➽18.
Lo primero que vio al momento de abrir los ojos, fue una lámpara de techo que le jodía la vista. Quiso cerrarlos y seguir descansando, incluso si ni siquiera sabía donde estaba, mas una voz aguda no se lo permitió.
- ¡Por fin reaccionas! Ya pensé que tendría que llamar a un doctor - habló el pequeño Chopper, su tono oscilando entre lo acusador y lo preocupado. Law intentó incorporarse, mas un fuerte dolor de cabeza no se lo permitió.
- ¿Qué diablos me pasó? Estoy como si me hubiera atropellado un camión - se quejó. El cachorro le alcanzó unas aspirinas junto a un vaso de agua.
- Pues a este punto, ni siquiera yo estoy del todo seguro. Pero tengo una teoría - admitió.
Ahí fue cuando el mayor comenzó a preocuparse. Si bien el chico era muy joven, también era el hijo adoptivo de dos respetados doctores que le habían inculcado la importancia de la medicina desde su más tierna infancia. Ese cachorro castaño estaba lleno de conocimiento.
Realmente no quería darle demasiada importancia, pero sabía perfectamente que si algo le pasaba, al pobre de Cora le daría un maldito infarto. Suspiró.
- ¿Y cuál es esa teoría tuya? - preguntó débilmente. El otro, parecía estar pensando sus palabras con cuidado.
- ¿Qué edad tenías cuando te presentaste? Lo recuerdas, ¿verdad? - y le respondió con otra pregunta. Genial.
- Tenía trece y medio. Lo común - aclaró.
Era cierto. Al menos en ese sentido, era normal, se sentía normal. El promedio en el que las personas presentaban su segundo género era de entre los trece a los quince años. Sin embargo, habían varios casos en los que las personas se presentaban unos años tarde, y muchos casos de niños presentándose antes de tiempo.
Se preguntó brevemente como se sentiría Chopper, con quince años, estando al límite del promedio. En su caso, si no se presentaba antes de su próximo cumpleaños, se asumiría que era un simple beta. Pero, conociendo al cachorro, de seguro y creería que había algo malo con él. Incluso los betas se presentaban, después de todo. Aunque también existía la posibilidad de que sólo fuera un caso tardío...
Su análisis fue abruptamente interrumpido por el sonido de un pesado libro golpeando el suelo. Se encontró al menor agachado en el suelo, leyendo con apremio y moviendo levemente un pie, pues estaba nervioso.
- Eso fue... hace siete años, según tengo entendido - el alfa asintió - Entonces, necesito que me digas algo. Durante todo este tiempo, tú em, has estado, esto, has estado sin un... - hizo algunos gestos con sus manos, sin poder hacerse entender.
- ¿Sin qué?
- Sin un... ¿acompañante? Sí, acompañante suena correcto - asintió, probablemente contento consigo mismo. Por su parte, Law no estaba para nada contento.
- ¿De qué rayos hablas, niño? No te entiendo.
- Vaya Law, pensé que eras más listo - pensó en voz alta, sin poder evirtarlo. El otro gruñó por lo bajo, sorprendiéndose de inmediato.
¿Desde cuándo habia perdido el control de sus propios instintos? Él mismo se enorgullecía de la educación que había recibido y el tiempo que había invertido para poder tener un control absoluto sobre sí mismo.
Era algo que él, al principio, siendo un niño egoísta e ignorante, no quiso aprender, no obstante, a medida que crecía, se fue dando cuenta de las miradas con terribles intenciones que le llegaban a ese pobre omega rubio, que con tanto amor lo había criado.
Todos esos seres repugnantes, cuyos rostros no recordaría y cuyos nombres nunca obtendría, se le quedaron grabados, como monstruos que le acechaban a la hora de dormir. Fue en una de esas noches, protegido por los cálidos brazos de Cora, que decidió que sería diferente a ellos.
Y que, por favor, le pegaran un tiro, de lo contrario.
- Eh, ¿Law? Te estoy hablando - acotó Chopper, tocando su brazo con suavidad. Se había distraído otra vez.
- Lo siento, no sé qué me pasa hoy.
- Yo creo saber. Pero volvamos a mi pregunta.
- Es que de verdad no te entiendo, no puedo pensar con claridad ahora mismo. Simplifica, háblame como si fuera Zoro - pidió. El otro se cruzó de brazos.
- Te estoy preguntando que si alguna vez has tenido una pareja, en concreto, una pareja omega. Pero es algo tonto, ya sé que de seguro sí tuviste, entonces...
- Chopper - interrumpió. Su voz sonaba aún más fría de lo normal. Nunca antes, le había hablado así, no a él.
- ¿Sí, Law?
- ¿Qué pasaría, si te dijera que no?
- No tienes que preocuparte por eso, es decir, de todas formas es imposible - quiso calmarlo y, al ver que sus palabras tenían el efecto contrario, se puso nervioso una vez más - ¿Verdad? Law, tienes veinte años, no me digas que...
- Eso no responde a mi pregunta. ¿Qué pasaría, si te dijera que no? - cuestionó de nuevo. Estaba muy tenso, casi al punto de hacer alguna locura. El cachorro dio un paso atrás, temeroso.
- Por favor, no digas eso - pidió, con voz temblorosa - Si eso fuera verdad, entonces tú... tu alfa. Oh no, no tienes idea de lo que has hecho.
- Entonces dame una maldita idea.
- Law, has estado negando a tu alfa, lo has dejado insatisfecho, lo has rechazado. Por Dios, eso no es sano.
- ¿Qué va a pasarme ahora?
Si llega a ser grave, ¿cómo diablos se lo diré a mi papá? Quedará destrozado.
- No te preocupes, no es tan grave. He oído de casos peores, de más de diez años, incluso. Aún así... oh, esto es malo.
- Pues ya lo noté. ¿Algo más que quieras mencionar?
- Es difícil de decir pero... tu alfa está desesperado, quiere unirse a un omega, proteger a un omega, ser contenido por un omega. No puede más. Te puso en este estado casi enfermizo como advertencia. Si sigues así, la próxima vez no será tan amable - le explicó con amargura.
A Law le dio un escalofrío. Si ese malestar era "amable", no quería experimentar lo peor.
- Y, lo peor de todo... - continuó el menor - Es que se despertó por él, puso su interés y sus deseos en él. Tu alfa, lo quiere a él.
- ¿De qué estás hablando? - Chopper lo miró incrédulo.
- ¿Que no lo recuerdas? Estás recostado en ese sillón por eso mismo. Porque tu alfa se fijó en él. En Luffy.
Ahí recuperó la memoria, se sintió más despierto. Y, mientras dejaba que su mente divagara sobre el nombre recién descubierto, sobre aquel omega que había logrado conquistarlo sin dirigirle la palabra siquiera, no notó la mirada de pura lástima que el cachorro le dedicó.
Pobre. Si no lo matan esos dos, de seguro lo hará Sabo.
* ═════「♡」・°・「♡」═════ *
¡Buenas noches! Perdonen la hora, quise actualizar antes, pero hoy en el curso tuve un mock test y bueno, me quedé hasta tarde. Al menos me fue bien.
Acá está la explicación que les debía, sobre el estado de Law. Pobrecito 💔
En fin, ¡espero que les haya gustado! Nos leemos pronto <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top