Manjiro

- La paciente se encuentra estable, no hay peligro en su vida. La sangre que perdió se recuperó con la ayuda de sus familiares, su herida no fue grave, sin embargo, su desmayo se debió al cansancio, la perdida de sangre, y la deshidratación. Se encuentra ahora recuperándose. - Informó el doctor.

Muchos suspiros de alivios -incluyendome- se escucharon en la sala donde estábamos la mayoría. Junto a nosotros estaban los hermanos Haitani, el chico que acompañaba a Ima, los capitanes de Touma, además de Baji, Kazutora, un miembro de Valhalla, y dos de Black Dragons; Kokonoi Hajime e Seishu Inui.

- ¿Podemos pasar a verla? - Miré de reojo a los dos miembros de Black Dragons, ellos lucían preocupados.

Los hermanos Haitani miraron a ambos, había curiosidad en sus ojos, además de cierta desconfianza. No parecían preocupados por su hermana menor, pero no podía juzgarlos. Cómo hermano mayor de Emma, entendía muy bien lo que significaba mantener la compostura, incluso sí no se trataba de Emma, lo mismo hacia por mis amigos.

- Pueden hacerlo, pero dentro de las horas de visitas.

- Gracias, Doctor - agradeció el mayor de los Haitani. Lo ví girar en dirección de su hermano menor, parecían susurrarse un par de palabras. Sus ojos subieron a los míos, luego lentamente miro a Kazutora, su semblante se hizo frío.

Di un par de pasos para evitar que Ran siguiera mirando a Kazutora. Haitani me miro seriamente, sonrió de oreja a oreja dándome a entender que lo sucedido no terminaría ahí. Y claramente, no iba a dejar que dañará a Kazutora.

- Parece que proteges bien a tus amigos, "invencible" Mikey - comentó con burla Rindo.

Mis cejas se fruncieron al momento en que mi semblante se volvió serio. Los hermanos Haitani eran tan distintos, tenían gustos de peleas distintos, y así mismo, sus actitudes eran diferentes. Ran quién era el mayor, tenía una fuerte carisma que le ayudaba a ser un fuerte líder. Rindo, era un tanto inmaduro, y no tenía tanta carisma como el mayor. Y Ima, ella tenía carisma como el mayor, pero había algo más en ella que la hacía distinta a los otros dos.

- Basta, Rindo. Hemos venido por el problema que Ima causó, no ha buscar pelea - regaño el mayor.

El menor chasqueo la lengua con molestia, me miró por última vez antes de girar hasta los dos miembros de Black Dragons.

- Tengo curiosidad por su relación con la hobbit de mi hermana menor. ¿Quienes son ustedes? ¿Y a que pandilla pertenecen?

Kokonoi fue el primero en ponerse al frente de Rindo, su mirada era sería y parecía proteger a su amigo de la mirada de los hermanos. La mayoría miramos su escena, mientras tanto, otros hablaban entre ellos o se mantenían callados.

- Rindo.

- Aniki, ¿No me digas que no te importa la relación que tienen con la hobbit?.

Escuché unas ligeras risas detrás de mí. Comprendía el motivo de la risa, incluso a mi, me daba gracia aquel sobrenombre que se le había dado a Ima. Ran miro a su hermano seriamente, tal parece que realmente no le importaba estar rodeado de otros pandilleros.

- Si tanto te importa, pregúntale a Ima cuando despierte.

Escuché decirle. El bicolor chasqueo la lengua, realmente se notaba que quien mandaba era el mayor.

- Agradecemos que estén aquí por Ima. Pero, no es necesario que estén aquí, pueden irse. Solo dejaremos que Michi Michi, se quede o venga a verla - declaró Ran.

- Ran-san, Rindo-san. Ustedes deberían ir a sus casas avisar sobre Ima-chan - miré a Takemicchi hablarles con nerviosismo. Había notado desde hace horas, que ambos hermanos habían comenzada a tratarlo amablemente.

- Michi Michi, es nuestra hermana, nos quedaremos. No es necesario avisarle a nadie, puedes ir a casa y llevarte a tus amigos - respondió Ran acariciando levemente el cabello rubio de Takemicchi.

Mi ceño se frunció más, caminé hasta ellos. Tome la muñeca de Ran para bajarla de los cabellos rubios de mi perra. Abracé a Takemicchi pasando mis brazos por arriba de sus hombros hasta que estos cayeran por su abdomen. Coloqué mi barbilla en su cabeza, y mire a Ran con molestia.

- No toques a mí perra.

El bicolor sonrió de lado con algo de burla. Miro a Takemicchi por un par de segundo, el rubio de igual manera lo miraba pero con nerviosismo. No me gustaba el que tocaran lo que era mío, o me lo quitarán, siempre, siempre debía ser yo el dueño de ellos.

- Mikey, no es momento de hacer tus berrinches - reprochó Kenchin. Lo mire con las mejillas infladas, abracé aún más a Takemicchi a mi cuerpo.

- Takemicchi es mío.

Podía sentir las miradas de algunos sobre nosotros, estaba seguro que mis amigos tenían una gota cayendo de sus frentes. Algunos se reían ligeramente detrás de nosotros, mientras que Takemicchi lucía avergonzado.

El Haitani frunció sus cejas, tomo a Takemicchi de mis brazos y lo jalo hasta ponerlo detrás de ellos. Sentí como mis venas resaltaban de mi frente, y la molestia comenzaba a hacerme una visita ligera.

- Lo siento, pero Michi Michi es de nuestra hermana - contrataco Rindo. Lo mire molesto, dí un par de pasos para comenzar alzar mi pierna derecha dispuesto a golpearlo. Pero aquel golpe fue detenido por otro golpe sobre mi cabeza. Mire a Kenchin con reproche antes de sobar mi cabeza.

- Detente, Mikey. Estamos en un hospital, no en la calle.

Sonó molesto. No me quedo de otra que refunfuñar y maldecir a los hermanos Haitani por sus acciones. Sabía que llegaría un momento en el me podría cobrar todo eso.

- Bueno.

"Pobre Takemicchi". Escuché como Mitsuya se reía a espalda mía, luego le siguió Baji con una fuerte carcajada que fue callada por su subcapitán.

- Dejemos que los hermanos Haitani se encargen. Nosotros tenemos una reunión que hacer ¿No Mikey?. - Ken me miro desde arriba. Era cierto, apenas nos enteramos de que Ima había perdido la consiencia, venimos al hospital y no dimos por concluida la pelea.

- Sí.

Giré mi cuerpo en dirección al chico albino que había acompañado a Ima durante toda la batalla. Sus ojos verdes me miraron con el ceño fruncido, desconocía a ese chico no sabía quién era, sólo sabía que era el asistente de Ima.

- Vienes con nosotros, y tú también Takemicchi - dije mirándolo seriamente. Lo ví tragar en seco antes de asentir, y sentirlo caminar detrás de mí.

Al salir del hospital, la mayor parte de nosotros se subió en sus motocicletas, Baji en la suya llevaba a Kazutora. Kenchin, llevaba al asistente de Ima, y yo llevaba a Takemicchi. El aire golpeaba mi rostro, se sentía refrescante, cómodo y me llenaba de alivio. Había recuperado a dos de mis amigos, a pesar de que Kazutora vivía con la culpa de haber matado a mi hermano, lo entendía y perdonaba.

Había muchas cosas las cuales pensar, de ellas, estaba el asunto de Ima. Si lo pensaba, ella y Takemicchi eran extraños, incluso sus actos lo eran. Pero no quieria ser uno más que desconfiara de ellos, sabía que tenían sus razones, mi corazón me lo decía.

- Mikey-kun, ¿Has perdonado a Kazutora-kun?.

Abrí los ojos por la sorpresa que me tomó aquella pregunta. Mi semblante se relajo suavemente. Kazutora, él, era un amigo que tuve hace un tiempo atrás. Al igual que Kenchin, Mitsuya, Pa', y Baji, el era también un fundado de la Touma, y para mí así como para los otros, siempre seguirá siendo un miembro de Touma.

- Lo hice - respondí con una sonrisa de oreja a oreja que duró tan solo cinco segundos, antes de que volviera a mirar la carretera.

Al llegar al santuario Musashi, todos bajaron de sus motocicletas. Takemicchi bajo de la mía, lo escuché suspirar aliviado, al parecer mi manera de conducir le daba miedo.

- Mikey, allá.

Miré frente a nosotros a dos personas paradas bajo las escaleras del santuario. Mis cejas se fruncieron en el momento que ví a Takeomi, junto a otro chico de cabellos albinos. Entrecerre ligeramente los ojos, el parecido lo conocía. Takeomi vestía con ropas normales al igual que el chico, solo que este llevaba una sudadera larga.

- Akashi-san ¿Que haces aquí? - Kenchin fue el primero en hablar, y en acercarse a ambos.

- Veo que su pandilla a crecido bastante - Murmuró dando una mirada a todos, hasta que sus ojos cayeron en Takemicchi - ¿Vienen de alguna pelea?

- Peleamos con Valhalla hace unas horas. Venimos del hospital luego de dejar a Haitani Ima - comenté. Cómo era de esperar, su ceño se frunció.

- No sabía que fueran unidos - agregó absorbiendo de su típico cigarrillo.

- No lo somos, sólo se ha metió donde no debía - dije - ¿Necesitas algo de nuestra pandilla?.

- No. - su mirada bajo a Takemichi de nuevo - Eres Hanagaki Takemichi ¿Verdad?.

Sentí como Takemicchi se asomaba desde mi espalda para mirar a Takeomi y al albino. Levemente asintió con algo de inseguridad, al poco tiempo que note como sus cejas se fruncieron.

- Sí, soy yo.

Tras sus palabras, el albino justo al lado de Akashi, corrió de manera que tomo impulso para saltar hasta llegar detrás de Takemicchi. Se le acercó, tomo sus manos y luego sonrió de oreja a oreja.

- ¡Seamos amigos, Takemichi!

El rubio la miro con sorpresa, duda, pero más sorpresa. Mi cejo se frunció aún más.

-¿E-eh? ¿Q-quién eres?.

- ¡Soy Senju Kawaragi!

Senju Kawaragi. Era un nombre desconocido para mí, sin embargo, la persona frente a nosotros era conocida.

- ¿Que hacen aquí? - Preguntó Sanzu apareciendo de atrás de Mucho. Lo observe al igual que al albino que hablaba con Takemicchi, ambos se parecían.

- Haruchiyo-nii.

Así que son parientes

Las miradas de todos cayeron sobre los dos albinos. Takeomi suspiro cansado, tomo a Kawaragi del hombro, también miró a Sanzu, sólo qué su mirada era sería. Miré a Sanzu con seriedad, él me miro y bajo la mirada.

- Senju, vámonos.

El albino miro al mayor, asintió con la cabeza para luego mirar a Takemicchi y sonreírle de nuevo.

- Te veré en otro momento, Takemichi - le dijo, Takemichi sonrió nerviosamente pero movió la cabeza de arriba a bajo dándole una afirmación - ¡Takeomi visitemos a Ima-san!.

Y conoce a Ima Haitani, interesante.

- Seguro. Manjiro, en otro momento hablamos - me miro con una pequeña sonrisa sobre sus labios, como buena persona que era, acepte con un asentamiento.

- Akashi-san - lo llame antes de él girara para irse - ¿Has ido a visitar a Shinichiro? - Pregunté. Su mirada fue llevada al cielo oscuro, el humo de su cigarrillo salió de su boca. Bajo su mirada hasta mi persona, y negó.

- En otro momento.

Desde la muerte de mi hermano mayor, la mayor parte quien lo conocía, había ido a visitarlo, todos excepto Akashi-san. Fue el único que no había ido en ningún momento, incluso el día de su funeral, tampoco vino. Llegó dos días después a mi casa, para sólo entregar algunas cosas que pertenecía a Black Dragons en sus primeras generación. Lo último que dijo, fue que "Se le entregará a Haitani Ima" lo que le perteneció una vez a mi hermano.

Nunca entendí el motivo detrás de ello, Shinichiro nisiquiera hablaba tanto de Ima sobre su liderazgo en Black Dragons. Decía que era una mujer hermosa con una valentía extrema, y con una fuerza de voluntad muy grande. Sólo una vez llegó a decir que sentía que le había fallado tanto cómo amigo, cómo capitán.

« - Cuando Ima se unió a la pandilla. Le prometi demostrarle la gran familia que éramos. Pero siento que esa promesa la rompí cuando me fui, y más cuando le dí la siguiente generación a Izana. Así que Manjiro, jamás rompas tus promesas. »

Shinichiro sonaba emocional en ese momento. Ahora que recordaba, dos días después había fallecido.

- Nos vemos.

- Adiós.

Touma los vio irse, todos parecían algo sorprendidos por la rempentina aparición de una leyenda que pocos conocían. Akashi era de esas leyendas que pocas veces se veían por estos rumbos.

Kenchin colocó su mano sobre el hombro izquierdo de Takemichi. Bajo un poco a su altura para decirle un par de palabras que fueron escuchadas por todos:

- Takemicchi, estuviste frente a una leyenda. Él era Akashi Takeomi, uno de los fundadores de Black Dragons.

*

Otro capítulo maaasss. Yyyy ¿Que creen?. La historia ya está a tres partes por llegar a su final, así qué vayan preparando pañuelos para el futuro, que se nos viene la muerte de un personaje importante en la historia.

Por cierto... ¿Vieron el Manga hoy? ¿Estuvo bueno no? Si no, recomendable que lo vean por qué es importante.

Nuevamente, gracias por leer. ¡Nos vemos pronto! ❤️