32. Me gusta, todo
— ¿Es-estás bien? — pregunté preocupado al ver a Taehyung rojo y temblando mientras miraba al suelo — ¿Te pasa algo?, papá llama a una ambulancia, Taehyung no luce bien — me acerqué a Taehyung — dime que te duele, ¿Es la garganta?, ¿El cuerpo?, tenemos pastillas en el botiquín —
— Me-me voy — dijo alejándose de mí — quiero irme a casa... —
— ¿Pero te sientes bien? —
— ¡NO! — me encogí cuando gritó — ¡No estoy bien, Jungkook! —
— No te preocupes, te daré un paracetamol, eso hará que te sientas mejor —
— No lo hará... ¡La vergüenza no se me irá con un paracetamol! —
— ¿Y porqué estás avergonzado? —
— Por-porque dijiste cosas íntimas, cosas que solo nosotros dos debemos de saber —
— ¿Qué cosas? —
— Hablemos cuando me sienta mejor — se fue corriendo
— Hablen luego, dale tiempo — su mamá me sonrío y se fue detrás de Taehyung
— ¿Dije algo malo? — volteé a ver a mis padres
— Jungkook, sí — mi papá se acercó a mí
— ¿Qué fue? —
— Lo que me dijiste, que tú y Taehyung... eso —
— Pero no tiene nada de malo, es normal que las parejas lo hagan —
— Lo es, pero no debes de estar diciéndole eso a tus padres, eso es solo entre tú y tu pareja —
— ¿Entonces hice mal al decir eso? —
— Sí —
— ¿Entonces debo de pedir disculpas? —
— Sí, pero no ahora —
— ¿Porqué? —
— Porque tengo que abrir el local y como ya no tengo a mi ayudante te necesito a tí, y también porque sé que Taehyung necesitará unos días para calmarse —
— ¿Cuántos días? —
— Dos —
— Bien, esperaré dos días... ¿Este cuenta como uno? —
— Sí —
— Entiendo —
Durante todo el día estuve ayudando a mi papá, también hablé un poco con mi padre, es divertido.
— Compra flores —
— Lo haré —
— Dile que lo sientes —
— Eso sin duda haré —
— Dile que le comprarás un helado para que se sienta mejor —
— Buena idea —
— Muy bien, hijo —
— Gracias, padre —
Esperé con paciencia a que se cumplan los dos días, fue muy torturoso, mis ojos siempre iban al reloj, quería que sean las cuatro de la tarde. Taehyung come entre la una y dos, si voy a esa hora interrumpiré su comida, puede molestarse de nuevo por eso.
— Cuatro en punto — me puse de pie y agarré las flores que mi papá compró
Salí de casa y fui a la de Taehyung, toque la puerta solo dos veces, siempre lo hago así, la segunda es por si no escucharon la primera.
— Jungkook... —
— Perdón — extendí las flores — fue mi culpa, no lo volveré a decir, solo a nosotros, pero al resto no —
— Bien — sonrío, eso me decían que las cosas estaban bien — entra —
— Pensé que irías a trabajar, pero mi papá me dijo que hoy no abrirá la pasteleria por feriado —
— Así es, menos mal, sería vergonzoso verlo luego de eso... —
— No lo volveré a hacer, lo prometo —
— Bien —
— ¿Me sigues amando? — me acerqué a él
— Claro que sí — me abrazó, sentí como un suspiro de alivio salió de mi boca
No pude dormir tranquilo por eso, temía haber hecho algo realmente malo y que por eso Taehyung decida no amarme, no quiero eso, me gusta estar a su lado.
— Yo también te amo — sonreí
○●○●⊙●○●○
(Un mes después)
— ¡Achís! — estornudé — ay no, creo que me voy a resfriar — me quejé viendo mi libro de estudio
Estaba en exámenes, Jungkook también, es por eso que ninguno ha podido verse más allá de los viajes en bus. Mi trabajo, los estudios y los problemas con mi mamá me están consumiendo. Mi mamá hace unos días me dijo que saldría de viaje por unos días, no hubo problema en eso, el problema empezó cuando me dijo que Jungkook no podía entrar, no entendía el porqué, Jungkook nunca me haría daño, y fue ahí donde empezó todo.
— Terminé — dije poniéndome de pie para entregar mi examen
Quería irme a casa, me estaba empezando a dar sueño, pero no podía irme aún, tenía mucho que hacer, tenía libros y libros que leer.
— Me duele la cabeza — se quejó Yoongi
— Falta poco — sonreí al ver la hora
— Pero igual tenemos tareas que hacer —
— No, no me digas eso — tiré mi cara contra la mesa
— Sí, solo debemos de esforzarnos, ya solo nos faltan dos meses para terminar —
— Sí, falta poco — volví a sonreír
— Mi padrino me dará trabajo en su hospital... es una suerte que lo tenga —
— ¿Y tus papás? —
— Siguen con su vida loca — se río — para ellos fue una bendición que mi padrino me llevara con él —
— ¿Es un buen sujeto? —
— Claro que sí, gracias a él voy a ser alguien —
— Se ve que lo aprecias mucho —
— Sí —
— Mi papá y yo seguimos con una relación débil —
— ¿Por lo de Jungkook? —
— Eso y otras cosas, él quiere controlar mis cosas pero no puede, además me es incómodo estar con él... y su pareja —
— ¿Pero lo sigues viendo? —
— No, solo llama de vez en cuando y charlamos un poco, pero nada más, con mi mamá es con quien realmente hablo, ella es una buena mamá, con sus defectos pero buena, ella nunca me abandona... aunque ahora tenga problemas con ella —
— ¿Problemas? —
— Sí, no quiere que Jungkook esté dentro de casa, ¿Puedes creerlo? — me reí
— Bueno... es normal —
— No, Jungkook nunca me haría daño —
— No daño, pero si otra cosa —
— ¿Qué?, no entiendo —
— Jungkook es un alfa y tú un omega... —
— Para, sé por donde vas y te equivocas —
— ¿No te has dado cuenta verdad? —
— ¿De? —
— Jungkook se a vuelto intimidante, además de que su olor es más intenso de lo normal, eso solo significa una cosa —
— Su celo... —
— Así es, amigo —
¿Cómo no lo noté?, ¿Cómo?, es que es absurdo, yo soy su novio, debí de ser el primero en notarlo. Ahora entiendo la actitud de mi mamá, ahora todo es tan claro.
— Taehyung, vamos — escuché la voz de Jungkook en frente mío
— ¡Ah! — mi lapicero se cayó — ho-hola — me puse de pie y alisté todas mis cosas para irnos
— Adiós Taehyung, nos vemos — se despidió Yoongi
— Sí... — me choqué con la mirada penetrante de Jungkook — vamos — lo agarré del brazo — ¿Cómo estuvo tu día? — pregunté cuando el silencio fue demasiado para mí
— Estuvo bien, mi maqueta tuvo buena calificación —
— Me alegro —
Durante el viaje en bus no dije nada, sólo miraba el camino, notando que sí, el olor de Jungkook se sentía más fuerte, no podía mirarlo a la cara, me sentía extraño, nervioso.
— Llegamos —
— Taehyung, qu-... —
— Me tengo que ir, ¡Hablamos luego! — lo solté y me fui corriendo a mi casa
(Cinco días después)
— ¡Achís!, ¡Achís!, ¡Achís!, ¡Achís! —
— ¿Seguro que estás bien? —
— Sí, gracias por preocuparse señor —
— Bueno, espero no sea nada —
Estaba en mi trabajo, eran las doce aún, faltaba mucho para ir a casa. Lo bueno era que era domingo, lo malo era que me sentía mal, creo que de nuevo enfermé.
El día estuvo muy ajetreado, siempre los domingos el local está lleno, tuve que aguantar no estornudar en frente de las personas, fue agotador, pero al fin me iba a casa.
— Hasta el sábado —
— Hasta el sábado, cuídate mucho Taehyung —
— Gracias señor —
Mientras me dirigía a casa me empezó a dar sueño, los ojos me empezaron a quemar de una manera infernal, fue horrible, tuve que esforzarme de sobremanera para llegar a mi casa. Mi mamá no estaba en casa, el jueves viajó y no vendría hasta el próximo jueves o viernes.
— Mamá... — me quejé
Fui al cuarto de mi mamá y busqué pastillas, bajé y con agua tibia tomé, esperaba mañana sentirme mejor. Subí a mi cuarto y me tiré en mi cama, durmiendo de inmediato. Cuando desperté ya eran las ocho de la noche, me sentía un poco mejor así que tomé un té caliente y me puse mi pijama para dormir, seguro mañana estaría mejor.
No fue así, cuando desperté me di cuenta de que mis ojos estaban rojos, tuve que llamar a mis profesores para comunicarles mi estado y que tal vez no asistiría hoy. No podría ir y solo me quedaba descansar, y lo hice, tenía sueño. Desperté por un toque en la puerta, me acerqué lo suficiente para abrir la puerta, quise oler quién era pero mi olfato estaba arruinado. Al abrir la puerta vi a Jungkook con una bolsa de pastillas, al parecer su papá le había dicho que enfermé.
— Hola — me acerqué a abrazarlo
— No te vi en la universidad —
— Estoy enfermo, quiero dormir — sonreí
— Estás muy débil, eso es preocupante —
— Es el estrés, ven, pasa — lo llevé a la cocina
— Deberías de abrigarte —
— Tengo calor — dije mientras buscaba galletas
Me sentía mejor realmente, solo que no olía nada, luego de eso me sentía bien.
— ¿Tienes hambre? —
— No, ya comí —
— ¿Sed? —
— No —
— Acepta algo — me reí — toma un poco de yogurt — volteé a verlo con un vaso
— No —
— ¿Estás bien? — dejé el vaso en la mesa y me acerqué a él — ¿Estás molest-...? —
Dos pasos, solo a dos pasos de estar a su lado me encontraba, pero no podía moverme, no cuando mis fosas nasales captaron sus feromonas, en exceso.
— Tu-tu cel-... — no pude continuar porque Jungkook estampó sus labios contra los míos
Choqué contra la pared con fuerza, quise alejar a Jungkook de mí pero sus feromonas me estaban mareando, me estaban haciendo sentir extraño.
— Ju-ungkook — gemí cuando se alejó — Jungkook, espera — me quejé cuando me agarró del brazo
— Quiero — dijo empezando a avanzar conmigo a la parte superior
— Jungkook... — lo detuve antes de que abriera mi puerta
— Taehyung, quiero estar contigo — se acercó a besarme
— Es que tengo miedo — me alejé
— No-no te haré daño, he estado buscando información al respecto, sé que no debo de hacer para que no sea molesto para tí —
— Bien... — agarré su mano — entremos —
Abrí mi puerta con lentitud, sintiendo como mis piernas perdían su fuerza.
— Quítate la ropa — me senté en mi cama
— Sí-í — con torpeza y desesperación lo empezó a hacer
— Sí... — cerré mis ojos y me quité igualmente la ropa
Tenía miedo, había escuchado muchas cosas con respecto al nudo, además de eso tenía vergüenza, tenía panza, no era agradable, para mí.
— ¿Seguro que haremos esto? — pregunté cuando se sentó en frente mío
— Sí —
Me cubrí con mi sábana al ver como me miraba el cuerpo, era vergonzoso, no importaba si antes ya me había visto así, jamás dejaba de ser vergonzoso.
— Eres lindo — tocó mi mejilla
— ¿Lo crees? — sonreí
— Sí, me gustas mucho, todo — se acercó a unir nuestros labios
— Jungkook... —
Nos echamos en la cama, sin romper el beso, él encima mío, sintiendo como mi cuerpo temblaba.
— Humm — gimió mientras se frotaba contra mi pierna
— Sé gentil — lo agarré de las mejillas
— Sí-í — se acomodó cuando abrí mis piernas
— Te amo — lo abracé cuando sentí algo entrar en mí — Ju-ungkook —
— Ta-taehyung — también me abrazó
No se movió, él al igual que yo parecía tener problemas. Ambos teníamos las respiración irregulares que queríamos normalizar. Era horrible, me dolía mucho, lo quería apartar de mí con urgencia, pero a la vez no, quería sentir eso especial que siempre he escuchado en las películas.
Poco a poco las caricias empezaron, los besos, los toques, los movimientos desesperados, sabía que esto sería difícil de explicarle a mi mamá, a sus padres igual, pero ahora eso no importaba.
— Más, más despacio... —
Era algo torpe, Jungkook se movía de forma errática y muy brusca, haciendo que a veces su pene saliera por completo, provocando un sonido obsceno.
— ¡Ahg! — mis ojos se volvía blancos, sentí como mi respiración se volvía cada vez más agitada — Jun-jungkook — lo besé
Me sentía sensible, conforme los minutos avanzaban sentía algo raro abajo, mi vientre se sentía entumecido.
— Má-más despacio — pasé mis manos por su cabello cuando empezó a morder mi pezón — Ju-ungkook —
— Me-me gustas — gruñó alzando mis caderas — Taehyung me gustas mucho —
— Tú también me gustas — lo besé
— No quiero irme de tu lado —
— Jun-jungkook — me corrí cuando tocó algo dentro mío — humm — temblé mientras él seguía moviéndose
— Te amo, te amo mucho — me abrazó
— Jungkook... no, espera, ¡UHG! — me quejé de dolor al sentir el nudo
— A-ah — se tiró contra mi pecho — Taehyung... — me abrazó con fuerza
— Shh, duerme, mi bebé alfa — dije con dificultad, dolía mucho el sentir su nudo, quería llorar pero tenía miedo alterarlo
— Te ves mal, ¿Lo hice mal? — preguntó queriendo alejarse de mí
— No-no, lo hiciste bien — lo abracé y besé coronilla — solo no te muevas —
Buscamos una posición más cómoda, cuando el nudo bajó nos pudimos separar, pero no queríamos eso, no teníamos planeado eso.
— Sí-í — lo agarré del cuello mientras él se movía
— Taehyung... — me besó
Mi cama era un completo desastre, todas las sábanas, almohadas, todo, era un desastre.
— Te amo mucho — agarró mi mano
— Yo también lo hago, mucho — sonreí — ahg —
No podía quejarme de esto, al principio fue incómodo, pensé que no podría, pero me equivoqué, porque se sentía bien, mucho. No sabía si era porque era con él o era producto de sus feromonas, era ahora mismo todo tan confuso.
— Te amo —
Jungkook era tan suave con su toque, pero estaba tan desesperado ahí abajo, sentía lo duro que estaba. Golpeaba en mi interior, con desesperación, pero con amor.
— Jungkook... — me reí mientras él besaba mi cuello
— Me gusta tu olor, es más fuerte —
— Es que tu celo activa ciertas cosas — pasé mis manos por su cabello mojado
— Sí, lo sé — su voz sonaba soñolienta
— Vamos a descansar — lo abracé
Me alejé de Jungkook cuando pude, quedó completamente dormido, yo no podía, tuve que ponerme ropa. Me sentía hambriento, además debía de ordenar el cuarto.
— ¡Ah! —
— Te fuiste — Jungkook me abrazó por la espalda
— Estoy arreglando las cosas — sonreí al sentir su nariz en mi nuca
— Échate conmigo, tengo frío —
— Jungkook... — cerré mis ojos cuando sentí su mano en mi cintura
— Vamos a la cama, me gusta tenerte a mi lado —
— Vamos — volteé, poniendo mis manos en su cuello para besarlo, con solo pocas palabras me convenció
— ¡Taehyung! —
— Ma-mamá — volteé, viendo a mi mamá furiosa en la puerta
Continuará...
Perdón la demora 🥲
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