Desde que le defendió de esos niños, Atsushi no se apartaba ni un solo centímetro de Akutagawa, eso molestaba al portador de Rashomon, hasta ya estaba fastidiado pero no podía hacerle nada o conocería la sala de torturas de Dazai y no específicamente la de la Port mafia, minutos después de haberle defendido llegaron al apartamento de Chuya, no había nadie, al parecer lo que sea que Chuya y Dazai estuvieran haciendo tardaria.

Cada vez que Akutagawa se movía a un lugar de la casa Atsushi iba detrás de el, pegado como un patito a su mamá,en algún momento Akutagawa intento asustarle con Rashomon pero sabía que asustaría tanto al pequeño que lloraría por un buen rato y no quería lidiar con ello, rendido ante todo se sentó en el sofa, el pequeño también y empezó a jugar con sus pies mientras estaba en silencio, Akutagawa estaba cruzado de brazos.

-Jinko -no hubo respuesta- Jinko, ¿Me estás escuchando?

-¿Me hablas? - dijo curioso, mientras ladeaba la cabeza-

-¿Quién más estaría aquí?

-Pero yo no me llamo Jinko -fruncio un poco su cejas, un hábito que había desarrollo mientras comprartia tiempo con Chuya-

-Pero yo te llamo Jinko

-¿Que significa Jinko?

-Eso... olvídalo

-¿Por qué no me llamas por mi nombre? -se acerco un poco a él -

-¿Algun problema?

-Me gusta que me llamen Atsushi no Jinko

-Pues no lo esperes de mi -Dijo indiferente mientras apartaba al pequeño de su espacio personal-

-Quiero que me llames por ni nombre

-No

-Si -Hizo un puchero-

-No, Jinko

-Dime Atsushi no Jinko

-Jinko

-Atsushi -inflo más sus mejillas-

-Jinko

-Atsushi

-hace un puchero con lágrimas en sus ojos- Jinko

-No caeré en eso.

Atsushi seguía con el puchero y se cruzó de brazos, no le hablo en ningún momento a Akutagawa, hasta se fue sin decir nada al cuarto y se encerró azotando la puerta, a tan temprana edad y tan independiente o al menos eso quería parecer el pequeño, Akutagawa cansado del pequeño berrinche del menor se levantó y trato de abrir la puerta cosa que por obvias razones no logro asi que siguió intentando, pasaron unos 10 minutos y aun trataba de sacar al pequeño sin romper la puerta en el acto.

-Jinko, ábreme -golpeo la puerta un poco fuerte, no tanto como para causarle un paro de corazón al menor -

-No quiero, vete

-Jinko, Chuya-san llegará en cualquier momento y no quiero romper la puerta.

-Baba entenderá por que... además no me importa, puedes romperla y a mí no me dirá nada

Akutagawa se fastido y se recargo en la pared, recapacito todo, suspiro pesadamente volvió a tocar la puerta un poco más suave y no recibio respuesta

-Jin.... Atsushi, por favor abre

Se escuchó un ruido en la habitación, además de abrirse la puerta de dónde salió un Atsushi directo a abrazar a Akutagawa quien solo se quedó quieto, al parecer eso era todo lo que necesitaba para hacer salir al pequeño de ahí

-Ryunosuke... Lo dijiste, dijiste mi nombre -Dijo mientras casi daba saltitos de felicidad-

Akutagawa se sonrojo levemente y trato de apartarse ya que el pequeño se aferraba fuertemente a su pierna, y soltar unas risitas, más no pudo liberarse de el, rendido cargo a  Atsushi, dejándose hacer puesto que sabía que no sería apartado o lanzado a algún lado de la habitación, se aferró a él sonriendo

-Ryu, ¡Te amo!

Akutagawa no supo que responder, hasta que escucho unos aplausos, al mirar observo a Dazai y Chuya sonriendoles, al parecer habían escuchado todo, a saber dios desde cuándo habían regresado. Estaba más interesado en sacar a Atsushi que a su alrededor.

-¿Que dices ante la declaración de tu Jinko?