Prólogo: Eddie va a entrevistar a Cletus sin saber que tu también estabas ahí, y para poder hablar contigo a solas pide una supuesta entrevista que nunca llega a hacer.

Tuve que cambiar algunas cosas del pedido original ya que como no he visto la película (aún) para que tuviera más sentido, aún así espero les guste y lo disfruten 💖

Catalina_Ramirez22
Advertencia: Aquí la rayis tiene los mismos poderes de Wanda.
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Eddie y tu hacía un par de años atrás habían sido pareja, sin embargo él decidió que terminar las cosas sería lo mejor ya que temía que Venom pudiera arruinarlas.

Durante todo ese tiempo no había sabido nada de ti, aunque mentiría si dijera que no trató de buscarte en más de alguna ocasión.

Aquel día se dirigió a la prisión donde mantenían encarcelado a Cletus para hacerle una entrevista, sin embargo vio que junto a este había una celda y mucha gente amontonada alrededor, por lo que al principio solo trató de enfocarse en su entrevista y ya, pero su curiosidad era más fuerte.

–¿Por qué tanto escándalo? ¿Quién está ahí?–Murmuró Eddie frunciendo el ceño y viendo a la gente amontonada, sin embargo la persona en la celda no parecía querer hablar.

–Mi compañera, la trajeron hace como dos años. Es todo un amor.–Le dijo Cletus con una pequeña risita viendo hacia la otra celda.

–EDDIE ACÉRCATE, QUIERO SABER QUIEN ES.–Le dijo Venom donde nadie podía verlo ni oírlo.

Eddie frunció el ceño y se acercó abriéndose paso entre los periodistas hasta lograr divisarte a ti dentro de la celda, provocando que se quedara ligeramente boquiabierto.

–¡NO PUEDE SER! ¡ES T/N! ¡DILE HOLA!

En un momento cruzaste miradas con Eddie y frunciste el ceño, sin embargo no prestaste mucha atención mientras que los demás periodistas hacían miles de preguntas y trataban de hablar contigo.

–¿S-señorita T/A? ¿Cree que pueda hacerle una entrevista?–Preguntó Eddie captando tu atención.

Le quedaste viendo por unos segundos hasta que te levantaste de tu cama y te acercaste a un lado de la celda donde por fuera había un guardia y le susurraste algo al oído, antes que este comenzara a echar a los demás periodistas dejando solo a Eddie adentro.

–Tienen diez minutos.–Les dijo cerrando las puertas de la gran habitación donde estaban las celdas, y Cletus soltó una pequeña risita viéndolos atento.

–Debo admitir que es una gran sorpresa verte aquí.–Le dijiste con una pequeña sonrisita sentada en tu cama viéndolo parado frente a ti fuera de tu celda.

–A mi también me sorprende que estés aquí... ¿qué pasó?–Te preguntó sinceramente preocupado guardando su libreta y lápiz dentro de su chaqueta.

–Me culparon de algo que no hice, estaba en el lugar y momento equivocado... supongo.–Le dijiste encogiéndote de hombros y acercándote a los barrotes.–Pero enserio debes creerme, no fui yo.

–Tranquila, te creo.–Te dijo con una sonrisa posando su mano sobre la tuya en los barrotes, provocando que tu también sonrieras.

–Awww, que lindos son... ¿Acaso son pareja? O aún mejor... ¿exes?–Dijo Cletus desde su celda haciéndote rodar los ojos.

–¿Cómo está Venom?–Le preguntaste en voz baja sin apartar tu mano de la suya e ignorando al otro.

–AHORA MUCHO MEJOR.

–Está bien y feliz de verte.–Te dijo con una sonrisa acariciando tu mano.

–¿Acaso se van abesar ya?–Preguntó el otro desde su lugar.

–Cierra la boca.–Le dijiste haciendo un movimiento con tu otra mano para usar tu magia y así hacer un hechizo en él provocando que se quedara callado y se quedara en una esquina de la celda de espaldas a ustedes.

Eddie soltó una pequeña risita viendo hacia el hombre, y luego se volteó hacia ti otra vez.

–Te extrañé muchísimo... los dos te extrañamos. Intenté buscarte pero nunca te encontré... ahora veo por qué.–Te dijo con una pequeña sonrisa.

–Eddie... fuiste tú quien decidió terminar las cosas.–Le dijiste soltando un suspiro bajando tu mano de los barrotes.

–Lo sé, y fue una estupidez. Quise protegerte y pensé que quizás Venom podría arruinarlo todo, pero el que realmente arruinó las cosas fui yo.–Te dijo bajando la vista hacia sus manos, antes de volver a ponerlas en los barrotes levantando la mirada hacia ti.–¿Crees... crees que podrías perdonarme? Este tiempo sin ti ha sido horrible...

–Por más enojada que me gustaría estar, no puedo. Yo también los he extrañado muchísimo, y también me alegra ver otras caras que no sea la de este tonto y los guardias de siempre.–Le dijiste con una sonrisa señalando hacia Cletus, acercándote para poner tus manos sobre las suyas.

Eddie soltó una pequeña risita acariciando tus manos con las suyas, y pasó una por los barrotes para posarla en tu mejilla y acariciarla.

–Me encantaría poder pedirte una cita pero creo que va a ser un poco difícil.–Te dijo pasando su dedo pulgar con mucha delicadeza sobre tus labios.

–¿Y si mejor nos saltamos todo eso? Ya hemos ido a citas antes.–Le dijiste con una sonrisa acercando tu rostro a los barrotes y pasando tu nariz por la suya entre los espacios de estos.

–O también podemos hacer eso.–Respondió provocando que sus labios rozaran al hablar.

Ambos acortaron la distancia y se besaron con ternura lo mejor que podían por entre los barrotes, a la vez que llevabas una mano para enredarla en su cabello y la otra suya la bajaba para pasarla por tu cintura, a pesar de que era algo incómodo por la separación entre ambos.

–¡¡¡ESOOOOOO!!! AÚN TIENES EL TOQUE EDDIE. AL FIN NO ERES UN MARICA. ¡¿QUÉ SE SIENTE VIVIRLO Y NO SOÑARLO?!

Eddie rio con ligereza alejándose de ti mientras tú no podías dejar de sonreír.

–Por favor dime que no puedes escucharlo...–Dijo algo avergonzado con las mejillas sonrojadas.

–Desafortunadamente para ti si, mi magia sigue funcionando un poco aquí.–Le dijiste con una sonrisa acariciando su barbilla.

–Vaya... bueno... ¿e-entonces estamos bien?–Te preguntó por fin levantando la vista hacia ti otra vez y tomando tus manos en las suyas.

–Claro que si, solo no vuelvas a terminar conmigo por una estupidez como esa, ¿si?–Le dijiste haciéndole reír mientras asentía con la cabeza.–Se supone que nosotros no podemos recibir visitas, pero quizás si vienes con la excusa de hacer más entrevistas...

–Encontraré la forma de venir a verte más seguido, lo prometo.–Te aseguró con una sonrisa antes de darte un último beso y alejarse de los barrotes.

En ese momento la puerta se abrió y Eddie se volteó a ver alguardia ahí.

–Muy bien tortolitos, les di trece minutos, ya es suficiente. Fuera de aquí señor.–Le dijo a Eddie mientras este caminaba a la puerta, y luego el guardia se volteó hacia ti.–Y quita ese hechizo del tonto este.

Hiciste un movimiento con tu mano y Cletus por fin se volteó hacia ustedes, mientras Eddie se despidió de ti con la mano.

–¡Mucho cuidado Eddie! ¡No vaya a ser que no la veas más!–Le dijo Cletus con una pequeña risita.

Eddie se volteó preocupado hacia ti y tu solo le hiciste una seña para que se calmara volviendo a hacer callar al otro, mientras el guardia lo sacaba de ahí y te ofrecía una última sonrisa.