luego de haber llegado del instituto y de haber comido los helados decidieron ir a casa de michael. su madre no llegaba aún, por lo que luke le hacía compañía porque no le gustaba que se sintiera solo. michael tiró de la mano de luke y lo llevó hasta su habitación con una sonrisa constante en su rostro.

"quiero que me ayudes a elegir qué falda llevaré mañana." le dijo cuando lo obligó a sentarse en su cama.

el mayor suspiró mientras michael se adentraba de fondo a su armario y sacaba tres faldas, una rosada, una celeste y una blanca. se puso primero la blanca sin molestarse en ir hacia el baño para cambiar su ropa, dejándole ver a luke sus panties color lila. dio una pequeña vuelta en la falda haciéndola levantarse ligeramente y se la sacó con cuidado, dando pequeños saltitos para buscar la otra. subió por sus piernas la delicada falda celeste y sonrió cuando ésta cayó relajadamente sobre sus muslos. una sonrisa no dejaba la cara de luke.

por último se probó la tercera falda su agachó dejando en alto su trasero mientras buscaba algo, luke no podía despegar sus ojos de las panties lilas que la falda revelaba al estar en esa posición, pudo notar que michael se estaba poniendo algo en los pies. no fue hasta terminar que su aliento le abandonó ante la imagen de michael con medias de pierna completa.

"esa te queda maravillosa, mikey." susurró controlando sus ganas de quitarla.

michael sonrió y con cuidado se la quitó y la guardó, junto a las medias. aún en panties y su suéter se subió al regazo de luke y escondió su cara en la curvatura de su cuello, mordiendo suavemente y succionando para marcar a luke, robándole un vergonzoso gemido.

"¿qué significa ese sonido?" preguntó con inocencia.

"cuando una persona se siente- hm, jod- que te quiero mucho." luke rió metiendo su rostro entre el cuello y el hombro de michael, mordiendo un poco fuerte haciendo a michael soltar un involuntario gemido también.

"eso significa que yo te quiero más." jadeó el menor mientras luke volvía a atacar su cuello.