Eliana se encontraba en el departamento de Luisina, está la había invitado luego de la discusión con Ale. No se sentía bien por lo que había sucedido, sabía perfectamente que fue muy cruel.

-No entiendo porque reaccionaste así, además de que, si es molesto, tanto para Johann como para Ale. ¿Realmente ese es el concepto que tienes de ellos?

-No, claro que no

-¿Y entonces por qué le dijiste eso?

-Estaba molesta...quizás porque siempre me gusto la atención que Johann me daba, sabia a los brazos de quien correr cuando pasaba algo con Richard. Soy una egoísta, lo sé.

-Pues sí, lo eres. Debes pedirle perdón, es una buena chica, yo no me arrepiento de haberle respondido esa tarde. Me recuerda a Meryl.

-A mí también, pero supongo que lo tuyo es más fuerte pues es tu prima de quien hablamos.

-Siento que en Ale encuentro una parte de Meryl. Ale me hace sentir completamente nuevamente, no quiero perder eso.

-Pues yo tampoco quiero perderla.

-Entonces ya sabes que hacer.

...

Ale se quedó esa tarde en el departamento de Ana. Quedo dormida, no se dio cuenta cuando despertó que había dormido tanto, miro su celular, era la medianoche.

Escucha unas voces cuchichear en el salón. Con precaución de no hacer un solo sonido se acerca y puede escuchar claramente.

-Te contare toda la verdad, pero solo a ti porque eres mi prima ¿De acuerdo?

-De acuerdo.

-Yo nunca ame a Christopher

-Sí, eso me lo imagine, pero ¿Por qué estabas con él?

-Había visto a CNCO y su éxito, y los empecé a seguir, hasta que un dia me encuentro con la foto de Erick y Eliana en casa de sus familiares. Ahí decidí acercarme a ellos con la excusa de trabajar juntos. Chris es muy fácil y tú lo sabes bien.

-Si ni me lo digas.

-Bueno, fue fácil conquistarlo.

-¿Pero, que querías con todo aquello?

-Acercarme a Eliana...acercarme a mi hermana.

-Tu... ¿hermana?

-Sí, hermana. ¿Recuerdas cuando les conté como conocí a Hannah?

-Sí, lo recuerdo

-Bueno, esa familia con quien vi a mi padre era Eliana y su madre. Y jure desde ese día vengarme de ellos. Me dio tanta rabia verlos felices mientras yo dormía en la calle y no tenía a mi madre. Nueve años espere para poder comenzar con mi venganza y Christopher fue solo el primer paso para arruinarla poco a poco. Pero, es hora del golpe definitivo, por eso quiero que Alejandra la mate, quiero matarla como ella mato a mi madre y toda mi vida. Quiero que mi padre sufra tanto como yo sufrí.

Alejandra se hecho hacia atrás y decidió volver a la habitación en la que se supone, está durmiendo. Se quedó en posición fetal sobre la cama procesando todo lo que acababa de escuchar. Sabía que mañana lo debía hacer y por el tono de Ana no había forma de persuadirla de tan terrible acto.

Volvió a quedar dormida entre lágrimas. Mañana iba a hacer lo peor que una persona podría hacer, matar. Iba a volver a sentir sangre en sus manos, peor aún, sangre de alguien a quien aprecia y es inocente.

...

25 de febrero, el peor día de mi vida. Hoy debía acabar con la vida de Eliana para salvar la vida de 3 personas más. Acabo de acordar una reunión con ella, en su hotel.

¿Cómo lo haré? De la misma forma que lo hice con mi padre, la apuñalare en el estómago.

Alejandra cierra su cuaderno luego de escuchar el grito de llamada de Ana, se la escuchaba realmente molesta, más de lo habitual. Estaba ansiosa por acabar con Eliana, tenía un gran odio acumulado, pero ¿Por qué no lo hacia ella? Era la pregunta que le daba vueltas en la cabeza a Ale. ¿La respuesta? Mata dos pájaros de un tiro, mata a Eliana y destruye la vida de Alejandra.

- ¡Alejandra! Ya es hora.

La chica toma una última respiración y se dirige hacia el living.

Al llegar Ana la toma fuertemente del brazo y la arrastra hacia la salida gritándole un montón de incoherencias. Claramente, estaba más nerviosa de lo que aparentaba.

Para retrasar aún más su terrible trabajo tomo el tren, pues era de tomar un taxi para ir hacia el hotel o la casa de los chicos.

Parada tras parada su respiración se iba acelerando. Estaba en la mochila, pero su mente le hacía sentir el frio metal afilando. Sentía que todos los allí presenten la observaban y juzgaban, como si supieran que iba a hacer esa tarde.

Tragaba saliva constantemente y sus manos transpiraban. Su corazón casi se sale de su cauce al escuchar en el alto parlante la estación donde debía bajar. Ya no había vuelta atrás. Fue la última en bajar del transporte.

"Diez cuadras, a paso lento, media hora. Solo una puta media hora para decidir qué hacer"

...

- ¡Hola! - La saludo alegremente en el hall del hotel. Llevaba un pijama de franela amarillo. - Ven. - Con un ligero movimiento de cabeza. - Ya compré algo para comer.

-Genial. Muero de hambre. - Trató de fingir entusiasmo.

-Tengo que bañarme, pero tenemos tiempo para charlar, mi papá está en la ducha.

-¿Esta tu papá?

-Si, claro.- Riendo.- Vive conmigo, ósea.

-Ah, si claro, pregunta tonta.

-Igual, ya se va. Tiene que reunirse con un colega para algo de un caso, parece que encontraron pruebas sobre el asesinato del político. Viste ese...como era el nombre...

-Louis Henderson

-¡Ese mismo!

-Espero que lo puedan resolver pronto.

- Aparentemente, van bastante bien.

La charla continuo hasta que llegaron a la suite. Tomaron unos refrescos mientras comían la comida vegetariana que Eliana compro.

-¿Por qué comida vegetariana?

-Quiero cambiar algunos hábitos en mi vida, quiero probar el ser vegetariana.

-Eres rara, Eliana.

-La gente rara es cool

Ale rio, risa que no duro mucho al recordar lo que debía hacer. Se escuchó un sonido en la habitación.

-Oh, mi papá ya salió

-Buenas tardes Alejandra.

-Hola Robert, buenas tardes.

Se saludan con un beso en la mejilla.

-Hola y adiós.- Tenia el maletín en la mano.

-¿No vas a comer?- Preguntó Eli

-No querida, estoy tarde ya, comeré algo en la sede.

-De acuerdo, escríbeme en cuanto llegues.

-Lo haré mi niña.- Le deposita un beso en la frente.- Hasta luego pequeñas.- Saludo por última vez para desaparecer tras la puerta.

-De acuerdo...¿Me esperas un rato que me baño?

-Si, por supuesto.

Eliana sonrió y se retiró al baño.

Era su oportunidad, debía matarla en el baño. Tomo su mochila y sacó la cuchilla. Comenzó a llorar mientras con sus manos sentía el metal. Su respiración era rápida y su corazón iba a mil revoluciones por segundo. Era un ataque de pánico, como los que le daba de pequeña al quedarse sola con su padre.

Espero media hora, allí sentada mirando hacia la nada y solo llorando, jugando con el cuchillo.

Llegado el minuto 40 de esperar, se pone de pie. Y como si una fuerza oscura la hubiese atrapado se dirigió hacia el baño.

A cada paso que daba la ducha se escuchaba más fuerte. Eliana tarareaba una canción.

Abrió la puerta.

...

-¿Cuál es la urgencia?- Preguntó Robert entrando a su oficina.

-Nos llegaron videos de las cámaras de seguridad del hotel y una testigo nueva.

-¿Quién?

-No quiso darnos su nombre real, se hace llamar BabyAsia. ¿Quiere que la haga entrar?

-Si, por favor.- Curioso por la testigo.

Al verla entendió su nombre, era asiática.

-¿Hablas inglés?

Ella asintió con la cabeza sin mirarlo.

-¿Qué tienes para ayudarnos con el caso?

-Yo...tengo una filmación del asesinato.

-¿Tienes al asesino?

-Si

-¿Y por qué te tomo tanto tiempo entregarlo?

-Tenía miedo

-De que, ¿De qué te buscara a ti?

-No, de qué pensaría la gente.

-¿De qué hablas?

-Yo hablaba con Louis por webcam, nos conocimos en una página de sugardaddy. Yo buscaba ayuda económica y el buscaba saciar su vicio sexual. Pero siempre me asegure de filmar nuestros encuentros para seguridad mía, pues sabía que era arriesgado lo que hacía y no sabía a qué se dedicaba Louis, él me dijo que era dueño de una empresa de construcción. Luego me entere que era político y más temor me dio. No me quería involucrar.

-¿Y por qué ahora?

-Mi hermana murió en el atentado en Italia y sabía que Louis era simpatizante del partido, ahora entiendo que era miembro del partido. Quiero justicia por mi hermana.

-¿Y el video?

-Lo tienen aquí, ya lo entregué.

-De acuerdo. Todo lo que me dijiste tendrás que repetirlo lo más detalladamente a Rebecca. Ve a la oficina 15 del piso 2. Allí te atenderán. Y quédate tranquila, con nosotros estas a salvo.

La muchacha agradece y se retira y un rato después entra el mismo muchacho que había entrado antes.

-Aquí les dejo los videos señor. - Depositando una caja con CD's.

- ¿Los viste?

-No, señor

-Pues quédate. Eres el único en quien confió y necesito otro testigo de la existencia de esto.

-De acuerdo.

Y sin más coloco los CD's en la computadora.

...

Eliana salió de bañarse y aún en bata se dirigió al living para decirle a Alejandra algo que estuvo pensando en el baño. Pero, al llegar a la sala esta se encontraba vacía. Estaba confundida. Algo le llamó la atención sobre la mesa ratonera de vidrio frente al sofá.

Alejandra había dejado una nota, pensó que posiblemente le había salido un imprevisto y tuvo que salir velozmente; pero jamás paso por su mente lo que ya se encontraba leyendo. En clara señal de sorpresa se lleva una mano hacia la boca. En su semblante se podía observar un gesto de gran preocupación. Sus ojos cada vez se movían más rápido a medida que leía.

No espero mucho tiempo en tomar su móvil y marcar a un número en su lista de recientes. Movía el pie izquierdo con ansiedad, se le hacía eterna la espera. Hasta que finalmente la persona del otro lado responde.

No dijo mucho, solo un –Ve ya a la casa de Alejandra, temó que le suceda algo malo. Yo sé porque te lo digo Johann, ¡Ve, ya! -

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Lo prometido es deuda. He aquí el capitulo 17, más corto que el anterior puesto que así lo pidieron. Comenten que les pareció ¿Qué creen que suceda con Alejandra? Quiero leer sus teorías-