Y a ella le gustaba lo brillante.

Después de todo fue lo único que conoció después de la partida de su madre. 

Y no, no hablamos de que llego una luminosidad esplendida a su vida, o que el amor de su padre llenaba sus días de color. 

Hablamos de un brillante que más que brillar, no desprendía luz alguna. Objetos costosamente vagos que solo la princesa parisina solía alcanzar. Joyas, accesorios, ropa, juguetes, zapatos, sin duda brillaban pero ¿qué sentido tenía? Al fin y al cabo siempre estaba sola.

Eso siempre le hicieron creer.

—Solo Sabrina es capaz de soportar a Chloe— mencionó Alix mientras veía a la hija del alcalde hacerle un escandalo al buen heladero que solo hacía su labor.

—Y si la soporta es por los regalos que le da, siento lastima por Sabrina, algun día deberíamos invitarla a pasar el día con nosotros— respondió Marinette con clara preocupación en su rostro

—Siempre tan linda— sonrío Luka a la azabache

—Solo estoy diciendo que esta bola de helado debería ser amarilla como el brillante cabello de Adrien, no de un asqueroso color menta— volvió a chillar mientras tiraba al suelo el helado. —Deme otro tal como lo pido, nunca debi dejar que usted escogiera los sabores, Adribu y yo estamos destinados— y al obtener lo que quería volteo triunfante a ver a las otras chicas de su clase. —Aun si alguien mas me soportara, no dejaria que cualquiera entrara en mi fabulosa vida

Y es que quienes eran ellos para estar opinando sobre su vida. ¿Y que si Sabrina solo estaba con ella por sus pertenencias? Para eso las tenía.

"Bien, lo siento Chloe, no puedo ser amigo de alguien que hace estas cosas"

Se sintió atacada, unas simples palabras habían desmoronado todo lo que ella creía correcto.

—¿En que estoy mal?

Su celular sonó, una notificación de las noticias que informaban que ladybug y chat noir habian detenido otro akuma, sonrió.

—Ladybug es tan asombrosa— susurró con admiración. —Si tan solo fuese como ella...

—Perderías tu esencia— dijo alguien a su espalda asustando a la rubia haciendo que de inmediato soltara su helado y este cayera al suelo

—¿Y tu eres?— contestó sin siquiera voltear a ver.

—Aunque te lo dijera no lo recordarias— se posicionó frente a la rubia obligandola a verle. —No me agradas porque siempre andas molestando a la chica que me gusta

—Entonces dejame en paz o comprame otro helado— Lo miró de pies a cabeza —pero se ve que eres pobre asi que mejor me voy yo— comentó Chloe rodeando al sujeto que le hablaba, pero el chico volvió a insistir caminando tras ella. —¿Puedes dejar de seguirme? Para que lo sepas soy la mejor amiga de ladybug y puedo llamarla a mi rescate en cualquier momento

El chico comenzó a reir —¿Ves? No hay nada malo en ti, siempre estas a la defensiva y eso te hace muy chistosa

—¿CHISTOSA?

—No lo tomes a mal, solo quiero decir que eres, eres como música electronica, muy espontanea y si, tal vez eres poco amable con los demas y solo eso debas arreglar pero de eso a querer ser alguien totalmente distinto es otra cosa— la Bourgeois agacho la mirada tratando de asimilar lo que el extraño sujeto le decía

—Yo soy muy amable, le doy cosa brillantes a Sabrina que sin mi nunca tendría

—Chloe Bourgeois, el brillo no esta en lo costoso de los objetos, el brillo está en cada una de las personas, nadie en su sano juicio estaría con alguien que lo trata mal solo por riquezas, Sabrina es alguien puro y en verdad te quiere

¿Como era que aquel joven con las puntas de cabello teñidas, ojos caídos y aspecto tan desagradable tenía una voz tan cálida?

Su corazón se estremeció y los musculos de su cuerpo se tensaron pero Chloe se mantuvo firme ante el.

—No se quien seas pero ya me molestas

—Te vi angustiada y escuche que querías parecerte a Ladybug, me enoja el hecho de que las personas sean tan debiles que buscan parecerse a los demas para ganar aceptación, tu brillas Chloe, solo estas cegada por lo material, nos vemos.

Y bajo el anaranjado cielo de la tarde parisina un chico de cabello desaliñado y uñas pintadas dejó cegada a la princesa parisina con su brillo

—¡Rídiculo, verdaderamente rídiculo!