Dos
"Duerme con nosotros"
Dipper
Había pasado varios meses desde la ultima vez que hablo con su familia, ni siquiera les llamaba puesto que su trabajo lo traía realmente ocupado. Aquella llamada que le provocó el no poder consiliar el sueño; era de su querida hermana que, como ya he mencionado, no ha tenido comunicación con ella desde hace varios meses.
Visita.
En resumen, la castaña le había dicho que muy pronto lo visitaría para ver donde trabajaba, ya que le resultaría algo "divertido" ver lo de niñero.
Estuvo pensando durante mucho tiempo en como las cosas no se saldrían de control, en cómo pensaría su hermana al ver el extraño comportamiento de los gemelos hacia él o como actuarían ellos enfrente de ella, de Will no se preocupa mucho, sin embargo Bill era otro caso más complicado. Y a causa de esto se durmió hasta las dos de la mañana, y por consecuencia no durmió lo suficiente, ya que poco menos de la siete de las mañana ya tenía que despertarse sin remedio alguno.
La rutina se repitió, despertar a los gemelos, desayunar, vigilarlos y hacer que aprendan algunas cosas sobre un excelente comportamiento, y que hagan algo productivo lo cual parecía ser alguna clase de reto para el castaño. De todas formas, seguía pendiente por si en cualquier momento llegaba su hermana.
Según ella, su tío Ford fue quién le dio la dirección de la lujusa mansión, solo era cuestión de tiempo que llegase.
Y se podía notar apenas su nerviosismo.
Aquel medio día, les explico a los gemelos la "situación" en la que se encontraba. Dando a entender como querían que se comportarán y que no hicieran alguna travesura. Les había prácticamente rogado, y más a Bill que solo ponía una extraña sonrisa como si quisiera decir "Te tengo".
-¿Y que recibiremos a cambio?- hablo el rubio.
-¿A cambio?- cuestionó Dipper algo confundido.
-Si. Mi hermano y yo queremos algo ha cambio para "actuar" enfrente de tu hermana. ¿Que nos darás? -
-¿Por qué quieres algo a cambio? -
-¿Por qué no quererlo? Además en esta vida no todo es gratis. - añadió el rubio sonriendo orgulloso, esperando algo del castaño.
-Mmmm... Ahg... Bueno, esta bien. ¿Que quieren?- se rindió fácilmente, pero necesitaba con urgencias que aquellos gemelos se portasen bien con su hermana, en especial Bill que era el más... travieso, por no decir demonio.
Los gemelos se miraron, parecían que hablaban por medio de telepatía.
-Dormir contigo. - contestaron unísono, uno de ellos sonrojado y un poco nervioso.
-....¡Qué!... Tienen 12 años, ya están grandes para dormir con un adulto. - excusó el mayor, un poco molesto e irritado por el comportamiento de ambos.
-Adolescente Pino, aún tienes 16. - contestó mientras se cruzaba de brazos.
-Cómo digas...- mencionó sin mucha importancia y Virando los ojos.
-¿E-Entonces?- dijo estaba vez Will, mirando con aquellos ojos al mayor muy esperanzado.
-¿Entonces que?-
-Que si dormirás con nosotros. - dijo Bill.
-Me costó trabajo bañarme con ustedes dos y ahora quieren que duerma con ambos. ¿Que es esto?¿Una telenovela de comedia romántica? Por que sí es así sería una chica la que... - fue interrumpido.
-El rubio empieza a toser muy falsamente.- Tu eres la chica...- murmuró un poco ronco.
-¿Que fue lo que murmuraste?- dijo arqueando una ceja.
-Que te quiero, no importa que tan pasiva seas. - contestó sin vergüenza alguna, mientras se lanzaba al mayor para abrazarlo cosa que no logro por que este mismo lo esquivo, provocando que el menor cayera al suelo.
-¡H-H-Hermano!- Chillo Will preocupado, aunque ni siquiera lo ayudó a levantarse.
-Dejalo Will, es un niño que todavía no ha madurado lo suficiente para dejar de molestarme con sus tontos comentarios. - comentó Dipper serio, mientras se disponía a irse para terminar aquella platica o 'negociación' que le parecía absurda.
-¿¡Me estas diciendo inmaduro!?- dijo ya de pie y exagerando.
-Sí- contestó directamente.
-Ahora si ya valiste Pino. -
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Al día siguiente...
Dipper estaba en la biblioteca leyendo un libro titulado "La Cabaña" que era del género de misterio. A su lado estaba Will contento, no sólo por que disfrutaba de la lectura brindada, también por que estaba pasando "tiempo" junto al castaño. Y a veces lo miraba de reojo.
Hasta que llegó una sirvienta a arruinar aquel hermoso y pacífico momento, o eso pensaba Will.
-Joven Dipper, tiene visitas.-
Y aquello puso alerta al castaño.
Caminaba por los largos y enormes pasillos, rezando por que no fuera su hermana. No en esos momentos... no ahora.
La mujer lo llevo a una de las salas principales para después retirarse. El castaño observó a cierta castaña que estaba admirando la enorme y lujusa lugar.
-¡Hermano!- Chillo la mayor de los mellizos con una tierna sonrisa. Se lanzó sobre el menor abrazandolo, y este le correspondió el gesto dulce.
-Mabel, es bueno volverte a ver. - dijo un poco nervioso.
-Lo mismo digo Bro, sigues siendo tan... tú.- rió causando un leve enojo en el contrario.- Veo que debe ser de maravilla trabajar aquí. Los niños que cuidas... ¿se portan bien contigo?- añadió interesada.
-Uno de ellos si... casi. El otro pues... Es como cuando tu tenías 12 años, pero el triple de problemas.-
-Oh, tu caso es demasiado difícil. ¿Pero puedes con esto? ¿No crees que es de mejor trabajar en una tienda de café o algo así? - su tono sonó insistente.
-No Mabel, necesito el dinero...- aclaró un poco serio.- Además me estoy acostumbrando. - añadió con una sonrisa amable.
-Es que... te extraño mucho en casa.- comentó.
Mientras ambos castaños hablaban sobre algunas cosas, de pie ya que son tan tontos para no poder sentarse o no darse cuenta que hay un sofá detrás de ellos; los gemelos Cipher estaban a un distancia considerable escondiéndose para poder oír de lo que hablaban ambos mayores.
-Si que se parecen. - comentó Will casi impresionado.
-Son mellizos idiota, obvio tienen que parecerse. Pero Pino sigue siendo la femenina ahí. - ambos hablaban en voz baja.
-Me pregunto... ¿Quién será el mayor?-
-Luego se lo preguntas a Pino... cambiando de tema.- Prosiguió.- ¿Escuchaste? Esa castaña frenética quiere alejar a nuestro castaño, nuestro niñero, de nuestro lado. - dijo mientras miraba con desprecio a la chica.
-¿Por qué frenética?- cuestionó el menor de los dos.
-Por qué usa Frenos.- contestó sin mucha importancia.
-Bill, la palabra Frenos y la palabra frenética no tienen nada que ver, solo es por que ambas comienzan con 'Fre'. Argumento Will un tanto serio. - Y tu me decías idiota hermano... - dijo de ultimo Virando los ojos.
-Cómo sea Will, hay que hacer algo para que nuestro Dipper no se vaya. ¿recuerdas lo que Prometimos? No podremos cumplirlo si nuestro castaño se va. - explicó, interesando a Will sobre lo antes dicho por él.
-T-Tienes razón Bill. ¿Que hacemos entonces?- pregunto angustiado.
-Mmm... tengo una idea Will, y para eso... tienes que ser valiente. -
-¿V-V-Valiente?-
-Aja. Es hora de ser tan cursis como podamos. - contestó el rubio.
-T-Tengo miedo... - declaró.
-Mmm... tamales, es por Pino!-
-Está B-Bien. -
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Marcos P. Butler, era el mayordomo de mayor confíanza que había en la mansión, aparte era demasiado bueno desempeñando su papel de mayordomo.
El empezó a servir a la familia Cipher dos años antes de que los gemelos nacieran, por lo que Phill lo conoció por más tiempo. Conoció a los Señores Cipher, y juro lealtad a la familia. Cuando los gemelos nacieron, el apenas tenía 26 años. El era el que tenía la misma autoridad como el mayor de los Cipher, Phill. Y era prácticamente como su tutor, o al menos hasta que ellos fueron mayores de edad. Por lo cuál, es el más respetado de la casa, después de Phill claro.
Los padres de Phill, Bill y Will, murieron en un accidente de Avión, cuando los gemelos tenían ocho años.
Y desde muy pequeños sabían que ambos causaban muchos problemas, incluso Will que se dejaba influenciar por las locas ideas de su gemelo mayor. Durante años había contratado a varios niñeros para que controlarán a los gemelos, incluso tres al mismo tiempo, pero nada daba resultado. Lo más que duraban cuidándolos era un mes entero.
No entendía a los niños, no sabía que era lo querían, hasta hace algunos meses cuando un milagro, (ahora lo considera como uno) fue a parar a la mansión.
Mason Pines, estudiante de preparatoria de tercer año, excelentes calificaciones en materias muy importantes. 16 años. Sobrino de StanFord Pines, un antiguo compañero suyo de confianza.
Al parecer buscaba el trabajo de ser niñero, y al principio lo subestimaba.
Meses después, se dio cuenta que Dipper mantenía algo de control en los gemelos; Phill también desconfiaba del chico, hasta que lo conoció un poco más y vio como cuidaba a sus hermanos.
"Él es el único que puede con mis hermanos, era su destino cuidarlos"
Explicaba el pelirojo.
Por lo que, Marcos acepto mostrar respeto hacía el castaño.
Marcos no entendía como era que conseguía que los gemelos no fueran tan... ellos. Pero Phill se lo explico.
"Amor, cariño, atención, respeto"
Era que lo sentían ambos gemelos hacía el castaño.
Al mayordomo no le importaba la clase de relación que podrían mantener con el niñero, solo quería que no fueran tan traviesos y activos, en especial el rubio que sabía cuantas canas lograba sacar aquel niño.
Volviendo en el tiempo actual, el mayordomo logró visualizar a los gemelos ocultándose de su niñero y lo que creía que era la hermana de este.
No sabia que ocurría, pero no era de su incumbencia, su responsabilidad no era cuidarlos, eso era del niñero. Así que seguiría de largo encargándose de las tareas del hogar. Que todo estuviera en orden.
Regresando con el niñero...
-¿Y donde están los niños?- preguntó al fin Mabel, emocionada por conocerlos.
-Q-Quizás estén jugando por a-ahi... - contestó titubeando un poco nervioso.
Y ahí fue cuando ambos hicieron presencia en la sala.
-¡Pino!- nombro el rubio con su característica sonrisa 'coqueta' y cariñosa que solo le dedicaba a su Pino.
-¿Que cosa?- pregunto un poco confundida la castaña por tal apodo. Mirando con aparente atención a los gemelos.
Observó que el peliazul estaba un poco sonrojado y nervioso, viéndose adorable.
-Mateneme ya... - murmuró el castaño mientras se daba un bofetada mental.
-¡Pino! ¿donde estabas?... - dijo Bill mientras lo abrazaba por detrás con algo de fuerza. Al igual que Will pero este nervioso.- ¿Quién es ella? ¿¡Nos estas engañando!?- exclamó enojado y dramarizando.
-¿Eh?...- logró pronunciar aún más confundida y un poco incómoda. - Un gusto, soy Mabel, la gemela de Dipper. - aclaró mientras alzaba su mano para saludar a los menores por educación.
-Yo soy Bill y él es Will, somos los novios de Pino y futuros esposos. - contestó con una sonrisa algo arrogante. Diciéndolo como si fuera lo más natural del mundo.
Dipper miro estupefactado al rubio, luego miro al peliazul esperando que este hiciera algo o regañara a Bill por su comentario.
Will, al sentir la 'penetrante' mirada del castaño se sonrojo aún más y desvío un poco la mirada para dirigirse a la hermana de Dipper.
-U-Un placer cuñada. - saludo Will, provocando que ambos Pines se quedarán con cara de Σ(゚ロ゚) (⊙_⊙)
-¿¡C-C-Cuñada!? ¡Dipper! ¿¡Que esto esto!? - exclamó confundida y pasmada.
-Ellos son los gemelos a los cuales tengo que cuidar. - dijo el castaño ignorando la pregunta de su hermana tratando de mantener la calma lo mejor posible.
-Pino, no nos dejes! ¿De nada sirvió todos estos meses de relación? ¿Acaso no disfrutabas aquellas cosas que hacíamos en la cama?- sus bellos ojos dorados se intristecieron, fingiendo un 'drama' de telenovela. Una lágrima falsa recorría su mejilla.
-¿¡De que rayos hablan!?- esbozo Mabel ( ̄□ ̄」)
-¿Por qué dicen eso?- pregunto Dipper mientras apartaba a ambos gemelos.
-Éramos un trío... - 'confeso' Will igual de dolido.
-Mmm... Dipper... ¡Necesito una explicación! - exigió la única chica de la habitación... creo...
-¡Están mintiendo!- grito Dipper.
-¿Mintiendo? Creí que... nos querías... - dijo Will llorando. Literalmente, sus bellos ojos azules abordaban lágrimas que descendían hasta sus suaves y rojas mejillas, haciéndolo ver más tierno e indefenso.
"Haha, que bueno es mi hermano llorando. Tómala hermana de Pino" Pensó Bill escondiendo una sornisa de victoria.
-Que adorable es el peliazul, parece un lindo ángel. - comentó Mabel admirando la "ternura" del menor.
-¡Mabel! ¡No te dejes llevar por su lindura!- dijo Dipper casi regañadola.
-Dipper... necesito hablar contigo a solas. - dijo sería.
-P-Pero... - su hermana lo interrumpido algo brusca.
-Mason Pines!-
-¡No me llames así!- exclamó enojado, no le gustaban para nada su nombre.
Dipper le hizo unas señales a los menores para que los dejarán solos a él y su hermana y estos entendieron y se alejaron.
Iban a espiarlos, hasta que Marcos vino a avisarles que era hora de sus clases de piano. Y no tuvieron más opción que ir.
Por una muy buena razón que quizás mucho más tarde se mencione.
Dipper y Mabel se quedaron solos. Reinaba un silencio algo incómodo que empezaba a fastidiar a Dipper. Por fortuna, la castaña acabo con eso.
-Vaya hermanito, si que te quieren mucho. Parece que tienes todo bajo control. Que divertidos son. - comentó la chica con un sonrisa.
-¿D-Divertidos?-
-Si, estaban jugando a ser tu pareja. ¿No? - añadió.
-Ah... ¡Sí! Hehe, eso mismo era. - contestó algo nervioso, dejando soltar un suspiro de alivio.
-Ya veo, bueno... ¿Tienes algún día libre?- pregunto cruzándose de brazos.
-No lo creo... ¿Por qué?-
-Robbin. - contestó un poco fría.
-.... - la incomodes volvió a presenciar se, y esta vez con un toque de melancolía. - Sinceramente, ya no se si él y yo seguimos siendo pareja... Desde que soy niñero, estoy demasiado ocupado. - añadió con la mirada casi pérdida.
-Pues... el me ha estado insistiendo para que le diga donde buscarte. - dijo la castaña.
-Estoy muy ocupado con los gemelos, dudo que pueda tener alguna cita con él. -
-Mmm... y que tal si... ¿Los llevas a la cita?- sugirió la chica para darle ánimos a su hermano.
-No creo que sea una buena idea. - contestó.
-Mira bro, los llevas y yo los cuidaré mientras tú y Robbie hablan sobre su relación y quizás puedan arreglar las cosas. -
-No lo sé... -
-¡Vamos bro! Si el en serio es para ti te entenderá y esperara. Y si no pues... ya no tendrías que guantar su emo-actitud. -
-Mmm... esta bien. - dijo rendido.
-¡Perfecto!... Solo tienes que convencer a esos niños para que acepten ir... creo que será difícil. - dijo Mabel mientras se ponía a pensar en alguna forma de que aquellos niños fueran sin problema.
-Mira esto. - dijo con una cara de orgullo, mientras hacia que su voz sonará muy tierna y dulce logrando sorprender a su hermana.- ¡Bill!¡Will!- los llamo con ese tono algo provocador.
-¿Eh?- esbozo un poco confundida la castaña.
No paso mucho tiempo para que enfrente de ellos se encontrará los tan dichosos gemelos. Sin importarles dejar sólo a su maestra (vieja) de piano. El llamado de Dipper era suficiente para que estos aparecieran 'místicamente' junto a él.
-¿Si?- dijieron ambos con una sonrisa dulce.
-¿Que quieres Pino?-
-¿Les gustaría salir conmigo y Mabel a dar un paseo este domingo?- pregunto recalcando la palabra "conmigo", haciendo que ambos niños esbozan una tierna sonrisa. Que mostraban lo emocionados que estaban.
Por lo que, en pocas palabras, accedieron.
Días después.... ( dos para ser más exactos)
Eran alrededor de las seis de la tarde.
Ambos pares de gemelos ya se encontraban sentados en una mesa de un restaurante familiar que el principal producto era la deliciosa pizza.
Bill y Will notaron la 'impaciencia ' de su niñero, lo cual no les gustaba mucho.
-¿Esperas a alguien Pino?- pregunto Bill observándolo fijamente, muy fijamente.
De hecho, creo que Bill da un perfecto significado de las palabras "mirar fijamente"
-Ah, Si. - contestó Dipper.
-¿A quién?- preguntaron al mismo tiempo los gemelos.
-Un... amigo. Solo eso.-
Pasaron unos breves minutos para que una voz desconocida para los gemelos se hiciera presente.
-¡Hey! ¡Dipper!- un chico que vestía con ropas oscuras se acercó.
-Robbie. Que bueno que llegaste. - dijo Dipper esbozando una sonrisa mientras saludaba al recién llegado.
-Necesitamos hablar y...- el mismo fue interrumpido al notar a ciertos niños que lo miraban como si fuera alguna clase de cosa asquerosa.- ¿Quienes son ellos?- pregunto con algo de repugnancia, que sólo los gemelos lograron identificar.
-Somos los esposos de- Bill fue interrumpido por su niñero.
-¡Son los gemelos a los que cuido! - contestó de inmediato.
-¿Cuidas gemelos?- pregunto confundido Robbie.
-Soy niñero Robbie, es por eso que he estado demasiado ocupado.... Niños, ahora vengo, necesito hablar con Robbie sobre algo importante, Mabel los cuidará. - informó a los menores.
-¿Que? ¿Nos dejarás con ella?- dijo Bill indignado.
-Sólo será unos minutos, por favor...- dijo Dipper.
-Tu deber es cuidarnos.- respondió Bill.
-Escucha pequeño, no es por ser mala onda pero de lo que hablaremos Dipper y yo es algo muy importante, será un momento. ¿Comprendes?- dijo Robbie hablando como si los gemelos fueran unos bebés, con una mirada fría.
-...... Maldito emo. ¡No me vuelvas hablar así!-
-H-H-Hermano tranquilo... - dijo Will para tratar de tranquilizar a su hermano.
-Mejor escucha al bebé de tu hermano. - agregó el emo fastidioso. ;-;
-¡¡¡CON MI HERMANO NO TE METAS ESTUPIDO PEND- Bill estaba furioso, estaban haciendo prácticamente un escándalo en el lugar, muchas miradas veían la escena, y fue interrumpido por el castaño que también ya se empezaba a molestar.
-¡¡¡YA CALMADOS!!!-
Un ligero silencio se hizo presente, donde ciertas miradas de odio recibía el pelinegro.
-Robbie, ya tienes casi 19 años, eres lo suficientemente grande para no discutir con estos niños.- dijo Mabel mirandolo enfadada.
-No es mi culpa que sean tan insoportables y babosos. - respondió de mala gana Robbie, lo único que quería era arreglar las cosas con Dipper, cosas que quizás no pasaría ya que...
-No hables así de ellos cuando ni si quieras los conoces bien. - dijo Dipper mientras le daba un buena golpe a Robbie en la cara.
-¿¡Por qué hiciste-
-Vamonos niños. - le interrumpió mientras tomaba a ambos gemelos del brazo, llevándoselos fuera del lugar.
-¡Pero Dipper!-
-No quiero que me vuelvas a buscar, no te quiero volver a ver. -
-¿¡Por qué proteges a esos niños que ni parientes tuyos son!? ¿¡Son más importantes esos hengendros que yo!?-
-Si. Son más importantes y muchos mejores que tú. Más cariñosos, más lindos, inteligentes, y aunque a veces suelen ser muy traviesos y molestosos, al menos ellos saben sentir especial a alguien. Y no se quedan mirando 'disimuladamente' a cada mujer con gran trasero y pecho que tiene. -
-(*^.^*) ¡Uh, salseo!- comentó la única chica del grupo, osea Mabel.
-No es mi culpa que tu no quieras acostarte conmigo todavía y hacer 'magia' con ese trasero que tienes. - dijo Robbie muestras llevaba sus manos a los bolsillos de sus pantalones olgados.
-¡¡¡A MI PINO LO RESPETAS!!!- gritó Bill muy furioso, nadie insultaba a su Pino, y mucho menos con su redondo trasero.
-¡¡¡ES POR ESO QUE NO YA NO TE QU-QUIERE!!!- dijo Will igual de furioso.
-Dipper ¡Has algo!- comentó Mabel viendo como ambos gemelos se lanzaban contra el mayor y empezaban a galarle el pelo y darle golpes en la cara.
Dipper meditó por unos segundos, pronto llegaría algún guardia a detenerlos y la cosa sería peor, y era su responsabilidad que los gemelos no se metieran en problemas, y gracias a él, se estaban peleando con Robbie quien parecía no poder ni si quiera defenderse, haciéndose ver débil ante unos niños de 12 años.
-NIÑOS VAMONOS. NO VALE LA PENA PELEARSE CON UN TARADO EGOCÉNTRICO. - y eso bastó para que los gemelos se detuvieran (apenas) y regresarán con su niñero, tomándolo cada uno de sus manos.
Mabel vio esto como un gesto algo tierno y un poco extraño.
Los dos pares de gemelos salieron del local lo más tranquilamente posible, dejando al Robbie tirado en el suelo con unos leves moretones y pedazos de pelo, su pelo, en el suelo.
Y lo que más le dolía a Robbie no fueron los golpes de los niños, ni que Dipper haya preferido a esos 'mocosos' que a él; si no era el hecho de que lo dejaron en el vergüenza, con la cuenta de algo que ellos consumieron y... le arrancaron parte de su 'preciado' cabello. Un golpe muy fuerte en su corazón. Que no sanará fácilmente.
Dipper y Mabel llegaron a la mansión, el castaño ordenó a los gemelos de que dejarán nuevamente a solas con su hermana por lo que estos no se quejaron, además de que veía muy serio y a juzgar por lo que acababa de pasar y el denso ambiente, decidieron que era mejor hacerle caso.
-Entonces.... - habló Mabel
-Robbie era un inútil egoísta, estúpido, maldito y... y... - no podía seguir, por alguna razón, unas lágrimas empezaron a salir de sus ojos.
-No llores Dipper, el no merece ni tu lástima. - aclaró.
-Yo lo quería mucho... creí que el igual...Pero... me duele sabes... creí que él era la persona indicada para mí... era tan dulce, detallista y protector... -
-Al principio Dipper, Calmate hermano. Trata de olvidarlo. - dijo Mabel mientras lo consolaba.
-¿Cómo? -
-Consiguete a alguien más. - sugirió sonriendo dulcemente.
-No quiero tener novio tan pronto Mabel, además estoy ocupado con los gemelos... -
-¡Eso es! Concéntrate sólo en ellos. Piensa en ellos como... como... ¡Personas importantes a las que debes querer!-
-¿Que demonios dices Mabel? ¿Volviste a comer 1000 gomitas de corrido otra vez verdad?-
-¡Claro que.... no! Lo que digo es que... quizás puedas olvidar a ese tarado idiota de Robbie. Esos niños podrían animarte y... y... solo ¡Déjate querer!
-¿De que hablas?
-Se que no soy tan inteligente como tu hermanito, pero... no soy tan tonta para darme cuenta que esos niños te aprecian y quieren mucho. Probablemente ellos te ven como una hermano mayor o... una madre... - Dipper frunció el ceño algo molesto por el comentario de su hermana.- No lo sé pero... quizás con su cariño puedas olvidarlo y empezar de nuevo. Así que por el momento no pienses tanto en el amor y menos en Robbie. -
-Tienes razón Mabel... Desde ahora trataré, no sólo de olvidar a Robbie, también de ser un poco más abierto y un poco cariños con los gemelos. - Prosiguió. - Además, me defendieron, a su modo pero los hicieron y... -
-Mejor ve y agradeceles de frente. -
-¿Eso significa que... ?-
-Dipper... ahora se que estarás bien aquí, tienes personas que te cuiden. - sonó sería.
-Lo irónico es que yo soy el que cuida de ellos. -
-Quien sabe hermanito... En fin; ya debo de irme Dipper.
-¿Volverás? -
-No creo Dipper, Losiento. Ambos estaremos muy ocupados, en especial tu hermanito. -
-¿Sigues ayudando en la cabaña del misterio del tío Stan?-
-Obvio bro, una nunca sabe cuando te puedes encontrar un chico guapo, hahaha... Bueno, adiós hermanito. - dijo la castaña mientras salía de la casa.
-Adiós Mabel. - se despidio.
Dipper se quedo ahí por unos breves minutos, quieto y pensando como seguiría su vida de niñero.
Mientras tanto, en otra parte no muy lejos de ahí.
-Al menos ya sabemos quien es el menor. - soltó Will relajado.
-Supongo que sí - respondió Bill.
Al caer la noche...
Los gemelos tenía puesta ya su pijama para dormir, se acostaron pero no lograron consiliar el sueño.
Un detalle extra es que la cama de Bill esta a unos pocos metros enfrente de la de Will. En fin; El cuarto estaba casi en total oscuridad si no fuera por que no cubrieron la ventana con la gran y cortina roja.
-Niños... ¿Ya se han dormido?- pregunto Dipper entrando al cuarto.
-¡Pino!- expreso Bill feliz y emocionado.
-¡D-Dipper!- dijo Will.
-Vine agradecerles P-Por haberme defendido. En serio, les agradezco mucho... se que suelo ser algo cerrado y un poco frío con ustedes, mayormente con Bill pero... he a prendido que no son tan molestos como pensé y que puedo confiar en ustedes. Desde ahora, haré lo mejor posible para ser más... abierto con ambos. - Se le notaba un ligero sonrojo en sus mejillas.
-¿E-En serio Pino? -
-Si niño, digo Bill... Mabel me ayudó mucho en comprender y convencerme en confiar en ustedes. -
-Mmmm... creo que después de todo Estrella fugaz no están mala como pensé. -
-¿Estrella fugaz?- dijo Dipper confundido.
-E-Es el apodo de tu hermana Mabel. Es mucho mejor que el otro. - dijo Will
-Ya veo... ¿Y cual era el otro?-
-Frenética. -
-¿¡Que!?-
-Bill se lo puso por sus frenos. - comentó el peliazul.
-Hahahahaha... okey, eso si me causó gracia. -
-Que lindo te ríes Pino, muy lindo. -
-Ahg... G-Gracias. - estaba más rojo. Hasta que reaccionó y estaba apunto de irse.
-¿Ya te v-vas?- pregunto Will algo desepcionado.
-Son más de las diez, ya es tarde así que tengo que dormirme. - aclaró con una leve sonrisa de confianza.
-Dipper... - mencionó casi audible el menor de los gemelos.
-Duerme con nosotros. - dijo Bill mirando directamente aquellos ojos de color chocolate con miel, simplemente hermosos.
-Pero... n-no lo sé, es algo raro y... -
-Por favor... - ambos gemelos se pararon y se acercaron al mayor para hacerle caras tiernas y convencerlo.
-Ahg... esta bien. Pero será en mi cuarto. -
-No hay problema por eso Pino. -
Los tres ya se encontraban en la cama de Dipper, que si bien no era tan grande como la de los gemelos, pero era lo suficiente cómoda y cálida para ellos, además de que podrían aprovechar que esta un poco chica y así estar mas apegados al castaño.
Horas pasaban; Dipper estaba en un profundo sueño y todos sus sentidos no estaban al 100% alerta, por lo que no pudo notar de que manera era la que los gemelos lo tenían abrazado.
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Usen su imaginación, imaginen que Bill es mabel
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