@Isxxcs_

Deku iba retorciéndose los dedos con nerviosismo, sus pasos eran vacilantes pero apresurados. Antes de llegar a la salida de la escuela pegó la vuelta y se encaminó de regreso al salón de clases, dispuesto a defender a Kacchan de lo que sea que Aizawa le impusiera como posible castigo. No podía creer que en verdad había dicho tal cosa, aunque no negaba que en parte lo reveló por celoso, realmente no le gustaba serlo y lo correcto era ir y solucionar lo que sus celos tontos causaron. Porque sí, Izuku Midoriya estaba celoso de Bakugou, no podía creer que realmente había otro estudiante interesado en su profesor. Bueno... Si, en realidad si lo creía, era totalmente entendible, es decir ¿Han visto lo que es ese hombre? Ni aún luciendo así de desaliñado Aizawa dejaba de verse tan atractivo, cada cosa que hacía ese hombre era simplemente sensual. Esa voz ronca, su constante calma desinteresada, su talento como héroe. ¡Dios! ¡Si hasta cuando dormía en el suelo del salón Deku tenía pensamientos poco puros! Y eso lo mataba de vergüenza.

Sin embargo, Deku estaba dispuesto a ser una buena persona que hiciera lo correcto, y eso incluía salvar a Kacchan de la probable molestia de Aizawa Shouta por ¿La falta de respeto? Como fuera, Deku hablaría por Bakugou, aún si debía mentir para sacarlo del problema, aunque aún se sentía sorprendido por como descubrió el secreto de Katsuki.

FlashBack

Deku abrió los ojos con un quejido cuando siente un sonido constante atravesar la pared de que separaba su cuarto del de Bakugou. Con un bostezo voltea a ver el reloj.

— ¿1:23? — murmura, frotándose un ojo con el puño. Era muy tarde ¿Qué demonios estaba haciendo Bakugou a esa hora?

Con un suspiro se pone de pie lentamente y se acerca a la pared para apoyar su oreja contra el muro. Tal vez Bakugou solo estaba practicando boxeo como otras veces, en varias ocasiones el rubio estaba estresado y se quitaba ese estrés por medio del ejercicio. Aún así, Deku quería dormir.

Sin embargo, lo que Izuku escuchó a través de la pared fue algo que jamás habría esperado, y eso eran los gemidos de Bakugou. ¡Dios! ¡Qué bien sonaba!

Avergonzado, Deku cubre su boca, sonrojado hasta las orejas, totalmente sorprendido. Esos gruñidos y roncos gemidos sonaban tan bien. Jamás creyó que llegaría el día en que oiría un sonido más atractivo de Bakugou que su típico "Shine". Tímidamente desliza su mano hacia su entrepierna, metiéndola dentro del pantalón de su pijama para tomar su miembro semi erecto y acariciarlo lentamente, endureciéndolo por completo.

— Ahh ah ¡Mierda si! — Deku muerde el dorso de su mano suavemente, intentando acallar sus gemidos para poder oír mejor a su amigo de la infancia gemir a su manera.

— Ah Kacchan, suenas tan bien — gime por lo bajo, con su mano aún sobre su boca, luchando por no ser oído. Aunque con lo ruidoso que era Bakugou sería imposible que escuchara algo más además de sus propios gemidos.

Su mano acelera el ritmo, presionando de vez en cuando para tener una mejor sensación. Apoya su espalda contra la pared y mete dos dedos dentro de su boca, presionando su lengua con ellos de vez en cuando, así como también la enredaba entre sus dígitos una y otra vez, lubricándolos con su saliva. Sus gemidos sonaban ahogados, y Bakugou aún seguía en lo suyo. Izuku se sentía al borde del orgasmo, jamás le gustó Bakugou en un sentido romántico, pero no negaría que era un imán sexual increíble, a veces incluso imaginarlo desnudo era suficiente para que se excitara, pero jamás en su vida creyó tener la oportunidad de oírlo gemir, se oía tan lascivo.

Pero si hay algo que caracteriza a Bakugou Katsuki era su increíble capacidad de cagarla, y está ocasión no fue la excepción.

— Ahh ah Mierda ¡Shouta!— el movimiento de las manos de Deku se detuvo abruptamente. ¿Qué?

No, no había forma de que Bakugou gimiera el nombre del hombre que le gustaba a Deku, debió haber oído mal, tal vez a Katsuki le gustaba Shoto, si, eso debía ser. Hasta tenía cierto sentido el pensar que a Bakugou le gustará Todoroki ¿No?

— ¡Sensei, dios si!— no, si era Aizawa. La calentura se le bajo de golpe a Deku y un malhumor infernal se aferró a su cuerpo. Ah no, Bakugou definitivamente no podía sentirse interesado por Aizawa, no era justo.

Fin FlashBack

Lo peor fue verlo al día siguiente actuar tan natural, como si sus jodidos y sensuales gemidos lujuriosos no hubieran sido oídos por medio instituto. Sacudió su cabeza, ya no importaba. Tenía que ayudar a Bakugou sin importar nada, era su amigo después de todo, incluso si el rubio decía lo contrario.

Cuando llegó al salón la puerta estaba cerrada. Ay, debe estar recibiendo el sermón de su vida. Piensa entristecido el peliverde, aunque si había algo raro era el profundo silencio que sentía cerca de la puerta, era extraño no oír las quejas de Bakug-

— ¡Ahhh Katsuki Ahh!— Deku siente que se le detiene el corazón, y sin poder detenerse abre la puerta de golpe, topándose con una escena que ni en sus más profundas pesadillas habría logrado imaginar.

— Baku... Gou — murmura Izuku débilmente, en shock. Aizawa estaba recostado en el escritorio boca arriba,  sus piernas estaban enganchadas a los hombros de Bakugou, quien penetraba rudamente al segundo héroe favorito de Deku sin ningún cuidado.

— ¿Huh?— Aizawa desvía su mirada hacia la puerta, y Deku tiene la vaga esperanza de que algo, lo que sea, ocurra. Tal vez que Aizawa sostenga algo de dignidad y se quite a Bakugou de encima, que finja al menos que Izuku no lo encontró follando con un estudiante, con su amigo de la infancia. Sin embargo, Aizawa sonríe y estira su mano hacia Deku, invitándolo a acercarse — Ven aquí, retoño mío — gime mordiéndose el labio inferior. Y Deku ya no sabe que le duele más, si el corazón o la entrepierna.