7:35 am.

Abrió los ojos, le dolía la cabeza, miro a un lado y vio al pequeño pelinegro dormido, en ese momento comenzaron a venir pequeños flashbacks a su memoria, recordaba haber besado a Daniel. "Otra vez, no" pensó mientras pasaba sus manos por su cabeza.

-Mierda, es tarde. - dijo Jhonny en cuanto vio su reloj.

Daniel despertó en ese momento.

-¿Que pasa? - dijo mientras frotaba su ojo derecho.

-Llegaremos tarde a la escuela.

Daniel reaccionó en cuanto noto que ya había amanecido.

-¿Que hora es?.

-Falta muy poco para las 8.

-No puede ser, llévame a mi casa, de seguro mi mamá ya noto que no estoy.

-Bien.

Jhonny comenzó a conducir.

Durante el camino, ambos pensaban en lo que había pasado la noche anterior, pero ninguno dijo algo al respecto.

Cuando Daniel llegó a su casa, vio a su madre caminando preocupada por la sala.

-Cariño, ¿Dónde estabas?, estuve preocupada, desperté y no te vi en tu cama, ¿Estás bien?

-Si mamá, lo siento, salí con un amigo y perdí la noción del tiempo.

-Llame a Freddy y dijo que no estabas con él.

-No salí con Freddy, salí con otro amigo.

-¿Que amigo?.

-Jhonny Lawrence.

-Cariño, no quiero que te metas en problemas, se muy bien que a la señora Mildred no le agradamos.

-Lo sé mamá, descuida.

-En otra avísame a dónde y con quién sales, ¿Bueno?

-Bueno.

-Bien, ahora alístate y corre a la escuela, yo ya debo irme, se me hizo tarde. - le dió un beso en la frente y se fue.

Mientras se cambiaba, recordó un poco de lo que había pasado, ingirió tanto alcohol, no recordaba mucho, pero aún así había algo que jamás olvidaría, y eso es el hecho de que le confesó sus sentimientos a Jhonny, se sentía avergonzado, una parte de él deseaba que Jhonny no recuerde lo sucedido, temía haber arruinado las cosas con él.

Se puso lo primero que vio, antes de salir, tomó el suéter de Jhonny y se lo puso, comió una banana, y se fue a la escuela, espero a Jhonny en el lugar de siempre, el rubio llegó, eso sorprendió a Daniel, pues no habían ido juntos a la escuela desde hace mucho, se saludaron y caminaron hasta la escuela en un incómodo silencio. Jhonny no pudo evitar notar que Daniel traía su suéter, amaba verlo usar su ropa, se veía lindo.

Jhonny quería pretender que no recordaba lo sucedido, pero cada vez que lo recordaba, sentía un cosquilleo en todo su cuerpo. Era inevitable.

Cada uno se fue a su salón.

En la hora del almuerzo, no dejaron de darse pequeñas miradas el uno al otro. Sus amigos hablaban, pero ninguno escuchaba, casi parecía que tenían un concurso de miradas.
Daniel se puso de pie y camino hasta la mesa de Jhonny para hablar con él, pero antes de llegar, chocó con un chico, era el mismo chico alto, fornido y bronceado que vio en la cancha el otro día. (el mismo que le dijo que vaya a las graderias).
El chico tiiro su almuerzo sobre Daniel. Todos se quedaron viendo y uno que otro se reía, incluyendo a los amigos de Jhonny.

-Lo siento. - dijo el chico dejando su bandeja a un lado y tratando de limpiar la camiseta de Daniel.

Daniel sintió algo de vergüenza, vio a Jhonny, quería llorar porque había arruinado el suéter, bajo la mirada y se fue al baño para limpiarse, Julie fue por su detrás. Jhonny quizo seguirlo también, pero no lo hizo, se sintió mal por eso.

-¿Dani? - Julie entró al baño de hombres para buscar a Daniel. Lo vio parado junto al lavamanos. - ¿Estas bien?

-Si. - dijo mientras frotaba su suéter con desesperación para quitar la mancha.

-Eso no saldrá así de fácil. - dijo Julie acercándose a Daniel.

-Lo arruine. - dijo con ojos cristalinos.

-Creeme, lo olvidarán para mañana. - trataba de consolarlo.

-Eso no me importa.

-Ese suéter es especial, ¿cierto? - dijo Julie.

-Sí.

-¿Te lo dio alguien en especial?

-Me lo dio Jhonny. - Julie trataba de entender.

-Dijiste que es tu amigo, ¿cierto?, pero en este corto tiempo que te conozco, jamás te vi hablando con él. ¿Qué pasó?.

-Solíamos ser amigos, muy unidos, hacíamos todo juntos, pero lo arruine.

-¿Cómo?.

-Una noche fuimos a su casa, bebimos un poco, y luego pasó algo.

-¿Qué cosa?.

Daniel tomo una gran bocanada de aire antes de responder.

-Nos besamos. - Julie se quedó callada. - Ninguno supo cómo reaccionar, nos distanciamos y él hizo nuevos amigos.

-Entonces ese suéter es...

-Es especial por el simple hecho de ser suyo. - se quedaron callados por un momento.

-¿Qué sientes por él?.

-No sé que decirte.

-Te gusta, ¿Verdad?.

-No, no soy gay.

-¿Seguro?.

Daniel la miro, luego desvió la mirada, temia abrirse sentimentalmente con alguien.

-Esta bien, sí, sí me gusta, y mucho. Pero no creo estar seguro.

-No te entiendo, dijiste que te gusta.¿Cómo que no estás seguro?

-Siento que soy muy joven para esto, ¿Cómo puedo estar seguro de lo que soy?

-Tu edad es lo de menos, no existe una edad para sentir afecto. ¿Lo amas?

-Mucho.

-Entonces no tienes porque dudar.

-Entonces, ¿Soy gay?

-Es probable, pero no todo necesita tener una etiqueta.

Sonrió con tranquilidad, Julie era muy comprensiva.

-Pero no estoy seguro de lo que siente él.

-No quiero sonar cruel, pero no deberías ilusionarte, tiene novia.

-Pero anoche volvió a besarme.

-¿Qué? - dijo con asombro.

-Salimos, fuimos al mirador y solo paso.

-Tú lo besaste o él te beso?

-Él me besó. - dijo con una sonrisa, recordando aquel bello momento.

-Entonces, probablemente si le gustes.

-¿Tú crees?.

-No te besaría si no lo hiciera.

-No estoy seguro, ¿Por qué sale con Ali?

-Tal vez, se siente presionado, está en el equipo de fútbol, y esos chicos no parecen muy confiables, quizás tenga miedo.

-Como sea, debo arreglar el suéter.

Fue a su casillero para guardar el suéter y sacar sus libros para su siguiente clase. Cuando abrió el casillero, una carta cayó al piso.

Esperame afuera de la escuela después de clases.

-Jhonny.

Jhonny estuvo distraído todo el día, no dejaba de pensar en Daniel, en lo que le había dicho. "Te amo" era una declaración muy fuerte, ¿encerio Daniel lo amaba?. Decidió faltar a la práctica ese día, quería pasar el resto del día con Daniel.

El pelinegro lo espero tal y como se lo había pedido.

El lugar estaba vacío, la mayoría ya se había ido.

Jhonny salió.

-¿Nos vamos? - dijo Jhonny.

-¿No entrenaras hoy? - pregunto Daniel.

-No, le dije al entrenador que no me siento bien.

-¿Y adónde iremos?

-A mi casa por mi moto e iremos de paseo. - Puso su brazo sobre los hombros de Daniel y caminaron hasta la casa del rubio.

A Kreese le pareció raro que Jhonny se enferme de la nada, lo conocía, y sabía que era un chico rudo y que un simple dolor de estómago no lo haría faltar, así que lo siguió, y lo vio irse con otro muchacho. Ver a Jhonny abrazando a Daniel, le hizo recordar bellos momentos de su juventud.

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Condujo hasta el parque de diversiones, subieron a la rueda de la fortuna, Daniel tenía un poco de miedo a las alturas, pero se sintió seguro en cuanto Jhonny lo tomo su mano.

-Solo relájate, trata de no mirar abajo. - dijo Jhonny sin soltar su mano.

Daniel solo suspiro, no había notado la diferencia de tamaño en sus manos, las de Jhonny era mucho más grandes.

Cuando bajaron del juego, se dirigieron a los puestos de puntería, Daniel trato de ganar un pingüino, pero no lo logro, tenía muy mala puntería. Jhonny lo intento y logro ganar dicho premio.

-Eres mejor que yo en todo. - dijo Daniel con desánimo.

-Mentira, soy un asco con la guitarra, en cambio tú eres magnífico.

-¿Me lo prestas? - dijo Daniel refiriéndose al pingüino.

-No, es mío. - dijo Jhonny.

-Pareces un niño pequeño. - dijo Daniel.

Fueron a comprar unos helados y se sentaron por un momento para contemplar el crepúsculo. No dijeron nada, solo admiraron el paisaje.
Jhonny estaba sentado muy cerca de Daniel, no entendía porque, pero le gustaba.

Cuando el sol finalmente se escondió, Daniel le suplico a Jhonny para que suba con él al carrusel, al pelinegro le encantaba subirse, pero a Jhonny no.
De todas formas las súplicas de Daniel funcionaron, pues Jhonny termino subiendo al carrusel, se sintió aliviado de que el lugar no estaba lleno. Daniel tenía una sonrisa, encerio se divertía, Jhonny no, pero le gustaba ver feliz a Daniel, eso era más que suficiente.

Bajaron del carrusel.

-Mira, una cabina de fotos, vamos. - dijo Daniel, tomo a Jhonny de la mano y lo llevo hasta dicho lugar.

Entraron y se tomaron varias fotos.
Hicieron caras graciosas, en otras solo sonrieron, la favorita de Daniel era una en la que Jhonny salía con los ojos cerrados, era gracioso y lindo.

Pero lo importante de todo esto era que en las fotos, Daniel no soltó la mano de Jhonny, al rubio no le molestó, al contrario, le gustaba sostener la mano de Daniel.

Mientras caminaba por el lugar, Daniel tenía frío, Jhonny lo notó por la postura erguida del pelinegro, sin pensarlo dos veces, puso su brazo sobre el hombro de Daniel. El pelinegro se sentía cómodo, pero no duró mucho, pues no tardaron en llamar la atención de varias personas, a Daniel no le importo, pero a Jhonny sí, así que retiro su brazo y tuvo una mejor idea.

Se quitó su chaqueta azul y se la dió a Daniel.

-Espero que no tires comida sobre está. - dijo en modo broma.

Daniel tomo la chaqueta y se la puso.

Ya eran las 8:30 pm. Decidieron regresar. Cuando llegaron a la casa de Daniel, el pelinegro quizo mostrarle a Jhonny sus dibujos, pues había estado practicando.

-Estas mejorando. - dijo Jhonny mientras abrazo a Daniel del cuello.

El pelinegro adoraba que Jhonny sea cariñoso con él.
Daniel giró su mirada y sus ojos chocaron con los de Jhonny, había muy poca distancia entre ellos, Daniel creyó que sería buen momento para hablar sobre lo que había pasado la noche anterior, pero lo único que logró salir de su boca fue:

-¿Quieres unos cigarros?.

-Claro.

Luego de un rato estaban tirados sobre la cama del pelinegro, con la ventana abierta y un cigarrillo en la mano de cada uno. La cabeza de Daniel estaba reposada sobre el brazo de Jhonny, éste frotaba el brazo del pelinegro con su mano.

-Asi que ahora vas a fiestas, vaya, es gracioso, considerando que cuando te conocí, odiabas los lugares con mucha gente. - dijo Daniel.

-Seria divertido si tú también fueras.

-Aww, ¿Me necesitas? - dijo Daniel bromeando.

Jhonny rió.

-Hablo encerio, lo único que hacen es, hablar de a cuántas chicas se cojieron en la semana, es aburrido.

-¿Y tú lo haz hecho?.

-¿Que cosa?.

-Estar íntimamente con una chica.

Jhonny solo suspiro antes de responder.

-Mi familia siempre me dijo que debería guardar esas cosas para después de, ya sabes, casarme. - dijo Jhonny.

-¿Eso es un no? - pregunto Daniel.

-Asi es. - Daniel si lo había hecho, pero no con una chica, sentía vergüenza al decirlo, nadie lo sabía, no sabía si contárselo a Jhonny, temía que lo juzgue, pues el rubio venía de una familia bastante conservadora.

-¿Entonces no lo harás con nadie hasta que te cases?

-Depende.

-¿Depende de que?

Jhonny solo lo miro, sonrió y se puso de pie para tomar la guitarra de Daniel.

-Toca algo.

Daniel solo tomo la guitarra.

-Aun no eh terminado mi canción.

-Toca lo que sea.

Daniel comenzó a tocar "Rebel Rebel" de "David Bowie"

-Amo esa canción. - dijo Jhonny cuando Daniel terminó de tocar.

-Estuve practicando.

-Tienes una hermosa voz. - dijo Jhonny.

Daniel se sonrojo, sintió un revoloteo en su estómago y sonrió.

-¿Que tal si subimos al tejado? - dijo Daniel.

-Creí que tu mamá no quería que subamos.

-Si, pero ella no está.

Estaban a punto de subir, cuando el teléfono sonó. Daniel fue a contestar.

-Hola, ¿Quien habla?.

-Soy Brooke.

-¿Que paso?.

-Queria pedirte algo.

-Claro, dime.

-¿Podemos vernos mañana antes de la escuela?.

-Esta bien, ¿Dónde?.

-¿Te parece si paso por tí?.

-Bien, nos vemos mañana, adiós.

-Adios.

Daniel colgó el teléfono.

-¿Quien era? - dijo Jhonny, había escuchado la conversación y le daba curiosidad saber con quien se vería Daniel.

-Era Brooke. - la expresión de Jhonny cambio.

-Oh, ¿Y para que quiere verte mañana? - dijo celosamente.

-Mmm, para...nada importante. - no podía decirle lo que pasaba con Brooke. - ¿vamos?

-Esta bien. - sus celos regresaron, no soportaba la idea de que Daniel esté con Brooke.

Subieron al tejado, Daniel aún traía puesta la chaqueta de Jhonny.

-Hoy fue divertido. - dijo Jhonny.

-Si, deberíamos hacerlo seguido.

-No puedo faltar a mis entrenamientos.

-Lo sé. - reposo su cabeza sobre el hombro de Jhonny. - ¿Estas seguro de que no recuerdas nada de lo que paso ayer?.

-Si, estoy seguro. - mentira, no quería admitir que recordaba un poco porque no quería hablar de eso. - ¿Por qué?, ¿Tú recuerdas algo?.

-Solo el bello paisaje. - no quería decir que recordaba lo que le había dicho, no quería incomodar al rubio. - Podríamos ir otra vez.

Jhonny sintió un estremecimiento en todo su cuerpo.

-Algún día.

Se quedaron un momento más, luego entraron a la casa de Daniel, escucharon música y se quedaron dormidos. Lucille llegó y vio al rubio junto a su hijo, no los despertó.

En la mañana Daniel abrió los ojos y sintió la calidez del pecho de Jhonny en su espalda, la tibia respiración en su nuca y el fornido brazo abrazandolo. No quería moverse, quería quedarse en esa posición todo el día, pero sintió como Jhonny comenzó a despertar, así que se hizo al dormido.

Jhonny despertó, jamás se sintió mejor por la mañana, despertar junto a Daniel era lo mejor que le había pasado, quería despertarlo con un beso, pero sintió que sería algo raro, considerando que aún no eran nada, además no estaba seguro de lo que sentía por Daniel, por lo que no quería incomodarlo, así que se puso de pie y golpeó a Daniel con la almohada.

-Despierta, dormilón. - eso no fue romántico, para nada.

Daniel lo miró enojado, pues el esperaba un tierno despertar, pero no podía esperar algo así, sentía que Jhonny solo lo quería como amigo.

-Era necesario golpearme.

-Tu harías lo mismo.

Eso no era cierto, pero no se lo dijo. Jhonny debía regresar a su casa antes de que su abuela note que no llegó a dormir.

Daniel fue a la cocina para desayunar, su madre había preparado panqueques para ambos chicos, pero Jhonny ya se había ido.

-¿Donde esta tu amigo?.

-¿Qué amigo?.

-El que se quedó a dormir.

Se sintió apenado porque su madre lo había visto dormir acurrucado con Jhonny.

-Ahh, ese amigo, se fue.

-Pero, no lo vi salir.

Daniel no sabía cómo explicarle que Jhonny había salido por la ventana.

-Ummm.

-Daniel, dime que está pasando.

-No sabía que te habías dado cuenta de que él estaba aquí, así que...salió por la ventana.

-¡Daniel!. - dijo Lucille.

-Perdón, creí que te molestarías.

-Hijo, no me molesta que hagas pijamadas con tus amigos.

-Si, lo siento.

-Bien, ahora siéntate a desayunar. - Daniel comenzó a comer. - Por cierto, jamás me presentaste a tu amigo, deberías traerlo a cenar.

-Pero, que hay de tu trabajo.

-Sabes que los domingos no trabajo, puedes invitarlo ese día.

-Esta bien.