Una mañana como cualquiera en el Bounty, en donde casi todos se encontraban sentados al rededor de la mesa esperando que Zane terminará de prepapar el desayuno, se tuvieron que levantar temprano. Luego de todas maneras deberían ir a la tienda para abrirla y atender a los clientes que llegaran.

Nya: Vamos hermano, no es tan difícil.

Kai: Lo dices porque tú no quieres a nadie.

El castaño golpeó su cabeza con la mesa, sus amigos se encontraban insistiendole en confesar sus sentimientos hacia cierto rubio que no se encontraba presente en estos momentos.

Nya: No, bueno tal vez pero el punto es que ya llevas mucho tiempo así, al menos preguntale si le gusta alguien más.

Cole: ¿En serio Nya? Hablamos de Lloyd, el no te dirá si le hecho el ojo a alguien, sabes que mayormente está centrado en ser Ninja y no se va a querer desconcentrar.

Jay: Pero puede ser que lo oculte.

Zane: Hablando de Lloyd ¿Donde está? Normalmente es el primer en levantarse.

Kai: No lo había pensado.

Jay: Tranquilos, yo iré por él.

Jay's Pov.

Cruzé la puerta de la sala para caminar hacia donde se encontraban las habitaciones hasta llegar a la que le pertenecía al niño. Me acerqué y alzé mi mano formando un puño con mis dedos, di una par de golpecitos.

Jay: Lloyd, los chicos y yo te estamos esperando. Se nos hace tarde.

No recibí respuesta asi que volví a tocar.

Jay: ¡Lloyd debemos abrir la tienda de té!

Otra vez, no escuché nada. Ya no me importó su privacidad solo abrí la puerta y entré a su habitación.

Jay: ¡Levantate de una buena... vez.

No encontré a nadie o al menos eso pensé yo. Caminé hacia su cama en donde se debería encontrar acostado y luego busqué por toda la habitación pero no había rastro de él.

Jay: Si es una broma, no es graciosa.

Un crujido pude escuchar y cuando me dí cuenta provenía de por debajo de la cama. Giré a verlo y esta seguía sonando.

Tragué saliva esperando lo que estuviera ahí dentro.

Caminé unos pasos temerosos y puse mi mano sobre la cobija que tapaba ese hueco de la cama, la alzé con cautela y asomé mi cabeza.

×××: ¡Buuu!

Jay: ¡WAAAAAHHH!

Cole' s Pov.

Estabamos empezando a servir el desayuno de lo más normal, felices de la vida, entonces ahí fue cuando escuchamos un grito proveniente de las habitaciones.

Jay: ¡WAAAAAHHH!

Reconocería en cualquier parte que ese grito era de Jay. Nos levantamos de las sillas alarmados y agarramos nuestras armas que solo se encontraban a un lado.

Nya: ¿Qué creen qué sea?

Zane: Lo que sea, de seguro no es bueno.

Cole: ¿Creen qué Jay esté bien?

Kai: Espero que sí, al igual que Lloyd -giramos a verlo- ¡Oh vamos! Igual ya lo saben.

Caminamos con lentitud hacia los pasillos en donde se encontrarían las habitaciones notando que solo la puerta de Lloyd estaba abierta.

Tal como una película, nos apegamos a la pared de un lado estando yo primero en la fila. Intercambiamos miradas y yo asentí en señal de que todos entraran. Alzamos las espadas e ingresamos a la habitación haciendo un gran ruido.

Todos-Jay: ¡AHHH!

Ahí fue cuando nos dimos cuenta de como Jay estaba en una esquina de la habitación con cara de traumado.

Cole: ¿Jay? -guardé mi arma- ¿Qué ocurre?

Jay: Debajo... de... la cama...

Señaló al lugar en donde todos observamos y luego nos vimos confundidos.

Kai: ¿Qué hay debajo de la cama?... ¿Y donde está Lloyd?

Al parecer Kai solo pensaba en la seguridad de Lloyd, aunque no lo culpo tampoco.

Jay: Mira y lo averiguaras.

Nya fue la primera en avanzar a la cama sin bajar su arma, se arrodilló y alzó la cobija y luego asomando la cabeza.

Nya: Ay no puede ser...

Zane: ¿Qué? ¿Qué es? ¿Qué ocurre?

Nya: Es un...

Kai: ¡¿Un qué?!

Nya: Un... es un bebé.

Todos quedamos impactados al ver como Nya se levantaba del suelo con efectivamente un bebé en brazos.

Tenía el cabello rubio y los ojos verdes con pura inocencia con una pequeña ropa que en realidad parecía ser de... oh no, esto debe ser un mal chiste.

Kai: Esa... ¿No es la pijama de Lloyd?

Solo llevaba la parte de arriba que le quedaba algo grande siendo el niño muy pequeño.

Zane: Kai... ese es Lloyd.

[....]

Narración.

Kai: ¡¿Cómo diablos pasó esto?!

Los ninjas después de hacerle una ropa improvisada con una tela, ya que por obvias razones nadie tenía ropa de bebé, estaban discutiendo en la sala teniendo a Lloyd bien sentado sobre la mesa.

Zane: Mis analizis no logran ver nada, tiene perfecta salud por ahora y al parecer nada a cambiado solo... su edad física, ahora su mentalidad y tamaño es de un niño de un año y dos meses.

Cole: ¡¿Es en serio?! ¡Dije que quería que volvieras a ser un niño! Pero no era para que te lo tomes tan literal.

Lloyd: ¿Litetal?

Cole: ¡Ni siquiera sé por qué estoy hablando con un niño!

Nya: Muy bien chicos calmemosnos. Esto... no debe ser tan malo... primero debemos descifrar cual fue la causa de que se volviera pequeño ¿A caso alguien lo vió diferente ayer o tal vez antes?

Kai: Bueno él... ayer en la noche no se veía del todo bien después de haber tomado el té.

Nya: ¡Ven! Ya tenemos algo ¿Alguien más? ¿Cole? -negó- ¿Zane? -negó- ¿...Jay?

Cole: Entonces de seguro pudo haber sido el té, tal vez tenía algo.

Lloyd: ¿Ago?

Cole: ¡Deja de remedarme niño!

Jay: ¿Pero entonces por qué no nos pasó nada a nosotros?

Zane: Porque Kai le trajo un té diferente a Lloyd.

Todos giraron a ver al Ninja De Fuego con sospechas.

Kai: ¡Pero yo solo saqué el que estaba en la sección de tés normales!

Nya: Un segundo. Zane, Jay, ustedes estuvieron ordenando los tés.

Zane: Yo le dije a Jay como ordenarlos.

Kai: Jay ¿Cómo los ordenaste?

Jay: Etto... pues miren, es gracioso saben, es decir eran varios tés y... varias filas osea... debieron verlos porque...

Cole: Jay ¿Qué hiciste?

Lloyd: ¿Icite?

Cole: ¡Oh! ¡Ya basta!

El pelirrojo suspiro resignandose a seguir negandoles.

Jay: Puede que tal vez... y solo tal vez, haya puesto los tés en otro orden diferente al que Zane me dijo.

Todos-Jay: ¡¿QUÉ?!

Jay: ¡Vamos chicos, Zane parecía un robot hablando! Sin ofender Zane.

Zane: Soy un nindroide, no puedo ofenderme.

Nya: ¿Qué clase de té estaba ahí?

Jay: ¡Que voy a saber yo! Deberíamos ir a ver.

Cole: Pues que buena idea genio.

Zane: Si, además ya se nos hizo tarde.

Kai: Chicos...

Jay: ¡Pues perdón por... vivir!

Kai: Chicos...

Nya: Ya no importa mejor vayamos de una vez.

Kai: Chicos...

Cole: Pues por mí está bien.

Kai: ¡CHICOS!

Todos-Kai: ¡¿QUÉ?!

Kai: Lloyd ya no remedó a Cole estas últimas dos veces.

Con lentitud voltearon a ver a la mesa en donde "Baby Lloyd" ya no se encontraba sentado, ni parado, ni presente.

Pegaron un brinco y se miraron con tensión.

Nya: Okey okey okey, guarden la calma y... separemonos para buscarlo.

Cada quien fue por lugares distintos, recorriendo la cocina, todas y cada una de las habitaciones, el baño y alivio sintieron al no encontrar nada en el horno o el lavavajillas.

Se volvieron a reecontrar en la sala después de haber visto todo el barco.

Cole: ¿Lo encontraron?

Kai: ¡No! ¡Y ya recorrimos todos los adentros del barco!

Zane: ¿Y qué tal si no está adentro?

El nindroide fijó su vista hacia la ventana y luego sus amigos hicieron los mismo. Aterrandose profundamente al ver como el pequeño bebé estaba caminando sin equilibrio por el barandal del barco.

Cole: Santa Madre Purísima de Ninjago.

Todos a lo más rápido que se les permitió correr, salieron a la cubierta pero Lloyd ya no se encontraba en el barandal. Volvieron a su búsqueda pero ya sin encontrarlo de nuevo.

Jay: ¿Y si ya se cayó?

Kai: ¡No digas eso!

Cole: ¿Qué hace ese niño para moverse tan rápido?

Lloyd: ¿Dapido?

Al escuchar esa vocecita notaron su procedencia. Estaba sentado en una de las maderas que sostenían las velas, observando con una sonrisita inocente a sus amigos por debajo de él.

Nya: Ve por él.

Kai: ¿Por qué yo?

Nya: Porque yo lo digo.

El castaño primero dió un salto a ese techo y agarrandose del asta, logró subir a la misma madera extensa en donde se encontraba el niño de ojos verdes que agitaba sus piernitas en el aire.

Kai: Vamos Lloyd... ven aquí.

El mencionado no hizo caso, es más, se alejó del Ninja De Fuego levantandose y empezando a caminar por la madera.

Kai: No hagas las cosas más difíciles Lloyd.

Se volvió a alejar y ahora el castaño buscó algo de su bolsillo no solo extrañando al niño sino que también al resto de sus amigos.

De ahí sacó una paleta de caramelo de fresa y se la mostró al de ojos verdes que extendió su manita.

Lloyd: Dame.

Kai: Ven aquí y te lo doy.

Esta vez si obedeció y con pasitos torpes logró llegar hasta el muy mayor ahora que él.

Volvió a extender sus manos con una carita que daba cierta pena y haciendo un puchero mega adorable.

Kai lo cargó y ya teniendolo entre sus brazos le dió la paleta ya sin el envoltorio obviamente porque ahora él solo no podría hacerlo.

Lo miró con ternura por unos segundos y luego con cuidado bajó hasta el techo y luego volviendo a la cubierta con sus amigos.

Cole: No abuses de esto, eh.

Lloyd: ¿Eto?

Cole: ¡Listo! ¡Me harté!

Kai: Ja, este niño me empieza a caer bien.

Zane: Bueno en realidad si es muy tierno.

Lloyd: ¡Achu! -estornuda-

Todos-Lloyd: Awwww.

Nya: ¡Aw! ¡Es una ternura!... ¡Quiero cargarlo!

Kai: Esta bien -se lo entrega a Nya.

Nya: Esperemos que no se acuerde de esto cuando vuelva a la normalidad... si es que vuelve a la normalidad en primer lugar.

Cole: ¿Dices que no va a volver a la normalidad? -espera un rato- ¡Bien! Ya no me repitió.

Lloyd: ¿Depetir?

Cole: ¡Mi^%#*!

Kai: -le tapa los oídos- ¡No digas esas palabras en frente del niño!

Nya: Tal vez, ni sabemos por qué está asi de pequeño, como dije antes: Primero saber qué le pasó y luego ver como revertirlo.

Jay: Igual debemos ir a la tienda, ¿Qué hacemos con él?

Zane: No nos queda de otra, lo llevaremos con nosotros y por ahí le deberíamos comprar ropa y... una carriola sería buena.

Jay: ¿Y qué haremos cuando llegue el Sensei?

Kai: Esperemos que haya vuelto a la normalidad para ese entonces, aún tenemos una semana.

Nya: Ya no esperemos más y vamonos de una vez. Cole trae el desayuno, comeremos en el camino.

Cole: En seguida.

Lloyd: ¿Seki-? -Nya le tapa la boca-

Nya: Ya no molestes al tío Cole.

Después de ir a buscar el desayuno, volvieron a salir y formaron sus dragones elementales. Kai llevó a Baby Lloyd consigo sujetandolo fuerte para que no se cayera o se intentara escapar otra vez y por si acaso le dejó comiendo otro dulce para que este quieto.

Nya: ¿Y ahora? ¿Piensas decirselo?

Kai: ¿Quieres qué le diga a un bebé que me gusta?

Jay: Pues no lo recordaría.

Kai: Que graciosos -sarcástico-.