Capitulo 14 (Los Estragos)

Hola mis terrones seguimos con las votaciones, wow... Si que están bastante reñidas... Veremos quien ganara al final de la semana y se gane el especial que haré próximamente.

Pueden volver a votar el día de hoy mis terrones de azúcar, recuerden un voto por día.

En esta semana, voy a dejar una pequeña encuesta... Que ustedes deberán votar por alguna pareja, lo harán comentando en este apartado... Podrán votar una vez al día... Estén atento a las actualizaciones que tendremos en esta semana igual si no sigues otros de mis fic's, pueden ver la lista en Wattpad.

No diré para que es... Solo que lo hagan, ya lo sabrán el próximo año. Y claro que no se me olvida las votaciones anteriores.

Ahora si, decidan ustedes que pareja es su favorita, solo un voto por persona al día, si votan mas de uno, solo tomare en cuenta el primero... Piénselo bien.

ShakaXMu

DohkoXShion

MiloXCamus

AioriosXSaga

DeathMaskXAfrodita

ShuraXAioria

AldebaranXKanon

Por el momento solo sean estas parejas de los dorados, pero me servirá mucho que escojan, así tendré una idea de que mas hacer adelante con esta información.

Sin mas, disfruten la lectura y los quiero mis terrones de azúcar.

No se olviden de votar.

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La sorpresa en el rostro de los tres allí presentes, desde luego no se hizo esperar...

El patriarca con sus cuarzos sumamente abiertos, sorprendido por escuchar aquello, pero... No por que alguno de sus niños de repente pudiera tener hijos. Tiene un listado por la misma Atena, de a que caballeros había condenado de manera involuntaria a tener hijos, conocidos como donceles en antiguos relatos que hoy en día no se deberían ya conocer o existir.

El rostro de Afrodita fue de lo rojo a lo pálido de forma rápida, asombrado por que al fin entendía de forma rápida la sintomatología que presentaba, solo podía significar el hecho de estar esperando un bebe, pero al momento en que se enteró... No presto mayor importancia... Usualmente el cangrejo y él por lo mismo han usado protección, no querían hijos tan pronto.

Y ahora resulta que ya están esperando uno, volviéndose en cierta forma los primeros hasta el momento y conocidos, claro está.

Para el peli morado con escasa barba, su rostro estando descompuesto, su ojo parece tener un tic nervioso al abrirlo y cerrarlo levemente, con su ceja izquierda arqueada, sin comprender rápidamente esta información.

Solo atinando a dar un grito repentino, que claramente es obvio al soltar una noticia de esa forma.

-¡¡¡¿QUÉ?!!!- Le da igual si está dirigiéndose a la misma Diosa Atena, el grito de confusión sale, sin poder creer esto, sus brazos a los costados, teniendo la privacidad del recinto patriarcal para exclamar con cierto terror.

Atena al ver esto, solo alcanza a cubrir su boca con la mano derecha, sus ojos azul verdosos, se dilatan por la impresión que tiene, creyendo que fue una verdadera imprudencia decirlo a la ligera.

-¡¡¡Death Mask de Cáncer!!!- La voz enérgica del patriarca se hace presente, al momento de escuchar como el cangrejo dorado ha respondido a la misma Diosa que deberían respetar -¡¡¡¿QUÉ SIGNIFICA QUE ESTÉS GRITANDO DE ESTA MANERA?!!!-

-¿Cómo que embarazado?- Para Afrodita esta es su manera de reaccionar, su voz es tenue ahora, porque al parecer es más la impresión -¡¡¡NOS HEMOS CUIDADO!!!- Pero al final su verdadera naturaleza sale a relucir, con alzar la voz fuertemente y llevar sus manos a su vientre, claramente plano ahora.

-Oh... ¿Acaso no lo sabían?- La jovencita, sumamente apenada por lo que ha hecho, dándose cuenta que no lo pensó, su emoción le gano, atrayendo confusión a todos.

La pregunta se suelta, esperando que alguno de los futuros padres reaccioné.

-¡¡¡PUES NO!!!- Death es el que lleva la batuta del enojo repentino, pero no por el hecho de que va a tener un hijo, en cierta forma esta alegre con eso, si no que la sorpresa es grande y tiene un odio bastante elevado.

-¡¡¡DEATH MASK!!! ¡¡¡DEJA DE GRITAR EN PRESENCIA DE NUESTRA DIOSA ATENA!!!- La reprimenda que no va acorde a su pedido, pues también está irritando, aunque es con motivos de regaños para el peli morado, que no se sabe comportar ahora.

-Ay... Lo siento... Yo...- Saori Kido, la nueva Atena de esta generación, sí que comienza a sentirse algo mal... Y sumamente apenada por su imprudencia –Creí que lo sabían, que por eso venían, por alguna sospecha...- Habla con lo que dedujo sin siquiera esperare a que ellos respondieran en un inicio.

Cruzado de brazos, posando el dorso de la mano en su mentón, algo preocupado, pensativo y sonrojado, asimilando aquella idea, pero intentando averiguar en su mente el momento que sucedió aquel descuidado –Cuando me dijo que podía tener bebes, se lo conté a Death, y no pensábamos ser padres tan pronto...- Confiesa bastante serio en sus palabras, pero el sonrojo en sus mejillas sigue sin desaparecer, incluso una ligera sonrisa se comienza a reflejar.

-¿Qué planean hacer?- Por curiosidad el patriarca hace este cuestionamiento, ya que puede notar los cosmos dispersos de ambos dorados, preocupándole las decisiones que tomen.

-Claro que tenerlo- Responde el peli celeste, evidenciando una sonrisa bastante conforme ahora, su cambio de actitud sin duda se debe a todo lo que ocurre, el enojó, la confusión, sorpresa y el amor que tiene por ese cangrejo ebrio y de paso por la criatura que acaba de enterarse de su existencia.

El suspiro por parte de la Diosa se hace presenté, cerrando sus ojos, y descansando en cierta forma –Que bien...- Posa su mano derecha en el pecho –Creí que... No lo querrían tener y...- Le cuesta siquiera decirlo abiertamente, pues tener que eliminar a una criatura de esta forma seria algo horrendo en cumplir a su parecer –Desearían deshacerse de él-.

Otra nueva impresión para los tres, el peliverde incluso sintió como la sangre se le helada de solo imaginar que aquello pudiera pasar, aunque claramente si fuera el deseo de la pareja no se podría hacer nada, ni cuestionamientos morales.

-¡¡¡ESO JAMÁS!!!- Los puños del peli celeste se crispan, frunciendo el ceño, con un sonrojo evidente en sus mejillas, negando con rapidez –Voy a tener un cangrejito con mi amado Death, eso es razón suficiente para mí, para que este niño crezca dentro de mí y nazca- Habla firme, sin duda el hecho de una maternidad repentina, no le afecta tan negativamente, al contrario, tan solo al enterarse ya parece estar amando con fuerza a quien algún día conocerá.

Aquella peli morada suspira, su alivio se evidencia al saber que Piscis está aceptando el regalo de la vida, que su cuerpo ha podido adquirir, por imprudencia de ella misma, sin duda no debió estar pensando en viejos relatos cuando les daba la nueva vida, pero para ella aun es difícil controlar su cosmos como Diosa, cuando apenas ha tenido un entrenamiento por lo bajo de lo mínimo en control.

-Me alegra tanto que estén felices- Ella sonriente, y sin siquiera pedir permiso, ya que no lo necesita, toma ambas manos del Sueco y las estrecha, dedicándole una mirada cálida y benevolente –Entonces, felicidades por él bebe que esperan-

Para Afrodita este acercamiento es algo incómodo, pues no era uno muy allegado a la Diosa como otros, pero acepta la felicitación asintiendo y sonriendo con superioridad.

-Gracias, sin duda será un hermoso bebe- Y allí esta su pequeño grado de soberbia y orgullo, pero es normal en él, nada de qué preocuparse o temer.

Aunque Piscis quién sería el futuro papá de esta criatura o madre... Cualquiera de los dos términos bien pueden estar correctos. Esta sumamente feliz, sonriente, y pensativo igualmente, es una noticia que no esperaba aunque ya había sentido algo en su cuerpo diferente, pero... No le prestó atención por la precaución de su ex mejor amigo.

El patriarca... ¿Qué podría decir?

Todos los dorados ya son adultos, puede que no tan responsables la mayoría y algunos les haría falta intentar tomarse tiempo de resiliencia y lograr comprender mejor situaciones de la vida, afrontar cosas que aún les atormenta, pero... Al ver que dos de sus niños más alborotadores lleguen a asentar cabeza, lo hace sentir un tanto aliviado y preocupado a la vez.

Pero en este momento, la situación parece complicarse por un solo factor...

El cangrejo dorado, sigue estando ahora en silencio, pensando en ese modo, solo enojándose, la alegría se le pasó rápido, el odio en su cuerpo se va presentando, un solo pensamiento se le ha cruzado en su mente, de una forma tan repentina que puede asustar a los demás, por el solo sentir del cosmos enfurecido del peli morado.

-¡¡¡ESA MALDITA CABRA...!!!- Murmura, apretando su mandíbula, y sus manos hechas en puños.

Tanto Piscis como el anterior Aries, entienden en cierta forma el por qué su enojo, aunque podría ser peligroso por el simple hecho de que ahora al saber esa noticia, quería acabar al décimo caballero dorado.

-¿Qué está pasando?- Atena, está bastante ajena a estos temas, al estar intentando llevar su nueva vida como deidad y a la vez como una humana en cierta forma... La hace perderse situaciones en el santuario, que solo las sabe por boca del peliverde.

Por eso está consternada a como de repente el cosmos del cuarto guardián se siente turbado... muy diferente a como debería estar al recibir esta noticia.

-Oye, cangrejo...- Le llama como es su manera cariñosa de ser –No hagas algo...-

-¡¡¡LO VOY A MATAR!!!- Demasiado tarde para intentar calmarlo, esta enfurecido por saber esto, que casi pudo haber perdido a su pececito y a su futuro bebe, eso no se lo va perdonar jamás.

-¡¡¡YA BASTA!!! ¡¡¡CONTROLARTE!!! ¡¡¡NO MATARÁS A NADIE!!!- El patriarca le habla con voz firme, aunque entiende la irritación, no le parece del todo congruente que se dé una pelea de mil días entre dos caballeros dorados, por motivaciones diferentes.

-¡¡¡NI SIQUIERA SABEMOS SI ESTABA EMBARAZADO PARA ESE ENTONES!!!- No se necesita ser un genio, para intuir que le ocurre a su querido novio, pero si tratara de hacerlo entrar en razón a como dé lugar –¡¡¡NO TE ENOJES, YA...!!!- Frunce un poco el ceño, pero muestra unos ojitos de súplica, pidiendo que ya su cangrejo dorado no se esté enojando tanto.

-¿De qué están hablando?- La Diosa más confundida que nada más, mira la situación y los comportamientos de estos tres hombres, que sin duda no concuerdan en nada bien.

-Señorita Atena, sucedió un pequeño percance entre el caballero de Capricornio, y el caballero de Piscis, lo que provocó una pelea en el entrenamiento por el enojo de parte del caballero de Cáncer- Le informa lo más general posible y sintetizado para que ella entienda.

Ella ahora comprende, que sin duda su presencia y noticia repentina, sin haberlos preparado antes y calmando las aguas, resulto a algo que está entre el amor y el odio...

Observando como Death, desea ir sin permiso previo a buscar a Capricornio, para darle su merecido con ahora claras intenciones de dejarlo sin respirar, y claramente Piscis evitándolo, poniéndose de por medio, para que se detenga y mejor entre en razón.

Podemos intuir que incluso si el patriarca o la misma Diosa intentaran hacer algo, no les haría ningún tipo de caso, Cáncer solo escucha en sus momentos de furia extrema como ahora, a su pececito...

Pero el amor por su pececito, por su amada rosa de espinas, el nombrado y reconocido por muchos como el más hermoso caballero dorado, que el cuarto guardián esta tan embravecido.

---Dos Días Después---

Desde luego, este tiempo fue suficiente para que Capricornio se sintiera mejor, su condición mejoro rápidamente pues al no ser hombres por completo normales y con el uso de cosmos, para sanar sus heridos, fracturas y demás dolencias, tal vez no mortales. Ayuda muy bien para lograr al fin ponerse de pie sin la ayuda de nadie más.

Obviamente debía ir ante el patriarca, pues recibiría su castigo, pues esto no se va a quedar así como así, solo por una pequeña fractura.

Sin embargo en esta ocasión parecer ir mucho más tranquilo, incluso se pude decir que su cosmos que previamente había tenido muchos momentos de perturbación y molestia, se ha calmado radicalmente...

Es cociente de esto... En cierta forma lo entiende como algo que no espero...

Durante ese tiempo que estuvo en reposo obligatorio, el León dorado se comprometió a ayudarlo bastante.

Mientras va subiendo aquellas dos casas, entre sus pensamientos y su silencio, recuerda lo que ha pasado durante ese tiempo...

Lo que el Griego le contaba para pasar el tiempo, el hecho de que le cocinara algo, que si bien no es del todo un experto, sus platillos al menos son comestibles.

Tonterías que hacía o decía para animar un poco al Capricornio y que de hecho lo lograba en muchas ocasiones, todo para que no pensara en el dolor de su cuerpo.

Jamás le preguntó la razón por la cual se enojó con Afrodita o ¿Por qué los alejó?

Aioria no es de tanto chismear, era mejor contarse cosas de su vida, sus nuevos gustos...

Desde que revivieron o bueno desde mucho antes, no habían tenido una conversación tan amena... Salvo por la del restaurante, pero esa parecía ser enfocada a un ambiente romántico, que claramente no era del todo cómodo para el León dorado.

En cambio en esta ocasión, parecían de nuevo esos dos amigos de antaño, en donde ambos se cuidaban y ayudaban para que nada los agobiara...

Capricornio pudo ver esa sonrisa... La que en su recuerdos aún permanecía, aquella que antes solo veía como una cosa buena, y nada más... No la podía detonar antes por estar deslumbro por el Sagitario...

En cambio ahora... Al fijarse más en el quinto guardín... Ve que tiene mucha más belleza que incluso el hermano mayor...

Sus ideas no son clara... Sigue estando estancado en el mismo lugar y lo sabe...

Los momentos que paso agradables a lado del castaño claro, los disfruto tanto... Que lo hacían olvidar su absurda venganza, pero al momento en que el tema se fuera a un lado con Sagitario, volvían esos pensamientos de querer seguir haciéndole daño...

Enamorar al Leo, no se sabe si está funcionando, pero... En él... En Capricornio algo sí parece estar cambiando, lamentablemente su odio aun no lo está dejando del todo ver bien.

Si, su podrido corazón late cuando ve al León, es una verdad absoluta, pero igual siente deseos de hacerlo sufrir para que el mayor entienda que eso se merece, seguir apreciando que por su causa Aioria será atormentando por sus pecados.

Esto le molesta mucho, pero le agrada...

Su tormento no parece acabar con cada paso dado, solo se sumerge en pesar que está haciendo algo de lo cual se puede arrepentir...

Aún tiene algo de bondad en su corazón y parece creer, al momento que ha visto y tenido esas atenciones por parte del León dorado, cada cosa significante le dicta que no todo en la vida puede ser una venganza para dañar a terceros.

Eso apacigua su conciencia de repente, pero... No por siempre, al solo recordar o escuchar que Aioros es tan feliz con Saga, su ira se eleva.

No puede liberarse de sus tormentos, porque ha estado cometiendo error tras error, y la culpa al parecer también se está transformando en algo evidente en su ser, que no puede decirlo a nadie, ni pedir concejo... Pues si lo intentara...

No tendría con quien ahora...

Su mirada color jade, solo refleja su grado de confusión, y ahora algo de dolor...

No lo pensó con claridad cuando cometió aquello, pero ahora si nota las consecuencias... Si pidiera al fin un concejo, queriendo que alguien le diga qué camino tomar...

No será escuchado...

Sus pasos al fin lo condujeron a la entrada de Piscis, el último obstáculo antes de llegar con el patriarca.

Fue un alivio que Acuario estuviera solo, pero el doceavo templo no lo está.

Al ingresar pidió permiso, como se debe hacer cuando un caballero esta presenté y claramente despierto, si estuviera descansando se debe respetar entre camaradas...

Tuvo su respuesta... Concediendo el permiso de ingresar...

Pone un pie en ese lugar, que varias veces subía para conversar, cuando más joven con el guardián de este, o que iba el otro a verlo y molestarlo para alegrarlo a su manera...

En esta ocasión el ambiente se siente incómodo, y más al notar que Afrodita está más centrado en otras cosas que no logra ver al invitado no deseado.

Su pasar es como si se tratara de un fantasma, en ningún instante el peli celeste lo saludo como de costumbre, ni le hablo o intento entablar una conversación.

Solo hacia sus deberes como costumbre, sin siquiera ver a Capricornio...

No le debería tomar de raro, ya que el único que de verdad se interesó por su bienestar fue Aioria, claramente algunos pocos preguntaban por como seguía, pero lo hacían por medio del León dorado... Y sabia de esto al momento que esté le informaba, pero... En ninguno figuro Cáncer o Piscis, sus mejores amigos... O lo eran antes.

No está sorprendido, claramente por que él los alejo... Aunque, desearía por un momento... Intentar ahora si hablar con ellos, aunque fuera con Piscis y pedirle un concejo...

Algo que no haría, ni recibiría, al estar haciéndole una ley del hielo merecida, con porte soberbio y orgulloso, que claramente no le importa no querer apreciar a quien alguna vez fue su amigo.

Shura salió del último templo del santuario... Y al fin se da tenuemente cuenta de sus errores, lo han orillado a una soledad, que si no fuera por Aiora... Estaría consumiéndolo...

No le da más importancia, continua su camino hasta estar justamente en aquel gran y ultimo templo previo a donde Atena debe descansar en este mundo...

La sala patriarcal es donde ha sido llamado por el mismo pontífice, y desde luego sabe a qué viene.

Pide permiso para entrar y se le otorga con una voz algo severa.

Las puertas se abren y al entrar, se cierran detrás, da unos cuantos pasos hacia el frente y al encontrarse en un punto adecuado, hace la reverencia cotidiana, baja su mirada, ya habiendo visto al pontífice, en aquel trono, sin duda lo estaba esperando.

-Me alegra que acudieras de forma rápida, Shura- La voz es tranquila, pero no por eso imponente.

-Una orden de usted es de igual peso que la de la misma Atena, no desobedeciera- Habla, sin levantar su vista, sus ojos clavados en el piso, su rodilla izquierda toca aquello, y se apoya en la derecha flexionada.

-Muy bien, ¿Sabes a lo que vienes?- Le pregunta de una manera serena.

-A recibir mi castigo, por seguir la pelea con Cáncer- Responde serio, no va a discutir ante esta situación.

-Bien, Death Mask tuvo el castigo de reparar las gradas del coliseo, te encargaras de levantar los pilares dañados que se encuentran en varios puntos del santuario- Le da su sentencia sin favoritísimos, la reconstrucción de algo por su cuenta es algo sumamente pesado, claramente los caballeros dorados lo pueden hacer, pero tardara un buen tiempo.

-Entendido- Solo eso responde, es fácil lidiar en esto términos con Capricornio, sabiendo que hizo mal, acepta su error y castigo como tal –Si, ya no hay más que decir... Me gustaría empezar de una vez- Igualmente, le gusta cumplir con la orden de forma inmediata, sintiéndose sofocado en sus pensamientos y queriendo ponerse en otra ida pronto.

-Espera un momento-

-¿Si?-

-Antes de que vayas a cumplir tu castigo, me gustaría hablar contigo de algo muy importante- Para este punto, el patriarca se ha levantado de su asiento, su rostro se ve evidente, pues ha dejado de usar la máscara de su rango, claro que para eventos importantes lo debe usar si es requerido.

-¿Pasa algo más, patriarca?- No levanta su mirada, prefiere mantener abajo su rostro.

-Sí, algo está ocurriendo me gustaría saber...- Hace una pausa, intentando encontrar las palabras correctas, para no verse muy entrometido -¿Qué está pasando contigo?-

Esto provoca una leve alerta en la mente del décimo guardián, provocando que levanté con sorpresa su rostro, pero su mirada aun no es capaz de ver al pontífice, su consternación crece repentinamente, por trata de guarda su temple rápidamente –Disculpe, pero... No entiendo a qué se refiere...-

-No me trates de ocultar nada, Shura- La voz de nuevamente vuelve a ser severa, pero tiene un toque diferente, como si fuera de una comprensión y cariño –Lo pudo ver en tu cosmos, en tu rostro...- Se acerca, pero deja el espacio suficiente entre ambos -¿Qué te está atormentando?- Su preocupación asemeja a la de un papá.

Capricornio no logra entender como esto ha sucedido, ¿Por qué justamente el patriarca le está cuestionando esto?

Sabe que ante las palabras de él, será imposible mentirle o negarse a responder...

Siente que esta sin duda atrapado... Y de hecho lo está claramente, de aquí... No podrá irse sin dar verdaderas respuestas... Con el patriarca no servirá eso de enojarse y alejarse, sino se ganaría una peor reprimenda por su insolencia y esto ya llegaría a ser un problema para todos en el santuario.

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Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Aquí mamá terrón de azúcar, publicando el hermosos capitulo del día de hoy.

Les debo informar que igualmente este fanfic, no tendrá actualizaciones hasta en Enero, por lo cual... Espero que lo entiendan, pero me tendrán aquí sin duda para actualizar pedidos de cumpleaños y los de aquellos caballeros dorados.

Pero no se angusties que en Enero volvemos sin falta, y cualquier cosa se los comunicare de antemano.

Sigan votando, nos leeremos pronto en este fanfic...

Y por aquellos que solo siguen este fanfic, les deseo feliz navidad y año nuevo, pues no creo actualizar este fanfic hasta el próximo año, así que los quiero mucho.

Muchas gracias a todos mis terrones de azúcar por apoyarme, votar, comentar estar conmigo, siempre se los desagradecer de todo corazón.

Kiaaaaaa mis terrones de azúcar, los mega quiero y espero me puedan esperar hasta que regrese con las actualizaciones de este fic, hasta Enero.

Por favor sigan cuidándose, hagan caso a las medidas de higiene yo no se expongan de mas por favor...

Les deseo felices fiestas.

Los quiero mucho.

Ammu se va. 

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