[EXTRA SHINCHIRO]

En algún momento de tu vida, llega el momento en el qué tienes que morir.

La fecha, la hora, y el momento en que lo harás, se convierten en un misterio.

A veces llegas a pensar que morirás trágicamente por qué el miedo al cruzar una calle o estar en un área peligroso, te consumen el pensamiento.

Pero resulta que al final, puedes morir solo por enfermedad o incluso, lo que menos esperas: asesinado.

Morir, ni siquiera estaba en mis planes. De principio a fin, siempre pensé que estaría al lado de mis hermanos y nuestros amigos.

Pero cuando llegó el último día de mi vida, solo me disculpé con ellos por dejarlos solos.

— ¿Has ido a visitarla?

Escuché detrás de mí la voz de mi amigo. El olor de los cigarrillos que acostumbraba él a consumir, se adentro con suavidad a mi nariz. No lo mire, pero tampoco lo ignore, escuché sus palabras con claridad del mismo modo en que me centraba arreglando una de las llantas de mi motocicleta.

— No, aún no.

Contesté seriamente. Escuché como suspiro tranquilamente y con paciencia, sabía muy bien por qué me estaba pidiendo que fuera, así como sabía que mi orgullo no me permitía moverme.

Había pasado al rededor de dos meses desde la última vez que ví a Ima, hace dos meses atrás le había entregado Black Dragons y desde entonces, no me metí en los nuevos asuntos de la pandilla.

— Shin, no entiendo por qué no has querido ir, incluso ella te busca.

Ir, no es que no quisiera. He tenido muchas oportunidades para hacerlo, pero mi orgullo no me permite dar un paso adelante para ayudarla. Sabía que hace dos meses había sido egoísta, le dejé Black Dragons en sus manos sólo confiando en que ella manejaría a la pandilla mejor que yo.

Fue miedo el miedo él que me hizo tomar esa decisión. Fui cobarde en cuanto me dí cuenta que al convertirnos en una pandilla de leyendas, la maldad consumiría a los chicos. No fui capaz de querer enfrentar ese cambio, por qué de esa misma manera en que ellos fueran consumidos, sentía que yo también lo sería.

— Haitani-chan estará bien, ella es buena tomando decisiones.

Murmuré mientras limpiaba la suciedad de mis manos con un trapo anaranjado.

— Shin, Inupi me dijo que Ima se ha estado alejando de la pandilla y que su personalidad ha cambiado.

— ¿Sucedió algo?

Lo mire con atención en cuanto su voz cambio con preocupación.

— Parece que se está relacionando con Asura.

Mis ojos se abrieron como platos cuando el nombre de aquella organización sonó en mis oídos. Sabía de antemano, que Asura era una organización la cuál se dedicaba a la caza de pandillas, no sabía muy bien que tipo de pandillas, pero en su mayoría eran las más crueles.

Baje la mirada y dejé el trapo sobre uno de los muebles donde colocaban accesorios para las motocicletas.

— Está bien, iré un día de estos.

Eso fue lo que ese día dije, sin embargo, al final no fue lo que hice.

Los meses pasaron hasta que la nueva generación llegó a la pandilla, Ima los había recibido, pero yo ya tenía nuevos planes para BD.

El 12 de noviembre, Izana tomó el lugar de capitán en la pandilla bajo mi decisión. La oportunidad de que a Ima se le dijera la decisión, no la hubo, ni siquiera deje que hubiera una. Había tomado esa decisión por impulso, solo por qué no quería que Black Dragons fuese por el mal camino.

Pero me arrepentí poco después cuando Izana había cambiado la pandilla. Para entonces, Ima había desaparecido, nadie  sabía de ella, excepto que el día en que Izana y ella se conocieron fue la última vez que se vió.

— La última vez que te ví, fue hace un año, Sano Shinchiro.

Ese día un día antes de mi muerte, la había visto. Lucía más alta, y más bonita, pero en sus ojos ya no había ninguna luz parecidos a los de Manjiro. Sin ningún brillo o esperanza en ellos.

— Haitani Ima ¿Que te trae a mi humilde guarida?

Ella sonrió de lado con un toque burlezco. Quise sonreír al igual que ella, pero mis sentimientos de culpa no me permitían hacerlo. Ciertamente, me sentía como un ex que la había abandonado sin una despedida.

— Me enteré que Manjiro creo su propia pandilla.

Dijo.

— Sí, Keisuke y otros amigos más de ambos, se unieron a ella.

Contesté, encendí uno de los cigarrillos y lo fume. Ella me miro y sonrió con ojos de media luna, una sonrisa que aunque tuviera sus ojos apagados, me sorprendió el sentimiento sincero que me dió.

— Espero que sea una gran pandilla.

Lo será.

— Sí, también lo espero.

Ella asintió en silencio. Mire por un rato su perfil antes de ella me mirara de nuevo y me entregara una bolsa de regalo. La curiosidad me llevo abrirlo, pero me arrepentí cuando me dí cuenta que lo que me había entregado, era la bandera de Black Dragons, la que nosotros como primera generación habíamos llevado siempre.

— Inupi me pidió que les ayudará en el futuro como una segunda al mando. No quería aceptar, pero terminé haciéndolo por qué no podía abandonar BD con facilidad. Es difícil dejar ir un lugar en el que te sentías como en una segunda familia, y hacerlo me tomara un tiempo, así que te entrego la bandera como el comienzo de mi despedida.

La mire con los ojos abiertos, mi corazón sentía dolor por aquellas palabras suyas. Mi mente me dijo que solo tomara su mano y no la dejara ir, sin embargo no lo hice, en cuanto estiré mi mano, está fue cerrada en un puño y la aparte.

— Está bien, me imagino que tienes otros planes — alcance a decir antes de que mi voz que quebrara por el dolor en mi garganta.

— Sí, Asura espera que me una, así que lo haré.

— Ya veo.

Luego de ese día, al siguiente día en la noche, fue el día de mi muerte.

No culpe a Kazutora, ni a Keisuke. En todo momento me culpe a mi mismo por el hecho de haber cometido grandes errores a lo largo de mi vida dentro del mundo pandillero.

Me arrepentí de no haber podido arreglar las cosas con Ima o de haberla detenido para que no entrara en un mundo donde acabaría con su vida por qué no quería perderla.

Quién iba a saber que el día de mi muerte iba a llegar un día después de nuestra despedida.

Pero estoy feliz, por qué ella vive y sé que será feliz.

* Un extra cortito de Shinchiro, se que quizás se les venga a la mente ¿Shinchiro gustaba de Ima?.

La verdad no lo sé. Shinchiro sentía muchas cosas en el pasado cuando abandono Black Dragons. Nadie lograba entender sus pensamientos, incluso hasta después de su muerte.

Bueno eso es aquí en esta novela, en el manga puede que sí se entienda un poco sus pensamientos.

Cómo dije desde un inicio, Shinchiro lastimó a la prota luego de que él le dejo Black Dragons. Lo que él sentia por ella, nada se sabe, por qué aún incluso falta revelar lo que sentía cuando ambos estaban en Black Dragons.

En fin, espero les haya gustado y se haya aclarado un poco la dirección de esto. Habrá dos o tres extras más para terminar de explicar está relación, solo que irán por separado y antes de llegar a la pelea de Izana contra Ima.

Gracias por leer. ❤️