Tu puedes tigre (Steve)

Prólogo: Le gustas mucho a Steve sin embargo no puede hablar bien contigo por los nervios, y cuando por fin lo logra, llega Tony para avergonzarlo y a la vez conseguirle una cita.

WonSungI12
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●

Todos los Vengadora sabían que Steve se había enamorado de la más reciente adición como agente de SHIELD. Nat y tu se conocían deade antes en el Red Room y ella te llevó a trabajar ahí, además de presentarte ante los héroes más poderosos de la Tierra, y fue ahí que el pobre Capitán cayó perdidamente enamorado de ti.

Bucky y Sam trataban de animarlo para que fuera a hablar contigo, sin embargo los nervios siempre le ganaban, tartamudeaba o se enredaba hablando, por lo que la mayoría del tiempo solo se avergonzaba a sí mismo.

Ese día Steve estaba en una de las salas de reuniones de SHIELD haciendo papeleo, cuando llegaste tú para entregarle unos informes, pero se quedaron conversando.

De momento Steve se había sorprendido a sí mismo con lo bien que iba yendo todo: él no se trababa al hablar, tu parecías interesada en lo que estaban hablando, las cosas iban fluyendo bien, todo era perfecto... hasta que apareció Stark.

Tony los vio de lejos y una pequeña idea se le metió en la cabeza ya que estaba aburrido, y no había ninguna otra cosa que le gustara más que avergonzar o molestar a Steve.

–¡T/N! ¡Capipaleta! ¿Cómo están?–Dijo entrando con una sonrisa llegando a su lado, y Steve instantáneamente tragó saliva nervioso.

–Stark...–Le saludó el rubio parándose más derecho.

–Hola Tony, ¿qué haces por aquí en Shield?–Le preguntaste con una sonrisa cruzándote de brazos.

–Ah ya sabes, lo de siempre, darle consejos a los ingenieros y los que hacen armas, dando mi opinión en la construcción de los jets para misiones, lo normal.–Te dijo con una sonrisa antes de darle una palmada en el hombro a Steve que estaba en silencio.–¿Y tu por qué tan callado, anciano? ¿Qué pasó? ¿Te comió la lengua el ratón? O quizás fue la Agente T/A...

–¿Qué dices Tony?–Se quejó avergonzado apartando la vista haciéndote reír.

–¡¿Qué?! ¡Yo solo digo! Hasta hace un minuto se te veía conversando bien contento, desde el pasillo los veía.–Le dijo alzando ambas cejas para molestarlo.

–Eran anécdotas de misiones nada más, tampoco es para tanto.–Le dijiste al billonario con una pequeña sonrisa.

–¿Y no te ha contado de su tiempo como estrella de Broadway? Hizo tantos actos, cantaba, bailaba y se la pasaba bien con las bailarinas, ¿Verdad campeón?–Le dijo con un tono de voz burlesco dándole una nalgada provocando que Steve se pusiera rojo y se volteara hacia él entre molesto y queriendo que se lo tragara la tierra.

–¿No tienes ningún otro lado donde estar, Tony?–Le dijo Steve viéndole fijamente intentando evitar verte a ti, mientras que tu solo contenías la risa.

–Okey, está bien... los dejo coquetearse tranquilos. Nos vemos T/N, y dale que tu puedes tigre, la mujer no te va a rechazar. El Capi te quiere invitar a salir, por cierto, así que cuidamelo bien.–Te dijo Tony antes de darle una palmada en el brazo, y luego salió de la habitación riéndose.

Tu soltaste una pequeña risita mientras que Steve pasó ambas manos por su rostro sintiendo que ardía como nunca.

–T/N— A-agente T/A, enserio perdón por eso, lo lamento mucho, Tony a veces puedes ser demasiado y—

–Tranquilo, no pasa nada. ¿Aunque no crees que si me quieres invitar a salir ya deberías empezar a llamarme por mi nombre?–Le dijiste con una sonrisita antes de tomar una carpeta de encima de la mesa detrás tuyo.–Ahora me tengo que ir, ¿pero quizás podríamos vernos más tarde cuando salga para ir a cenar?

–¡S-si! Si, claro, me parece bien...

–Genial, nos vemos a las siete entonces, Capitán.–Le dijiste con una sonrisa antes de salir de la habitación.

Steve soltó un pesado suspiro con una sonrisa pasando ambas manos por su rostro, antes de dar un salto al escuchar una voz.

¡ESO ES TIGRE! ¡Conseguiste la cita y todo gracias a mi! Si es que de verdad, soy espectacular. Quizás debería dedicarme a ser casamentero y juntar parejas...–Dijo Tony por los parlantes de la sala de reuniones.–Podría hasta empezar un programa en la tele, me iría demasiado bien.

–¡¿Estabas viendo todo?!

Pfff, obvio. Si hasta lo grabé para mostrarlo en la noche de películas de hoy, ahora si me disculpas, tengo que ir a prepararme para recibir el dinero de las apuestas que hicimos. Sam me debe como cincuenta dolares, ¿qué se siente saber que tu amigo no te tenía tanta fe como yo? Con amigos como esos, ¿para qué quieres enemigos?–Dijo con una pequeña risita antes de apagar los parlantes.

Steve soltó otro suspiro rodando los ojos, para luego tomar los papeles de la mesa y salir de la sala.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top