intentando ocultarlo.
── T-tú, tú dijiste que... ──el frágil murmullo de Hyunjin murió, sus ojos rojizos y llenos de decepción ya no soportaban ver lo que sucedió delante suyo.
── ¡Hyunjin, no, espera! ──fue el grito del omega al ver que este huía apresuradamente. Decidiendo ir atrás él por alguna extraña razón, su pecho dolía al verlo tan roto una vez más.
Sin embargo, antes de poder dar dos pasos adelante, su muñeca fue sujetada por la mano de Chris.
── ¿Qué haces? ──le reprochó con cierto enojo──. Suéltame. Esto también fue tu culpa.
── ¿De qué rayos hablas? ──la sensación revoltosa pero agradable en su pecho fue cambiando──. No es culpa de nadie.
── ¿Acaso no fuiste tú quien me prohibió acercarme a Hyunjin? ──su ceño se frunció, empujándolo para poder liberarse del agarre.
── No digas jodidas mierdas, Felix. Así no fueron las cosas.
── ¿En serio? ¿No fue así? ──inquirió sarcástico──. ¿No es esta otra de tus formas de creerte más que otros alfas? De alzar tu ego y burlarte de tus conquistas luego.
── ¡Él es parte de mi familia! Y si aun así no lo fuera, yo no quiero agregarte a mi dizque estúpida "lista de conquistas".
── ¡Pues no te creo nada! ¡¿Por qué me besaste?! No, mejor no digas nada.
Felix se sorprendió que el alfa aún no se saliera de sus casillas siendo tan impulsivo como lo conocía. No obstante, ignoró lo que fuera a responderle y caminó con la esperanza de encontrar a su menor. Chris fue tras él por igual.
Pasaron por toda la sala, a través del bullicio y las personas disfrutando la fiesta. El omega gritó vanamente, queriendo ver a Hyunjin por algún lado cuando claramente la situación estaba más que perdida.
── Ni se te ocurra avanzar. ──le advirtió Chris al notar las intenciones del más pequeño.
── No te pedí permiso.
Replicó, evitando gruñir cuando notó que gotas empezaron a caer en su cabello. Genial, nada podía empeorar. La lluvia estaba a empezando a cubrir toda la ciudad.
── Ya esté, te llevaré a tu casa.
── ¿Disculpa? Yo no pienso moverme de acá. ──se cruzó de brazos.
── No estoy de humor para aguantar tus berrinches.
── ¿Y quién dijo que te quedes aquí? Llamará a mi papá, vuelve adentro.
── ¿Tu si puedes darme órdenes?
── ¡Ese no es el punto!
── El punto es que no pienso dejarte aquí ante tantos peligros. ──se sacó la chaqueta negra de cuero y la puso sobre los hombros a pesar de sus quejas.
── Tampoco necesito de tus cosas.
── No te pregunté.
Respondió tajante, desaparcando su motocicleta para dejarla a vista del omega.
── Creo haberte dicho que llamaré a mi papá. ──recalcó con fastidio──. No pienso subirme a esa cosa mata personas.
El alfa apretó sus labios para no soltar un par de carcajadas, Felix tenía un gran toque especial que lo hacía ver tierno aun estando o pareciendo enojado, en especial cuando decía ese tipo de cosas.
Que no se note lo perdido que se encontraba Chris por él.
── Hey, no hables así de mi bebé, te está escuchando.
Siguió el juego, fingiendo tapar los manubrios de la motocicleta. Por poco ganándose una sonrisita por parte del rubio.
── Lo conseguí, sonreíste.
── ¡No es cierto!
Chris se apoyó ligeramente en el vehículo y arqueó una ceja, las gotas de agua aún eran ligeras.
── Oye ──mordió el interior de su mejilla, pensando bien lo que iba a decir──, uh, toma tu chaqueta. Puedes enfermarte y tampoco quisiera eso.
── Estoy bien, quiero que la tengas tú.
Nadie dijo nada luego de ello. La cabeza de Felix dando mil vueltas debido a los pensamientos que le abordaban y que para nada tenían que ver con alguna gota de alcohol.
── Anda, sube. Prometo dejarte en la puerta de tu casa antes de que la lluvia nos bañe por completo.
Lo dijo en tono suave, uno en el que Felix no se había permitido oír antes. En cierta parte, le daba desconfianza el montar una de esas cosas mata personas como solía nombrarlas; mas por el lado adverso, su lobo estaba calmado, sin dar señales de posible peligro ante Chris como en muchas otras ocasiones sintió con otros alfas.
── Creo que prefieres bañarte. ¿Por qué no vas quitándote la ropa?
── ¡Eres un idiota! ──exclamó con las mejillas ruborizadas.
── Auch, nunca me habían dicho algo tan feo. ──dramatizó con sorna──. Rompiste mi corazón.
── Me sorprende todas las tonterías que crea tu cerebro y salen por tu boca.
── Ese estuvo mejor.
── ¡Agh! ──miró al cielo buscando clemencia, para luego suspirar y encararlo──. Estuve a casi nada de aceptar tu cordial invitación. ¿Sabes?
── ¿Cuál? ¿La de quitarte la ropa?
El rostro de Felix hizo una mueca horrorizada, a punto de estallar en bochorno y enojo. La risa de Chris fue fuerte, incluso más cuando las manos del omega golpearon su fornido pecho.
── Ya, de acuerdo. ──la sonrisa juguetona no se desvanecía de su rostro──. Me quedó claro a qué te referías.
── Sigues siendo tonto. ──murmuró, sus labios haciendo un puchero chiquito que Chris deseaba besar tan mal.
Bueno, quizás su fuerza de voluntad tampoco era inmensa. Por lo que plantó un casto pico en los belfos rosados, creando un chasquido al separarse.
── ¡Hey!
── Fue por los golpes, no puedo ni respirar bien. ──se llevó la mano al pecho, mostrando un supuesto gesto de dolor.
El omega no le creyó en lo absoluto. ¿Quién se creía él para besarlo así como si nada?
Chris se le quedó viendo por un largo rato, quería decirle tantas cosas pero no tenía ni la más mínima idea de cómo empezar. Era complicado, se sentía estúpido. De nuevo el silencio sepulcral lo ponía tenso y nervioso. ¿Cuándo se había puesto así en su jodida y monótona vida?
── Felix, yo...
── ¡Acepto! ──le interrumpió, generando duda en el alfa.
── ¿Eh?
── El que me lleves a casa, ya es muy tarde para mí y de igual forma estoy completamente mojado.
── Oh. Entiendo.
Felix, aunque no quisiera admitirlo, sabía la manera en las que empezaban a sacar conversaciones en las que él se veía en la necesidad de negarles una oportunidad. Quizás estaba creando ideas alocadas en su cabeza o estaba siendo demasiado paranoico, pero sintió como si aquello viniera al momento y quiso dar un giro a la situación, aun si lo que imaginaba no fuera cierto. Mientras más lejos de Bang, mejor.
No había discusión.
Para cuando enfocó su mirada, el alfa ya se encontraba en su posición, esperando por él.
── Colócate el casco.
── ¿Qué? ¿Y tú?
── Tengo experiencia en esto, Felix. Solo póntelo.
La orden fue acatada, sus manos nunca se sintieron tan inquietas como ahora.
── Si no intentas por lo menos sujetarte de mí, vas a caerte.
El omega respiró profundo. No sabiendo si estaba asustado e intranquilo por la nueva experiencia de viajar en una motocicleta o por tener el cuerpo de Chris tan, pero tan cerca. No era como las otras veces en medio de una pelea, únicamente eran ellos.
Chris tomó las manos de Felix, haciendo que le rodeara el torso con lentitud para no ponerlo incómodo de alguna forma.
── Solamente así.
Los dedos del omega se entrelazaron entre sí con seguridad. Se adhirió más al cuerpo ajeno y ladeó su cabeza a un lado, confiando.
El castaño tragó grueso, reforzando el agarre de sus manos en el manubrio y esperando que Felix no escuchara lo rápido y vigoroso que latía su corazón.
Sí, ya pueden darlo por perdido.
La ventisca era gélida y las gotas chocaban contra su rostro. La fría sensación contra la piel de sus tatuados brazos expuestos era fuerte, pero lo soportaba si de eso se trataba mantener mejor a Felix. El trayecto fue ligero puesto que no había ningún tipo de congestión vehicular y de vez en cuando el omega le daba indicaciones para dar con su dirección. Realmente quiso que el tiempo siguiera alargándose, o que la circunstancia en las que pudiera tener a Felix entre sus brazos fuera diferente.
Cuando menos lo pensó, ya estaba estacionando su motocicleta. El rubio fue el primero en bajarse y sacarse el casco, tratando de cubrirse con lo chaqueta lo más que pudo. Ido en la forma en cómo el alfa se quitaba el agua de su cincelado rostro y llevaba su cabello hacia atrás, dejando su frente descubierta.
Por la Diosa Luna.
── Como lo prometí. Sano y salvo en tu casa, precioso.
Le guiñó el ojo, intentando lucir coqueto cuando en verdad moría por estrujarlo en un abrazo y varios besos. Se estaba convirtiendo en alguien que desconocía.
Felix algo cohibido por la imagen frente a él, solo atinó a agradecerle. Llevándose sin darse cuenta la chaqueta consigo, sacando una sonrisa en el más bajo. Chris sabía que si se lo proponía, la próxima despedida podría ser con un beso. Soñar no le costaba nada.
Con la idea latente, se puso el casco y emprendió rumbo hacia su vivienda. A decir verdad, no se esperaba por nada del mundo ver a Hyunjin sentado en el suelo de la entrada con las piernas flexionadas y pegadas a su pecho mientras la lluvia seguía cayendo sobre él.
── Me gustaría escucharte.
Espero que les gusteee <3
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