19. Vacaciones con los abuelos
Algo aturdido entré a mi casa, sentía mis mejillas quemar, mi estómago se sentía raro, pero todo se fue al ver a mis dos padres en la sala.
— Hola, Taehyung — dijo él intentando acercarse, de inmediato retrocedí
— Veo que tienes visitas, mamá. Estaré en mi cuarto — intenté subir pero de inmediato mi mamá se puso en frente mío
— No irás a ningún lado, te quedarás aquí — dijo ella
— Taehyung, tenemos muchas cosas de las cuales hablar. Hay muchas cosas que debemos de resolver —
— ¿Cuántos años tengo? — lo volteé a ver al darme cuenta de que mi mamá no se movería
— Taehyung... —
— Dime, ¿Cuántos años tengo? —
— Vas a cumplir dieciocho — suspiró
— Bien, ¿Cuándo te fuiste de esta casa? —
— Taehyung, tu padre no ha venido para hablar de eso — dijo mi mamá molesta
— Déjalo. Me fui cuando tenías seis años —
— Así es, ¿Y recuerdas desde cuándo estás ausente? —
— Taehyung — me regañó mi mamá
— Desde tus ocho años no te veo — dijo él
— Bien, ¿Entonces eso qué quiere decir? — miré a mi mamá — quiere decir que esta persona no ha estado en mi vida por díez años, que nunca ha venido a visitarme o llamarme —
— No le respondías —
— Hay un motivo, mamá —
— Taehyung, quiero que me perdones —
— Te perdono — cerré mis ojos por un momento, estaba de mal humor — pero el que te perdone no quiere decir que de la noche a la mañana seamos cercanos — recordé a Jungkook — te perdono solo porque es lo correcto. Ahora, me iré a mi cuarto — intenté subir pero mi mamá me agarró del brazo
— No te he criado de ese modo, Taehyung, sé educado, tu papá ha venido de muy lejos para verte, lo menos que pue-... —
— Lo menos que puedo hacer es perdonarlo, y ya lo hice — me solté de su agarre — no quiero discutir contigo, siempre me has dado mucho y te amo por eso, pero no me gusta cuando me pides hacer algo que no quiero hacer —
— Taehyung... —
— No vive tan lejos, sólo a una hora de aquí, así que puede irse ya. No creo que me extrañe, si ha vivido diez años sin mí puede hacerlo diez años más —
— Taehyung, ven, ¡Taehyung! —
No la escuché, sólo subí y me encerré en mi cuarto, escuchando sus gritos.
— ¡Taehyung sal ahora mismo de tu cuarto y pídele perdón a tu papá! —
Me puse mis audífonos, me cubrí con las sábanas y cerré mis ojos. Era obediente, no era el mejor hijo, pero me esforzaba mucho para no ser una carga para mamá, siempre limpiaba la casa, ordenaba todo para que ella al llegar no tenga que hacerlo, evitaba tener problemas con otras personas en el colegio, me juntaba con buenas personas, no iba a fiestas, no tomaba o algo parecido, siempre escuchaba lo que me decía. Pero no siempre podré ser todo lo que ella pide, no si eso tiene que ver con mis decisiones, no puede manejarme.
— ¿Aló? —
— Hola, Taehyung — escuché la voz de Hoseok
— Hola, ¿Cómo estás pasando tus vacaciones? — sonreí
— Bueno, muy bien... —
— No suenas tan contento —
— Taehyung, me voy a mudar —
— ¿Qué?, pero tú... —
— A mis papás les decepcionó que haya quedado en un puesto muy bajo, dijeron que este lugar no tiene lo que yo necesito —
— ¿A dónde te irás?, no creo que te lleven tan lejos —
— Me iré a otra ciudad —
— ¿Qué? —
— Lo lamento. Al parecer no podremos estar más tiempo juntos, re-realmente quería seguir a tu lado —
— Hoseok... —
— ¡Me iré a un lugar nuevo y no quiero! — estaba llorando — me-me gusta estar con ustedes —
— Hoseok... —
— Por favor no dejemos de ser amigos, al menos una vez al mes hagamos una video llamada —
— Lo haremos —
También lloré, no quería que se vaya, Hoseok y yo hemos pasado grandes momentos juntos. Teníamos planeado escoger una carrera juntos, ir juntos a cada clase y graduarnos, casarnos y que nuestros hijos salgan. Teníamos tantas cosas planeadas. Y ahora se va.
A la mañana siguiente bajé a comer algo, me encontré en la sala a mi mamá, ella estaba molesta, lo pude notar cuando me miró de reojo.
— Buenos días — me dirigí a la cocina
No quería discutir, mis ánimos estaban por los suelos. Me sentía mal, tenía un vacío en el pecho.
— Irás al campo — dijo haciendo que me detenga
— ¿Qué? —
— A casa de tus abuelos, irás tres meses —
— No puedo, tengo que presentar el examen de admisión — volteé a verla
— ¿Cuándo es eso? —
— En tres meses —
— Bien, entonces irás por dos meses, y medio —
— Mamá... —
— Vas a irte mañana, irás a reflexionar sobre todo esto, quiero que pienses en tus actos — se puso de pie — yo no eduqué de esa forma a mi hijo, me niego a tener un hijo tan maleducado, así que irás al campo y pensarás en todo —
A la mañana siguiente mi mamá me llevó a la estación de autobuses. Llevé poca ropa, mis audífonos, unos libros, cuadernos y mi celular. Todo esto era muy rápido, no podía asimilarlo.
— Por favor cuídate, piensa en todo y vuelve siendo el niño educado y amoroso que eras antes — besó mi frente — tu abuelo te estará esperando, apenas llegues llámame, no te vayas solo —
— Entiendo... nos vemos — me despedí
El viaje iba a durar ocho horas, mientras estaba en el bus leí algunos libros, marqué todo lo esencial, también escuché música y dormí. Había traído frutos secos y fruta, necesitaba comer. No había ido al campo en donde viven mis abuelo desde que tenía tres años, ha pasado tiempo desde que los vi, por los problemas de mis padres fue que dejamos de ir, para mi mamá era incómodo ver a sus suegros.
Al llegar bajé y miré a mi alrededor, llamé a mi mamá, no sabía como lucía mi abuelo últimamente, además veo a mucha gente, estoy mareado.
— ¿No está? —
— No lo sé, hay mucha gente —
— Lo voy a llamar — me colgó
Esperé ahí un rato, luego de eso un señor se acercó a mí.
— Hola, Taehyung —
— ¿Eres mi abuelo? —
— Así es, has crecido mucho — sonrió
Yo asentí y llamé a mi mamá, debía de estar seguro de que era él. No soy tonto, cualquiera puede venir y decirme que era mi abuelo.
— Sí, Taehyung, es él —
— Bien — colgué primero
— Vamos a casa, la abuela está muy entusiasmada por verte — sonrió
Era incómodo, para mí. No sabía de qué hablar, no sabía como hablar o portarme, se veía que eran personas amables, pero realmente no sabía cómo ser con ellos.
— ¡Ay!, recuerdo cuando eras tan solo un bebé — dijo mi abuela mirándome con cariño — eras tan pequeñito y tierno, realmente muy tierno, ¿Recuerdas? — le preguntó a mi abuelo
— Sí, Taehyung era un niño muy tierno —
— Sí... ¿Puedo ir a ordenar mi ropa? —
— Claro, te mostraré tu cuarto — dijo mi abuela poniéndose de pie
Me llevó a un pequeño cuarto donde vi muchas fotos de mi papá, fotos de su niñez, su juventud, y fotos conmigo de bebé.
— Cuando naciste él fue la persona más feliz del mundo — escuché la voz de mi abuela que de inmediato me sacó de mis pensamientos
— ¿En serio? —
— Sí, realmente fue así — se rió — cuando vinieron de visitas él no te soltaba, para dormirte te cargaba entre sus brazos hasta que te durmieras —
— No recuerdo eso... — miré de nuevo la foto en donde ambos estábamos, él más joven y yo siendo tan solo un bebé
— Sé que tienes problemas con mi hijo — se acercó a mí
— No es nada — sonreí y me alejé — ¿Puedo estudiar un poco? —
— Fue duro para nosotros el cambio que mi hijo tuvo, pero lo aceptamos tal y como es, porque es eso, es nuestro hijo —
— Ese no es un motivo para irse y jamás llamar — la miré sin expresión
— Tal vez tenía miedo — sonrió — quizás no quería que su pequeño sepa de los cambios que él mismo no entendía, no quería avergonzarlo, no quería ser una decepción para alguien que lo veía como un héroe... —
— Tal vez... necesito descansar — miré al piso
— Bien, desempaca, báñate y duerme un poco —
○●○●⊙●○●○
Estábamos en la casa de mis abuelos maternos, ellos me querían mucho, siempre me hacían galletas. Me gustaba estar con ellos, eran silenciosos, ordenados y limpio, además olían a libro viejo.
— ¿Y tienes algún omega por ahí? — preguntó mi abuelito
— Yo también quiero saber, seguro el pequeño Jungkook tiene a muchos omegas detrás de él —
— Ellos no están detrás mío — me reí, sería raro que estén detrás mío, ¿Porqué lo estarían? — Taehyung siempre está a mi lado, no detrás mío — sonreí
— ¿Taehyung?, ¿Así se llama tu novio? —
— No es mi novio, abuelo — arrugué mi nariz
— ¿Y qué esperas? — se rió — debes de ser más audaz —
— Eso mi padre me dijo, así que lo estoy cortejando —
— ¿En serio?, que lindo —
— Sí, Taehyung es muy lindo, se parece a uno de los muñecos de porcelana que tienes en tu repisa, abuela —
— ¿Se parece a una de mis muñecas? — yo asentí con fuerza — ¿Cuál de ellas? —
De inmediato me puse de pie y me dirigí a su repisa, sacando a la muñeca.
— A ella — me acerqué
— ¿Tan lindo es? —
— Sí, pero ahora que lo pienso... no se parece a la muñeca — dije viendo a la muñeca — es fría, Taehyung es cálido y huele bien, además de que siempre sonríe —
— Se ve que te gusta mucho —
— Me gusta, pienso decirle que sea mi pareja cuando vuelva — alcé mi pecho — estoy seguro de que mi cortejo a funcionado, padre me ha ayudado mucho —
— Eres muy tierno —
— Be-bebé, así me dice Taehyung, bebé alfa — abracé la muñeca
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(Dos meses y medio después)
Llegué a casa en la mañana, estaba muy cansado. La pasé bien con mis abuelos, realmente me agradó estar ahí, eran muy sabios y sabían contar cuentos, además de que me hacían sentir seguro.
— ¿Estás bien? — mi mamá pasó su mano por mi cabeza
— Solo estoy cansado — dije con pocas fuerzas
— Hay alguien afuera que te busca —
— ¿Qué? — me senté — Jungkook... — salí corriendo — ¡Jungkook no sabía que ya habías vuelt-...!, ¿Yoongi? —
— Hola, Taehyung —
— Pensé qué... —
— Sí, yo también lo busqué, pero no está — me extendió dos libros — los anuarios —
— Gracias... —
— Es una pena que no hayas participado en la fiesta —
— Tuve cosas que hacer —
— Entiendo. Bueno, nos vemos — sonrió y se fue
(Tres semanas después)
El examen fue intenso, fui al tercer día, hice mi examen y dijeron que en dos semanas darían los resultados. Estaba nervioso, esperaba pasar, si no lo hacía me sentiría muy mal.
— Fuerzas — me animé
Vi la casa de Jungkook, seguía vacía, no sabía que hacía pasado, me preocupaba.
— ¿Aló?, Taehyung cuéntame que tal te fue —
— No lo sé, mamá —
— Confía en tí —
— Sí — sonreí
Perdón la demora 🥲
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