Prólogo: A Quill le gustas sin embargo él no quiere aceptarlo y en lugar de eso quiere darte celos con Gamora quien es tu mejor amiga, pero ella le hace darse cuenta que se está comportando como un niño.

@Whoss_l1nnd
Advertencia: Aquí la rayis es hermana de Thor y Loki.
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●

Desde que te habías unido a los Guardianes un buen tiempo atrás que Peter venía sintiendo grandes y muy fuertes cosas por ti, sin embargo nunca lo había querido aceptar.

La cosa es que con el tiempo comenzó a tratar de darte celos con Gamora (en realidad él no tenía idea qué estaba haciendo, pero en ese momento esa parecía una muy buena idea), pero Peter no contaba con que ella era tu mejor amiga y siempre se la pasaba ignorándolo, hasta que finalmente un día se cansó y le dijo básicamente que no fuera un idiota.

–¿A qué te refieres con que no sea un idiota?–Se quejó Quill viéndola mal.

–Que ya dejes de ser un tonto orgulloso, Peter. T/N te gusta, y mucho. Y si te sigues comportando como un niño tratando de darle celos conmigo, que déjame decirte a ella no le puede importar menos, alguien más la va a conquistar antes que tú. Es una princesa y diosa asgardiana, la mitad del universo está enamorado de ella, y si no comienzas a pensar como un adulto y enserio aceptas tus sentimientos, entonces alguien más lo va a hacer antes que tú.–Le dijo Gamora viéndole algo seria pero también con un toque de compasión.

Quill frunció el ceño, mientras que la otra solo se dio media vuelta y lo dejó solo en el pasillo que estaban conversando.

Después de aquella conversación, Peter se la pasó evitando a todos tratando de poner sus pensamientos en orden, además de que no podía quitar de su mente las cosas que Gamora le había dicho.

También durante esos días fue que comenzó a prestar más atención, y ahí se dio cuenta de que pasabas bastante tiempo con Drax y que donde fuera que estuvieran, ya sea una misión, un bar, recorriendo los planetas que visitaban, etc, los dos siempre andaban juntos.

Un día que habían llegado a un planeta que defendieron y después se quedaron ahí un par de días, Quill comenzó a buscarte para hablar contigo. No estaba muy seguro de qué, pero quería hablar.

En un momento salió de la nave y caminó un poco hasta llegar a una gran laguna donde los vio a Drax y a ti sentados en la orilla conversando con el atardecer frente a ustedes.

Quill frunció el ceño y empezó a avanzar hasta ustedes, hasta que vio a Drax ponerse de pie y despedirse de ti.

–Hola Quill.–Le saludó pasando por su lado.

Te volteaste para verlo ahí y le ofreciste una sonrisa antes de volver a ver hacia frente a ti, y Peter tragó saliva antes de acercarse para sentarse a tu lado.

–Este es uno de los planetas más bonitos que hemos visitado, sus atardeceres se parecen mucho a los que hay en Asgard.–Le dijiste con una sonrisa.

–¿Por qué pasas tanto tiempo con Drax?–Te preguntó cruzándose de brazos y viéndote fijamente, ignorando por completo lo que le habías dicho.

–¿Disculpa?–Reíste ligeramente volteándote hacia él donde rápidamente apartó la mirada.–Yo podría hacerte la misma pregunta acerca de Gamora, aunque ambos sabemos bien por qué es.

–¿C-cómo así?

–Te la pasas tratando de darme celos con ella. ¿O qué? ¿Pensaste que no me iba a decir?–Le preguntaste con una pequeña risita.

–Ah... bueno aún así, todavía no respondes mi pregunta.–Insistió sentándose más derecho y tragando saliva nervioso.

–Quédate tranquilo, Drax no me gusta solo me recuerda a Thor, son muy diferentes pero a la vez me hace sentir como si estuviera con mis hermanos que hace tiempo no los veo.–Le explicaste con una sonrisa bajando la vista hacia tus manos.–Pero no tienes que preocuparte porque a mi el único que me gusta, eres tú.

Peter frunció el ceño y se volteó hacia ti donde le ofreciste una sonrisa, y luego te pusiste de pie para caminar de vuelta a la nave sin embargo te detuvo sujetándote de la mano provocando que te voltearas hacia él.

–¿De verdad? ¿Lo dices enserio?–Te preguntó sintiendo su corazón latir con fuerza en su pecho viéndote frente a él donde estaban parados con el atardecer de fondo.

–¿Acaso crees que te estoy mintiendo? Esa es más bien la especialidad de mi hermano.–Reíste entrelanazando tu mano con la suya.

Quill soltó un suspiro con una sonrisa aliviado, y luego dio un paso hacia ti dejando su otra mano en tu cadera y la tuya en su hombro, acercando tu rostro hacia el tuyo pasando su nariz por la tuya.

–¿Puedo?

–Ya te has tardado bastante.–Le dijiste con una sonrisa subiendo tu mano de su hombro a su mejilla, y te acercaste para besarlo.

Peter sonrió contra tus labios y envolvió sus brazos alrededor de tu cintura para acercarte más, mientras los tuyos los pasaste alrededor de su cuello pegándote imposiblemente más a él, mientras se besaban con el atardecer de fondo.