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Ella había sido deseada, rubia de cabellos largos y sedosos, que se deslizaban con soltura entre los dedos; ojos azules, tan azules como el cielo, mar o mineral que pudiese existir colocando una comparación; piel blanca, lisa, sin imperfecciones, suave; sus rasgos mixtos, cuencas almendradas, nariz redondeada, fina boca de suave color melocotón, ella era y es hermosa.

Una niña deseada, una niña que había nacido como cualquier otra, es por eso que no hallaba la razón por la cual se había convertido en alguien indeseado.

Reika era la niña de papá cómo muchas otras, el adulto le entregaba todo lo que pudiera necesitar, a pesar de ello no era caprichosa o avariciosa, después de todo sus padres se habían encargado de hacerle comprender el valor de las cosas, no solo objetos si no todo lo que la rodeaba.

Es por eso que ella no entendía la razón por la cual se convirtió en un objeto, ser humano sin valor pero usado por una razón, venganza.

Su madre era hermosa, madura, sofisticada, segura de sí misma, brillaba al caminar, de igual forma que los ojos resplandecía al verla.

Por eso Reika no había entendido, porqué en ese momento sus ojos ya no brillaban de la misma forma. Su madre había fallecido y ella era pequeña, tan diminuta como para mostrar con sus dedos cuantos años tenía, pero entendía, comprendía que su "mamá" había fallecido, lo supo cuando su boca se selló, mucha sangre se esparció debajo de sus pequeños zapatos blancos, sus favoritos porque mamá se los compró, porque papá se negó ese día. De la misma forma que ella se negó a pensar que su madre no abriría los ojos mirando al frente, mostrándole dos joyas brillantes.

Ella había sido deseada, pero ahora no lo era, por eso entendía el dolor de Tora.

Cuando Tora llegó a su pequeño refugio, el mismo que había sido creado para ella, pensó que era una niña hermosa, que seguramente había sido amada como ella, sin embargo, cuando la de ojos extravagantes clavó su atención en ella, comprendió la diferencia entre ambas, a pesar de que a las dos se le fueron entregados un surtido de caramelos para después arrebatárselos, la de cabellos extravagantes, poseía algo que ella no tenía, una meta.

Tora se movía para no morir, mientras que Reika deseaba de nuevo tener alguien que la amara.

¿Cómo dos niñas tan diferentes, pudieron hacerse amigas?

Reika era el sol que iluminaba la habitación, en cambio Tora era el rebelde cielo nocturno que se expandía a lo largo del infinito.

Porque Tora siempre correría, saltaría, volaría, siempre sería mejor que ella, porque la protegida del viento había nacido para ser amada, tenía un potencial que la contraria nunca tendría. Entonces pensó: ''¿Por qué ella puede hacerlo, pero yo no?''.

¿Por qué ella que quería ser amada, no tenía la suerte de su lado, pero la contraria en su soledad, tenía la habilidad para ser amada?

Sin embargo, se equivocaba, era algo mucho más complejo.

Lo supo al ver como Tora ayudaba a ese joven de cabellos verdosos semejante a las hojas que envolvían los árboles, o como protegió a sus nuevas compañeras de un posible ataque, o la forma en la que fue defendida intensamente por un rubio ceniza malhablado que parecía odiarla, pero que sin ninguna duda era lo contrario, era tan claro como él se sentía, a pesar de ello lo que más cristalino era, esa persona.

Todoroki Shōto.

Bicolor tanto de cabello como de ojos, a la rubia no le interesaba cuán popular fuese o cuán poderoso fuera, lo único que captaba su total atención era como Tora se veía embriagada por sus ojos heterocromáticos.

«¿Por qué él?», rogaba una respuesta, aunque era conocedora de ella, Todoroki podía ser y hacer lo que ella nunca podría, esa aclaración hacía arder su pecho. Existían muchos tabúes en el mundo interior de la rubia, ella que no podía ser tocada por un hombre, había sido profanada por los del sexo contrario y cuando se dio cuenta de que el mundo entero parecía querer estar en contra de las mujeres, ella deseó haber nacido como hombre. Esa petición aumentó al conocer a la de cabellos magenta, la contraria sabía que incluso en un mundo sin esclavos brindando libertad a sus ciudadanos, existen temas que las personas evitan, odian o repudian. Conocía las habladurías sobre las relaciones entre mujeres o viceversa, había investigado los estilos de vida de las personas que tenían relaciones con el sexo opuesto, después de todo, era una niña que desconocía muchas cosas sobre la sociedad. Entonces supo que sus sentimientos no eran algo descabellado, que tampoco era una enfermedad, o que ni siquiera estaba loca al ver a Tora de esa forma, se alegró tanto que no pudo contener las lágrimas, ella no tendría que encerrar esos sentimientos.

El problema apareció cuando una idea vino a su cabeza, su querida mejor amiga, ¿podía sentir lo mismo acerca el sexo opuesto?

Decidió intentar buscar indicios de ello, mientras comían hablando tranquilamente, mientras dormían juntas o incluso cuando se bañaban, pero lo único que encontraba eran esos ojos que procedían un amor filial, poderoso, cuidadoso, entrañable, pero para nada romántico.

Entonces su deseo de ser hombre se incrementó, podría parecer superficial para muchos otros, pero quería ser uno que pudiera complacer a Tora, que no permitiese que ella sintiese la soledad, aquel capaz de provocar sensaciones indescriptibles en su cuerpo, pero sobre todo, uno que fuese amado por ella, pudiendo alcanzar su alma.

Lamentablemente era conocedora de la verdad, ella no había sido escogida.

«¿Por qué no puedo ser yo?»

Era una mujer.

«¿Por qué no me puede mirar a mí?»

Ella mira hacia otra dirección, lejos de ti.

«¿Por qué ella tuvo que enamorarse?».

Ella deseaba mantener a la de cabellos rosados en su pequeño mundo, donde estarían juntas por siempre, aunque con todo un desastre sucedió; era un día como muchos otros, la pareja de amigas habían salido del refugio para conseguir comida como usualmente hacían cada mañana, la persona que cuidaba de ellas, Suzue , siempre se encargaba de explicarles las técnicas que deberían usar en sus planes de hurto. Las tres sabían que robar no era un acto heroico precisamente, pero en los barrios bajos solo cohabitan personas abandonadas por la sociedad, son individuos peligrosos perseguidos por asesinatos u otros delitos de grado menor o mayor. La cuestión era, ¿por qué niñas tan pequeñas convivían con alguien "supuestamente" peligroso?

La respuesta era tan clara como las gotas de agua que caían en sus cuerpos al caminar, debían su vida a Suzue, mientras que Reika había sido salvada por ella años antes de la llegada de Tora cuando había sido gravemente herida por hombres de la zona, Tora se salvó de una muerte pronta a causa de hipotermia. Debido a ello, las tres viven juntas, con su amable "hermana mayor", confían en su criterio, en la verdad que les contaba del mundo, Suzue era totalmente diferente de los residentes del barrio bajo, ella era la luz de ambas; Suzue nunca hablaba mal de los héroes, nunca favorecería sus labores de ladrona como algo positivo, sin embargo, las tres necesitaban sobrevivir.

Cuando las dos niñas saltaban los charcos de gran tamaño producidos por la lluvia, no podía evitar reír mostrando algo de diversión, pero sus sonrisas se desvanecieron al instante, al divisar un individuo sospechoso. Él llevaba una gabardina marrón, zapatos negros de punta, no mostraba su rostro ya que estaba siendo cubierta por un sombrero del mismo color que sus ropajes.

-Nunca habría imaginado toparme con dos enternecedoras jóvenes.-ambas lo intuyeron al instante, era un sujeto peligroso y debían huir de allí.

-Lo sentimos, pero tenemos prisa.-contestó firmemente la de cabellos rosados, mientras que tomaba la mano de su compañera, cuando ellas rebasaron al desconocido el hombre las detuvo hablando una vez más.

-Unas ratas de la calle que no tienen hogar ¿a donde irán?-las dos se detuvieron ante sus palabras, a pesar de ellos no voltearon hacia el hombre-Tengo ordenes claras de tomar a dos muchachas, ambas coinciden con esas descripciones.

-¿Quién te envía?-demanda Tora, esta vez girando su cuerpo con decisión hacia él.

-No conoces a mí jefe, pero sin duda tienes mucha relación con él, pequeña.

-Jefe, ¿eres de una mafia o algo así?

-En realidad, provengo de la liga de villanos-dijo mientras reía, las dos niñas empezaron a sudar, estaban aterrorizada-ambas poseen habilidades necesarias para el jefe, espero que comprendan.-él comenzó a deformarse, sus extremidades se hundieron en el suelo, Tora tomó a Reika para iniciar su escapada.

-¡¿Quién es ese hombre?!-vociferó la rubia la cual estaba atemorizada por lo que pudiera pasar.

-¡¡Ese tipo tiene un kosei moldeable, ni siquiera tiene un cuerpo físico de verdad, es una maldita gelatina!!

-¡¿Qué hacemos entonces?!-Tora la mira de reojo y le sonríe-¡Saltar!-gracias a la habilidad de viento ambas se desplazan por los techos, despistando brevemente al hombre, el vestido azul de Reika se ondea en el aire recogido por su amiga, las dos regresan al suelo, regresando rápidamente hacia la entrada de su escondite.

-¿A dónde creen que van, pequeñas?-ambas se detienen al instante para girarse y contemplar al hombre gelatina en frente de ellas-entiendo que sientan miedo, he sido muy descortés con las dos, me suelen llamar Jelly.

-Va acorde a tu aspecto.

-Oh, una chica lista, entonces comprenderás que estáis perdiendo el tiempo. Sé cual es vuestro escondite, así que rendios.-entonces el hombre comenzó a atacar de nuevo, las dos se dividieron por el impulso, Tora buscaba la solución a este problema pero tenían muchos puntos en su contra; número uno, la habilidad de Reika no haría efecto, número dos, al tener esa forma física, el viento de Tora no surtiría efecto, él sería destrozado pero volvería a regenerarse, había investigado sobre ese tipo de habilidades.

Pese a ello, tenían que escapar, procedió a usar su habilidad de viento cortando al villano, entonces tomó de nuevo la mano de su amiga e emprendieron su huida hasta llegar a la salida de los callejones.

-¡No escapen ratas!-el ser gelatinoso se encontraba una vez más, en frente de ellas, desplazándose sigilosamente-reconozco tú habilidad, eres rápida y astuta, pero se acabó el juego niña sucia.

-¡El juego no termina gelatina!-el viento de ella envolvió al ser, se sorprendió al ver como su potencia incrementaba.

-Lo habéis hecho bien-las dos manos de la adolescente se posaron en la cabeza de las muchachas, ellas se encontraron con el rostro de Süzue, sonrieron al verla-veamos como podemos librarnos de esta cosa.

-¡Tú eres la traidora!-dio voces el ser, como si quisiera demostrar algo, la sonrisa de la "traidora" se asemejaba a un zorro.

-Es una gran honor-hizo una reverencia occidental-que me nombres de tal forma.

-¡¿Por qué has escapado con el enemigo?!-la cosa intentaba golpear la esfera de aire sin resultado alguno.

-Ellas son mis hermanas ahora, por lo que podrás comprender que no permitiré que un sucio ser como tú, las dañe-sus ojos brillaban intensamente, su pasión se denotaba reflejada en las dos cuencas azules, apartó su cabello albino hacia un lado, alzó sus manos emitiendo una fuerte luz-Tora, Rei, saben lo que hay que hacer ¿cierto?-las dos asintieron atentas a su próxima indicación.

Cuando la habilidad de Tora se disipó ambas principiaron la carrera en cuanto el kosei de Suzue se activó, reflejando el ataque enemigo, el villano sin forma fue rebotado en su propia "anatomía", permitiendo unos segundos a las muchachas, a penas sus pisadas resonaron en el callejón Reika se tropezó, provocando que la de cabellos rosados mirase hacia atrás.

-Pensaban que las dejaría escapar-el pequeño pié de la rubia estaba siendo envuelto por la cuerda gelatinosa del villano-las ratas se deben atrapar con algo de sorpresa ¿cierto?

-¡Rei!-gritaron las contrarias, la rubia fue lanzada en el aire antes de que alguna pudiese reaccionar, entonces desde la altura fue devuelta con gran fuerza hacia el suelo, destrozando el asfalto.

-Rei no, Rei.-Tora estaba en estado de shock, nadie podría sobrevivir a una caída así, el pánico llegó hasta ella al ver como su amiga no se movía.

-Pensar que tengo que lidiar con escoria así, el jefe es realmente horrible.

-¡¡La única escoria aquí eres tú!!-Suzue entre lágrimas, se abalanzó hacia el individuo intentando usar su otra habilidad en él, a pesar de ello no lo logró a tiempo repitiendo el mismo movimiento de ataque, ella no logró esquivarlo a tiempo siendo arrojada a un muro cercano.

-Basta...-musitó la menor entre lágrimas, ella se había desplazado hasta su amiga, sosteniendo su cabeza ensangrentada con sus pequeñas manos.

-Oh bueno, tú eras quien realmente me interesaba.-las cuerdas gelatinosas se acercaron hasta la cabeza de ella, siendo quemadas por su kosei.

-¡¿Fuego?!

-He oído que tienes resistencias ante la electricidad, agua, hielo y fuego-se levantó dejando a su amiga en el suelo-sin embargo, incluso tu cuerpo no podría aguantar el fuego fatuo, el cual es capaz de mantenerse constante incluso si el usuario deja de usarlo.

-¡¡Maldición, nadie me había dicho que tenías esa habilidad!!-el ser gelatinoso se retorcía, su cuerpo estaba comenzado a evaporarse.

-Incluso a un villano con una kosei como el tuyo, le costará regenerarse.

-¡¿Crees que me intimidas, maldita niña sucia?!-los ojos de Tora brillaban intensamente, hasta que su atención fue clavada en las sirenas de la policía, estaban evacuando la zona a causa del fuego. Ella se asustó observando sus manos, estaba asustada, no era la primera vez que dañaba a alguien más por su habilidad de fuego, su cabeza comenzaba a doler, no pudo evitar apoyarse en el suelo dejando a su cabeza sentir la fría piedra bajo su anatomía, en ese instante se dejó caer en el suelo mientras observaba el rostro de su pequeña familia por última vez.

Ese día todo cambió, Tora fue tomada para ser enviada a un orfanato, en el cual intentó escapar numerosas veces en busca de su familia, mientras que Reika había sido dada por desaparecida, siendo atrapada por la liga de villanos, distorsionando sus recuerdos, manteniéndose bajo las ordenes de Shigaraki, en cambio Süzue la cual Tora daba por desaparecida también, había sido ingresada en un hospital para una recuperación, aunque a esta última no le permitían visitas, hasta el momento en el que nos encontramos.

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-¿Estáis todos?-Aizawa reviso con su cansada vista a los presentes, los alumnos de la clase A, habían sido llamados, viendo los resultados obtenidos de las licencias aceptaron que aquellos con habilidades extraordinarias para el combate fueran integrados en el equipo de rescate con el objetivo de traer de vuelta a Reika.

-¡Estamos presentes, señor!-pregonó Kirishima, con una gran energía.

-Gracias por la confirmación.-contestó Aizawa el cual pensaba lo que usualmente surgía por su cabeza "niños tontos".

-Y por preparar mi próxima visita al otorrino.-añadió Tora tapando su oreja izquierda, justamente donde se encontraba el de cabellos rojos, escuchó una disculpa por parte de su compañero a lo que suspiró.

-Escuchen atentamente, esto no es un juego-el conjunto de los presentes posaron su atención en la voz del azabache-no habrá segunda oportunidad, así que deben obedecer cuando sea necesario y acatar las reglas establecidas.-en su totalidad asintieron.

-Comencemos por orden, los mencionaré mientras que les encargo su función-él procedió a encender una pantalla mostrando lo que parecía ser un mapa-esta es la guarida del villano que buscamos "El ojeador nocturno".

-¿Ya lo han encontrado, pero cómo?-Tora estaba impresionada, él la detiene.

-No menosprecies nuestras habilidades-ella asiente- por lo que sabemos el lugar está fabricado con acero, no puede ser golpeado con habilidades de fuerza, sin embargo se puede fundir, usaremos los koseis de Hayashi, Todoroki y Ashido.

Los mencionados asienten, a su lado Kirishima parece decepcionado por lo que suspira bajando su cabeza.

-Creemos que la entrada es subterránea, ya que en la zona no se divisa edificio alguno.

-¿Cómo lo descubrieron entonces?-cuestiona Tora, era una situación engorrosa.

-Los héroes con habilidades de reconocimiento buscaron por la zona en la que los rescatamos, fue bastante sencillo la verdad, ese tipo debe estar confiado ante su seguridad.

-¿A pesar de qué no parece difícil su invasión?-cuestiona Jirō, a lo que él asiente.

-Su kosei le permita modificar los elementos, es por ello que los cuerpos desaparecían, creemos que confía fervientemente en sus capacidades.-Katsuki y Tora no pudieron evitar recordar su batalla contra el hombre, era hábil, ágil, fuerte-hemos creado una lista de posibles debilidades con vuestro testimonio-señaló al rubio y la pelirosada, él toca un botón en la pantalla para mostrar unos datos organizados en puntos- creemos que este es su perfil.

-¿Izumi Arata?-pronuncia Jirō mientras alza su ceja izquierda-es un nombre bastante común para un tipo tan peculiar.

-Así que es cierto...-musita la pelirosada, Tora bajó la cabeza. Todoroki notó ese cambio en su voz, ella parecía triste.

-Él trabajaba en el tercer sector, era un empresario normal como otro cualquiera, no destacaba especialmente.

-Pero tiene un kosei.-aclaró Yaomomo, el azabache asintió.

-Ciertamente, no fue aceptado en las pruebas de admisión, por lo que nunca se formó como aspirante a héroe.

-Entonces, ¿cómo es posible que él...?-Aizawa se adelantó a la interpretación de Midoriya.

-Desconocemos el origen de su camino-contestó observando a la pelirosada-sin embargo, sabemos que el se endeudó, asesinó a su esposa y dejó con vida a su hija.

-¿Su hija?-musitó el rubio extrañado-¿ese maldito tiene aún familia?

-Izumi Reika.-tras articular nombre y apellidos los restantes no pudieron evitar pronunciar un "¿eh?" a excepción de Tora la cual seguía decaída.

-Reika.-repite el de cabello verde.

-Izumi Reika hija de Izumi Arata, se crió con su familia en un pequeño apartamento, su padre cambió de comportamiento de forma radical creando tratos con la mafia japonesa, para poco después asesinar a su esposa, por consecuencia su hija fue abandonada a su suerte, provocando que tuviera que vivir en las calles conviviendo con otras dos crías, una adolescente y una niña de su misma edad-espectantes observaron a Tora, obviamente reconocían ahora las piezas restantes en el puzzle-el grupo que crearon se separó a causa del ataque de un villano, conocido como Jelly, a continuación Reika fue secuestrada por la liga de villanos, fue hospitalizada, como rehabilitación la Yuei le permitió continuar sus estudios en la Yuei.-sentenció mientras separaba sus ojos de Tora.

-Tengo una pregunta-él miró de soslayo a su alumna-¿que sucedió con Suzue?

-Por alguna razón los villanos no la llevaron al igual que Reika, la encontramos con múltiples contusiones, huesos rotos, estuvo en coma durante unos años hasta despertar, iniciando una rehabilitación.

-Sé por All Might que ella está bien, ella le pidió que entregara ese pendiente por mí.

-Cierto es.

-¿Podría verla?-sus redondos ojos relucían ardientemente, reflejando la intensidad en su deseo.

-Imposible.-ella suspiró ante su respuesta.

-Lo supuse, esperaré hasta el día en que ella quiera verme.

"Esta niña conoce bien a Suzue-san".

-Continuaré entonces con sus roles-tosió levemente, deslizando la imagen anterior de la pantalla-Bakugo irá en la retaguardia como defensa; Jiro se encontrará en el centro del escuadrón, Midoriya será la defensa del lado derecho a ella, a su vez Yaoyorozu se encargará de ser la auxiliar del equipo, Kirishima protegerá las espaldas de Ashido, la cual os abrirá aperturas con su kosei, al frente Todoroki y Hayashi, no quiero errores.

Tora mira con detenimiento al hombre con vendas, el cual parece confiar en su propio criterio para la organización de la táctica.

-Encargate de ese desgraciado Hayashi.

-¡Sí!-exclama ella con una amplia sonrisa.

-Izumi Arata ha evaluado, medido y planificado estos muros por completo-comenta Yaomomo observando a su alrededor-parece notarse su experiencia en la construcción.

-¿Realmente prodremos encontrar la entrada tan fácilmente?-pregunta Ashido, preocupada.

-Jirō es la hora que uses tu kosei.-indicó Tora, por alguna razón que ella desconocía había sido nombrada líder del escuadrón.

-Está bien-ella se colocó en cuclillas para acercar sus "extensibles" a la tierra árida-no escucho nada-sentenció mirando al grupo.

-Entonces-musita Tora-Kirishima-lo llama, él se acerca con curiosidad-activa tu pecualiaridad y golpea el suelo.

-¿Eh?-emite con confusión-bueno, está bien.

-Realmente, este sitio apesta, hablo en serio.-la chica alíen tapaba sus fosas nasales con una natural expresión de asco.

-Es lógico, estamos cerca de un alcantarillado.-responde con serenidad Jirō.

-¿Creen que seremos capaces de alcanzar a ese loco?-pregunta Ashido.

-Tenemos que hacerlo.-la voz de Tora denotaba tristeza, a pesar de ello una gran firmeza sonaba en sus palabras.

-Bueno, debemos salvar a Rei-rei.-añade la chica alíen.

-¿Rei-rei?-la pelirosada repite el ápodo con gracia.

-¡Nosotras somos amigas! ¿cierto?-se dirige a las otras féminas en el grupo, a lo que ellas asienten.

-Bueno, no suelo hablar mucho con ella, pero es agradable.-comenta Jirō, al escuchar la sinceridad de la chica auriculares se calmó, le agrada Kyoka, ella es simple, humilde, amable.

-Ella tiene un gran gusto en la moda-añade Ashido, a lo que Yaomomo se une.

-Es una pena que no pueda apreciar el té cómo se debe.-Tora suspiró.

-Ella odia las cosas agrias.-contesta.

-¡Oh, entiendo!-golpea suavemente el puño en su mano.

-¡Golpea!-el endurecimiento de Kirishima creó una onda sonora que Jirō pudo interceptar, su expresión mostraba alegría.

-¿Y bien?-Tora la miraba con una leve sonrisa, ella asintió, levantándose.

-¡Por aquí!-comenzaron a correr tras de ella, Tora recordaba el olor nauseabundo de las cloacas, la arena sujetada a su piel, el dolor de sus heridas producidas por el Ojeador Nocturno, él pagaría por todo.

La de cabellos cortos se detuvo, provocando el movimiento del equipo, uso su kosei una vez más comprobando la zona, asintió hacia sus acompañantes, para usar la punta de sus dedos, arrastrando la arena.

-¡Es la entrada!-exclamó Mina mientras saltaba alegremente, todos emitieron un "Shh"-perdón, perdón.

-Tengo una pregunta-Bakugō que no había hablado en todo el trayecto, algo extraño por supuesto, habló calmadamente, movió su pulgar indicando a Ashido-¿quién es el idiota que pensó que esta tía sería de ayuda?

-¡Bakugō, eso es cruel!-se quejó moviendo sus brazos formando un molinillo.

-Dejemonós de chácharas y entremos-sentenció Tora, los integrantes asintieron-en cuanto estemos en el pasillo quiero ver la formación, ¿entendido?

-Entiendo porqué nunca te han puesto de jefa, eres una mandona.-comentó el rubio, Tora chasqueó su lengua.

-Nadie te preguntó, Kacchan.-él castañeó sus dientes representado su rabia ante el apodo.

-Cuando recuperemos a Rei le diré que te mande a la mierda.-confesó con las manos en sus bolsillos.

-Ella me adora-contesta con sorna, llevando la mano a su pecho mientras que muestra una sonrisa ciníca- seguramente tú serás el que baile solo, expulsando aire fétido.

-¿Por qué aire fetido?-pregunta Yaomomo con inocencia.

-Tener una lengua sucia trae grandes consecuencias.-sonríe malévola.

-Muere.-una voz de ultratumba emerge del rubio ceniza, las leves chispas en sus manos alumbraron abruptamente el lugar.

-No tengo ganas, tal vez en otra ocasión, gracias.-contesta la pelirosa danzando su mano derecha, en tanto que lo mira con desdén.

-Vosotros dos, callados.-sentenció Kirishima.

-Perdón.-pronunciaron para después rechistar al unísono.

-Realmente son como hermanos perdidos.-añade Jirō con burla.

-Espero que mi pobre padre no haya introducido un esperma tan flácido y mugriento cómo el de Bakugō.

-Muere-pronunció fríamente mientras prendía sus chispas-muere ya.

-¿No pueden mantenerse en silencio sin pelear?-Kirishima miraba al dúo con agotamiento; pensar que su mejor amigo está enamorado de la pelirosada, por su comportamiento nadie lo diría, aunque bueno, esto es obvio incluso para un tipo despistado como lo es Kirishima.

-¿La has visto?-la señala el rubio con desdén-su cara de fea amargada pide que la moleste.

-Creo que te estás equivocando-pronuncia siseando, a continuación, Tora lo golpea en la cabeza provocando que este lleve su cabeza hacia abajo y abra ampliamente sus piernas, casi en cuclillas-él me pide a gritos que destroce sus órganos reproductores.-dice activando su kosei de fuego.

-¡Tora-san! ¡No hagas eso!-clama Midoriya intentando sostenerla, atormentado por sus intenciones.

-Dejen de perder el tiempo-la ronca voz del bicolor destrozó la ardiente batalla, miró directamente a la líder-Tora vamos.-ante la orden de Todoroki, la pelirosada se detuvo mostrando un puchero caminando hasta él, siendo testigos, observaban sorprendidos la escena viendo como sus dos compañeros estaban en tal extraña cercanía.

-Eso sonó...-musita Midoriya con asombro.

-Como un padre, regañando a su hija.-completa Yaoyorozu.

-Ella es muy obediente cuando se trata de mitad bastardo.-dice Bakugō, por supuesto molesto ante la situación.

-Ojala fuese así contigo.-añade Kirishima observando al frente ensimismado, a lo que el rubio lo golpea con un "tortazo" en la cabeza.

Entonces, después de una "corta" disputa, el escuadrón inició su exploración.

-Las paredes son algo extrañas.-comenta Kirishima observando los alrededores.

-¿Podrías analizarlas, Momo?-solicita Tora, la nombrada asiente usando su peculiaridad, de esa forma comienza a sacar un artefacto pequeño.

-¿Qué es eso?-pregunta Ashido desde detrás de Momo; la muchacha entrelazaban sus manos llevando ambos brazos a la espalda.

-Se trata de un analizador de minerales-contesta ella con entusiasmo; algo que Tora había notado en el corto tiempo de conocerla es que ella suele expresar todo o con muchas ganas o seriamente- puede clasificar las características de la piedra que componen estas paredes.

-¿Podremos saber entonces, cuán resistente es?-pregunta Jirō, ella asiente.

-Pero Aizawa-sensei-el grupo miró a Mina, la cual se dirigía a Tora-mencionó que no tendríamos problemas, ¿cierto?

-Eso mencionó, el caso es lo que no dijo-la joven alíen se veía aún más confundida-¿por qué crees que Aizawa creó una estrategia con alumnos de la clase A?

-¿Por qué recibimos nuestras licencias?-contestó llevando la mano al mentón, la contraria negó.

-Él busca ver nuestro desempeño como héroes-contesta Midoriya con seriedad-tener un permiso no nos hace ser más capaces.

-Correcto-habla Tora-las experiencias, saber usarlas a tu favor, aprender de tus errores y disfrutar de tus éxitos.

-¡Ya veo!-contesta ella entusiasmada-¡Vamos allá, Bakugō!-mira para el rubio sonriendo.

-¡No me juntes contigo!-regaña él gritando.

-¡Nosotros podemos, Bakugō!-vocea el de cabellos rojo.

-¡Dejarme en paz, extras!-contesta él igual de furioso.

-Tenemos que seguir, así que mantengan la calma.-regaña Yaomomo, la pareja animada asiente dejando en paz a Bakugō.

Abrieron la marcha por los ahora iluminados pasillos de piedra, sus componentes son desconocidos, eso asegura que están creadas por el Ojeador Nocturno. Punto a su favor, dado que son conocedores de como disipar el lugar por completo, si es derrotado su guarida se desvanecerá.

-El lugar ha cambiado por completo.-comenta Tora, el grupo seguía en formación, Todoroki a su lado la mira de soslayo.

-¿Te refieres a la estructura?-ella asiente mientras mira al frente.

-Cuando Bakugō y yo llegamos nos encontramos con una serie de habitaciones, muchas de ellas tenían asignadas pruebas.

-¿Cómo puzzles?-pregunta Ashido, sus redondos ojos brillaban con intensidad, algunos suspiraron.

-Sí, incluso pasamos por una habitación que parecía totalmente habitable, es por ello que no comprendo la razón por la cual solo vemos pasillos.

-Él modificó la estructura-comenta Midoriya, él parecía iniciar una charla consigo mismo-eso quiere decir, que podría usar su kosei mientras estemos aquí. ¿Cómo podríamos escapar dándose el caso?

-Él no pretende encerrarnos.-comenta Bakugō, su tranquilidad asustaba.

-¿A qué te refieres, Bakugō-hermano?-cuestiona Kirishima.

-Él solo está interesado en una persona.-el rubio ojeó al frente encontrándose con los ojos de Tora, los cuales lo observaban de reojo.

-Él tiene algún tema pendiente con mi padre, aunque todavía no sé la razón.-confiesa la pelirosada.

-Entonces, no podemos permitirnos perderte de vista Hayashi.-añade Kirishima, ella asiente.

-Aunque solo debéis preocuparos por seguir el plan.-asintieron, a excepción del bicolor.

-No permitiré que suceda de nuevo.-casi como un susurro imperceptible Todoroki reflejó su decisión, Tora clavó su atención en él, descontenta por su respuesta.

Él parecía querer mantenerla en una caja de cristal, lo que definitivamente surcaba sus pensamientos.

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Caminaron durante dos horas, los pasillos se volvían más estrechos, el escuadrón se asemeja a un rebaño de ovejas más que una formación táctica.

Ashido aplicaba su ácido para perforar las paredes creando una abertura nueva, mientras que Jirō usaba sus extensibles para hallar posibles sonidos dispersos en la estructura, aplicando esa técnica se desplazaban en el gran búnker.

Bakugō mantuvo un silencio sepulcral después de las discusiones que había mantenido con Tora, extrañando a los miembros del grupo.

Midoriya no podía evitar sentir curiosidad por las experiencias de ambos compañeros, los cuales contaban con una experiencia anterior contra el villano, después de meditarlo decidió dar el paso.

-Tora-san, Kacchan-incluso aludidos no se detuvieron, aunque clavaron su atención en él-¿cómo fue su pelea con el Ojeador Nocturno?-ningún sonido residía en el pasillo, el grupo estaba expectante por las posibles respuestas de ambos.

-Físicamente parece un hombre débil.-comenzó Tora.

-Se directa, él parecía un payaso de circo.-la pelirosada frunció el ceño ante su interrupción.

-Sus vestimentas eran extravagantes como si estuvieras viendo un actor de películas del siglo XVIII; su complexión es delgada, es esbelto portaba una máscara.

-Ese maldito parecía una araña, me daban ganas de matarlo.-Kirishima sonrió nervioso.

-Es flexible, ágil, no parece tener mucha resistencia, a pesar de ello estarías en clara desventaja solo por sus habilidades en combate.

-Cuando me enfrente a él parecía anticiparse a mis movimientos.

-Se sentía como si estuviéramos jugando al ajedrez y él conociese nuestra siguiente jugada.

-Así que el Ojeador Nocturno es un estratega nato.

-No del todo-replica Tora-cuando realizamos la pruebas de las habitaciones me di cuenta de algo.

-¿Qué es?-pregunta Ashido.

-Cada una de ellas parecían complejas para escapar y elaboradas con gran esfuerzo, sin embargo, no eran difíciles de superar.

-¿Quieres decir que eran fáciles para ser propuestas por un villano?-intenta aclarar Jirō, a lo que Tora asiente.

-Era como si un niño estuviese colocando acertijos-Tora contempló el techo-por lo que sabemos que realmente él no es tan habilidoso como creemos, realmente sus destrezas en combate es lo que tienen peso.

-No comprendo, entonces ¿es hábil o inútil?-cuestiona Mina con confusión.

-Ambas cosas, el ser humano siempre destaca en el algo-contesta mirando a la de tez rosada-él se aprovechó de nuestro cansancio físico para usar su punto fuerte.

Bakugō suspiró.

-Lo supuse al ver como mi cuerpo era menos resistente ante él.

-Buen punto; la arena ralentiza los movimientos, incluso al salir tú cuerpo se siente fatigado por el esfuerzo.

-¡Increíble!-Ashido muestra una sonrisa de oreja a oreja-¡Eres muy inteligente Tora!-ella emite una suave risa.

-Sólo tuve tiempo para pensar-su rostro se tornó serio-él fue astuto, pero ese tipo de trucos solo funcionan una vez.

-¡Ahora no estáis solos!-exclama Kirishima, sus dientes de tiburón parecían relucir en el oscuro pasillo.

-Cierto es-habló Yaomomo, pensante-estamos aquí para respaldarnos, podremos rescatar a Reika-san.-todos asintieron, conmoviendo a Tora.

-Gracias, escuchando vuestras palabras me doy cuenta de lo estúpida que fui al correr sola al peligro.

-No pienses eso Torichi-Mina le sonríe levemente, al mismo tiempo que sostiene su brazo-si Bakugō y tú no se hubieran infiltrado no sabríamos como localizar a Rei-chan, ni mucho menos saber los puntos débiles del Ojeador Nocturno.

-Ashido-san tiene razón-añadió Midoriya-también nos ha servido-miró a sus compañeros- está experiencia, es algo que nunca olvidaré.-sus dos cuencas verdes se achinaban formando una expresión decidida.

-Izuku...-musita Tora, para después sonreír ampliamente.

-¡Chicos!-Jiró habló exaltada, indicando frente a nosotros-está por allí.

-¿El Ojeador Nocturno?-pregunta Midoriya, ella asiente a lo que el escuadrón inicia la carrera.

Mina usó su kosei para abrir un callejón sin salida, con precaución entraron según el orden que habían mantenido desde el inicio, encontrándose con algo realmente escalofriante.

-Oh, dios mío...-Yaomomo cubrió su boca con ambas manos, sus redondos ojos se turbaron al ver la habitación iluminada.

-¿Fotos?-Kirishima sintió una gran angustia al ver las personas en ellas.

-¿Por qué tiene fotos nuestras? Decirme, por favor.-demanda Ashido asustada, Tora abraza a su amiga por los hombros, observando en gran mural.

-Están por toda la habitación, no es que sea precisamente pequeña.-comenta Jirō, no lo admitiría pero comenzó a sudar.

-Parece que él planeaba algo contra nosotros-habló Midoriya, sus ojos bailaban entre los rostros de la clase A.

-Pero, ¿por qué?-pregunta Kirishima en busca de una aclaración, a lo que Mina nota el apretón en su abrazo con Tora.

-Para dañarnos, comenzando tal vez con nuestras familias-añade Todoroki, él sostuvo entre sus dedos una foto de sus hermanos-sabe quienes somos, conoce quién es cada uno de nuestros familiares, ha creado una auténtica biblioteca de nuestras vidas.

-Ha sido sencillo para una araña que puede camuflarse-añade Bakugō con frustración-él quería saber cuáles podrían ser sus siguientes objetivos.

-¡Chicos, vengan!-Yaomomo grito desde el otro lado de la habitación-aquí hay una puerta.

Con pasos lentos se acercaron a la posición de su compañera, encontrando una abertura, Kirishima uso su endurecimiento para pasar su dedo en el contorno de la puerta, haciendo que se abriera.

Todoroki se adentró primero, seguido de los demás, sus heterocromaticos ojos se abrieron por completo, al instante, los presentes emulaban su expresión.

-¿Qué es esto?-cuestiona Ashido con voz temblorosa.

-Es terrible, ese hombre...-musita Yaomomo espantada.

-Este cuarto es más pequeño, aún así es el que más imágenes tiene-comenta Jirō mostrando el asco en su voz-ese tipo es repulsivo.

Tora no sabía en qué foto debería centrar su atención la vida de Reika y ella se encontraban esparcidas por todo el muro.

-Izumi nos lleva observando desde hace años-comenta casi en un susurro pero perceptible para los demás-ni siquiera me di cuenta, incluso tiene fotos de mi familia.

-¿Son tus padres?-Ashido indica con la punta de su dedo una de las fotos, la pelirosada clava sus ojos en la imagen, asiente.

-Mis padres, mi hermana mayor y la menor.

-Son preciosas todas, ¡tú padre es muy apuesto!-comenta Ashido, seguramente para agregarle menos angustia al asunto, Tora sonríe levemente mientras que palmeaba si cabeza.

-Gracias Mina.-ella asiente con una leve sonrisa.

-Tu vida en un muro, ¿eh?-musita Bakugō-¿deberíamos hacerlo arder?

-No importa, ahora debemos.-su voz es ahogada en el sonido de algo siendo quemado, las fotos comenzaban a quemarse una a una, en hileras, horizontal y verticalmente, los ojos de Tora reflejaban una ventana siendo iluminada por un anaranjado color.

Todoroki quién había posado su mano derecha en el muro, uso su kosei para arder todo en cenizas, con su misión concluida observó a Tora.

-No quedarán ni las cenizas-pronunció fríamente-eres libre ahora.

Había una ventana en los ojos del joven; Tora se sentía relajada cuando la luz traspasaba el marco para entregar una pequeña parte de ella a su corazón.

La pelirosada que no había despejado sus ojos del bicolor, decidió salir de la habitación, cerrando el asunto.

No quería llorar ahora, no sería libre hasta que Reika estuviera a su lado.

-

¡PLUS ULTRA!

Una vez más agradezco vuestra presencia en este capítulo, considerando lo habitual procederé con algunas preguntas:

1. Asesino/Ojeador Nocturno resultó ser el padre de Reika: opinión sobre el personaje, ¿qué esperáis de él? ¿por qué una investigación sobre la vida de las dos chicas?

2. Se ha expuesto a Reika, su historia ha sido desvelada con algunas revelaciones importantes, muchas marcadas entre líneas: hora del veredicto sobre Reika como personaje.

3. Jun, la madre de Tora ha aparecido en ateriores capítulos hablando sobre sus actos, pidiendo el perdón de su hija: ¿qué pensáis sobre ello?

4. Hipotesís general sobre lo que va ocurrir en el siguiente capítulo.

5. Ideas, sugerencias o conceptos que os gustarían que fueran explicados más a fondo o querríais que aparecieran próximamente.

¡ESCOGE AHORA!

Tú decisión marcará la trama de ahora en adelante:

A. Tomar el siguiente arco de referencia en la historia, relaciones personales - Festival cultural.

B. Descubrimiento de la familia Hayashi, a continuación festival cultural.

¡ATREVETE A SUGERIR!

¡Comenta una peculiaridad nunca antes vista!