mierda, ¿por qué eres tan jodidamente escandaloso? ── bufó por lo bajo. Chris no quería que abrumaran a su chico, pero la situación podría salirse de sus manos si no le daba un pare. Antes de poder regañar más fuerte a San, escuchó la suave risita de Felix al estar tan cerca suyo. ── ¿Pasó algo?

── Uhm... Él me recuerda a Jisung, creo que se llevarían muy bien.

Chris lo pensó unos segundos, y terminó contagiándose de la sonrisa del rubio al recordar al otro escurridizo omega. Tal vez algún día todos podían juntarse.

── ¡¿Cómo que no vienes solo?! ── una tras otro, fueron preguntando. Pero las sonrisas y aspectos en cada uno hicieron a Felix relajarse poco a poco, reforzando el agarre en la mano de Chris y sonriendo en lo que se presentaba adecuadamente.

── Con todo respeto, eres muy lindo, Felix-ah. ── dijo Wooyoung, otro alfa pelinegro. ── No sé qué de bueno le viste a ese idiota. ── con su broma, todos carcajearon. Incluso Felix que sentía sus mejillas calientes.

── Este idiota te golpeará si no te callas. ── respondió divertido.

Realmente no fue tan malo como lo pensó. Los tres omegas del grupo lo integraron fácilmente al tema de conversación, halagando lo tersa que lucía su piel y el lindo maquillaje, y Felix elogiando sus pierciengs y lo bien que lucían aquellas prendas.

Chris siempre estaba viéndolo cada ciertos minutos, procurando que se sintiera cómodo mientras el acordaba el tema de la siguiente carrera y conversaba fluidamente luego de todos esos días en los que estuvo ausente, todo por estudiar y sacar un buen promedio.

Tsk, probablemente su yo del pasado estaría burlándose si viera al yo del presente en el que se había convertido.

── Te preguntaría si en verdad vas en serio con él, pero creo que está muy claro. ── comentó Mingi, casualmente. ── Es decir, jamás habías traído a alguien antes.

── Solo se iba de aquí con algún o alguna omega a vaya-saber-la-Diosa-dónde. ── agregó Yunho, riendo a la par que Wooyoung.

── Bueno, esas andanzas quedaron atrás. ── respondió Chris, tomando brevemente de su lata de cerveza. ── Mierda, no me miren como si tuvieran un tercer ojo en la frente.

── ¡Esto parece inaudito!

── ¿En serio estás bien?

── ¿Es Christopher Bang con quien estamos hablando?

── Ah, tan idiotas como siempre...

Seo le dio un codazo amistoso. ── Sabes que igual cuentas con nosotros.

── Sí, solo no nos dejes tan de lado por andar de novio.

── Así que Chris ya está reservado. ── se unió la presencia de dos omegas y un beta. Interrumpiendo la convivencia amena con una sonrisa fingida.

── ¿Qué es lo que buscas, Jinhwan? ── gruñó San con exasperación.

── ¿Yo? Nada... Simplemente quería comprobar que tan cierto era el nuevo chisme.

── No es ningún chisme. ── replicó esta vez Jongho. ── Así que si querías buscar a alguien de nuestro grupo para pasar la noche y tu calentura, pues lamento decirte que nadie está interesado.

── Eso no decía Chris, querido.

"Chris"

Los omegas notaron el cambio drástico en las facciones del más bajito, por lo que intentaron alejar a ese otro grupo de la zona que a ellos les correspondía.

── Está bien, yo mismo me iré. Solo díganle a Chris que lo vine a buscar para, uhm, él ya lo sabe. ── con su horroroso tono sugerente y un chasquido de sus dedos, los otros dos le siguieron en su camino de ida.

── Ahg, no le hagas caso a ese estúpido, Lix. ── dijo Hongjoong de inmediato. ── Él ama sacar de sus casillas a cualquiera.

── Sí, sí... Es alguien muy-

── No se preocupen. ── cortó la pobre excusa que iban a seguir dándole. ── Creo que es algo normal, ¿no? Chris y yo...

"No teníamos nada"

"¿Pero ahora sí? Ni siquiera somos novios..."

── ¿Seguro que todo va bien?

── Sí, solo... Uh, iré a tomar un poco de aire fresco.

── Podemos acompa-

── No, gracias. ── le sonrió suave, intentando convencerles. ── Creo que ya han hecho mucho por mí, no tardaré.

Diciendo eso, agradeció que ninguno insistiera. Felix quería dar un respiro hondo y sacar esos pensamientos negativos de su cabeza. Se supone que estaba siendo una buena noche. Tenía que relajarse y no exagerar. Ellos acordaron ir a su propio ritmo, a comprobar si estaba funcionando.

── No hay ningún problema, no agrandes algo que no tiene sentido. ── murmuró para sí mismo, cruzado de brazos mientras observaba el oscuro cielo.

── Hey, bonito.

Y Felix cerró los ojos con algo de fuerza. Quería unos minutos más para vaciar lo ridículo que estaba siendo.

── ¿Por qué saliste tan de pronto? ── siguió hablando hasta ponerse al lado del omega, pudiendo exhalar con calma al fin. ── Me llevé un puto susto.

── No hay de qué preocuparse, ¿ves? Estoy bien.

── Pudo haberte pasado algo, no conoces a todos los de aquí.

── Por lo visto tu sí.

── ¿Eh? ── frunció el ceño, no comprendiendo el murmullo bajo.

── Nada, solo quería aire fresco, estaba empezando a sofocarme.

── Te hubiera acompañado. ── dijo más lento, abrazando al omega por la cintura y acomodando su mandíbula en el estrecho hombro. ── Te noto algo tenso, bonito. ¿Realmente no te fastidiaron? ¿Pasó algo que te incomodó? ── al notar el silencio, siguió: ── Ahg, sabía que no era buena idea, pero yo he estado alrededor de esto y lamento que no te guste. Debes creer ahora que soy una mierda de alfa y que no te merezco. Y tal vez no lo entienda del todo, pero estás en tu dere-

Sus palabras murieron cuando Felix se alejó del abrazo, dejándolo algo estupefacto.

Sin embargo, ese agrio asombro pasó a segundo plano cuando sintió los delgados brazos rodearle, una suave fuerza llena de sensaciones.

Chris le correspondió tan rápido como pudo, dejándole suaves caricias en la menuda espalda y soltando un par de feromonas que lograran aminorar la pesadez de la atmósfera entre ellos.

── P-perdón, yo soy el tonto. No digas esas cosas, Channie... ── bisbiseó cerca, rozando su cálido aliento y respiración en la curvatura del cuello ajeno. ── Es absurdo que me enoje.

── ¿Hice algo que te desagradó? ── lentamente lo separó para tomarle de ambas mejillas. ── Solo dímelo y lo remediaré.

── No, no hay nada malo contigo. So-solo, yo... ── dio un suspiro, intentando no llorar al sentirse un tonto que exageraba la situación. ── Bueno, no- ya no importa.

── ¿Por qué no debería de importarme? ── cuestionó con voz dócil, algo intrigado. ── Mira, yo soy igual de novato que tú en estos tema de... Ah, de e-estar enamorado. ── carraspeó con un pequeño ápice timidez. ── Y.... uhm, siento que si no me dices al menos algo, no podré ayudarte. Estabas muy emocionado por llegar aquí, pero ahora no sé qué es lo que pasa.

Como si fuera lo único que su cabeza pudo comprender, inquirió algo escéptico:── ¿Estás enamorado de mí?

Las mejillas del alfa se ruborizaron aun si él quiso evitarlo a toda costa y, con una sonrisa avergonzada, respondió: ── ¿Cómo no podría estarlo?

> Siendo sincero, ahora mismo mis manos quieren temblar ante los nervios, y jamás había sentido algo como esto... Creo que tú eres la razón, eres la razón por la que estoy creyendo en algo tan cursi como el amor.

Una lágrima se deslizó por la mejilla de Felix al sentirse conmovido. Chris se encargó de limpiarla para finalmente besarlo, transmitiendo ahí el resto de sus emociones.

── ¡Eh, no coman delante de los pobres! ── gritó uno que otro del grupo, haciendo que Felix sintiera algo de bochorno al alejarse de la boca del alfa.

── Lamento interrumpir su luna de miel, pero la carrera empieza dentro de poco. ── avisó Yunho, estirando el brazo para que vieran como los demás de otros bandos salían para tomar su respectiva motocicleta.

── Ah, cierto. Los alcanzo en unos segundos.

── Mucha suerte, aunque creo que no la necesitas. ── comentó más tranquilo, con una sonrisa sincera y satisfecha.

── ¿Un beso de la suerte?

── Un beso de la suerte. ── afirmó, estampando sus labios con los más gruesos en un tacto casto.

Cuando todos fueron hacia la pista desolada en donde se llevaría acabo la competencia. Felix se sintió mas a gusto con los demás omegas que alentaban a los alfas del grupo, congenió nuevamente y ya se encontraban sonriendo y gritando. Sin poder retenerlo, también estaba algo anonadado y con el pánico pulsando su organismo, Chris hacía acrobacias que le parecían muy peligrosas y lo tenían con el corazón en la boca.

Cuando lo perdió nuevamente de vista, se dio cuenta que faltaba solo una vuelta más. Juntó las palmas de sus manos para esperar el resultado, y entonces sucedió, el vigoroso rugido de la motocicleta de Chris marcó territorio y fue el primero en cruzar la meta. Siendo seguido luego por Wooyoung y otros cuatro alfas más.

Felix no podía creer que alguien luciera tan guapo mientras se frenaba la moto y se secaba lentamente el casco. Ambos se sonrieron, y el omega apresuró sus pasos y lo felicitó en medio de un abrazo.

Muchos quedaron más que sorprendidos ante la escena, y otros omegas como Jinhwan gruñeron con disconformidad.

Era un hecho, nadie podía compararse al omega que Chris sujetaba por la cintura. Nadie fue más valioso que Felix en ese momento, estando entre los brazos del alfa. Ni siquiera el acostón de una noche o el "te llamo luego" después del acto.

Jinhwan lo sabía y le jodía entenderlo, pero antes de meter cizaña a la feliz pareja que conversaba animadamente con su grupo, el fuerte sonido de las sirenas alarmaron a todos. Dos camionetas policiales se estaban acercando.

── ¡Por la puta, salgan de aquí! ── vociferaron los líderes, cada uno emprendiendo huida.

Felix volvió a sentir pánico. Sin embargo, Chris le tomó de la mano para hacerlo concentrarse. Tan rápido como tomaron asiento, el alfa arrancó con máxima aceleración, alejándose del alboroto y emprendiendo camino hacia la casa del alfa.

Tal vez los nervios no se iban del todo.

── Eso estuvo muy cerca. ── comentó Felix entre risitas y cepillándose los dientes. Parecía que la adrenalina de ese momento aún estaba hormigueando en su piel.

── No sabes todas las veces que he pasado por eso. ── respondió mientras dejaba su enjuague bucal a un lado. ── Aunque creo que son unos idiotas por poner semejante chillido y ayudarnos a escapar.

Ambos ya estaban con sus pijamas, o lo que se podía decir de aquello. Chris dormía sin camiseta y Felix se regañó así mismo por no traer unos pantalones holgados en vez de unos shorts.

La casa Park estaba habitada solamente por ellos dos. Los padres de Chris habían salido por la tarde a un viaje de visita y posiblemente no volverían hasta el domingo por la mañana. Chris se había negado a ir por esta vez debido al plan que ya había tenido con Felix.

── Entonces, ¿estamos bien? ── la pregunta del alfa captó su atención.

Felix suspiró hondamente y decidido, se sentó a ahorcajadas en el regazo de Chris. ── Sí... Lamento mi actitud, no fue tu culpa.

── Entiendo si no quieres expandir el tema, pero si fue el comentario estúpido de un terciario sin gracia, ignóralo. Apuesto a que tenían envidia de ver a alguien mucho más precioso.

Sonriendo como un tonto, el omega repartió varios besos por su rostro hasta tomar la valentía suficiente y preguntar: ── Chris-ah, ¿quieres ser mi novio?

La frase interrogativa fue tan inesperada que el alfa boqueó por unos microsegundos, parpadeando un poco para enfocarse en el tema y en el muy sonrojado rostro de Felix.

── Joder. ¿No tendría que pedírtelo yo con alguna cosa cursi?

── ¿Quién dice que un omega no puede hacerlo? ── refunfuñó de pronto, su puchero siendo besado al instante.

── Yo sé que eres capaz de muchas cosas. Como la vez que me pateaste en las bolas y casi quedo sin oxígeno. ── Felix le dio un golpe en el hombro ante el recuerdo, pero Chris solo rio. ── Está bien, acepto ser el afortunado novio de Lee Felix aunque yo haya querido hacer la pregunta.

── Pudiste hacerlo hace mucho, bobo.

── No encontraba la forma adecuada. Soy tremendo ignorante para estas cosas, lo admito. Vi muchos vídeos en cómo hacían regalos o canciones, tenían demasiada creatividad.

── Yo soy feliz con cualquier cosa que hubiera venido de ti.

── Prometo hacer algo pronto.

Y con una reluciente sonrisa por parte del omega, ambos unieron sus bocas para un largo beso que se tornaba profundo. Explorando la cavidad bucal ajena. Los largos dedos de Felix enredándose en los cabellos sedosos del alfa. Chris sujetando la pequeña cintura del omega, adentrando cuidadosamente sus palmas por la tersa piel escondida bajo la remera.

Chasquidos y jadeos suaves. Probablemente se pasaron toda la noche en medio de besos y toques cálidos. Confiando en el otro pero sin dar el siguiente paso, todavía no.

El despertar al lado de alguien más nunca fue más increíble que hasta ese momento. Chris compartió camas por unas horas en la noche con desconocidos. Sin embargo, nadie especial -románticamente hablando- había entrado a su habitación. No pudo creer que solo hubo abrazos, besos y charlas risueñas; cuando eso era lo último que podría hacer meses atrás.

Su mundo estaba de cabeza, pero estaba contento con ello. Toda la mañana se la pasaron jugando y preparando el desayuno. Disfrutaron todo lo posible en medio de risas y quejas, miradas dulces y pucheros besados. La pasaron bien hasta que llegó la hora en que Felix tuvo que volver a su casa. Y a insistencia de éste mismo, Chris lo llevó en su motocicleta.

El alfa no le creía buena idea, puesto que temía que alguno de los padres pudieran verlo y regañar a Felix. Muchas veces le dijo que lo mejor era que lo dejara en casa de Jisung, para que así pueda llegar sin problema de levantar sospechas.

Pero una vez más, Felix fue testarudo que con su carita de adorable felino, convenció a Chris.

── ¡Entra, Channie, no seas aburrido!

── Oh, no, para nada. ── sacudió su cabellera luego de colgar el casco en el manubrio. ── En verdad, bonito, creo que ya debería irme.

── No te preocupes, Minie. A pesar de que es sábado, mis padres van temprano a la oficina. ¡Vamos!

Chris fue jaloneado por Felix hasta llegar a la puerta principal, con su mano libre buscó las llaves que estaban metidas en su mochila y le sonrió despreocupadamente.

── ¿Ves? No entiendo cuándo fue que te volviste histérico.

── No es cualquier tema, Gigi. ── le respondió, examinando las paredes llenas de fotografías familiares. ── El tema de conocer a tus padres debe salir bien.

Felix arrugó su nariz al sonreír, contento por el apodo y las palabras de Chris sobre algo tan serio como llevarse bien con sus progenitores. Tirando la mochila, se abrazó a la cintura del alfa, frotando cariñosamente su mejilla con la adversa.

── Saldrá de maravilla, no tienes porqué preocuparte.

── Yo creo que sí debería.

El omega abrió sus ojos desmesuradamente, saliendo de su burbuja con un fuerte golpe a su realidad. Alejándose del cuerpo de Chris como si quemara completamente.

No. Podía. Ser. Cierto.

── Llamé a la señora Jung temprano para ver cómo estabas, puesto a que no contestabas mis llamadas. ¿Y sabes de qué me enteré? ── la mirada de su papá era dura, el regaño y molestia en su voz podía sentirse. ── Resulta que mi hijo no tuvo ningún trabajo que hacer, y que para el colmo, no se encontraba en casa de su mejor amigo. Ahora te apareces como si nada y con este alfa aquí. ¿Qué es lo que tienes que decirme, Lee Felix?

El momento no tenía escapatoria. El omega supo que la había jodido y en grande.

Muchas gracias por leer<3

Por cierto gente, las actualizaciones serán lentas, pues la historia original se encuentra en emisión, lo siento :c

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