Prólogo: Tienes una pesadilla y Mantis quiere ayudarte para que estés bien.

nosexdarre
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●

Mantis despertó de un salto al escuchar un fuerte grito de la habitación continua a la suya.

Tomó su peluche favorito y un zapato y salió de su cuarto al pasillo antes de acercarse a tu puerta donde escuchó pequeños sollozos del otro lado, y luego abrió azotando la puerta atrás en la pared soltando un grito fuerte alzando el zapato.

–¡¿DONDE ESTÁ EL INTRUSO?!–Exclamó viendo alrededor de la habitación mientras tu le veías confundida desde tu cama.

–¿De qué intruso hablas?–Preguntaste con voz ronca y limpiando las lágrimas de tus mejillas, sentada en tu cama y con tus piernas pegadas a tu pecho.–¿Mantis qué estás haciendo?

–Te vengo a proteger... ¿No hay nadie más entonces?–Dijo confundida antes de dejar caer el zapato y acercarse a tu cama abrazando su peluche.–¿Por qué estás llorando?

–No es nada, vuelve a dormir, lamento haberte despertado.–Le dijiste dándote vuelta hacia el otro lado y tapándote con las frazadas.

–¡Entonces fuiste tú quien gritó! ¿Qué te pasó? ¿Estás triste? ¿Tienes miedo?–Preguntó preocupada sentándose detrás tuyo.

–Una pesadilla, pero no es nada Mantis, solo vuelve a dormir.–Dijiste secando las nuevas lágrimas que esperabas no pudiera ver.

Mantis se metió en la cama contigo dejando su peluche delante de ti para que lo abrazaras, y ella te abrazó a ti con fuerza dejando su mejilla pegada en tu hombro por detrás.

Trataste de decirle que se fuera, pero ella solo te abrazaba más y más como si fuera un koala, y pronto ya no pudiste contener más las lágrimas y comenzaste a llorar más fuerte.

–Está bien... no estás sola, T/N.–Te dijo con voz suave sin soltarte teniendo sus brazos y piernas alrededor tuyo.–No tienes por qué tener miedo, aquí estoy yo para cuidarte y protegerte...

Lloraste por un buen rato hasta el punto en que te costaba respirar, por lo que Mantis usó sus habilidades y te hizo dormir tranquila.

Dejó un beso en tu hombro y cerró los ojos sin dejarte ir mientras escuchaba tus respiraciones más tranquilas, a la vez que una de tus manos sujetaba la suya y la otra abrazaba a su peluche.

Mantis es demasiado tierna ✨️