—quítate la ropa—.

—P-p-pero—.

—Obedece—.

—O-ok—.

En aquella habitación, solo habían 2 personas, una palida y alcohólizada chica de pelo castaño y ojos rojos, y un niño de pelo grisáceo de ojos azules...

—Ahora escuchame— la joven adulta se acercó a él esbozando una fría y cruel sonrisa en su rostro— Se un buen chico y te prometo que será rápido ok?—.

El niño trago saliva, intentando no llorar en el proceso, no quería, no le gustaba lo que ella estaba haciendo con él, pero acaso tenía opciones? Como la misma Chara lo dijo, estaba limitado a ella...

Chara lentamente lo sentó en la cama, el chico totalmente sin ropa más que la interior, su cuerpo algo delgado y de infante solo hacía que el deseo voraz de Chara se empezara a crecer...excitándola.

Sin alguna palabra, Ella comienza a acariciar su cabeza, mientras sus ojos llenos de un mal lo miraban con dulzura, Frisk no sabia que hacer, se sentía a su merced, solo podía rezar que no fuera doloroso, pero solo era su imaginación tratando de negarle su realidad.

Chara se empezó a quitar su ropa, tirando su chaqueta y suéter negro al piso, su falda también lentamente bajaba por sus piernas, colocándose de espaldas para darle una mejor vista de su culo al chico, quizás podía ser una persona psicópata pero con grandes dotes en la belleza, y sus atributos de mujer no eran la excepción, sin embargo, Frisk no comprende del todo este comportamiento tan extraño y nuevo para el, honestamente lo repudiaba.

Cuando Chara dejo de hacer su modelaje para Frisk, se encontró con las ropas interiores de ella, que no eran precisamente pudorosas, una lencería muy reveladora y con encajes que se apegaba a su figura la cual era de color negra, debido a que la tela era fina y delgada se podían ver un poco los pezones de la chica al igual que su parte no tan privada ahora y pese a que la ropa era bastante provocadora, solo alimento la curiosidad y la incertidumbre del niño.

—¿Y? ¿Te gusta?— la castaña preguntó con una voz seductora y firme—.

—...— Frisk no tenia palabras algunas para decir en aquel momento, casi como si estuviera muerto—.

Chara solo se rió ante la reacción de Frisk, ella se encargaría de corromperlo, y incluso hacerlo desear más de aquello.
Pero Frisk a pesar de su corta edad, sabia que todo esto estaba mal, aún así, espero encontrar consuelo seguirle un poco el juego a Chara...y quizás....solo quizás hacerla entrar en razón.

Chara se acerca lentamente, moviendo sus caderas y de forma muy elegante, intentando provocar excitación en el niño sin éxito alguno, solo hacia confundir aún más a peligris.

Cuando finalmente estuvo cerca de él, ella lo arrincona contra la pared estando en la cama, mientras su mano sin pudor alguno y consentimiento del chico va directamente a su entre pierna, y comienza a frotarse suavemente, por reacción, frisk jadeo levemente, pero estaba muerto de la vergüenza, y rojo como un tomate, no quería esto, pero Chara no aceptaría un no como respuesta.

Chara entonces introduce su mano dentro del bóxer del chico, y se encuentra con el genital de el, ella sonríe al sentirlo endurecerse.

—Awww es tan pequeño, que ternura —.

No sabia si eso fue un insulto o un alago,  frisk solo le importaba salir de aquella situación, y aunque fue arriesgado, el aparto la mano de Chara de su ingle.

—¡S-suficiente!— dijo asustado— N-no quiero esto....—.

—....— no dijo palabras algunas, entonces en sus ojos se vio una chispa de odio — ¿Por las malas eh?—.

Y casi sin tiempo de reacción alguna, un golpe certero cae sobre el rostro de frisk, quien en su momento grito de dolor, no obstante Chara comenzó a darle otros golpes, tanto en su cuerpo como en sí rostro, llenándolo de moretones y tirandolo al suelo, donde seguiría con su castigo, todo mientras ella sonreía de una forma muy perturbadora y sus ojos abiertos como si fuera un demonio, lo que parecía una noche de placer para Chara, se convirtió en una noche infernal para Frisk.

Poco tiempo transcurrió antes de que todo el suelo estuviera cubierta con la sangre de frisk, así como los nudillos de Chara con gotas de aquel líquido rojo, ella jadea un poco, observando a un moribundo niño llorar en el suelo, sollozando, gritar no servía de nada...

—Aún no termino contigo ~ —aquella amenaza alertó al infante, quien rapidam intenta arrastrarse lejos de ella—.

Desafortunado, Chara sin ningún problema toma a Frisk de su cabello y lo hala con fuerza hacia atrás, obligando a levantar la vista, esta tan aturdido que nisiquera puede forcejear, deja salir quejido de dolor, su rostro lleno de inflamación y sangre son un deleite visual para la castaña, ella entoces con su otra mano libre, baja las bragas de su lencería, revelando su intimidad, y en un movimiento brusco, pega el rostro del infante contra si misma.

—Vas a lamerla hasta que me hagas correrme....o te ahogare....—.

Tal cual como dijo sus palabras, Chara hunde la cabeza de Frisk con una fuerza increíble en su entrepierna, Frisk nisiquera puede respirar, su nariz pegada contra el clitoris de esta, estaba desesperado, la adrenalina activa de instinto de supervivencia y comienza a usar sus manos para intentar separarse, desde rasguños, y azotes que le daba, incluso se aferro a las nalgas de ella con tal de que lo soltara, pero Chara ni se inmutaba.

Finalmente no le queda de otra....

—Mmgh ~ —.

Un suave y lindo gemido de Chara se escapa de sus labios, mientras sonríe victoriosa, la lengua del infante comienza a introducirse en su vagina mojada y excitada, haciendo movimientos torpes he inexpertos, pero la sola sensación de tenerlo allí, tan sumiso y lamiendo sus genitales, era mas que suficiente...

—Ohh~....ngh~...no pares—.

El agarre de Chara se afloja levemente, dejando respirar al chico, quien ya estaba desbordando lágrimas de terror, el sabor de su intimidad era desagradable para su lengua, quería vomitar, pero no podía, solo seguía con aquello, pues de eso depende su vida....

—¡Carajo!...¡Oh!—.

Chara vuelve hundir el rostro de frisk en su entrepierna, extasiada por el placer, cada lamida dentro de ella hace que su sistema nervioso quiera colapsar, ella arquea su cabeza hacia atrás, mientras estando de pie, sus piernas empiezan a temblar levemente.

—Mierda, ahh~...ngh~...sigue lamiendo como buena mascota que eres...¡ah!—.

Sin motivos algunos para negarse, el infante continúa con el sexo oral hacia la mayor, solo quería desaparecer en ese momento, quería morirse, quería cualquier cosa menos estar allí, seguía dejando salir lágrimas y quejidos de tristeza, pero nadie lo escuchó...

—¡Ah! Me voy a....—.

Un último gemido seco salió de la boca de Chara, así como algo más de su entre pierna....jadeaba audible, intentando recuperar su postura, ella suelta la cabeza de frisk dejándolo ir, quien solo se queda en el suelo, con los ojos totalmente vacíos...y llenos de miedo....su boca lleno del orgasmo de Chara.

—Ah.....ah....jeje, buen chico— sonrió con malicia mientras ella se agacha y le acaricia su cabello — A pesar de que te portaste mal...mamá te va a recompensar...¿Hay que darte una inscripción en dado caso te pierdas, para que sepan quien eres no?— comentó juguetona mientras se levantaba y se dirigía a la mesita de noche de su cuarto —.

Abriendo  el cajón de madera, Chara saco lo que parecía ser un pequeño fierro, ella entoces con un encendedor que tenía en su chaqueta, comenzó a pasar la pequeña barra de metal por las llamas del fuego, tornandole de un color rojo...

No quería más....

No lo soportaba...

Y aun así siguió...

Cuando frisk recobró su cordura, estaba en el baño de la casa de Chara, tomando una ducha mientras abraza sus rodillas estando en el suelo, sus ojos cansados de tanto llorar, y aún así, dejó caer lágrimas una vez más, el dolor aún era intenso, y el frío del agua lo hacía peor, en su espalda brotaba la sangre, mientras podía verse que tenía unas quemaduras, pero estas tenían un patrón, pues era una inscripción de un texto hecho por la castaña....

"PERRA DE MAMI".