7. Evadir problemas del pasado
— No digas tonterías — escuché la voz de Jimin detrás mío — tú fuiste una de las primeras personas que lo trató mal, tú no tienes derecho de ahora fingir que eres bueno —
— Lo lamento, no quería tratarte mal —
— Mejor vete, solo estás molestando a Jungkook de nuevo, déjalo en paz — Jimin me agarró del hombro y me apartó — yo estoy con él, no te necesita —
— Sí... lo lamento — me puse de pie y salí corriendo, viendo al papá de Jungkook en frente mío — lo lamento mucho — pasé por su lado
Llegué a mi casa lo más rápido que pude, no estuve tranquilo y me seguía sintiendo muy mal al respecto.
— Taehyung —
— ¿Humm? — pregunté alzando mi mirada
— Si no tienes hambre puedes dejarlo, no hay problema —
— Si tengo hambre — me metí una cucharada de comida a la boca
— Taehyung... hoy me llamó tu papá —
— Creo que iré a descansar. Tienes razón, no tengo hambre — me puse de pie
— Taehyung, siéntate — me miró mal — tenemos que hablar —
— Tengo sueño, hablemos mañana —
— No, Taehyung... —
— No quiero hablar de eso, para ya —
— Tu papá vendrá si sigues así, solo quiere hablar cont-... —
— Fui suspendido dos días del colegio —
— ¿Qu-qué? —
— Me bajaron puntos en conducta — me dirigí a mi cuarto
— ¡Taehyung, espera! —
— ¡Buenas noches! — corrí a mi cuarto
— ¡Taehyung abre la puerta! —
No lo hice, solo miré mi pared en toda la oscuridad, pensé en muchas cosas; Jungkook, mi papá, mis estudios, incluso en mi vida amorosa. No sabía que hacer con ninguna de ellas. Cuando menos me di cuenta me dormí.
— Taehyung, he dejado el desayuno listo, también la comida — escuché la voz de mi mamá — por favor come, y por favor intenta hablar con tu papá —
Me levanté tarde de la cama, bajé y empecé a limpiar un poco, escuchaba música mientras lo hacía. Me levanté con ánimos, hoy era un nuevo día y no podía renegar.
— Eres encantador desde la cabeza hasta los pies — cerré mis ojos para cantar — estoy orgullosa de que seas tú la persona a la que amo — canté mientras daba vueltas — esperar por ti fue divertido, ahora incluso es aire es dulce, te amo de esta mane-... — me detuve cuando una llamada entró a mi celular
No iba a contestar, era un número desconocido, no sabía quien era, tal vez alguien malo, el banco o solo movistar, no lo sabía. La idea era no contestar y esperar a que se acabe la llamada para seguir escuchando mi música, pero de nuevo volvió a sonar, pensé en mi mamá y creí que tal vez algo malo le había pasado en su trabajo.
— ¿Aló? — respondí con algo de miedo — ¿Quién es? —
— Hola, Taehyung. Te extraño mi pequeño —
— Número equivocado — colgué de inmediato al reconocer su voz
La música de inmediato empezó a sonar, miraba mis pies pensando en si hice lo correcto. Mi papá se fue cuando tenía siete años, venía de vez en cuando, no era malo conmigo, al menos no en frente de mí. Lo aburría. Desapareció por cuatro años más, para luego enterarme por un compañero de clases que había visto a mi papá por aquí, no sabía como reaccionar, así que lo busqué, dándome cuenta de que no vivía tan lejos como creía. Entendí que no quería verme, solo estaba a un par de minutos de casa, y nunca vino, ni en mis cumpleaños. Cuando llegué a su casa una alfa con bata me abrió, me miró extrañada, recuerdo escuchar la voz de mi papá, preguntando quién diablos fue quien arruinó su hora de sexo, cuando me vio se puso pálido, de ahí las llamadas, los intentos de comunicarse conmigo. No quiero hablar con él, hemos llevado lejos el uno del otro suficiente tiempo, además si antes no tuvo interés en hablar conmigo, ¿Porqué ahora?
— Es inútil — me dirigí a la cocina y empecé a comer de la olla
Todos los ánimos con los que me había levantado hoy se fueron de pronto. Subí a mi cuarto y me tiré en mi cama, fue lo único que hice, incluso cuando mi mamá tocó la puerta, solo seguí durmiendo.
>> Taehyung ven a mi casa mañana, es cumpleaños de mi hermana <<
>> Bien 😊 <<
A la mañana siguiente me alisté, no le dije a mi mamá que saldría, para cuando ella llegue yo estaría ya en casa. Salí y tomé un bus, en cuarenta minutos estuve en casa de Hoseok, él tenía una hermana menor de diez años.
— Feliz cumpleaños — la abracé
— Muchas gracias —
— Ahora sí, vamos — Hoseok me agarró del brazo
— Pero recién llego, ni siquiera he probado la torta —
— Probarás algo mejor allá —
— ¿Dónde? —
— Solo sígueme —
— Bien... —
Me llevó a un centro comercial, era chico, no como el que está cerca de mi casa. Paseamos un rato, hasta que se detuvo en medio de la nada y me miró.
— Vamos a ver una película —
— No he traído dinero suficiente — me quejé
— Yo te doy lo que falta — me agarró del brazo y jaló
— Mejor vamos a comer —
— ¿Quieres comer? —
— Sí —
— Vamos a comer entonces —
— Oye... ¿Tus padres se molestaron? —
— Les expliqué todo, no se molestaron, ¿Tu mamá sí? — yo solo asentí — ¿Pero le explicaste? — negué — ay. Debiste de hacerlo —
— No importa, vamos a comer —
Lo pasamos bien, comimos donas y helado, también habían juegos ahí así que jugamos eso. Hoseok quería decirme algo, pero no lo hizo, nos fuimos a su casa nuevamente, me dió torta y otros dulces.
— ¿Ya terminó? — me reí
— Sí, nos vemos el martes —
— Sí, nos vemos —
Tomé mi bus, ya eran las seis, podía darme cuenta por el color del cielo. Cuando bajé del bus vi a lo lejos a un niño con sus padres, me detuve a mirarlos, se veía contento. Antes era así, yo también caminaba junto a mis padres, con cada uno a mi lado, era feliz.
Llegué a mi casa temprano, aproveché en comer y subir a ducharme antes de que mi mamá llegara. El día siguiente fue igual o más tranquilo, estuve dibujando y durmiendo todo el día.
Cuando los dos días de suspensión terminaron me alisté, ya debía de ir al colegio. Salí temprano esta vez, fui aún cuando no habían muchos alumnos. Mi mamá se sorprendió al verme despierto tan temprano, yo solo sonreí y salí. Cuando entré al salón vi a Jungkook, no sabía que llegaba tan temprano, no había nadie más que él y yo. Él estaba sentado de forma recta, miraba la pizarra con atención, como si estuviera en clases.
— Hola — me acerqué a él
— Ho-hola, Taehyung — dijo algo sorprendido
— La última vez yo... yo dije que te ayudaría, eso haré —
— ¿Ayudar? —
— Sí, con tu cuaderno —
— ¿¡En serio me ayudarás!? — se puso de pie
— Sí — sonreí al ver como dió un pequeño salto y aplaudió con felicidad
— Taehyung me va ayudar, Taehyung me va ayudar — repitió verías veces
— Espero que eso no te incomode —
— Claro que no — se acercó y me abrazó, dejándome perplejo
— Me-me alegro — dije sintiéndome raro
Durante la hora de clases Jungkook estuvo atento como siempre, me sentía mejor, esto es hacer las cosas bien.
— Hoy vamos a la cafetería, vi que están preparando frejol colado — dijo Hoseok en voz baja
— Sí, pero no iremos solos — dije viendo como frunció el ceño — solo espera —
Las clases continuaron hasta el receso, luego de eso me acerqué a Jungkook.
— ¿Vamos a la cafetería? — pregunté, viendo como Jimin llegaba
— Él comerá conmigo —
— Por supuesto, tú también estás invitado — dije viendo como me miró mal — te pido perdón, a los dos — reverencié — quiero hacer las cosas bien, quiero ser un amigo para Jungkook —
— ¿Amigo?, ¿Porqué? —
— Taehyung es mi amigo — Jungkook se puso de pie — vamos Taehyung, vamos a la cafetería — me agarró del brazo
Volteé a ver a Hoseok y le hice una seña para que nos siguiera, los cuatro fuimos a la cafetería. Al principio fue algo incómodo, nadie hablaba más que Jungkook.
— Iré a traer algo, ¿Me acompañas, Jimin? — preguntó Hoseok
— ¿Porqué iría contigo? —
— Porque sí, ven — lo agarró del brazo y se lo llevó
— Es-estoy feliz, papá me dijo que hacer amigos era bueno — dijo moviendo unas pelotitas en su mano
— ¿Estás nervioso? —
— Algo, es que no estoy acostumbrado a salir del salón a esta hora, pero tengo que adaptarme a cambios, papá me dice que eso es bueno — dijo moviendo más rápido las pelotas
— Tranquilo — puse mi mano encima de la suya — si me dices que esto no te gusta podemos volver al salón —
— No, me gusta — sonrío, pero no me miraba
De hecho no miraba nunca a nadie, me parecía curioso eso, quería aprender de él, ser una buena persona, ya que no lo fui en un principio.
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