Capitulo 29 - Cambio
El sofá se hundió con el peso de un segundo cuerpo. Harry me guió a sentarse a su lado, sus párpados pesados por todo el humo y el alcohol. Intentaba claramente mantenerlos abiertos. Toda esta situación llevaba el nombre de peligro y tenía que alejarme.
"No puedo dejar de pensar en ti... en el vestido. El negro. Precioso." Las palabras salieron de su boca mientras sus dedos se movían hasta tocar mi cabello.
"¿Lo llevarías otra vez? ¿Para mí?" Dijo lentamente. Cuando no respondí, Harry se acercó más a mí. "Por favor, habla conmigo, Lia." Respiró en mi oído y un brazo me cubrió los hombros. Me puse más cerca de él, el espacio entre nosotros desapareció. Los labios de Harry rozaron la parte por debajo de mi oreja, el contacto fue una representación de miedo y excitación al mismo tiempo.
"Has bebido mucho." Finalmente, le dije. "Tengo que irme."
"Te vas a quedar aquí." Él afirmó. "Quiero ver esos ojos. Esos ojos bonitos." Levantó mi barbilla y me dio la vuelta para mirarlo.
Harry dejó caer su mano hasta mi regazo y poco a poco trazó círculos sobre él con los dedos, haciendo que me estremeciera. Nunca me había tocado así antes. Mi atención se desvió de él cuando presionó sus labios en mi mejilla. Luego me besó en la comisura de mis labios y noté como si en las puntas de mis dedos hubiera fuego.
Cerré los ojos mientras mi resistencia cesó. Poco a poco volví la cabeza hacia él, para que me besara correctamente. Lo sentí sonreír contra mis labios antes de que los mojara. Cada predicción que hice sobre la pérdida del sentido racional estaba en lo cierto. Su mano se cerró sobre mi muslo y sentí adrenalina por todo mi sistema. Me acordé de la primera vez que Harry me había besado, él estaba borracho entonces también.
Nuestras respiraciones iban y venían más rápido cuando el beso se hizo más profundo. Lo único que importaba ahora era estar lo más cercano a Harry como fuera posible, nada más me vino a la mente. De repente, todo esto era lo que me importaba. Deslizó la mano hasta mi cintura, me guiaba para ponerme debajo de él. Entonces conocí algo nuevo. Sentí su lengua con la mía en una serie de movimientos extraños.
No estaba seguro de qué hacer con esto, pero me elevé a un nuevo nivel de emoción. Se hizo un nudo en mi estómago en respuesta a la extraña sensación. Mis manos encontraron un lugar en su cabello y acaricié los rizos mientras buscaba más la sensación increíble que me estaba haciendo sentir. Pero Harry estaba perdiendo su ritmo, sus labios gradualmente se volvieron inactivos. Y en menos de un minuto, tenía su cabeza apoyada en mi pecho y el peso de su cuerpo echado sobre el mío. Se había quedado dormido. Sabía que no podría permanecer despierto durante mucho tiempo.
Me empujé hacia fuera, con cuidado de no despertarlo. Deslicé una almohada debajo de su cabeza antes de alejarme de la cama, todavía estaba nerviosa por lo que acababa de suceder. Le observé mientras un razonamiento recorría mi mente regañándome por lo que acababa de hacer. Harry estaba ebrio y le dejé que me hiciera esto. No recordaría nada por la mañana.
Mis dedos todavía temblaban mientras los pasaba por mi pelo en señal de socorro. Sabía que esto sucedería. Que me ahogarían el remordimiento y la culpa después, pero lo hice de todos modos. Y me sentí sucia. Esta no era yo. Thalia no dejaría que un hombre la tocara de esa manera. Harry me hizo cuestionarme quién era como persona.
Todo lo que yo creía que sabía acerca de mí... no era exactamente real. La imagen que tenía de mí misma era por la cual mis padres lucharon desesperadamente para que me convirtiera, a la que dedicaron su vida. ¿Y lo había tirado todo por la borda? La cara de Harry estaba ardiendo, ya que se le veían gotas de sudor. Se le veía tan incómodo a pesar de que estaba profundamente dormido. Me pregunté qué le había llevado a tomar tanto alcohol esta noche. No pude evitar ir a la cocina y coger un paño húmedo. Volví de nuevo a la sala de estar con ella y me arrodillé cerca del sofá. Empujé el pelo húmedo de Harry hacia atrás y me sonrojé por lo guapo que era, incluso en este estado desaliñado.
Le puse el paño sobre la frente, esperando que pudiera reducir el calor en su piel. Entonces le di unas palmaditas suavemente en la mejilla y la nariz, antes de trasladarme a su cuello. Todo el tiempo, estuve recordando nuestro beso. ¿Qué me estaba haciendo Harry? Antes de conocerle, nunca habría pensado que podrían existir estos sentimientos. ¿Podía él, sentir lo mismo por mí? ¿Por qué habría pintado un cuadro de mí si fuera alguien insignificante para él? Ahí vamos de nuevo.
Le separé las cadenas del cuello y se las quité. Las puse en la mesa de café antes de llevar el paño húmedo por su cuello otra vez. Le limpié a lo largo de su pecho y terminé sobre la frente. Le di un beso allí, y las lágrimas nublaron mi visión.
Me sorprendí a mí misma por los sentimientos que ahora sentía por él. Me resistía a aceptarlo, pero estaba enamorada de él. Él era un desastre, y él y era parte de ellos pero lo amaba. Nunca había sentido nada igual. Y esto no era nada más que malas noticias. Esta fue una forma de traicionar a mi madre, mi padre, a Darren y sobre todo a mí misma.
Me había quedado en el baño toda la mañana. Me culpaba a mí misma por no despertarme más temprano antes de que la señora Briffen se fuera por el fin de semana, tal vez ella podría haberme ayudado. Mi mente zumbó mientras pensaba en lo más práctico que podía hacer en ese momento.
Mi período siempre había sido irregular, y aun no me había venido ni una sola vez desde que estaba aquí, así que me había olvidado de él. Pero ahora que había regresado con una explosión, me arrepentí de no tomar ninguna precaución.
¿Qué iba a hacer? ¿Decidle a Harry que fuera a una tienda y que comprara compresas para mí? Odiaba la vida.
Pero escuché una voz débil que hablaba hace unos treinta minutos, por lo que supuse que Harry estaría despierto. No pude estar más en lo cierto cuando hubo un golpe en la puerta del baño.
“¿Thalia? " Otro fuerte golpe.
" ¡Perdón!” Respondí en un pequeño gruñido.
"Vine hace casi una hora y estaba aquí. Y sigues estándolo.” Dijo Harry. “Sólo quería asegurarme de que no estás haciendo nada estúpido. "
"No, no estoy tratando de suicidarme." Grité de vuelta, sorprendida por lo diferente que sonaba cuando estaba sobrio.
"Entonces, ¿por qué sigues ahí?” Preguntó.
“¿Por qué necesitas saberlo? "
“Llevas ahí demasiado tiempo. Voy a abrir la puerta. “Le oí lidiar con el pomo, pero no pudo abrirlo.
“¡No, yo - yo no puedo salir! "
"¿por qué demonios no?”
Mi silencio le molestaba y volvió a preguntar con voz más firme. “¿Por qué no puedes salir? "
“Porque yo... yo no puedo, ¿de acuerdo? " No me atreví a decirle aunque sabía que no tenía más remedio que depender de él para que me ayudara.
"¿Estás herida?” Harry cuestionó. “No me voy hasta que me lo digas. "
"Lo…tengo”. Me las arreglé para decir.
"¿Qué diablos significa eso?” No lo iba a dejar pasar.
"Tengo el período, ¿de acuerdo?” Solté un repentino estallido de ira y luego me mordí los labios cuando la vergüenza inundó mis sentidos.
“Oh. " Se limitó a decir y sentía correr la sangre por mis mejillas. “¿Eso significa que vas a quedarte allí durante toda la semana? " Oí un toque de risa en su voz.
"Probablemente”. Le contesté.
“¿Por qué no me lo dijiste? " Él se echó a reír.
“Y, ¿qué harías? "
"Podría tratar de conseguir algo... en alguna parte. " Podía imaginarle encogiéndose de hombros con una sonrisa estampada en su rostro. "Si quieres que lo haga. "
"Está bien. " Le respondí, esperando que nuestra conversación terminara aquí.
"Está bien, ¿qué?” Él bromeó.
“Si hicieras eso. " Suspiré, sabiendo que Harry no iba a dejarlo pasar.
“¿Hacer qué? "
“Harry ". Hice hincapié.
“Bueno, bueno. ¡Volveré pronto!". Él se rió.
Justo después de tener que enfrentarme a la peor clase de humillaciones, tenía que unirme a Harry para el almuerzo. Protesté contra ello, pero él me dijo que le debía una. También amenazó con seguir hablando de ello avergonzarme más si no me unía a él.
La verdad era que no quería enfrentarme a él después de lo que pasó anoche. Las cosas habían cambiado, al menos para mí. Cuanto más tiempo pasaba con él, más ponía en peligro a mis emociones. Constantemente me preguntaba si recordaba al menos un fragmento de lo que sucedió. Hasta ahora, no había dicho una sola cosa relacionada con ello.
Supongo que lo mejor sería que siguiera siendo así. Yo todavía no sabía lo que iba a hacer con Damian y francamente, quería mantenerlo en la parte trasera de mi mente por el mayor tiempo posible a pesar de que sólo me había dado una semana.
Harry había pedido pizza y era un buen cambio por la sopa de setas que me había hartado durante la semana pasada. Me ayudó a recuperar mi apetito un poco. Había cogido una porción cuando Harry bajó del piso de arriba. Sus cejas juntaron mientras me miraba y yo estaba sorprendida por el repentino cambio de actitud.
"¿Has estado en alguna de las habitaciones de la derecha?"
________________________________
– toujourscestmoi
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top